FENÓMENOS PASIVOS DEL TRABAJO DE PARTO Las modificaciones consecutivas a la actividad contráctil del útero constituyen los fenómenos que se agrupan bajo esta denominación. Que constituyen la ampliación del segmento inferior, el borramiento y dilatación del cuello, la expulsión de los limos, la formación de la bolsa de las aguas, la ampliación del canal del parto, el mecanismo del parto y los fenómenos plásticos del feto. Desarrollo del Segmento Inferior Hemos visto al analizar las modificaciones del útero durante el embarazo cómo se constituye el segmento inferior en el curso de los últimos meses de la gestación. El segmento inferior nace a partir del istmo uterino, distendiéndose durante el embarazo de forma progresiva y adquiriendo una gran elasticidad para permitir el paso del feto por el canal blando del parto, del que forma parte en su porción superior. Durante el trabajo de parto el segmento inferior completa su formación intensificando los mismos mecanismos que se explicaron para el embarazo. En el momento de iniciarse el parto el útero se divide en tres zonas: la superior, representada por el cuerpo; una intermedia, el segmento inferior, y, por debajo de este, el cuello. Las dos últimas regiones, unidas y dilatadas al final del parto, forman el canal cérvico segmentario o canal de Braun. El cuerpo, verdadero motor del útero, trata de expulsar al feto al contraerse, mientras que la región cérvico-segmentaria se deja distender, constituyendo una vía de tránsito. Durante el curso del parto las dimensiones del segmento inferior se modifican. Al encajarse la presentación, el anillo de Bandl (límite superior del segmento) se encuentra a la altura del plano del estrecho superior. El segmento inferior mide en ese momento unos 7 a 10 cm, a contar desde su límite inferior (orificio interno del cuello). Cuando la dilatación se completa, y debido a que el cuerpo ha continuado su progresiva retracción, el segmento inferior adquiere una longitud de unos 12 cm, con lo que el anillo de Bandl asciende a un nivel equidistante entre el ombligo y el borde superior de la sínfisis. Borramiento Y Dilatación del Cuello Son dos fenómenos característicos del trabajo de parto. Se los interpreta como la continuación natural de la formación del segmento inferior, que se va ampliando por la inclusión del cérvix. El borramiento precede, sobre todo en la nulípara, a la dilatación del cuello. Este hecho se cumple por la disminución gradual de su espesor, desde arriba hacia abajo, hasta reducirse al orificio externo, de borde delgado y cortante. En cambio, en la multípara el borramiento del cuello suele producirse simultáneamente con el proceso de dilatación y finaliza recién cuando este último se ha completado. El progreso de la dilatación no es regular en la unidad de tiempo. Al principio, hasta la mitad de su abertura, el cuello se deja dilatar con más lentitud. Después de vencida su elasticidad, la dilatación progresa con mayor rapidez. Si se consigna en un gráfico la dilatación cervical en función del tiempo (curva de dilatación cervical), es posible observar que ambos guardan una relación exponencial, calculándose que para realizar la primera mitad de la dilatación se requieren aproximadamente dos tercios del tiempo necesario para llegar a la dilatación completa. Son varios los factores que influyen en la velocidad con que se dilata el cuello uterino, como por ejemplo la paridad, la posición que la madre adopta durante el periodo de dilatación, la integridad de las membranas ovulares, la variedad de posición y grado de flexión de la cabeza fetal, anestesias de conducción y general, útero-estimulantes, úteroinhibidores, etc. El grado de dilatación se aprecia por el tacto vaginal y se valora por el número de dedos introducidos en el área cervical. Un dedo corresponde a 1,5 cm; dos dedos a 2,5-3 cm. Cuando los bordes del orificio alcanzan las paredes de la pelvis, la dilatación es completa habiéndose constituido el canal segmento-vaginal. El labio anterior del cuello es el que más tardíamente se retrae, quedando a veces "pellizcado" y edematizado entre la presentación y el pubis. Dilatación De La Inserción Cervical De La Vagina (cúpula vaginal) Durante el curso del borramiento el anillo vaginal que rodea al cuello en forma circular sufre una dilatación progresiva tal que, cuando el perlado de borramiento termina, el anillo vaginal alcanza 3 a 4 cm de diámetro. Con el progreso de la dilatación propiamente dicha, el anillo vaginal se va ensanchando, de manera que cuando el cuello se halla aún lejos de la dilatación completa, el anillo vaginal superior adquiere ya un diámetro próximo a los 10 cm, permitiendo la penetración profunda de la presentación, cuyo descenso queda limitado por el diafragma cervical, insuficientemente dilatado y aplicado a la presentación en forma de un casquete.