Entrenamiento de fuerza para la salud Cuando nos referimos al entrenamiento de fuerza muchas personas piensan que se hace referencia solamente a los powerliftings o levantadores de pesos pesados. Aunque estos también están dentro de este grupo, también se quiere referir a cualquier actividad que requiera que el músculo se active y pueda, en términos más específicos: Deformar un cuerpo o modificar la aceleración del mismo, iniciar o detener el movimiento aumentar o reducir su velocidad o hacerle cambiar de dirección. Entonces, también se puede denominar trabajos de fuerza a actividades como, por ejemplo: Crossfit, Funcional, Entrenamiento enfocado a Hipertrofia o Resistencia en el gimnasio, Calistenia, entre otros. A lo largo de los años este tipo de entrenamiento se fue haciendo cada vez más realizado por personas de diferentes edades, niños, adolescentes, adultos, personas de la Tercera Edad. Y esto llevó a que empiecen a aumentar los estudios sobre su impacto en nuestro cuerpo. Determinando así sus beneficios y también sus contras. Algunos de sus beneficios pueden ser: · Mejora de la fuerza: El entrenamiento con pesas mejora la fuerza en el atleta, lo cual conlleva a cientos de beneficios en el día a día de la persona. · Aumento de la masa muscular: Al someter al músculo a nuevos estímulos, se generan micro rupturas en las fibras musculares, las cuales se regenerarán en mayor cantidad y es ahí cuando ocurre el crecimiento muscular. Este es el famoso proceso denominado hipertrofia muscular. ¿Por qué hay que enfocarse en la ganancia de masa muscular más allá de la estética? Al tejido muscular se lo conoce como el horno metabólico de nuestro organismo. Se le denomina este nombre ya que el músculo como ya dijimos es un tejido metabólicamente activo el cual consume calorías estando en reposo. Esto quiere decir que al cuerpo le genera un mayor gasto de energía mantener ese tejido muscular. +Músculo=+Calorías gastadas · Aumento de la densidad ósea: El entrenamiento de fuerza puede aumentar la densidad ósea y además ayuda a la prevención y el tratamiento de la osteoporosis. · Previene el Catabolismo muscular/Sarcopenia: Se denomina Sarcopenia a la pérdida progresiva de masa y fuerza. El entrenamiento de fuerza evita (con una alimentación correcta) la pérdida de tejido muscular o catabolismo muscular. Esto es debido a que, si no entrenamos nuestros músculos, al no utilizarlos, nuestro cuerpo querrá empezar a deshacerse de ellos. Ya que este tejido le genera un gasto de calorías muy grande, y por lo tanto a nuestro organismo no le gusta desperdiciar energía. · Mejora la estética: Como todos ya sabemos un cuerpo trabajado es, estéticamente hablando, más lindo que uno no entrenado. Además de mejorar la estética, el desarrollo de la masa muscular, mejora nuestra postura. · Favorece el rendimiento deportivo: Se ha demostrado en estudios al respecto que el entrenamiento de fuerza optimiza el rendimiento de los atletas de resistencia al incrementar la fuerza que se aplica en cada despegue del piso. También diversos ejercicios dan una mejoría en lo saltos verticales y en la aceleración. Previene el envejecimiento: El entrenamiento de fuerza ha demostrado ser la mejor herramienta para combatir los efectos negativos asociados con el envejecimiento fisiológico de nuestro cuerpo. El colectivo médico está cada vez más de acuerdo en que el entrenamiento de fuerza es bueno tanto para hombres como para mujeres, así como para jóvenes como mayores. El principal factor a la hora de mantener una postura correcta son los músculos. Una musculatura fuerte contribuye a mantener una buena postura sin esfuerzo. Una postura saludable no solo previene dolores y contracturas de la espalda, cuello y hombros, sino que también mejora la función del aparato circulatorio y digestivo, entre otros. Mejora la calidad del sueño. Reduce la presión sanguínea. Reduce estrés y ansiedad. Como todo en la vida el entrenamiento de fuerza también puede tener sus contras. Mayormente cuando no se realiza los ejercicios de manera adecuada. Algunas de sus consecuencias negativas pueden ser: • Lesiones articulares o músculo-tendinosas • Deformación de la columna si la técnica es incorrecta. • Pérdida de velocidad (si se trabaja de forma lenta) • Aumento de peso, lo cual en algunos deportes es contraproducente. En conclusión: Si el entrenamiento de fuerza se realiza de forma correcta con su debido descanso tiene cientos de beneficios. Va de la mano ya sea si tu objetivo es Aumentar masa muscular o perder grasa. Es un gran aliado de los dos objetivos.