Tribute to Pablo Neruda Educational Guide for Teachers Tribute to the South American poet and statesman, winner of The Nobel Prize in Literature 1971 on the hundredth anniversary of his birth prepared by DFW International for the 2004-2005 Tribute www.dfwinternational.org Sponsored by presents ERUDA: July 12, 2004 to July 11, 2005 PART II Prose Selections and Biographical Material Tribute to the South American poet and statesman, Poetry that brings alive a continent's destiny and dreams." “Poetry in harmony with Man and the Earth.” “Poetry with the overflowing vitality of an awakening continent” Born in Chile on July 12, 1904, Pablo Nerud created romantic Born in Chile on July 12, 1904, Pablo Nerud created romantic and epic poetry as well as drama and prose that captured the essence of America. Neruda was Latin America’s most prominent 20th century poetic voice. His simple words inspired generations lovers and gave voice to the common struggles of peasants, miners, factory workers. His love for the Americas burst forth in images of the sea and the flora and fauna. Neruda was much more than a Nobel Prize winning poet. He was a diplomat, an ambassador to France, a communist senator, a candidate for the presidency of Chile, a political fugitive, the winner of the World Peace Prize. His friends ranged from carpenters and fishermen to Pablo Picasso and Diego Rivera, Gandhi, Che Guevara and Salvador Allende. Neruda was known as the "poet of the people", the voice for the voiceless who fought passionately for social justice. “Poetry is an act of peace,” he wrote. “Peace goes into the making of a poet as flour goes into the making of bread.” Neruda was the most prominent 20th century poetic voice of Latin America, a man whose voice resonates to all our international We are grateful for the support of Contact us at: neruda@dfwinternational.org 214-340-9707 We are grateful for the support of the City of Dallas Office of Cultural Affairs and the Fundación Pablo Neruda "I have always wanted the hands of the people to be seen in poetry. I have always preferred a poetry where the fingerprints show. A poetry of loam, where water can sing. 53 A poetry of bread, where everyone may eat." "I have always wanted the hands of the people to be seen in poetry. populations. Lover, political activist, the voice of the common man--Pablo Neruda speaks to today's concerns and all people. This Teacher’s Guide was prepared by Anne Marie Weiss-Armush, President of DFW International, for the Tribute to Pablo Neruda centennial festival. It is offered FREE of charge and may be downloaded from our website at www.dfwinternational.org. Questions may be addressed to neruda@dfwinternational.org . We are especially grateful to Paula Menendez, 6th grade Humanities teacher at the St. Mark’s School of Texas in Dallas, who created many of the poetry exercises especially for this project. Paula may be reached at menendezp@smtexas.org. Every effort has been made to credit sources and to obtain permission for use of materials cited. When translator’s name is not noted, that particular poem was found on the internet, and the translator was not given. INDEX Part II Prose Selections and Biographical Material Pablo Neruda con Salvador Allende. de Confieso que he vivido (Spanish)…… ….…...55 “Interview’ with environmentalist PabloNeruda……………………………………………..58 Acceptance speech for the Nobel Prize for Literature: Toward the Splendid City……..61 Discurso de aceptción por el Premio Nobel de Literatura …………………………………65 Neruda’s biography in English ………………………………………………………………..70 and in Spanish…………………………………………………………………………72 Time Line in English ……………………………………………………………………………75 and in Spanish…………………………………………………………………………77 Lesson Plan -- Chile: 1960 – 1990……………………………………………………………85 48 Part II Prose Selections and Biographies of Pablo Neruda "Escribo estas rápidas líneas para mis memorias a sólo tres días de los hechos incalificables que llevaron a la muerte a mi gran compañero el presidente Allende" ... PABLO NERUDA con SALVADOR ALLENDE en Pablo Neruda: Confieso que he vivido. Memorias Seix Barral- 1974 "Escribo estas rápidas líneas para mis memorias a sólo tres días de los hechos incalificables que llevaron a la muerte a mi gran compañero el presidente Allende" Mi Pueblo ha sido el más traicionado de este tiempo. De los desiertos del salitre, de las minas submarinas del carbón, de las alturas terribles donde yace el cobre y lo extraen con trabajos inhumanos las manos de mi pueblo, surgió un movimiento liberador de magnitud grandiosa. Ese movimiento llevó a la presidencia de Chile a un hombre llamado Salvador Allende para que realizara reformas y medidas de justicia inaplazables, para que rescatara nuestras riquezas nacionales de las garras extranjeras. Donde estuvo, en los países más lejanos, los pueblos admiraron al presidente Allende y elogiaron el extraordinario pluralismo de nuestro gobierno. Jamás en la historia de la sede de las Naciones Unidas, en Nueva York, se escuchó una ovación como la que le brindaron al presidente de Chile los delegados de todo el mundo. Aquí, en Chile, se estaba construyendo, entre inmensas dificultades, una sociedad verdaderamente justa, elevada sobre la base de nuestra soberanía, de nuestro orgullo nacional, del heroísmo de los mejores habitantes de Chile. De nuestro lado, del lado de la revolución chilena, estaban la constitución y la ley, la democracia y la esperanza. 49 Del otro lado no faltaba nada. Tenían arlequines y polichinelas, payasos a granel, terroristas de pistola y cadena, monjes falsos y militares degradados. Unos y otros daban vueltas en el carrousel del despacho. Iban tomados de la mano el fascista Jarpa con sus sobrinos de "Patria y Libertad", dispuestos a romperle la cabeza y el alma a cuanto existe, con tal de recuperarla gran hacienda que ellos llamaban Chile. Junto con ellos, para amenizar la farándula, danzaba un gran banquero y bailarín, algo manchado de sangre; era el campeón de rumba González Videla, que rumbeando entregó hace tiempo su partido a los enemigos del pueblo. Ahora era Frei quien ofrecía su partido demócrata-cristiano a los mismos enemigos del pueblo, y bailaba al son que éstos le tocaran, y bailaba además con el ex coronel Viaux, de cuya fechoría fue cómplice. Éstos eran los principales artistas de la comedia. Tenían preparados los víveres del acaparamiento, los "miguelitos", los garrotes y las mismas balas que ayer hirieron de muerte a nuestro pueblo en Iquique, en Ranquin, en Salvador, en Puert Montt, en la José María Caro, en Frutillar, en Puente Alto y en tantos otros lugares. Los asesinos de Hernán Mery bailaban con los que deberían defender su memoria. Bailaban con naturalidad, santurronamente. Se sentían ofendidos de que les reprocharan esos "pequeños detalles". Chile tiene una larga historia civil con pocas revoluciones y muchos gobiernos estables, conservadores y mediocres. Muchos presidentes chicos y sólo dos presidentes grandes: Balmaceda y Allende. Es curioso que los dos provinieran del mismo medio, de la burguesía adinerada, que aquí se hace llamar aristocracia. Como hombres de principios, empeñados en engrandecer un país empequeñecido por la mediocre oligarquía, los dos fueron conducidos a la muerte de la misma manera. Balmaceda fue llevado al suicidio por resistirse a entregar la riqueza salitrera a las compañías extranjeras. Allende fue asesinado por haber nacionalizado la otra riqueza del subsuelo chileno, el cobre. En ambos casos la oligarquía chilena organizó revoluciones sangrientas. En ambos casos los militares hicieron de jauría. Las compañías inglesas en la ocasión de Balmaceda, las norteamericanas en la ocasión de Allende, fomentaron y sufragaron estos movimientos militares. En ambos casos las casas de los presidentes fueron desvalijadas por órdenes de nuestros distinguidos «aristócratas». Los salones de Balmaceda fueron destruidos a hachazos. La casa de Allende, gracias al progreso del mundo, fue bombardeada desde el aire por nuestros heroicos aviadores. Sin embargo, estos dos hombres fueron muy diferentes. Balmaceda fue un orador cautivante. Tenía una complexión imperiosa que lo acercaba más y más al mando unipersonal. Estaba seguro de la elevación de sus propósitos. En todo instante se vio rodeado de enemigos. Su superioridad sobre el medio en que vivía era tan grande, y tan grande su soledad, que concluyó por reconcentrarse en sí mismo. El pueblo que debía ayudarle no existía como fuerza, es decir, no estaba organizado. Aquel presidente estaba condenado a conducirse como un iluminado, como un soñador: su sueño de grandeza se quedó en sueño. Después de su asesinato, los rapaces mercaderes extranjeros y los parlamentarios criollos entraron en posesión de salitre: para los extranjeros, la propiedad y las concesiones; para los criollos, las coimas. Recibidos los treinta dineros, todo volvió a su normalidad. La sangre de unos cuantos miles de hombres del pueblo se secó pronto en los campos de batalla. Los obreros más explotados del mundo, los de las regiones del norte de Chile, no cesaron de producir inmensas cantidades de libras esterlinas para la city de Londres. Allende nunca fue un gran orador. Y como estadista era un gobernante que consultaba todas sus medidas. Fue el antidictador, el demócrata principista hasta en los menores detalles. Le tocó un país que ya no era el pueblo bisoño de Balmaceda; encontró una clase obrera poderosa que sabía de qué se trataba. Allende era un dirigente colectivo; un hombre que, sin salir de las clases populares, era un producto de la lucha de esas clases contra el estancamiento y la corrupción de sus explotadores. Por tales causas y razones, la obra que 50 realizó Allende en tan corto tiempo es superior a la de Balmaceda; más aún, es la más importante en la historia de Chile. Sólo la nacionalización del cobre fue una empresa titánica, y muchos objetivos más que se cumplieron bajo su gobierno de esencia colectiva. Las obras y los hechos de Allende, de imborrable valor nacional, enfurecieron a los enemigos de nuestra liberación. El simbolismo trágico de esta crisis se revela en el bombardeo del palacio de gobierno; uno evoca la Blitz Krieg de la aviación nazi contra indefensas ciudades extranjeras, españolas, inglesas, rusas; ahora sucedía el mismo crimen en Chile; pilotos chilenos atacaban en picada el palacio que durante dos siglos fue el centro de la vida civil del país. Escribo estas rápidas líneas para mis memorias a sólo tres días de los hechos incalificables que llevaron a la muerte a mi gran compañero el presidente Allende. Su asesinato se mantuvo en silencio; fue enterrado secretamente; sólo a su viuda le fue permitido acompañar aquel inmortal cadáver. La versión de los agresores es que hallaron su cuerpo inerte, con muestras visibles de suicidio. La versión que ha sido publicada en el extranjero es diferente. A renglón seguido del bombardeó aéreo entraron en acción los tanques, muchos tanques, a luchar intrépidamente contra un solo hombre: el presidente de la república de Chile, Salvador Allende, que los esperaba en su gabinete, sin más compañía que su gran corazón, envuelto en humo y llamas. Tenían que aprovechar una ocasión tan bella. Había que ametrallarlo porque jamás renunciaría a su cargo. Aquel cuerpo fue enterrado secretamente en un sitio cualquiera. Aquel cadáver que marchó a la sepultura acompañado por una sola mujer que llevaba en sí misma todo el dolor del mundo, aquella gloriosa figura muerta iba acribillada y despedazada por las balas de las ametralladoras de los soldados de Chile, que otra vez habían traicionado a Chile. 51 From Chile EcoNews http://www.iepe.org/econoticias/072003/12072003chile_neruda_en.htm The page is produced by the Instituto de Ecología Politica (IEP), a Chilean environmental NGO. The ‘interview’ is a fictitious interview with Neruda based on his poetry and life. Chilean Nobel prizewinner for Poetry: Neruda, a lifelong environmentalist Pablo Neruda was a poet with sincere environmental concerns. He founded and directed "Revista Caballo Verde" in Spain in 1935 (which unfortunately only had four editions). There, he worked with Spanish poets such as Alberti, Prados, Cernuda, Miguel Hernández, and Leopoldo Panero. He also established strong connections with Latin-American poets while he was director. Neruda would have celebrated his 99th birthday July 12, 2003. Pum Pum, who was like a niece to Neruda, agreed to a brief interview on Neruda´s birthday with Econoticias in which she answered Econoticias´ questions based on her knowledge of her "uncle" and his autobiography. Pum Pum has also translated some of Neruda´s poems into Russian. Pablo Neruda Eco: From where did you love for poetry stem? Neruda: My poetry was born between the hills and the river, it has the voice of rain, and is saturated with the magic of the forest as are the trees themselves. Eco: Have you been an environmentalist all your life? Neruda: Nature intoxicates my mind and soul like a drug. I feel a certain attraction toward all Nature´s creatures: birds, beetles, quail eggs. The anatomical perfection of such specimens of life truly amazes me. Eco: What is your opinion on the native Chilean forest? Neruda: If one is not familiar with the Chilean forest, then one cannot fully appreciate the world. Everything about our forests, from the actual land, to the mud, to the silence, is magical. It is to tell the world of such a magical land that I walk the world, singing the forest´s praise. Eco: How do you view the logging practices of the paper-mills? Neruda: The great forests of the south are being decimated. The land has been burnt, the forests razed to the ground, Nature is being attacked like an enemy during war. Paper-mills and other industries with similar factories are turning it into a monotonous landscape that is compatible only with other grey monotonous factories. Eco: What is happening to the land where the native Chilean forests were? Neruda: The native woods are being replaced by pine trees and other exotic specimens that are mechanically planted in monotonous rows that looks as natural as if the mills had set out green raincoats on the ground for some new production process. Eco: Were the forests of Southern Chile a source of great inspiration for your poetry? Neruda: The Chilean landscape is permanently instilled in my poetry. My journey through life goes is cyclical, always coming back to the Chilean forest, the lost forest. 52 Eco: Were you ever influenced by the thoughts of an environmentalist? Neruda: The ideas of Ms. Julia Rogers, her voice flowed like a river and her words were as majestic as the mountains. As I look back on my life and remember her thoughts that she shared with me, they remind me of the sublime power of silence. For me, the most important aspect of any living thing are it´s roots, for roots are the origin of life. Julia Rogers most importantly captured the essence of roots. Eco: It seems birds are another source of inspiration for your poetry. Neruda: The birds have taught me so much. The large birds, the little birds, all the birds in the sky. (Unfortunately, they did not teach me how to fly nor sing.) Although I could never know them on a personal level, that is to say that I did not know in which tree they lived or from what family they came, I did learn to love them as one loves one´s native land. Although it is impossible to know every detail of one´s homeland, the familiarity of being "home" is comforting. Also, as I watched them fly up and down and all around, I became proud of my ignorance of flying, because my ignorance granted me the stability of having two feet on the ground. On the other hand, I realized that the birds were laughing at me as they flew above my head. To humiliate them in return, I invented birds through my poetry to represent me amongst the real birds living in the sky. It was in this manner that the birds inspired my poetry. Eco: You also deeply loved insects? Neruda: In the southern forests, that are now being attacked or have already been killed while our government patiently stands by and does nothing, I was enchanted by their vibrant silence. Sleeping underneath gigantic boulders or searching for food in fallen logs, examining the intricate beauty of a corolla or exercising in the swamps. Over the years, I have gathered a small collection of a certain insect, madres de la culebra. Having such a collection permits me to protect a few of the defenseless creatures of Nature. My poery has evolved to become a paean to beetles. Eco: You are an ardent defender of the ocean, no? Neruda: I have become an expert on the tides, cetaceans, jellyfish, shells, all types of marine life. Eco: Did your love for the ocean motivate you to move to Isla Negra? Neruda: Of course. It seems to me that the ocean is much more clean and pure than the land. The diabolical crimes that occur in the huge metropolises today cannot be found in the water. Nor is the road towards world annhilation visible in the sea. Eco: Going to Isla Negra also allowed you to escape the smog of Santiago. Neruda: The pestilent smog does not reach the seashore; nor do cigarette smoke and ash accumulate in the air. The hygienic purity of the blue waves oxygenate the polluted Earth. Eco: With all the lies in the world today, how will we free ourselves from such fabrications? Neruda: The uprighteous people will liberate themselves. Using the strength of virtue, they will weigh the scales of justice and fight and punish corruption. These scales of justice will not fawn to or be sullied by greed because they are humanity´s ultimate weapon. Eco: And who are the ones that will end up poor, that is not to say financially poor but poor in terms of the soul and mind? Neruda: The corrupt, the perverted and the submissive will be destitute. Their baseness will be rightly punished by the virtuous. As the majority of the wealthy are rich in money today, the virtuous will be rich in spirit tomorrow. As the majority of the powerful weild a mighty hand over the corrupt dealings in the world today, the virtuous will weild a mighty hand over the gift of life romorrow. From such virtuous people will come the kingdom of the world. Eco: Of what should the virtuous be cautious in this fight for justice? Neruda: While it might seem at some point that the reactionaries have been defeated and only exist in the form of relics from a past era, we must be wary that while their bones and medals and war-scarred bloody limbs are locked away, their thirst for 53 domination and torment will live on. This thirst spies on us from day to night, waiting like an executioner to murder virtue. We must also beware of false liberators who hide behind sweet bouquets of flowers. Eco: Your poetry is intertwined with and is as complicated as life. Neruda: My poetry, and my life, have flowed like an American river, like the torrent of Chilean mountain streams. Born in the southern Chilean mountains amongst Nature´s magical secrets, it flows toward the ocean without ever slowing its current. My river has picked up all the fauna and flora and sediment it could on its path to the ocean, and most importantly it has captured the heart and soul of the people. Translated by Jenny Ratner Para mayores informaciones contactarse con Pamela Velasquez y Rodrigo Cerda Iturriaga, Fono 2-223 90 59, e-mail comunicaciones@iepe.org [Portada] [Opinión] [Mundo] [Latinoamérica] [Chile] [Temas] © 2003 - Instituto de Ecología Politica (IEP) 54 Pablo Neruda’s Nobel Lecture: Towards the Splendid City December 13, 1971, (Translation) My speech is going to be a long journey, a trip that I have taken through regions that are distant and antipodean, but not for that reason any less similar to the landscape and the solitude in Scandinavia. I refer to the way in which my country stretches down to the extreme South. So remote are we Chileans that our boundaries almost touch the South Pole, recalling the geography of Sweden, whose head reaches the snowy northern region of this planet. Down there on those vast expanses in my native country, where I was taken by events which have already fallen into oblivion, one has to cross, and I was compelled to cross, the Andes to find the frontier of my country with Argentina. Great forests make these inaccessible areas like a tunnel through which our journey was secret and forbidden, with only the faintest signs to show us the way. There were no tracks and no paths, and I and my four companions, riding on horseback, pressed forward on our tortuous way, avoiding the obstacles set by huge trees, impassable rivers, immense cliffs and desolate expanses of snow, blindly seeking the quarter in which my own liberty lay. Those who were with me knew how to make their way forward between the dense leaves of the forest, but to feel safer they marked their route by slashing with their machetes here and there in the bark of the great trees, leaving tracks which they would follow Foto cortesía de la Fundación Pablo Neruda back when they had left me alone with my destiny. Each of us made his way forward filled with this limitless solitude, with the green and white silence of trees and huge trailing plants and layers of soil laid down over centuries, among half-fallen tree trunks which suddenly appeared as fresh obstacles to bar our progress. We were in a dazzling and secret world of nature which at the same time was a growing menace of cold, snow and persecution. Everything became one: the solitude, the danger, the silence, and the urgency of my mission. Sometimes we followed a very faint trail, perhaps left by smugglers or ordinary criminals in flight, and we did not know whether many of them had perished, surprised by the icy hands of winter, by the fearful snowstorms which suddenly rage in the Andes and engulf the traveller, burying him under a whiteness seven storeys high. On either side of the trail I could observe in the wild desolation something which betrayed human activity. There were piled up branches which had lasted out many winters, offerings made by hundreds who had journeyed there, crude burial mounds in memory of the fallen, so that the passer should think of those who had not been able to struggle on but had remained there under the snow for ever. My comrades, too, hacked off with their machetes branches which brushed our heads and bent down over us from the colossal trees, from oaks whose last leaves were scattering before the winter storms. And I too left a tribute at every mound, a visiting card of wood, a branch from the forest to deck one or other of the graves of these unknown travellers. We had to cross a river. Up on the Andean summits there run small streams which cast themselves down with dizzy and insane force, forming waterfalls that stir up earth and stones with the violence they bring with them from the heights. But this time we found calm water, a wide mirrorlike expanse which could be forded. The horses splashed in, lost their foothold and began to swim towards the other bank. Soon my horse was almost completely covered by the water, I began to plunge up and down without support, my feet fighting desperately while the horse struggled to keep its head above water. Then we got across. And hardly we reached the further bank when the seasoned countryfolk with me asked me with scarce-concealed smiles: "Were you frightened?" "Very. I thought my last hour had come", I said. "We were behind you with our lassoes in our hands", they answered. "Just there", added one of them, "my father fell and was swept away by the current. That didn't happen to you." We continued till we came to a natural tunnel which perhaps had been bored through the imposing rocks by some mighty vanished river or created by some tremor of the earth when these heights had been formed, a channel that we entered where it had been carved out in the rock in granite. After only a few steps our horses began to slip when they sought for a foothold in the uneven surfaces of the stone and their legs were bent, sparks flying from beneath their iron shoes - several times I expected to find myself thrown off and lying there on the rock. My horse was bleeding from its muzzle and from its legs, but we persevered 55 and continued on the long and difficult but magnificent path. There was something awaiting us in the midst of this wild primeval forest. Suddenly, as if in a strange vision, we came to a beautiful little meadow huddled among the rocks: clear water, green grass, wild flowers, the purling of brooks and the blue heaven above, a generous stream of light unimpeded by leaves. There we stopped as if within a magic circle, as if guests within some hallowed place, and the ceremony I now took part in had still more the air of something sacred. The cowherds dismounted from their horses. In the midst of the space, set up as if in a rite, was the skull of an ox. In silence the men approached it one after the other and put coins and food in the eyesockets of the skull. I joined them in this sacrifice intended for stray travellers, all kinds of refugees who would find bread and succour in the dead ox's eye sockets. But the unforgettable ceremony did not end there. My country friends took off their hats and began a strange dance, hopping on one foot around the abandoned skull, moving in the ring of footprints left behind by the many others who had passed there before them. Dimly I understood, there by the side of my inscrutable companions, that there was a kind of link between unknown people, a care, an appeal and an answer even in the most distant and isolated solitude of this world. Further on, just before we reached the frontier which was to divide me from my native land for many years, we came at night to the last pass between the mountains. Suddenly we saw the glow of a fire as a sure sign of a human presence, and when we came nearer we found some half-ruined buildings, poor hovels which seemed to have been abandoned. We went into one of them and saw the glow of fire from tree trunks burning in the middle of the floor, carcasses of huge trees, which burnt there day and night and from which came smoke that made its way up through the cracks in the roof and rose up like a deep-blue veil in the midst of the darkness. We saw mountains of stacked cheeses, which are made by the people in these high regions. Near the fire lay a number of men grouped like sacks. In the silence we could distinguish the notes of a guitar and words in a song which was born of the embers and the darkness, and which carried with it the first human voice we had encountered during our journey. It was a song of love and distance, a cry of love and longing for the distant spring, from the towns we were coming away from, for life in its limitless extent. These men did not know who we were, they knew nothing about our flight, they had never heard either my name or my poetry; or perhaps they did, perhaps they knew us? What actually happened was that at this fire we sang and we ate, and then in the darkness we went into some primitive rooms. Through them flowed a warm stream, volcanic water in which we bathed, warmth which welled out from the mountain chain and received us in its bosom. Happily we splashed about, dug ourselves out, as it were, liberated ourselves from the weight of the long journey on horseback. We felt refreshed, reborn, baptised, when in the dawn we started on the journey of a few miles which was to eclipse me from my native land. We rode away on our horses singing, filled with a new air, with a force that cast us out on to the world's broad highway which awaited me. This I remember well, that when we sought to give the mountain dwellers a few coins in gratitude for their songs, for the food, for the warm water, for giving us lodging and beds, I would rather say for the unexpected heavenly refuge that had met us on our journey, our offering was rejected out of hand. They had been at our service, nothing more. In this taciturn "nothing" there were hidden things that were understood, perhaps a recognition, perhaps the same kind of dreams. Ladies and Gentlemen, I did not learn from books any recipe for writing a poem, and I, in my turn, will avoid giving any advice on mode or style which might give the new poets even a drop of supposed insight. When I am recounting in this speech something about past events, when reliving on this occasion a never-forgotten occurrence, in this place which is so different from what that was, it is because in the course of my life I have always found somewhere the necessary support, the formula which had been waiting for me not in order to be petrified in my words but in order to explain me to myself. During this long journey I found the necessary components for the making of the poem. There I received contributions from the earth and from the soul. And I believe that poetry is an action, ephemeral or solemn, in which there enter as equal partners solitude and solidarity, emotion and action, the nearness to oneself, the nearness to mankind and to the secret manifestations of nature. And no less strongly I think that all this is sustained - man and his shadow, man and his conduct, man and his poetry by an ever-wider sense of community, by an effort which will for ever bring together the reality and the dreams in us because it is precisely in this way that poetry unites and mingles them. And therefore I say that I do not know, after so many years, whether the lessons I learned when I crossed a daunting river, when I danced around the skull of an ox, when I bathed my body in the cleansing water from the topmost heights - I do not know whether these lessons welled forth from me in order to be imparted to many others or whether it was all a message which was sent to me by others as a demand or an accusation. I do not know whether I experienced this or created it, I do not know whether it was truth or poetry, something passing or permanent, the poems I experienced in this hour, the experiences which I later put into verse. From all this, my friends, there arises an insight which the poet must learn through other people. There is no insurmountable solitude. All paths lead to the same goal: to convey to others what we are. And we must pass through solitude and difficulty, isolation and silence in order to reach forth to the enchanted place where we can dance our clumsy dance and sing our 56 sorrowful song - but in this dance or in this song there are fulfilled the most ancient rites of our conscience in the awareness of being human and of believing in a common destiny. The truth is that even if some or many consider me to be a sectarian, barred from taking a place at the common table of friendship and responsibility, I do not wish to defend myself, for I believe that neither accusation nor defence is among the tasks of the poet. When all is said, there is no individual poet who administers poetry, and if a poet sets himself up to accuse his fellows or if some other poet wastes his life in defending himself against reasonable or unreasonable charges, it is my conviction that only vanity can so mislead us. I consider the enemies of poetry to be found not among those who practise poetry or guard it but in mere lack of agreement in the poet. For this reason no poet has any considerable enemy other than his own incapacity to make himself understood by the most forgotten and exploited of his contemporaries, and this applies to all epochs and in all countries. The poet is not a "little god". No, he is not a "little god". He is not picked out by a mystical destiny in preference to those who follow other crafts and professions. I have often maintained that the best poet is he who prepares our daily bread: the nearest baker who does not imagine himself to be a god. He does his majestic and unpretentious work of kneading the dough, consigning it to the oven, baking it in golden colours and handing us our daily bread as a duty of fellowship. And, if the poet succeeds in achieving this simple consciousness, this too will be transformed into an element in an immense activity, in a simple or complicated structure which constitutes the building of a community, the changing of the conditions which surround mankind, the handing over of mankind's products: bread, truth, wine, dreams. If the poet joins this never-completed struggle to extend to the hands of each and all his part of his undertaking, his effort and his tenderness to the daily work of all people, then the poet must take part, the poet will take part, in the sweat, in the bread, in the wine, in the whole dream of humanity. Only in this indispensable way of being ordinary people shall we give back to poetry the mighty breadth which has been pared away from it little by little in every epoch, just as we ourselves have been whittled down in every epoch. Foto cortesía de la Fundación Pablo Neruda The mistakes which led me to a relative truth and the truths which repeatedly led me back to the mistakes did not allow me - and I never made any claims to it - to find my way to lead, to learn what is called the creative process, to reach the heights of literature that are so difficult of access. But one thing I realized that it is we ourselves who call forth the spirits through our own myth-making. From the matter we use, or wish to use, there arise later on obstacles to our own development and the future development. We are led infallibly to reality and realism, that is to say to become indirectly conscious of everything that surrounds us and of the ways of change, and then we see, when it seems be late, that we have erected such an exaggerated barrier that we are what is alive instead of helping life to develop and blossom. We force upon ourselves a realism which later proves to be more burdensome than the bricks of the building, without having erected the building which we had regarded as an indispensable part of our task. And, in the contrary case, if we succeed in creating the fetish of the incomprehensible (or the fetish of that which is comprehensible only to a few), the fetish of the exclusive and the secret, if we exclude reality and its realistic degenerations, then we find ourselves suddenly surrounded by an impossible country, a quagmire of leaves, of mud, of cloud, where our feet sink in and we are stifled by the impossibility of communicating. As far as we in particular are concerned, we writers within the tremendously far-flung American region, we listen unceasingly to the call to fill this mighty void with beings of flesh and blood. We are conscious of our duty as fulfillers - at the same time we are faced with the unavoidable task of critical communication within a world which is empty and is not less full of injustices, punishments and sufferings because it is empty - and we feel also the responsibility for reawakening the old dreams which sleep in statues of stone in the ruined ancient monuments, in the wide-stretching silence in planetary plains, in dense primeval forests, in rivers which roar like thunder. We must fill with words the most distant places in a dumb continent and we are intoxicated by this task of making fables and giving names. This is perhaps what is decisive in my own humble case, and if so my exaggerations or my abundance or my rhetoric would not be anything other than the simplest of events within the daily work of an American. Each and every one of my verses has chosen to take its place as a tangible object, each and every one of my poems has claimed to be a useful working instrument, each and every one of my songs has endeavoured to serve as a sign in space for a meeting between paths which cross one another, or as a piece of stone or wood on which someone, some others, those who follow after, will be able to carve the new signs. By extending to these extreme consequences the poet's duty, in truth or in error, I determined that my posture within the community and before life should be that of in a humble way taking sides. I decided this when I saw so many honourable misfortunes, lone victories, splendid defeats. In the midst of the arena of America's struggles I saw that my human task was none other than to join the extensive forces of the organized masses of the people, to join with life and soul with suffering and hope, because it is only from this great popular stream that the necessary changes can arise for the authors and for the nations. And even if my attitude gave and still gives rise to bitter or friendly objections, the truth is that I can find no other way for an 57 author in our far-flung and cruel countries, if we want the darkness to blossom, if we are concerned that the millions of people who have learnt neither to read us nor to read at all, who still cannot write or write to us, are to feel at home in the area of dignity without which it is impossible for them to be complete human beings. We have inherited this damaged life of peoples dragging behind them the burden of the condemnation of centuries, the most paradisaical of peoples, the purest, those who with stones and metals made marvellous towers, jewels of dazzling brilliance - peoples who were suddenly despoiled and silenced in the fearful epochs of colonialism which still linger on. Our original guiding stars are struggle and hope. But there is no such thing as a lone struggle, no such thing as a lone hope. In every human being are combined the most distant epochs, passivity, mistakes, sufferings, the pressing urgencies of our own time, the pace of history. But what would have become of me if, for example, I had contributed in some way to the maintenance of the feudal past of the great American continent? How should I then have been able to raise my brow, illuminated by the honour which Sweden has conferred on me, if I had not been able to feel some pride in having taken part, even to a small extent, in the change which has now come over my country? It is necessary to look at the map of America, to place oneself before its splendid multiplicity, before the cosmic generosity of the wide places which surround us, in order to understand why many writers refuse to share the dishonour and plundering of the past, of all that which dark gods have taken away from the American peoples. I chose the difficult way of divided responsibility and, rather than to repeat the worship of the individual as the sun and centre of the system, I have preferred to offer my services in all modesty to an honourable army which may from time to time commit mistakes but which moves forward unceasingly and struggles every day against the anachronism of the refractory and the impatience of the opinionated. For I believe that my duties as a poet involve friendship not only with the rose and with symmetry, with exalted love and endless longing, but also with unrelenting human occupations which I have incorporated into my poetry. It is today exactly one hundred years since an unhappy and brilliant poet, the most awesome of all despairing souls, wrote down this prophecy: "A l'aurore, armés d'une ardente patience, nous entrerons aux splendides Villes." "In the dawn, armed with a burning patience, we shall enter the splendid Cities." I believe in this prophecy of Rimbaud, the Visionary. I come from a dark region, from a land separated from all others by the steep contours of its geography. I was the most forlorn of poets and my poetry was provincial, oppressed and rainy. But always I had put my trust in man. I never lost hope. It is perhaps because of this that I have reached as far as I now have with my poetry and also with my banner. Lastly, I wish to say to the people of good will, to the workers, to the poets, that the whole future has been expressed in this line by Rimbaud: only with a burning patience can we conquer the splendid City which will give light, justice and dignity to all mankind. In this way the song will not have sung in vain. 58 Discurso de Pablo Neruda al recibir el Premio Nobel Hacia la Ciudad Espléndida 13 de diciembre de 1971 Mi discurso será una larga travesía, un viaje mío por regiones, lejanas y antípodas, no por eso menos semejantes al paisaje y a las soledades del norte. Hablo del extremo sur de mi país. Tanto y tanto nos alejamos los chilenos hasta tocar con nuestros limites el Polo Sur, que nos parecemos a la geografía de Suecia, que roza con su cabeza el norte nevado del planeta. Por allí, por aquellas extensiones de mi patria adonde me condujeron acontecimientos ya olvidados en sí mismos, hay que atravesar, que atravesar los Andes buscando la frontera de mi país con Argentina. Grandes bosques cubren como un túnel las regiones inaccesibles y como nuestro camino era |oculto y vedado, aceptábamos tan sólo los signos más débiles de la orientación. No había huellas, no existían senderos y con mis cuatro compañeros a caballo buscábamos en ondulante cabalgata -eliminando los obstáculos de poderosos árboles, imposibles ríos, roqueríos inmensos, desoladas nieves, adivinando mas bien el derrotero de mi propia libertad. Los que me acompañaban conocían la orientación, la posibilidad entre los grandes follajes, pero Foto cortesía de la Fundación Pablo Neruda para saberse más seguros montados en sus caballos marcaban de un machetazo aquí y allá las cortezas de los grandes árboles dejando huellas que los guiarían en el regreso, cuando me dejaran solo con mi destino. Cada uno avanzaba embargado en aquella soledad sin márgenes, en aquel silencio verde y blanco, los árboles, las grandes enredaderas, el humus depositado por centenares de años, los troncos semi-derribados que de pronto eran una barrera más en nuestra marcha. Todo era a la vez una naturaleza deslumbradora y secreta y a la vez una creciente amenaza de frío, nieve, persecución. Todo se mezclaba: la soledad, el peligro, el silencio y la urgencia de mi misión. A veces seguíamos una huella delgadísima, dejada quizás por contrabandistas o delincuentes comunes fugitivos, e ignorábamos si muchos de ellos habían perecido, sorprendidos de repente por las glaciales manos del invierno, por las tormentas tremendas de nieve que, cuando en los Andes se descargan, envuelven al viajero, lo hunden bajo siete pisos de blancura. A cada lado de la huella contemplé, en aquella salvaje desolación, algo como una construcción humana. Eran trozos de ramas acumulados que habían soportado muchos inviernos, vegetal ofrenda de centenares de viajeros, altos cúmulos de madera para recordar a los caídos, para hacer pensar en los que no pudieron seguir y quedaron allí para siempre debajo de las nieves. También mis compañeros cortaron con sus machetes las ramas que nos tocaban las cabezas y que descendían sobre nosotros desde la altura de las coníferas inmensas, desde los robles cuyo último follaje palpitaba antes de las tempestades del invierno. Y también yo fui dejando en cada túmulo un recuerdo, una tarjeta de madera, una rama cortada del bosque para adornar las tumbas de uno y otro de los viajeros desconocidos. Teníamos que cruzar un río. Esas pequeñas vertientes nacidas en las cumbres de los Andes se precipitan, descargan su fuerza vertiginosa y atropelladora, se tornan en cascadas, rompen tierras y rocas con la energía y la velocidad que trajeron de las alturas insignes: pero esa vez encontramos un remanso, un gran espejo de agua, un vado. Los caballos entraron, perdieron pie y nadaron hacia la otra ribera. Pronto mi caballo fue sobrepasado casi totalmente por las aguas, yo comencé a mecerme sin sostén, mis pies se afanaban al garete mientras la bestia pugnaba por mantener la cabeza al aire libre. Así cruzamos. Y apenas llegados a la otra orilla, los baqueanos, los campesinos que me acompañaban me preguntaron con cierta sonrisa: 59 ¿Tuvo mucho miedo? Mucho. Creí que había llegado mi última hora, dije. Íbamos detrás de usted con el lazo en la mano me respondieron. -Ahí mismo –agregó uno de ellos– cayó mi padre y lo arrastró la corriente. No iba a pasar lo mismo con usted. Seguimos hasta entrar en un túnel natural que tal vez abrió en las rocas imponentes un caudaloso río perdido, o un estremecimiento del planeta que dispuso en las alturas aquella obra, aquel canal rupestre de piedra socavada, de granito, en el cual penetramos. A los pocos pasos las cabalgaduras resbalaban, trataban de afincarse en los desniveles de piedra, se doblegaban sus patas, estallaban chispas en las herraduras: más de una vez me vi arrojado del caballo y tendido sobre las rocas. La cabalgadura sangraba de narices y patas, pero proseguimos empecinados el vasto, el espléndido, el difícil camino. Algo nos esperaba en medio de aquella selva salvaje. Súbitamente, como singular visión, llegamos a una pequeña y esmerada pradera acurrucada en el regazo de las montañas: agua clara, prado verde, flores silvestres, rumor de rios y el cielo azul arriba, generosa luz ininterrumpida por ningún follaje. Foto cortesía de la Fundación Pablo Neruda Allí nos detuvimos como dentro de un círculo mágico, como huéspedes de un recinto sagrado: y mayor condición de sagrada tuvo aun la ceremonia en la que participé. Los vaqueros bajaron de sus cabalgaduras. En el centro del recinto estaba colocada, como en un rito, una calavera de buey. Mis compañeros se acercaron silenciosamente, uno por uno, para dejar unas monedas y algunos alimentos en los agujeros de hueso. Me uní a ellos en aquella ofrenda destinada a toscos Ulises extraviados, a fugitivos de todas las raleas que encontrarían pan y auxilio en las órbitas del toro muerto. Pero no se detuvo en este punto la inolvidable ceremonia. Mis rústicos amigos se despojaron de sus sombreros e iniciaron una extraña danza, saltando sobre un solo pie alrededor de la calavera abandonada, repasando la huella circular dejada por tantos bailes de otros que por allí cruzaron antes. Comprendí entonces de una manera imprecisa, al lado de mis impenetrables compañeros, que existía una comunicación de desconocido a desconocido, que había una solicitud, una petición y una respuesta aún en las más lejanas y apartadas soledades de este mundo. Más lejos, ya a punto de cruzar las fronteras que me alejarían por muchos años de mi patria, llegamos de noche a las últimas gargantas de las montañas. Vimos de pronto una luz encendida que era indicio cierto de habitación humana y, al acercarnos, hallamos unas desvencijadas construcciones, unos destartalados galpones al parecer vacíos. Entramos a uno de ellos y vimos, al calor de la lumbre, grandes troncos encendidos en el centro de la habitación, cuerpos de árboles gigantes que allí ardían de día y de noche y que dejaban escapar por las hendiduras del techo ml humo que vagaba en medio de las tinieblas como un profundo velo azul. Vimos montones de quesos acumulados por quienes los cuajaron a aquellas alturas. Cerca del fuego, agrupados como sacos, yacían algunos hombres. Distinguimos en el silencio las cuerdas de una guitarra y las palabras de una canción que, naciendo de las brasas y la oscuridad, nos traía la primera voz humana que habíamos topado en el camino. Era una canción de amor y de distancia, un lamento de amor y de nostalgia dirigido hacia la primavera lejana, hacia las ciudades de donde veníamos, hacia la infinita extensión de la vida. Ellos ignoraban quienes éramos, ellos nada sabían del fugitivo, ellos no conocían mi poesía ni mi nombre. O lo conocían, nos conocían? El hecho real fue que junto a aquel fuego cantamos y comimos, y luego caminamos dentro de la oscuridad hacia unos cuartos elementales. A través de ellos pasaba una corriente termal, agua volcánica donde nos sumergimos, calor que se desprendía de las cordilleras y nos acogió en su seno. 60 Chapoteamos gozosos, cavándonos, limpiándonos el peso de la inmensa cabalgata. Nos sentimos frescos, renacidos, bautizados, cuando al amanecer emprendimos los últimos kilómetros de jornadas que me separarían de aquel eclipse de mi patria. Nos alejamos cantando sobre nuestras cabalgaduras, plenos de un aire nuevo, de un aliento que nos empujaba al gran camino del mundo que me estaba esperando. Cuando quisimos dar (lo recuerdo vivamente) a los montañeses algunas monedas de recompensa por las canciones, por los alimentos, por las aguas termales, por el techo y los lechos, vale decir, por el inesperado amparo que nos salió al encuentro, ellos rechazaron nuestro ofrecimiento sin un ademán. Nos habían servido y nada más. Y en ese "nada más" en ese silencioso nada más había muchas cosas subentendidas, tal vez el reconocimiento, tal vez los mismos sueños. Señoras y Señores: Yo no aprendí en los libros ninguna receta para la composición de un poema: y no dejaré impreso a mi vez ni siquiera un consejo, modo o estilo para que los nuevos poetas reciban de mí alguna gota de supuesta sabiduría. Si he narrado en este discurso ciertos sucesos del pasado, si he revivido un nunca olvidado relato en esta ocasión y en este sitio tan diferentes a lo acontecido, es porque en el curso de mi vida he encontrado siempre en alguna parte la aseveración necesaria, la fórmula que me aguardaba, no para endurecerse en mis palabras sino para explicarme a mí mismo. En aquella larga jornada encontré las dosis necesarias a la formación del poema. Allí me fueron dadas las aportaciones de la tierra y del alma. Y pienso que la poesía es una acción pasajera o solemne en que entran por parejas medidas la soledad y la solidaridad, el sentimiento y la acción, la intimidad de uno mismo, la intimidad del hombre y la secreta revelación de la naturaleza. Y pienso con no menor fe que todo esta sostenido -el hombre y su sombra, el hombre y su actitud, el hombre y su poesia en una comunidad cada vez más extensa, en un ejercicio que integrará para siempre en nosotros la realidad y los sueños, porque de tal manera los une y los confunde. Y digo de igual modo que no sé, después de tantos años, si aquellas lecciones que recibí al cruzar un vertiginoso río, al bailar alrededor del cráneo de una vaca, al bañar mi piel en el agua purificadora de las más altas regiones, digo que no sé si aquello salía de mí mismo para comunicarse después con muchos otros seres, o era el mensaje que los demás hombres me enviaban como exigencia o emplazamiento. No sé si aquello lo viví o lo escribí, no sé si fueron verdad o poesía, transición o eternidad los versos que experimenté en aquel momento, las experiencias que canté más tarde. De todo ello, amigos, surge una enseñanza que el poeta debe aprender de los demás hombres. No hay soledad inexpugnable. Todos los caminos llevan al mismo punto: a la comunicación de lo que somos. Y es preciso atravesar la soledad y la aspereza, la incomunicación y el silencio para llegar al recinto mágico en que podemos danzar torpemente o cantar con melancolía; mas en esa danza o en esa canción están consumados los más antiguos ritos de la conciencia: de la conciencia de ser hombres y de creer en un destino común. En verdad, si bien alguna o mucha gente me consideró un sectario, sin posible participación en la mesa común de la amistad y de la responsabilidad, no quiero justificarme, no creo que las acusaciones ni las justificaciones tengan cabida entre los deberes del poeta. Después de todo, ningún poeta administró la poesía, y si alguno de ellos se detuvo a acusar a sus semejantes, o si otro pensó que podría gastarse la vida defendiéndose de recriminaciones razonables o absurdas, mi convicción es que sólo la vanidad es capaz de desviarnos hasta tales extremos. Digo que los enemigos de la poesía no están entre quienes la profesan o resguardan, sino en la falta de concordancia del poeta. De ahí que ningún poeta tenga más enemigo esencial que su propia incapacidad para entenderse con los más ignorados y explotados de sus contemporáneos; y esto rige para todas las épocas y para todas las tierras. El poeta no es un "pequeño dios". No, no es un "pequeño dios". No está signado por un destino cabalístico superior al de quienes ejercen otros menesteres y oficios. A menudo expresé que el mejor poeta es el hombre que nos entrega el pan de cada día: el panadero más próximo, que no se cree dios. Él cumple su majestuosa y humilde faena de amasar, meter al horno, dorar y entregar el pan de cada día, con una obligación comunitaria. Y si el poeta llega a alcanzar esa sencilla conciencia, podrá también la sencilla conciencia convertirse en parte de una colosal artesanía, de una construcción simple o complicada, que es la construcción de la sociedad, la transformación de las condiciones que rodean al hombre, la entrega de la 61 mercadería: pan, verdad, vino, sueños. Si el poeta se incorpora a esa nunca gastada lucha por consignar cada uno en manos de los otros su ración de compromiso, su dedicación y su ternura al trabajo común de cada día y de todos los hombres, el poeta tomará parte en el sudor, en el pan, en el vino, en el sueño de la humanidad entera. Sólo por ese camino inalienable de ser hombres comunes llegaremos a restituirle a la poesía el anchuroso espacio que le van recortando en cada época, que le vamos recortando en cada época nosotros mismos. Los errores que me llevaron a una relativa verdad, y las verdades que repetidas veces me condujeron al error, unos y otras no me permitieron -ni yo lo pretendí nunca- orientar, dirigir, enseñar lo que se llama el proceso creador, los vericuetos de la literatura. Pero sí me di cuenta de una cosa: de que nosotros mismos vamos creando los fantasmas de nuestra propia mitificacion. De la argamasa de lo que hacemos, o queremos hacer, surgen más tarde los impedimentos de nuestro propio y futuro desarrollo. Nos vemos indefectiblemente conducidos a la realidad y al realismo, es decir, a tomar una conciencia directa de lo que nos rodea y de los caminos de la transformación, y luego comprendemos, cuando parece tarde, que hemos construido una limitación tan exagerada que matamos lo vivo en vez de conducir la vida a desenvolverse y florecer. Nos imponemos un realismo que posteriormente nos resulta más pesado que el ladrillo de las construcciones, sin que por ello hayamos erigido el edificio que contemplábamos como parte integral de nuestro deber. Y en sentido contrario, si alcanzamos a crear el fetiche de lo incomprensible (o de lo comprensible para unos pocos), el fetiche de lo selecto y de lo secreto, si suprimimos la realidad y sus degeneraciones realistas, nos veremos de pronto rodeados de un terreno imposible, de un tembladeral de hojas, de barro, de libros, en que se hunden nuestros pies y nos ahoga una incomunicación opresiva. En cuanto a nosotros en particular, escritores de la vasta extensión americana, escuchamos sin tregua el llamado para llenar ese espacio enorme con seres de carne y hueso. Somos conscientes de nuestra obligación de pobladores y -al mismo tiempo que nos resulta esencial el deber de una comunicación critica en un mundo deshabitado y, no por deshabitado menos lleno de injusticias, castigos y dolores, sentimos también el compromiso de recobrar los antiguos sueños que duermen en las estatuas de piedra, en los antiguos monumentos destruidos, en los anchos silencios de pampas planetarias, de selvas espesas, de ríos que cantan como sueños. Necesitamos colmar de palabras los confines de un continente mudo y nos embriaga esta tarea de fabular y de nombrar. Tal vez ésa sea la razón determinante de mi humilde caso individual: y en esa circunstancia mis excesos, o mi abundancia, o mi retórica, no vendrían a ser sino actos, los más simples, del menester americano de cada día. Cada uno de mis versos quiso instalarse como un objeto palpable: cada uno de mis poemas pretendió ser un instrumento útil de trabajo: cada uno de mis cantos aspiró a servir en el espacio como signos de reunión donde se cruzaron los caminos, o como fragmento de piedra o de madera con que alguien, otros que vendrán, pudieran depositar los nuevos signos. Extendiendo estos deberes del poeta, en la verdad o en el error, hasta sus últimas consecuencias, decidí que mi actitud dentro de la sociedad y ante la vida debía ser también humildemente partidaria. Lo decidí viendo gloriosos fracasos, solitarias victorias, derrotas deslumbrantes. Comprendí, metido en el escenario de las luchas de América, que mi misión humana no era otra sino agregarme a la extensa fuerza del pueblo organizado, agregarme con sangre y alma, con pasión y esperanza, porque sólo de esa henchida torrentera pueden nacer los cambios necesarios a los escritores y a los pueblos. Y aunque mi posición levantara o levante objeciones amargas o amables, lo cierto es que no hallo otro camino para el escritor de nuestros anchos y crueles países, si queremos que florezca la oscuridad, si pretendemos que los millones de hombres que aún no han aprendido a leernos ni a leer, que todavía no saben escribir ni escribirnos, se establezcan en el terreno de la dignidad sin la cual no es posible ser hombres integrales. Heredamos la vida lacerada de los pueblos que arrastran un castigo de siglos, pueblos los más edénicos, los más puros, los que construyeron con piedras y metales torres milagrosas, alhajas de fulgor deslumbrante: pueblos que de pronto fueron arrasados y enmudecidos por las épocas terribles del colonialismo que aún existe. Nuestras estrellas primordiales son la lucha y la esperanza. Pero no hay lucha ni esperanza solitarias. En todo hombre se juntan las épocas remotas, la inercia, los errores, las pasiones, las urgencias de nuestro tiempo, la velocidad de la historia. Pero, qué sería de mí si yo, por ejemplo, hubiera contribuido en cualquiera forma al pasado feudal del gran continente americano? Cómo podría yo levantar la frente, 62 iluminada por el honor que Suecia me ha otorgado, si no me sintiera orgulloso de haber tomado una mínima parte en la transformación actual de mi país? Hay que mirar el mapa de América, enfrentarse a la grandiosa diversidad, a la generosidad cósmica del espacio que nos rodea, para entender que muchos escritores se niegan a compartir el pasado de oprobio y de saqueo que oscuros dioses destinaron a los pueblos americanos. Yo escogí el difícil camino de una responsabilidad compartida y, antes de reiterar la adoración hacia el individuo como sol central del sistema, preferí entregar con humildad mi servicio a un considerable ejército que a trechos puede equivocarse, pero que camina sin descanso y avanza cada día enfrentándose tanto a los anacrónicos recalcitrantes como a los infatuados impacientes. Porque creo que mis deberes de poeta no sólo me indicaban la fraternidad con la rosa y la simetría, con el exaltado amor y con la nostalgia infinita, sino también con las ásperas tareas humanas que incorporé a mi poesía. Hace hoy cien años exactos, un pobre y espléndido poeta, el más atroz de los desesperados, escribió esta profecía: A l’aurore, armés d’une ardente patience, nous entrerons aux splendides Villes. (Al amanecer, armados de una ardiente paciencia entraremos en las espléndidas ciudades.) Yo creo en esa profecía de Rimbaud, el vidente. Yo vengo de una oscura provincia, de un país separado de todos los otros por la tajante geografía. Fui el más abandonado de los poetas y mi poesía fue regional, dolorosa y lluviosa. Pero tuve siempre confianza en el hombre. No perdí jamás la esperanza. Por eso tal vez he llegado hasta aquí con mi poesía, y también con mi bandera. En conclusión, debo decir a los hombres de buena voluntad, a los trabajadores, a los poetas, que el entero porvenir fue expresado en esa frase de Rimbaud: solo con una ardiente paciencia conquistaremos la espléndida ciudad que dará luz, justicia y dignidad a todos los hombres. Así la poesía no habrá cantado en vano. 63 Biography of Pablo Neruda from http://www.kirjasto.sci.fi/neruda.htm This Chilean poet, and diplomat, was awarded the Nobel Prize for Literature in 1971. His original name was Neftali Ricardo Reyes Basoalto, but he used the pen name Pablo Neruda for over 20 years before adopting it legally in 1946. Neruda is the most widely read of the Spanish American poets. From the 1940s on, his works reflected the political struggle of the left and the socio-historical developments in South America. He also wrote love poems. Neruda's Twenty Love Poems and a Song of Despair (1924) have sold over a million copies since it first appeared. "Sucede que me canso de ser hombre. Sucede que entro es las sasterías y en los cines marchito, impenetrable, como un cisne de fieltro navegando en un agua de origen y ceniza." (from 'Walking Around') (I happen to be tired of being a man I happen to enter tailor shops and movie houses withered, impenetrable, like a felt swan navigating in a water of sources and ashes.) Neftalí Ricardo Reyes Basoalto was born in Parral, a small town in central Chile. His father, don José del Carmen Reyes Morales, was a poor railway worker and his mother, Rosa Basoalto de Reyes, was a schoolteacher, who died of tuberculosis when Neruda was an infant. Don José Carmen moved with his sons in 1906 to Temuco, and married Trinidad Candia Marvedre. Neruda started to write poetry when he was ten years old. At the age of 12 he met the Chilean poet Gabriela Mistral, who encouraged his literary efforts. Neruda's first literary work, an article, appeared in 1917 in the magazine La Manana. It was followed by the poem, 'Mis ojos', which appeared in 1918 in Corre-Vuela. In 1920 he published poems in the magazine Selva Austral, using the pen name Pablo Neruda to avoid conflict with his family, who disapproved his literary ambitions. From 1921 he studied French at the Instituto Pedagógico in Santiago. In 1924 Neruda gained international fame as an writer with VEINTE POEMAS DE AMOR Y UNA CANCÍON, which is his most widely read work. At the age of only 23 Neruda was appointed by the Chilean government as consul to Burma (now Myanmar). He held diplomatic posts in various East Asian and European Countries, befriending among others the Spanish poet Federico García Lorca. Neruda continued to write for several literary and other magazines, among them La Nación, El Sol, and Revista de Occidente. He also started to edit in 1935 a literary magazine, Caballo Verde para la Poesía. After Neruda ended his affair with the possessive and violently jealous Josie Bliss, he married in 1930 María Antonieta Hagenaar, a Dutch woman who couldn't speak Spanish; they separated in 1936. At that time Neruda lived in Paris, where he published with Nancy Cunard the journal Los Poetas del Mundo Defiende al Pueblo Español. Nancy Cunard was the sole inheritor of the famous Cunard shipping company, who later followed Neruda to Chile with a bullfighter. Her mother disinherited her when she escaped from high society with a black musician. In the 1930s and 1940s Neruda lived with the Argentine painter Delia del Carril, who encouraged Neruda to participate in politics. Neruda and Delia del Carril married in 1943, but the marriage was not recognized in Chile; they separated in 1955. Neruda married in 1966 the Chilean singer Matilde Urrutia. She was the inspiration of much of Neruda's later poetry, among others One Hundred Love Sonnets (1960). Neruda's Residence on Earth (1933), was a visionary work, emerging from the birth of fascism. In 1935-36 he was in Spain but he resigned from his post because he sided with the Spanish Republicans. After the leftist candidate don Pedro Aguirre Cerda won the presidental election, Neruda again was appointed consul, this time to Paris, where he helped Spanish refugees by re-settling them in Chile. 64 In 1942 Neruda visited Cuba and read for the first time his poem, 'Canto de amor para Stalingrado', which praised the Red Army fighting in Stalingrad. His daughter, Malva Marina, died in the same year in Europe. Neruda joined the Communist Party, and in 1945 he was elected to the Chilean Senate. He attacked President González Videla in print and when the government was taken by right-wing extremists, he fled to Mexico. He travelled to the Soviet Union, where he was warmly received, and in other Eastern European countries. Neruda was especially impressed by the vastness of Russia, its birch forests, and rivers. He met Ilya Ehrenburg, whose home was full of works by Picasso, and the Turkish poet Nazim Hikmet, who lived in exile in Moscow. The Soviet Union was for Neruda a country, where libraries, universities, and theatres were open for all. He referred to dogmatic views in the Soviet art, but optimistically believed that the views had been condemned. Neruda's colleagues also read him Boris Pasternak's poems but they did not forget to mention that Pasternak was considered as a political reactionary. In exile Neruda produced CANTO GENERAL (1950), a monumental work of 340 poems. "Come up with me, American love. / Kiss these secret stones with me. / The torrential silver of the Urubamba / makes the pollen fly to its golden cup. The hollow of the bindweed's maze, the petrified plant, the inflexible garland, soar above the silence of these mountain coffers." (From 'The Heights of Macchu Picchu'.) In this work Neruda examined Latin American history from a Marxist point of view, and showed his deep knowledge about the history, geography and politics of the continent. The central theme is the struggle for social justice. Canto general includes Neruda's famous poem 'Alturas de Macchu Picchu', which was born after he visited the Incan ruins of Macchu Picchu in 1943. In it Neruda aspires to become the voice of the dead people who once lived in the city. While in exile, Neruda travelled in Italy, where he lived for a while. After the victory of the anti-Videla forces and the order to arrest leftist was rescinded, Neruda returned to Chile. In 1953 Neruda was awarded the Stalin Prize. He remained faithful to "el partido" when other intellectual had rejected Moscow's leash. However, Neruda's faith was deeply shaken in 1956 by Khrushchev's revelation at the Twentieth Party Congress of the crimes committed during the Stalin regime.His collection EXTRAVAGARIO (1958) reflects this change in his works. In it Neruda turned to his youth. He presents the reader with his daily life and examines critically his Marxist beliefs. During a visit to Buenos Aires in 1957 Neruda was arrested and he spent a restless night in jail. Just before he was released, a policeman gave him a poem, devoted to the famous author. "Poetry is a deep inner calling in man; from it came liturgy, the psalms, and also the content of religions." (from Memoirs, 1974) Establishing a permanent home on the Isla Negra, Neruda continued to travel extensively, visiting Cuba in 1960 and the United States in 1966. When Salvador Allende was elected president, he appointed Neruda as Chile's ambassador to France (1970-72). Neruda died of cancer in Santiago on 23 September in 1973. His death was probably accelerated by the murder of Allende and tragedies caused by Pinochet coup. After Neruda's death his home in Valparaiso and Santioago were robbed. During his long literary career, Neruda produced more than forty volumes of poetry, translations, and verse drama. 65 Pablo Neruda: Premio Nobel de Literatura Adapted from ICARITO http://www.icarito.cl/especiales/neruda//neruda1.htm Ricardo Eliecer Neftalí Reyes Basoalto nació en Parral, actual VII Región, el 12 de julio de 1904. Su madre fue Rosa Neftalí Basoalto Opazo, profesora de un liceo de niñas. Su padre, José Ángel Reyes, fue obrero y posteriormente maquinista. Contrajeron matrimonio en 1903. Rosa murió de tuberculosis pocas semanas después de dar a luz a Neftalí, su único hijo. Esta ausencia marcaría más adelante al poeta, y su nostalgia se hizo patente en dos poemas dedicados a ella Neftalí —bautizado así en recuerdo de su progenitora— se educó los primeros años de su vida en la casa de sus abuelos, hasta que en 1906 fue a vivir a Temuco junto a su padre. En 1919 Neftalí ingresó al Liceo de Hombres de Temuco. y allí Neftalí Reyes adoptó el seudónimo de Pablo Neruda. ï‚· Una ciudad naciente A principios de siglo, Temuco tenía las características de ciudad naciente. La población residente allí estaba conformada en su mayoría por colonos y comunidades indígenas desplazadas a reducciones. El clima lluvioso también influyó en su poesía. Fue así como, años después, en su casa de Isla Negra, instaló en una de las habitaciones un techo de zinc para escuchar el sonido de la lluvia. Se ha caracterizado a Neruda en esos años como un joven tímido y taciturno. ï‚· Acercamiento a la poesía El primer contacto de Neftalí Reyes con la poesía fue a través de un tío poeta: Orlando Mason. Mientras, a su padre no le interesaba que su hijo fuera poeta; pensaba que debía estudiar en la universidad alguna carrera profesional. Para él resultaba vergonzoso tener un hijo poeta que formara parte del mundo bohemio y que viviera sumergido en la pobreza toda su vida. ï‚· El seudónimo Su seudónimo Pablo Neruda surgió a comienzos de la década que comenzó en 1920. Se ha señalado que la primera vez que lo adoptó fue ese mismo año, cuando escribió sobre el asalto a la Federación de Estudiantes firmando como Pablo Neruda. “Pablo” le gustaba, y “Neruda” lo eligió por el poeta checo Jan Neruda. Sus primeros versos fueron publicados en revistas sureñas y en algunas publicaciones estudiantiles. El primer poema suyo en triunfar en un concurso literario fue Canción de Fiesta (1921). ï‚· Viaje a Santiago En 1921 Neruda dejó Temuco para trasladarse a Santiago, decidido a continuar el camino de la literatura. 66 Comenzó a estudiar Pedagogía en Francés en la Universidad de Chile. Allí conoció a Albertina Azócar, quien al parecer fue su primer amor. Ambos eran compañeros de estudios. Neruda le dedicó a ella los primeros poemas de los tan conocidos Veinte poemas de Amor y una Canción Desesperada (1924). La efervescencia social de los años veinte fue ávidamente absorbida por el poeta, que desarrolló junto a sus compañeros universitarios y colegas contemporáneos una activa vida cultural. Se encontraban con él en distintos cafés, donde charlaban y discutían acerca de los más diversos temas. ï‚· Crepusculario Cuando su primer libro publicado de Neruda fue Crepusculario (1923) apareció en 1923, el poeta vivía en hogares estudiantiles y conventillos. ï‚· Primer viaje a Europa En 1927, Pablo Neruda realizó su primer viaje a Europa, junto a su amigo Álvaro Hinojosa. Luego se dirigió hacia el Oriente, donde había sido destinado cónsul en Rangoon, Ceilán y Birmania. En 1929 asistió al Congreso Panhindú, en Calcuta, donde conoció a Gandhi. ï‚· Compromiso político En 1934, Neruda se embarcó hacia Madrid, España para ejercer como cónsul. Fue entonces cuando conoció al poeta Federico García Lorca. En julio de 1936 comenzó la Guerra Civil española. Como consecuencia de su posición política antifranquista, Neruda fue destituido de su cargo diplomático y viajó a París. A partir de las experiencias vividas durante la guerra, se comprometió políticamente. Él mismo definió este período como el que marcó en forma definitiva su camino político. Este cambio también se reflejó en su poesía. En 1939, Neruda, como cónsul en Francia, consiguió el viaje del barco Winnipeg desde Francia hasta Valparaíso, para traer a Chile a más de dos mil españoles que escapaban de la guerra y que llegaron al país a fines de 1939. En 1941 fue cónsul en México. ï‚· Parlamentario y Premio Nacional En marzo de 1945, mientras vivía en Isla Negra, Chile, fue elegido senador de la República Chilena, e ingresó al Partido Comunista. ï‚· Clandestinidad y exilio Neruda fue un entusiasta partidario del presidente Gabriel González Videla. Sin embargo, ya siendo Presidente, González Videla promulgó la Ley de Defensa de la Democracia (1947), llamada “Ley Maldita”, que prohibió la existencia del Partido Comunista y mediante la cual se perseguía a sus partidarios. Con ello, Neruda fue desaforado en 1948. Clandestino en el país hasta 1949, por fin escapó a cballo, cruzando los Andes a la Argentina. El mismo año de 1949, Neruda partió al exilio, etapa durante la cual viajó por diversos países, mientras continuaba con una afanada producción literaria. Vivía en México, estuvo en Varsovia, y visitó la Unión Soviética. Estos hechos lo orientaron a impulsar su poesía militante. Regresó a Chile el 12 de agosto de 1952. En 1953 recibió el Premio Stalin de la Paz. 67 ï‚· Todo puede ser poesía Para Neruda, desde muy joven, el tema del amor también fue muy importante. También demuestra que todo puede ser poesía. En las Odas Elementales, de 1957 se encuentran versos para la alcachofa, la manzana, el vino, el átomo y el traje; le escribe a un reloj en la noche, al hilo, y también a la vida, a la tristeza, al pasado, a la pobreza, a la soledad, etcétera. ï‚· Amigos Sus amigos también fueron innumerables. Entre ellos hubo importantes personalidades internacionales, tanto del ámbito político como artístico y cultural: Federico García Lorca, Rafael Alberti, Volodia Teitelboim, Gabriela Mistral, Miguel de Unamuno, Alberto Rojas Giménez, Miguel Hernández y Salvador Allende forman parte de esta lista. ï‚· Candidato presidencial Con motivo de las elecciones presidenciales de 1970, Pablo Neruda fue presentado como candidato presidencial en representación del Partido Comunista. Sin embargo, declinó en favor de Salvador Allende, candidate socialista que ganó las elecciones. ï‚· Premio Nobel de Literatura En 1971 aceptó el cargo de embajador en Francia, y el mismo año se le otorgó el Premio Nobel de Literatura. En el país europeo comenzó sus memorias, terminadas unos dias antes de su muerte, y publicadas en forma póstuma: Confieso que He Vivido (1974). En 1972 Neruda renunció a su cargo diplomático y regresó a Chile a apoyar a Salvador Allende, un gran amigo personal, en sus programas de justicia social. Neruda falleció de cáncer el 23 de septiembre de 1973, doce días después del golpe militar liderado por el general Agusto Pinochet, que derrocó al gobierno de Salvador Allende. 68 Pablo Neruda Biographical outline Adapted from Britannica online school edition 26 Jan. 2004 <http://school.eb.com/eb/article?eu=56705> July 12, 1904 Pablo Neruda, Neftalí Ricardo Reyes Basoalto, is born in Parral, Chile. Mother: dies within a month of Neruda’s birth Father: a railway worker, remarries when Neruda is three years old. Age 6, 1910 Neruda enters Temuco Boys’ School Age 10, 1914 Neruda, a precocious boy who reads voraciously, begins to write poetry. He is encouraged by the principal of Temuco Girls’ School, Gabriela Mistral, who also would later become a Nobel laureate. During this time, he begins publishing poetry under the pseudonym Pablo Neruda. Age 16, 1920 Neruda graduates from Temuco Boys’ School. Age 17, 1921 Neruda moves to Santiago (Chile’s capital) to work as a French teacher but this job does not keep him from hunger, loneliness and a bohemian lifestyle. Age 19, 1923 Crepusculario, Neruda’s first book of poetry, is published. Age 20, 1924 Veinte poemas de amor y una canción de desesperada (Twenty Love Poems and a Song of Despair) is published. Now Neruda has already become one of Chile’s best-known poets. This collection remains one of Neruda’s most popular books. 1925-1933 Neruda is appointed as honorary consul to Rangoon, Burma (Myanmar), then Colombo, Ceyon (Sri Lanka) and next to Batavia (Jakarta). During this time four more collections of poetry are published: Tentativa del hombre infinitivo (Attempt of the Infinite Man), Anillos (Rings) and El hondero entusiasta (The Enthusiastic Slingshooter) and Recidencia en la tierra (Residence on Earth). The position of honorary consul was not paid, however, and Neruda lived in abject poverty. 1930-1932 During his stay in Batavia (Jakarta), Neruda fell in love and married for the first time. 1932 Neruda returns to Chile 1933 Neruda is appointed Chilean consul in Buenos Aires, Argentina. Here he meets the Spanish poet Federico García Lorca, with whom he becomes close friends. 1934 Neruda is appointed as consul to Barcelona, Spain and is soon transferred to Madrid. He is instantly welcomed by García Lorca’s communist friends. 1935 Residencia en la tierra II is published. It is a second edition which contains more poems than the first. 1936 Neruda and his wife separate, and he meets and marries his second wife. 1936 Spanish Civil War breaks out; García Lorca is executed by the Nationalists; Neruda supports the Republicans. 1937 España en mi corazón (Spain in My Heart) is published. It expresses the poet’s solidarity with the Republicans. Neruda returns to Chile. He regularly gives lectures and poetry readings, while also defending Republican Spain and Chile’s new center-left government. 1939 Neruda is appointed special consul in Paris. 69 1940 Neruda is appointed Chile’s consul general in Mexico. He begins work on his epic poem, Canto general (General Song). 1943 Neruda climbs Macchu Picchu and he writes Alturas de Macchu Picchu (Heights of Macchu Picchu), one of his finest poems. 1943 Neruda returns to Chile. 1945 Neruda is elected senator and joins the Communist Party. 1946 When Chilean President Videla turns from left to right, Senator Neruda publishes an openly critical letter, is expelled from the Senate and goes into hiding. At this time he legally adopts his pseudonym. 1947 Tercera residencia (Third Residence) is published. 1948 Neruda leaves Chile, crossing the Andes into southern Argentina on horseback by night. 1948-52 In exile, Neruda travels to the Soviet Union, Poland, Hungary and Mexico. In Mexico, he meets his future third wife and divorces his second in 1952. 1952 Chile’s political situation is now favorable to Neruda, and he returns to Chile a rich and famous man with houses in several lovely locations. 1954 Odas elementales (Elemental Odes) is published. These poems contain descriptions of everyday objects and reflect both his fame and his personal happiness. 1958-1973 20 more books of poetry are published during these prolific years. 1969 Neruda appointed ambassador to France. 1971 Awarded Nobel Prize for Literature and returns to Chile ill with cancer and bedridden, to live in his house on the sea in Islas Negras. 1973 September 11, Neruda’s friend President Salvador Allende is killed in a right-wing military coup led by Pinochet. Neruda writes the final pages of his autobiography Confieso que he vivido (I Confess that I have Lived), including Allende’s death, and dies on Sept. 23 at age 69. 70 Pablo Neruda Source: ICARITO http://icarito.latercera.cl/especiales/neruda/crono1.htm 1904 Neftalí Ricardo Reyes Basoalto (Pablo Neruda) nace el 12 de julio, en Parral, Chile, hijo de Rosa Neftalí Basoalto de Reyes y de José del Carmen Reyes Morales. Neruda pierde a su madre cuando tiene un mes de edad. 1906 Don José del Carmen se traslada a Temuco y se casa en segundas nupcias con doña Trinidad Candia Marverde. 1910 Pablo Neruda ingresa al Liceo de Hombres de Temuco, donde realiza todos sus estudios hasta terminar el 6º año de humanidades en 1920. 1917 El 18 de julio se publica en el diario «La Mañana», de Temuco un artículo titulado «Entusiasmo y perseverancia», que firma Neftalí Reyes. Es ésta la primera publicación del poeta. Sigue escribiendo poemas que se publican en revistas. 1920 En octubre adopta definitivamente el seudónimo de Pablo Neruda para sus publicaciones. 28 de noviembre: obtiene el primer premio en la Fiesta de la Primavera de Temuco. Este mismo año es presidente del Ateneo Literario del Liceo de Temuco y prosecretario de la Asociación de Estudiantes de Cautín. Prepara dos libros: Las ínsulas extrañas y Los cansancios inútiles, que no publica. Parte de estos libros integrarán Crepusculario. 1921 Pablo Neruda viaja a Santiago para seguir la carrera de profesor de francés en el Instituto Pedagógico. 14 de octubre: obtiene el primer premio en el Concurso de la Federación de Estudiantes de Chile por su poema «La canción de la fiesta». 1923 En agosto aparece la edición original de Crepusculario publicada por Ediciones Claridad. La revista «Dionysios», dirigida por Aliro Oyarzún, le publica cuatro poesías. Las tres últimas integrarán El hondero entusiasta, libro que, escrito en esta época, no será publicado hasta 1933. 1924 Junio: edición original de Veinte poemas de amor y una canción desesperada, editorial Nascimento. Publica, en el diario «La Nación», una carta sobre su libro Veinte poemas de amor y una canción desesperada en que explica el proceso de su creación.. 1927 Lo nombran cónsul ad honorem en Rangún (Birmania). 14 de junio: sale de Santiago para Rangún, vía Buenos Aires, donde se embarca en el «Baden» hasta Lisboa. Publican poemas de Neruda «El Sol» y «Revista de Occidente», de Madrid, y «La Nación de Santiago. Conoce y vive con Josie Bliss. 71 1928 Cónsul en Colombo (Ceylán). Josie Bliss viaja a verlo y se despiden para siempre. 1929 Asiste en Calcuta al Congreso Panhindú. 1930 Cónsul en Batavia (Java). 6 de diciembre: se casa con María Antonieta Hagenaar Vogelzanz. 1931 Cónsul en Singapur 1932 Regresa a Chile después de un viaje por mar de dos meses, cruzando el Estrecho de Magallanes. Julio: se publica la segunda edición -en texto definitivo- de Veinte poemas de amor y una canción desesperada. 1933 24 de enero: edición original de El hondero entusiasta, Empresa Letras de Santiago. La editorial Tor, de Buenos Aires publica Veinte poemas de amor y una canción desesperada. Abril: editorial Nascimento publica, en una edición de lujo, con tiraje de 100 ejemplares, Residencia en la Tierra (1925-1931). 28 de agosto: llega a Buenos Aires, donde ha sido nombrado cónsul. 13 de octubre: en casa de Pablo Rojas Paz conoce a Federico García Lorca. 1934 –1943 1934 5 de mayo: viaja a Barcelona, donde ha sido nombrado Cónsul. 4 de octubre: nace en Madrid su hija Malva Marina. 6 de diciembre: conferencia y recital poético en la Universidad de Madrid, presentado por Federico García Lorca. En la revista «Cruz y Raya», de Madrid, aparecen las «Visiones de las hijas de Albión» y «El viajero mental», de William Blake, traducidos por Pablo Neruda. En casa de Morla Lynch conoce a Delia del Carril. 1935 3 de febrero: se traslada como Cónsul a Madrid. Abril: se edita Homenaje a Pablo Neruda de los poetas españoles, ediciones Plutarco, de Madrid. Sonetos de la muerte, de Quevedo, presentados por Pablo Neruda, edición Cruz y Raya. Julio: aparece en «Cruz y Raya», ,«Poesías de Villamediana», presentadas por Pablo Neruda. 1936 Se edita Primeros poemas de amor (veinte poemas) por ediciones Héroe, de Madrid. 18 de julio: comienza la Guerra Civil Española y, poco tiempo después, matan a Federico García Lorca. Neruda inicia sus poemas de España en el corazón. Es destituido de su cargo consular. Viaja a Valencia y luego a París. 7 de noviembre: edita la revista «Los Poetas del Mundo Defienden al Pueblo Español», con Nancy Cunard. Se separa de María Antonieta Hagenaar. 1937 Febrero: conferencia en París sobre Federico García Lorca. Abril: funda, con César Vallejo, el Grupo Hispanoamericano de Ayuda a España. 2 de julio: se realiza en París el Congreso de las Naciones Americanas; allí pronuncia un discurso que luego es traducido y editado en francés. 10 de octubre: regresa a Chile. 7 de noviembre: Funda y preside la Alianza de Intelectuales de Chile para la Defensa de la Cultura. 13 de noviembre: se edita España en el corazón, ediciones Ercilla. 72 1938 Tres ediciones sucesivas de España en el corazón. Se reeditan casi todas sus obras en ediciones Ercilla y Tor de Buenos Aires. 7 de mayo: muere su padre en Ternuco. Julio: Espagne au Coeur, con prólogo de Louis Aragon. Agosto: aparece la revista «Aurora de Chile» dirigida por Neruda. 18 de agosto: muere en Temuco su madrastra, doña Trinidad Candia. Octubre: triunfa en las elecciones presidenciales don Pedro Aguirre Cerda, candidato del Frente Popular. Neruda recorre el país y pronuncia conferencias. En el frente de batalla de Barcelona, en plena Guerra Civil, se edita España en el corazón. 1939 Es nombrado Cónsul para la emigración española, con sede en París. Marzo: viaja a Francia pasando por Montevideo donde asiste como delegado de la Alianza de Intelectuales de Chile al Congreso Internacional de las Democracias. De abril a julio realiza las gestiones en favor de los refugiados españoles; a una parte de ellos los embarca en el «Winnipeg», que llega a Chile a fines de este año. Mayo: publica Las furias y las penas, editorial Nascimento. Edición rusa de España en el corazón. En Montevideo, AIAPE publica Neruda entre nosotros. En París, Trois Poèmes, edición G.L.M. (poemas de Residencia en la Tierra), y Chile os acoge, dirigido por Neruda a los refugiados. 1940 2 de enero: llega a Chile. Por la editorial Esperantistas Internacionales se edita en esperanto Veinte poemas de amor y una canción desesperada. Amado Alonso publica Poesía y estilo de Pablo Neruda, editado por Losada (hay ediciones posteriores). Continúa escribiendo el Canto General de Chile, que después sería el Canto General. 16 de agosto: llega a Ciudad de México, donde ha sido nombrado Cónsul general. 1941 Escribe «Un canto para Bolívar», que edita la Universidad Nacional Autónoma de México. Viaja a Guatemala. Octubre: es nombrado Doctor honoris causa por la Universidad de Michoacán. Diciembre: es agredido por un grupo de nazis en Cuernavaca. Recibe luego por este motivo la adhesión de cientos de intelectuales de toda América. 1942 En abril viaja a Cuba. El 30 de septiembre hace la primera lectura del poema «Canto a Stalingrado» , cuyo texto, reproducido luego en afiches, se fija en las calles de Ciudad de México. Publica en revistas literarias «América, no invoco tu nombre en vano», del Canto General. Muere en Europa su hija Malva Marina. 1943 «Nuevo canto de amor a Stalingrado», editado en México (Sociedad Amigos de la URSS). Se hace una edición privada, fuera de comercio, de Canto General de Chile. Se edita en Lima Cantos de Pablo Neruda, por Hora del Hombre. En Bogotá, Sus mejores versos, por Librería Siglo XX. En Chile, Nascimento edita una Selección por Arturo Aldunate Phillips. Febrero: Neruda viaja a Estados Unidos para asistir a «La Voz de las Américas», en Nueva York. Regresa a México. 27 de agosto: le es ofrecida una despedida y asisten dos mil personas. 1º de septiembre: inicia el viaje de regreso a Chile pasando por los países de la costa del Pacífico. 3 de septiembre: Panamá. 9 de septiembre:Colombia, donde es huésped de honor del Gobierno del presidente López y huésped de honor en Manizales. En Caldas se crea el grupo escolar Pablo Neruda. 22 de octubre: Lima y Cuzco, donde visita las ruinas preincásicas de Macchu-Picchu. Es huésped de honor en Arequipa. 3 de noviembre: llega a Santiago. 8 de diciembre: conferencias «Viaje alrededor de mi poesía» y «Viaje al corazón de Quevedo». 73 1944 Obtiene el Premio Municipal de Poesía. Dicta un ciclo de conferencias. Se publica en Nueva York, edición privada, Selected Poems (poemas de Residencia en la Tierra). En Buenos Aires, Veinte poemas de amor y una canción desesperada y Residencia en la Tierra, ediciones Losada 1945 4 de marzo: elegido senador de la República por las provincias de Tarapacá y Antofagasta. Se edita el folleto Saludo al Norte y a Stalingrado. Obtiene el Premio Nacional de Literatura de su patria. 30 de mayo: primer discurso en el Senado, editado en Cuatro discursos. 8 de julio: ingresa al Partido Comunista de Chile. 15 de julio: asiste en el Estadio de Pacaembú, en Sao Paulo, al Comicio en homenaje a Luis Carlos Prestes (cien mil personas). 30 de julio: recepción en la Academia Brasileira de Letras, en Río; discurso de recepción a cargo de Manuel Bandeira. 31 de julio: se realiza, en Río de Janeiro, el Comicio Pablo Neruda. 1º al 8 de agosto: recitales y conferencias en Buenos Aires Y Montevideo. Septiembre: escribe «Alturas de Macchu-Picchu». La Academia Sueca otorga el Premio Nobel de Literatura a Gabriela Mistral 1946 18 de enero: condecorado por el Gobierno de México con la Orden Águila Azteca. 20 de marzo: conferencia «Viaje al Norte de Chile». Es nombrado Jefe Nacional de Propaganda en la candidatura del señor Gabriel González a la presidencia de Chile. Se edita en Checoslovaquia España en el corazón. Se edita en Copenhague y en Estados Unidos Residencia en la Tierra. En Sáo Paulo, Brasil, Veinte poemas de amor y una canción desesperada. En la primavera conoce a Matilde Urrutia. 28 de diciembre: se dicta sentencia judicial declarando que su nombre legal será Pablo Neruda. 1947 Edición de Tercera residencia, Losada, Buenos Aires; esta edición agrupa definitivamente en un libro Las furias y las penas, España en el corazón y otros. Colección de su poesía completa por Cruz del Sur con el nombre de Residencia en la Tierra. Viaja a Magallanes. Edita sus conferencias la Sociedad de Escritores de Chile. 27 de noviembre: publica en «El Nacional» de Caracas (en Chile existía censura de prensa efectiva desde el 4 de octubre), Carta íntima para millones de hombres. Con motivo de esta carta el presidente de la República inicia su juicio político. 1948 6 de enero discurso en el Senado, publicado después con el título de Yo acuso. 3 de febrero: la Corte Suprema aprueba el desafuero de Neruda como senador de la República. 5 de febrero: los Tribunales de Justicia ordenan su detención. Desde esa fecha permanece oculto en Chile, escribiendo el Canto General y participando en la política de oposición. En diversos países se hacen veladas en su honor y se editan sus poemas. «Adam» (International Review-London), número íntegro dedicado a Neruda. 24 de febrero: sale de Chile cruzando la cordillera de los Andes por la región austral. 25 de abril: asiste al Primer Congreso Mundial de Partidarios de la Paz, revelando simultáneamente la incógnita sobre su paradero. Lo nombran miembro del Consejo Mundial de la Paz. Junio: viaja por primera vez a la Unión Soviética, donde asiste a los festejos del 150º aniversario de Puschkin. 27 de junio: recibe el homenaje de la Unión de Escritores Soviéticos en Moscú. Julio: visita Polonia y Hungría. Agosto: viaja a México con Paul Eluard. Septiembre: participa en el Congreso Latinoamericano de Partidarios de la Paz, en México, donde perrnanece enfermo de cuidado hasta fines de año. Se reencuentra con Matilde Urrutia. Se editan sus libros o selecciones de sus poemas en Alemania, Checoslovaquia, China, Dinamarca, Hungría, Estados Unidos, Unión Soviética, México, Cuba, Colombia, Guatemala y Argentina. En Chile, aparece Dulce patria, editorial del Pacífico. 74 1950 28 de enero: se extingue el permiso constitucional para ausentarse del país que le diera el presidente del Senado, don Arturo Alessandri. Se publica en México el Canto General, en dos ediciones: una, a cargo del Comité Auspiciador, y la otra, ediciones Océano. Ambas llevan ilustraciones de David Alfaro Siqueiros y Diego Rivera. En Chile se hacen también dos ediciones clandestinas. Viaja a Guatemala, donde ofrece recitales y conferencias, homenajeado por el Gobierno y el Parlamento. Se edita Pablo Neruda en Guatemala. Junio: viaja a Praga y después a París. En octubre firma ejemplares de la edición francesa del Canto General. Viaja a Roma, después a Nueva Delhi para entrevistarse con Jawaharlal Nehru. Su poesía se traduce al hindú, urdú y bengalí. Del 16 al 22 de noviembre asiste en Varsovia al II Congreso Mundial de Partidarios de la Paz. Lo acompaña Matilde Urrutia. 22 de noviembre: recibe, junto con Picasso y otros artistas, el Premio Internacional de la Paz por su poema «Que despierte el leñador». Invitado por la Unión de Escritores de Checoslovaquia, pasa una temporada en el castillo de Dobriss, propiedad de esa Unión. Se hace una nueva edición popular de Canto General en México y aparece otra edición clandestina en Chile. Nuevas ediciones en Estados Unidos, China, Checoslovaquia, Polonia, Unión Soviética (250.000 ejemplares), Suecia, Rumania, India, Palestina y Siria. 1951 Gira por Italia. Recitales en Florencia, Turín, Génova, Roma, Milán. Se edita en italiano «Que despierte el leñador». 14 de enero: se realiza en Santiago, en ausencia de Neruda, un homenaje que auspician la Sociedad de Escritores, por la publicación del Canto General. 20 de enero: conferencia en Milán dictada por Salvattore Quasimodo y Renato Birolle sobre la poesía de Neruda. Marzo: París. Mayo: Moscú, Praga y Berlín. 5 al 19 de agosto: Tercer Festival Mundial de la Juventud en Berlín. Luego asiste al Festival Cinematográfico de Karlovy Vary y al Festival de Arte Popular de Moravia. Viaja en el ferrocarril transiberiano hasta la República Popular de Mongolia. Desde allí a Pekín donde hace entrega del Premio Internacional de la Paz a Mme. Sun Yat-sen en nombre del Consejo Mundial de la Paz. Aparecen sus poesías en Bulgaria, Tatrán (Checoslovaquia), Hungría, Islandia. Nuevas traducciones al idisch, hebreo, coreano, vietnamita, japonés, árabe, turco, ucranio, uzhbeco, portugués, eslovaco, georgiano, armenio. 1952 Reside en Italia. Delia del Carril viaja a Chile. 10 de febrero: en Capri. Inicia su libro Las uvas y el viento. Edición privada y anónima de Los versos del Capitán. Julio y agosto: viaja por Berlín y Dinamarca. Chile: es revocada la orden de detención al cabo de tres años y algunos meses. 12 de agosto: regresa a Santiago donde se le tributan grandes homenajes de bienvenida. Se instala en su casa de la Avda. Lynch. Viaja a Temuco y a otros puntos de Chile. Diciembre: viaja a la Unión Soviética como jurado del Premio Internacional de la Paz. Comienza a escribir las Odas elementales. Comienza a construir La Chascona. 1953 22 de enero: regresa de su viaje a la Unión Soviética. Organiza el Congreso Continental de la Cultura, que se realiza en abril en Santiago, y donde asisten grandes personalidades de América, como Diego Rivera, Nicolás Guillén, Jorge Amado, etc. Se publican dos antologías en Santiago de Chile: Todo el amor, editorial Nascimento, y Poesía política, editorial Austral. 20 de diciembre: recibe el Premio Stalin de la Paz. 1954 Enero: dicta cinco conferencias sobre su poesía en la Universidad de Chile. Julio: Odas elementales, editorial Losada; Las uvas y el viento, editorial Nascimento. 12 de julio: se celebran 75 sus cincuenta años de vida con grandes homenajes. Viajan escritores de todo el mundo para saludarlo: Ai Chin y Emi Siau, de China; Ilya Ehrenburg, de la URSS; Drdda y Kutvalek, de Checoslovaquia. Barrault se une a los homenajes recitando los poemas de Neruda en sus funciones de teatro, en Santiago. De América también asisten numerosos amigos: Elvio Romero, de Paraguay; Miguel Ángel Asturias, de Guatemala; de Argentina, Oliverio Girondo, Norah Lange, María Rosa Oliver, Raúl Larra, De Lellis y otros. Dona a la Universidad de Chile su biblioteca y otros bienes, y la Universidad acuerda financiar la Fundación Neruda para el Desarrollo de la Poesía. 20 de junio: acto inaugural de la Fundación Neruda. Pronuncian discursos el rector de la Universidad, don Juan Gómez Millas, y Neruda. Estos discursos son publicados en una edición que se reparte gratuitamente. En Francia, se publica Le Chant Général con ilustraciones de Fernand Léger. Pablo Neruda, Choix de Poèmes, por Jean Marcenac, edición Pierre Seghers, de la colección Poètes d'Aujourd'hui, París, Tout l'Amour, edición Pierre Seghers. Se publican sus libros también en Hungría y Polonia; en Jerusalén, en idioma hebreo. Canto General, en la Unión Soviética. 1955 Se separa de Delia del Carril. Concluye la construcción de su casa La Chascona, donde se traslada a vivir con su actual mujer, Matilde Urrutia. Funda y dirige la revista «La Gaceta de Chile», de la cual salen tres números anuales. Se publican en Alemania Que despierte el leñador, editorial Insel Verlag, Leipzig, y Las uvas y el viento, editorial Wolk & Welt, de Berlín. Se publica una selección de su poesía en árabe. Canto General, Collezione Fenice Guarda, de Bolonia, Italia. Una selección de poesías en idioma persa. Canto General, en Bucarest, Rumania. La editorial Nascimento, de Santiago, publica su libro en prosa Viajes, que reúne varias de sus conferencias. Viaja a la Unión Soviética, China y otros países socialistas, además de Italia y Francia. De regreso en América, da recitales en Brasil y Montevideo y pasa una temporada de descanso en Totoral, Córdoba, República Argentina. 1956 Enero: Nuevas odas elementales, editorial Losada. Febrero: regresa a Chile. Septiembre: Oda a la tipografía, editorial Nascimento. Se publica El gran océano, en Estocolmo. 1957 30 de enero: Obras completas, editorial Losada, en papel biblia. Comienza a escribir Cien sonetos de amor. 1º de abril: viaja a la Argentina. 11 de abril: es detenido en Buenos Aires y permanece un día y medio en la Penitenciaría Nacional; es puesto en libertad después de las gestiones realizadas por el cónsul de Chile en Buenos Aires. Abandona la Argentina sin realizar el recital de su poesía programado. Viaja por los lugares de su juventud: Rangún, Colombo y otras ciudades de Oriente. Estos viajes se reflejaron en su libro Estravagario. Se publican: Pablo Neruda, por Mario Jorge de Lellis, libro de estimación de la poesía nerudiana, editorial La Mandrágora (hay ediciones posteriores), y Para una crítica de Pablo Neruda, por Roberto Salama, editorial Cartago, Buenos Aires. Realiza recitales en Montevideo. Es nombrado presidente de la Sociedad de Escritores de Chile. 18 de diciembre: Tercer libro de las odas, editorial Losada. 1958 Trabaja en la campaña política para la elección de presidente en Chile. Realiza giras y concentraciones populares. 18 de agosto: Estravagario, editorial Losada. Durante cinco meses viaja por Venezuela, donde recibe grandes honores. Allí conoce a Fidel Castro, en la embajada de Cuba. 5 de noviembre: Navegaciones y regresos, editorial Losada. 5 de diciembre: Cien sonetos de amor, edición privada por suscripción. Comienza a edificar, en Valparaíso, su casa La Sebastiana. 1960 76 Sale de viaje. 12 de abril: a bordo del «Louis Lumière» finaliza Canción de gesta, dedicada a Cuba. Jean Marcenac traduce su poema «Toros», que ilustra, con dieciséis aguafuertes, Pablo Picasso. Recorre la Unión Soviética, Polonia, Bulgaria, Rumania, Checoslovaquia, y reside el resto del año en París. De regreso, pasa a Italia y de allí se embarca para La Habana. Se publica en Cuba Canción de gesta, edición de 25.000 ejemplares. 14 de diciembre: edición definitiva de Cien sonetos de amor, Losada. 1961 Febrero: regresa a Chile. Canción de gesta, edición Austral, de Santiago de Chile. 26 de julio: Las piedras de Chile, edición Losada. 31 de octubre: Cantos ceremoniales, edición Losada. El Instituto de Lenguas Romances de la Universidad de Yale (EE.UU.) lo nombra Miembro correspondiente. Este cargo honorífico ha sido concedido entre otros poetas a Saint-John Perse y T.S. Eliot. Se publica el millonésimo ejemplar de Veinte poemas de amor y una canción desesperada. Edición en París de Tout l'Amour, traducción de Alice Gascar. En Estados Unidos: Selected Poems of Pablo Neruda. 1962 Enero: «O'Cruzeiro Internacional» inicia «Memorias y recuerdos de Pablo Neruda: Las vidas del poeta» (10 números). 30 de marzo: lo nombran miembro académico de la Facultad de Filosofía y Educación de la Universidad de Chile. Discurso de recepción por Nicanor Parra. Editorial Nascimento: Discursos de Pablo Neruda y Nicanor Parra. Abril: sale de viaje y visita la URSS, Bulgaria, Italia y Francia. 6 de sepiembre: Plenos poderes, editorial Losada. Regresa de su viaje directamente a su casa de Valparaíso. 1963 Se publica Sumario, impreso por Tallone, en Alpignano, Italia. Este libro se incorporará después al Memorial de Isla Negra. En la revista «BLM» («Bormiers Litterata Magasia»), de Estocolmo, Arthur Lundkvist, de la Academia Sueca, publica un extenso artículo: «Neruda». Diciembre: Pablo Neruda ilustra los sonetos de Homero Arce publicados con el título de Los íntimos metales, en los Cuadernos Brasileros. 1964 Raúl Silva Castro, crítico y Académico de la Lengua, publica Pablo Neruda, extenso libro biográfico y crítico. La Biblioteca Nacional de Chile conmemora el sexagésimo aniversario del poeta. Palabras del director, don Guillermo Feliú Cruz, al iniciar el ciclo nerudiano. Pablo Neruda: Cómo veo mi propia obra. Conferencias de Fernando Alegría, Mario Rodríguez, Hernán Loyola, Hugo Montes, Nelson Osorio, Luis Sánchez Latorre, Volodia Teitelboim, Manuel Rojas, Jaime Giordano y Federico Schop. Publican números dedicados a Neruda las siguientes revistas chilenas: «Alerce», «Aurora» y «Mapocho». 12 de julio: se publica Memorial de Isla Negra, 5 tomos con títulos diversos, editorial Losada. 9 de septiembre: se publica su traducción de Romeo y Julieta, de William Shakespeare, Editorial Losada. El ITUCH estrena esta traducción en Santiago. Pablo Neruda trabaja intensamente en la campaña presidencial recorriendo el país de norte a sur. 1965 Febrero: viaja a Europa. Junio: se le otorga el título de Doctor honoris causa en Filosofía y Letras de la Universidad de Oxford, título que se da por primera vez a un sudamericano. 1966 Viaja a Estados Unidos como invitado de honor a la reunión del Pen Club. Da recitales en Nueva York, presentado por Archibald Mac Leish, decano de los poetas americanos; en Washington y 77 Berkeley. Viaja luego a México y al Perú, donde da recitals. A pedido de la Asociación de Escritores peruanos, que preside Ciro Alegría, es condecorado con el Sol del Perú. 1967 Viaja por Europa. Julio: recibe el premio literario internacional de Viareggio (Italia). 1969 Es designado Miembro de la Academia Chilena de la Lengua. El Senado de la República de Chile lo condecora con la medalla de plata que se otorga a los hijos ilustres de Chile. Septiembre 3: es designado precandidato a la presidencia de la República por el Partido Comunista chileno. 1970 Enero: renuncia a su candidatura presidencial al lograrse la designación de un candidato único de los partidos populares chilenos (doctor Salvador Allende). 1971 El Senado chileno aprueba su designación como Embajador de Chile en Francia. Viaja a este país en el mes de marzo, pasando antes una semana en la ciudad de Buenos Aires. 21 de octubre: le es concedido el Premio Nobel de Literatura. Viaja a Estocolmo a recibirlo. 1972 Embajador en París. Viaja a la URSS. En el mes de marzo publica Losada su libro Geografía infructuosa. El 28 de octubre es nombrado Miembro del Consejo Consultivo de la Unesco, elegido por la Conferencia General, por un período de cuatro años. En el mes de noviembre viaja a Chile. Homenaje del pueblo chileno en el Estadio Nacional. 1973 El 5 de febrero renuncia a la embajada en París comunicándoselo al presidente Salvador Allende cuando éste va a visitarlo a su casa de Isla Negra. Luego cambian cartas. El 18 de febrero se publica su libro Incitación al nixonicidio y alabanza de la revolución chilena, que es vendido por las calles de Santiago. El 11 de septiembre muere Salvador Allende en un Golpe de Estado que tomó el Gobierno hasta 1990. El 23 de septiembre muere Pablo Neruda en la clínica Santa María, en Santiago de Chile. 78 Lesson Plan -- Chile: 1960 – 1990 by Marsha Plotkin Taylor Allderdice High School This is an excerpt from the excellent 36 page lesson plan for advanced level Spanish students that you may find at http://www.chatham.edu/PTI/Contemp_Latin/Plotkin_01.htm. The lesson includes links to films, music, and political resources relating to Chile. Overview The following curriculum unit has been designed as a cultural supplement to language learning (grammar, vocabulary, etc . . . ) in high school Spanish III classes. The curriculum is not meant to replace the existing Spanish III curriculum based on the oral proficiency standard, rather it will take a magnified look at a specific time period (1960 - 1990) in one Spanish-speaking country, Chile. During this time of tremendous political activity, Chile became the first country in Latin America to elect a Socialist government in 1970 only to see it fall to a violent golpe de estado (coup d’etat) three years later. The curriculum unit will examine the events leading up to the election of Dr. Salvador Allende, the overthrow of his government with the covert help of the Nixon administration, and the ensuing rule of the military junta led by General Augusto Pinochet. In addition to learning about the politics of this era, students will have the opportunity to listen to music related to the political climate and study poetry by two of Chile’s most influential and Nobel Prize winning poets, Gabriela Mistral and Pablo Neruda. In the 1980s, culture was the fifth component to officially become a permanent part of the foreign language classroom, although it did exist before then. Food was (and continues to be) immensely popular. Music, art and sports were among the many cultural topics, in addition to food, that found places in the language classroom. Students enjoyed culture, whether in English or the target language, but how much cultural instruction was authentic and how often was it integrated into the daily lesson? For example, did students learn that when they made tacos they were eating Mexican food and not food from Spain, that Cinco de mayo is a Mexican holiday not celebrated in the rest of the Spanish-speaking world, and that the Aztecs who once inhabited Mexico were not the same native peoples that inhabited Peru? I do not believe that language and culture can be separated, and in addition to the symbiotic relationship between language and culture, I also believe that teaching a language transcends compartmentalized schooling. I have always said to my students that life is not a seven or eight period day where school subjects are neatly separated in our daily lives. It is important that students are able to make the connections between learning a second language and the other subjects they study year after year. For some students, Spanish class is the only class where they learn about Latin America, our neighbors to the south with whom we share the term "America." Until recently, when students studied "World History" or as it is called today, "World Cultures," the word "world" was synonymous with "European." With this in mind, and depending upon how the teacher uses this curriculum unit, in addition to the World Language Content Standard, it could also be used to fulfill the following Pittsburgh Content Standards: Communications standards three, four, six, and eight, Arts & Humanities standards two and three, and Citizenship standards one and two. When studying contemporary Latin America, there are certain topics that are crucial to understanding the people, the culture, and ultimately the language. Even though each Latin American country is unique regarding its dialect of Spanish, population, geography and natural resources, the countries have much in common. Some of the recurring themes that have been part of our seminar discussions include: indigenous populations, history (colonial Spanish rule/independence), land distribution, religion, sovereignty, the attitudes/roles of men and women. These themes appear in the textbook, videos, and literature that we have read and discussed. It is around these themes that my curriculum unit is designed for students in Spanish III. I will focus on the time period between 1960 and 1990 in Chile. 79 I generally begin each school year by teaching or reviewing all of the Spanish-speaking countries of the world. One of the positive things about introducing students to all of the Spanish-speaking countries is that I have the opportunity to point out the uniqueness of each country as best I can. It is sometimes difficult for students to understand this since many have never traveled to a Spanish-speaking country, nor have they had any contact with a Hispanic person. The stereotypes abound--Cinco de mayo, tacos, fiestas, piñatas--all with a very Mexican flavor, and very logical since Mexico is our closest neighbor to the south. However, the word Hispanic encompasses so much more and as a Spanish teacher it is important for me to impart that information. Why Chile? Why the historical period between 1960 and 1990? Students are initially fascinated by Chile’s unique geography, an unusually long and narrow country that Chile’s Nobel prize winning poet Pablo Neruda described as "a long petal of sea, wine and snow." The Andes mountains extend from north to south. At Chile’s southernmost point, the Atlantic and Pacific Oceans meet and the submerged mountains form fjords like those in Scandinavia. The driest desert on earth is located in northern Chile, yet there are lush rain forests further south with an abundance of vegetation. Because of its mountainous terrain, Chile has been struck by over 20 major earthquakes in the last century that have killed thousands and destroyed cities. Chile also has over 600 volcanoes, many of them active. Chilean territory extends into the Pacific to Polynesia where Easter Island (Isla de Pascua or Rapa Nui) is located. The Islas Juan Fernandez, located several hundred miles west of Valparaíso in the Pacific are also part of Chile. The time period encompassing the decades of the 1960s, 1970s and 1980s was as turbulent as Chile’s geography is diverse. Most children in the United States who began elementary school in the late 1950s and early 1960s, learned about the threat and danger of the spread of communism following World War II. The Communists were the enemy and the United States had to defeat them politically, intellectually, economically, and physically. When the Soviets launched their first rocket into space, it sent scientists in our country racing not to equal, but to surpass that feat. At all Olympic competitions it was the ultimate success for the United States to win more medals than any other country, but more (especially gold) medals than the Soviet athletes. It was a time when the general belief was that the government of the United States knew what was best, not only for its citizens, but for people the world over. It was a time of when the balance of international power was a contest between two powerful nations, the United States of America and the Union of Soviet Socialist Republics. We, the democracy, were charged with preventing more Communism from spreading to other parts of the world in order to maintain the balance in our favor. The Bay of Pigs incident in Cuba and the subsequent attempts to assassinate Fidel Castro were futile attempts by the United States to overthrow the new, Soviet supported Communist government. However, it was not even close to being the first time that the United States military had been sent to intervene in a Spanish-speaking country in the Americas. The 1960s were chaotic times in the United States, but also in other parts of the world. By 1970, the Vietnam war still had not ended and more young men continued to be drafted. On May 4, 1970, the Ohio National Guard fired upon and killed four students on the campus of Kent State University during an antiwar protest. The Kent State shootings signaled the end of a turbulent decade, marked by a generation of people who became increasingly aware and more distrustful of the power of the United States military, of the United States government’s foreign policy, as well as its domestic social policy. During this time of political and social unrest in the United States over the war in Vietnam and civil rights, Chile was another place in the world where there was political and social unrest, although not in opposition to a war in southeast Asia or racial inequality at home. In his book Americas, Peter Winn states: "The years from 1960 to 1990 were unprecedented in Chilean history. They were decades in which the political spectrum shifted from the center to the left, before the pendulum swung abruptly to the far right, where it remained for sixteen years, and then moved decisively back to the center. They were years of reform, revolution, and counterrevolution, of deepened democracy and repressive dictatorship." (1) The Christian Democratic Party candidate Eduardo Frei was elected in 1964. During his tenure, he promised to institute an agrarian reform program, but by the time he left office, his attempts to provide land for the disenfranchised had not materialized quickly enough. The centuries old vestiges of the Spanish colonial 80 period had not yet disappeared in Chile by the last third of the twentieth century. In 1970, the Popular Unity party’s candidate, Salvador Allende, won the election, however with less than 40 percent of the vote. Even though it was not a majority victory, Allende was the first Socialist president elected in a country in the western hemisphere. The United States reacted similarly to the events unfolding in Chile as they had done ten years earlier in Cuba. In a series of recently declassified documents released by the CIA, there is evidence that the United States tried unsuccessfully to prevent Allende from taking office after his election. Once again the United States was flexing its muscle in order to prevent the spread of communism as it had done so many other times in Latin America during the twentieth century. The two issues that are apparent when comparing the involvement of the United States in Chile or any of the other Spanish-speaking countries are: 1) the sovereignty of independent countries, and 2) the commitment of the United States to countries that had made agreements with them based on economic conditions that would benefit large corporations from the United States and the very small, wealthy elites in those countries. Allende was committed to making Chile a better land for all of its citizens. Upon becoming president, he began to redistribute land and income, raise wages, and nationalize the mineral industry, businesses and foreign banks. The United States was opposed to the Allende government, not only because of the plan to nationalize American business interests in Chile, but also because of Allende’s Socialist ideology. The declassified documents confirm the United States’ involvement in Chile during this time period and explain how the United States planned to "destabilize" the economy after Allende’s election by limiting trade with Chile and by intervening with organizations such as the World Bank, to terminate loans and/or fail to extend credit to the Allende government As citizens of the United States of America, the way that we are taught and the way we perceive our history is naturally quite different from the way others perceive it. It must then be the same for the way people from other countries learn and perceive During most of the last century, beginning with the Spanish-American War, the United States military or other sectors of the United States government have been involved either covertly or overtly with the domestic issues of the independent nations of Latin America and the Caribbean. Many times during the twentieth century, our government supported and financed suppressive dictatorships, or tried to help to overthrow leftleaning governments in the following Spanish-speaking countries: Cuba, Puerto Rico, the Dominican Republic, Mexico, Nicaragua, Panama, Guatemala, Uruguay, Chile, Peru, El Salvador, and Colombia. That is not to say the other nations making up Spanish-speaking America have eluded influence from the United States. Argentina, Bolivia, Ecuador, Paraguay, Venezuela, Honduras, and Costa Rica have all felt either the economic, political, or military impact of the United States. During the first half of the 1970s, the economic and military presence of the United States in Chile was equal to or greater than any other country in South America. Objectives After listening and reading about the geography of Chile, students will be able to: 1. Locate and identify Chile on a map, along with several cities, surrounding countries, bodies of water and other geographical landmarks. 2. Learn and memorize new vocabulary describing Chile’s geography. 3. Discuss the geographical characteristics of Chile and compare with other South American countries and/or the United States. After listening and/or reading about significant events in Chile’s history, students will be able to: 81 1. Identify the important time periods in Chile’s history from the pre-conquest era through independence. 2. Name several people and explain their contributions to Chile during this time period. 3. Compare what was happening in Chile with what was going on in the United States at the same time. The next part of the curriculum unit’s objectives will make up the central part of the unit: Chile from 1960 1990. Students will still need to know about the history during the years between independence and 1960, but only in the context leading up to the time period to be studied. It may be necessary to teach this part of the unit in English, but it will ultimately depend on the ability of the students and how much information the teacher wants them to master. Salvador Allende ran 1970 election in order to try to accelerate land reform and the nationalization of businesses and natural resources. His platform espoused a "democratic road to socialism." Allende promised to do more than his predecessor and he immediately initiated an aggressive land reform program. He also initiated a redistribution of income, raised wages and controlled prices to help Chile’s poor, which did not make him popular with Chile’s small middle and upper classes. Finally, Allende instituted state control of banks and other businesses in addition to the expropriation of copper mines owned by the United States. The Nixon administration in the United States did not look favorably upon the election of Allende. As many of the recently declassified documents indicate, there was an attempt by the United States (CIA) to subvert the election by trying to convince then-President Frei to annul the election. Other tactics were also attempted in order to "reelect" Frei, such as offering him substantial amounts of money. The election results stood and according to one of the declassified documents written by then CIA director Richard Helms, "On 3 November 1970, Dr. Salvador Allende became the first democratically elected Marxist head of state in the history of Latin America, despite the opposition of the U.S. Government. U.S. prestige and interests . . . are being affected materially at a time when the U.S. can ill afford problems in an area that has been traditionally accepted as the U.S. ‘backyard.’"(3) Even before the election, the United States began its covert operations in Chile to prevent the election of Allende. But, in spite of their planning and monetary leverage, the CIA had failed to induce a coup prior to Allende’s installation as president. Furthermore, the military and the country temporarily rallied behind Allende’s ratification. A socialist government did not belong in the western hemisphere according to the President Nixon and his advisors, and so the CIA with help from military advisors from the United States and Chile, began to implement plans to destabilize and if necessary, overthrow the Allende government. After three years of planning, on September 11, 1973 there was a successful coup d’etat in Chile. The Chilean military, supported by United States funds and intelligence advisors, stormed the presidential palace, arrested Allende, and began a 16-year rule in Chile. Allende committed suicide rather than be killed by the opposing forces. The United States government may have concealed information from families concerning the arrest and deaths of two American citizens in Chile, Charles Horman and Frank Teruggi. The story of these two Americans living in Chile during the time of the coup is loosely retold in the 1982 film Missing starring Cissy Space and Jack Lemmon. Furthermore, the declassified documents suggest that because of the close relationship the United States had with the Pinochet government, it may have had at least some prior knowledge regarding the car bomb explosion on September 25, 1976 on Embassy Row in Washington, D.C. that killed former Chilean ambassador Orlando Letelier and his American associate Ronni Moffitt. General Pinochet became Chile’s dictator on September 11, 1973. As soon as he assumed power, he immediately suspended the constitution, dissolved Congress, imposed strict censorship, and banned all political parties. The Chilean police and military detained thousands of citizens who were considered to be threats to the new government. Many were tortured and killed or simply died in detention centers. In August 1988 the state of siege was lifted and for the first time since the coup, Chileans were permitted to hold a plebiscite to decide whether to extend Pinochet’s term until 1997. It was a simple "YES" or "NO" vote. Both sides were permitted to broadcast their daily campaigns on television during fifteen minute time slots 82 during the months preceding the October vote. On October 5, 1988, "NO" won with 55 percent of the vote compared to 43 percent voting "YES." In 1998, Pinochet became a "senator for life" when he retired from the army. Chile’s constitution was written while Pinochet was in power and it provided for past presidents to maintain an active role in Chile’s government by being appointed to that post. More important, along with the title, it gave him immunity from being prosecuted for crimes carried out during his tenure as president. Six months after declaring himself "senator for life," Pinochet was detained and charged with human rights crimes during his regime by a judge in Spain, while he was in London seeking medical treatment. Spain requested his extradition, but after 16 months of arguing and appeals in England, Pinochet returned to Chile, old and frail from his illness. Meanwhile, during Pinochet’s detention in England, elections were held in Chile (December 1999) and the people elected Ricardo Lagos, a Socialist who began his political career associated with Allende. He is 62 years old and was inaugurated in March 2000. While taking the oath of office, he stated, "I will make a tremendous effort to show the world that this is a democratic country where power is in the hands of authorities, elected by the people, and where the armed forces are obedient to him."(4) After learning about Chile from 1960 through 1990, students in Spanish III CAS will be able to: 1. Identify people who were important during this era and why they were important. 2. Explain the involvement of the United States during this time period and why you agree or disagree. 3. Analyze the political, social and economic conditions in the United States and Chile during the thirty years between 1960 and 1990 and compare and contrast them. 4. Discuss the probabilities/possibilities for Chile’s future, including but not limited to the trial of Pinochet. Classroom Activities This curriculum unit is meant to be flexible enough so that teachers can use the individual components at different times during the school year, or as an entire unit to be taught over a period of two or three weeks. Each of the components is independent of the others and they can be used separately or together and taught either in conjunction with or apart from the regular curriculum. Introducing Students to Chile (one to three days) The materials needed for this component are: a map of Chile and South America; pictures (from books, Internet, etc . . . ) or slides of Chile; a vocabulary list with geographical terms in Spanish, e.g., el país, la capital, las montañas, el desierto, el clima, el océano, la nieve, la lluvia, las islas, la cordillera, la frontera, el terremoto, el volcán, estrecho, largo, alto, along with the names of cities, rivers, etc... The vocabulary for this part of the unit can be taught using content-based methodology because the use of visuals helps students to understand the subject matter. Working in small groups or individually, students will identify and locate specific places on the map of Chile and add any new vocabulary to the existing list. Since the World Language Standard of oral proficiency should be kept in mind while making lesson plans, there should be sufficient time allowed for students to talk about Chile’s geography among themselves in small groups and with the entire class. Also, the lesson could be used to supplement and enhance the vocabulary and grammar of an already existing chapter or unit in the textbook. In addition to the classroom activities mentioned, current events topics about Chile should be ongoing during the course of the school year. 83 84