La pandemia de COVID-19 ha impactado enormemente a la educación con el cierre de los centros educativos, lo que ocasionó un retroceso en los niveles educativos en perjuicio de los estudiantes. En el contexto mundial, la pandemia de Covid-19 ha creado una crisis en los sistemas educativos de América Latina y el Caribe, como nunca antes se había visto. En toda la región, las escuelas fueron cerradas. En Panamá, las clases presenciales fueron suspendidas desde el 12 de marzo del 2020. Sin embargo, un mes después se inició una modalidad virtual en todo el territorio nacional. La cual se mantuvo hasta terminar el periodo escolar del año 2021. Esta situación, generó un impacto negativo en los resultados del aprendizaje. Debido a que en Panamá no estaba adecuadamente preparada para pasar a la educación virtual a gran escala, como reemplazo de la educación tradicional y presencial. Las pérdidas en aprendizaje durante COVID-19 no han ocurrido solamente como resultado de cierres de escuelas, sino también por la efectividad baja o parcial del aprendizaje remoto e híbrido (UNESCO, 2021).