Instituto Politécnico Nacional Centro de Estudios Científicos y Tecnológicos No.18 Expresión Oral y Escrita I Diego Barboza Murillo 1IM7 La Vida Después de la Muerte ¿Qué hay después de la muerte?... Es una de esas preguntas capciosas que pareciese que no tienen respuesta, pero ¿en realidad no la tiene? Para el budismo, después de la vida hay un eterno ciclo de rencarnaciones, para el cristianismo, hay un lugar para descansar, al igual que para el rastafarismo, hay un lugar al que se le llama Zion, así que, si hay tantos lugares y cosas después de la muerte, ¿a cuál voy a ir? En estadísticas publicadas por Statista, en el mundo el 31.1% de la población practica el cristianismo, lo que nos da a que aproximadamente 2,453 miles de millones de personas crean fielmente que después de morir van a ir a el lugar del eterno descanso, o más bien quieren. Se preguntarán, ¿esto de que me sirve para saber a donde voy a ir?, de entre todos estos creyentes, en el 2003 hubo un caso donde una persona de nombre Colton Burpo, el aseguraba haber ido al cielo después de estar al borde de la muerte, lo cual nos deja que querer ir a un lugar, hace que vallamos a este. Casos similares al de Colton Burpo no solo pasan en la religión cristiana, sino que, en todas las religiones, tenemos a Shanti Devi, una chica de la India que asegura haber rencarnado o como el caso de James un chico de San francisco que, a temprana edad, tenía un conocimiento muy detallado de la segunda guerra mundial, en donde el aseguraba haber sido un piloto. ¿Entones la religión influye en lo que nos pasa después de la muerte? Pues si y no, ya que en realidad lo que influye es en lo que tu creas, la respuesta a la pregunta inicial ¿Qué hay después de la muerte? Es muy simple. Después de la muerte hay lo que crees que hay después. Pido a todos que cierren los ojos e imaginen el lugar más bello de la existencia misma, imaginen el lugar que sea su lugar Solo, como una ráfaga o ceniza, miro aún el candor de tu cabello, la amorosa violencia de tus ojos hoy ya distancia, caracol cerrado a mi rumor de corazón herido, casi naufragio, tenebral y duelo. En vano lejanías, o la muerte del tiempo entre tu cuerpo agonizando, porque en música pura estoy rendido cuando al sentir conmigo tu tristeza sobre mis labios mueres, amor mío. -Alí Chumaceromi nombre es Diego Barboza y esto fue la vida después de la muerte y espero algún día verlos en el siguiente plano. Bibliografía Chumacero, A. (2017). Pasa al desconosido. Ciudad de México: CANIEM. Statista. (2023). Statista. Obtenido de Statista: https://es.statista.com/estadisticas/1382875/religiones-porcenta-de-creyentes-de-lasprincipales-confesiones-del-mundo/