book reviews Karin Tusting, Sharon McCulloch, Ibrar Bhatt, Mary Hamilton & David Barton. Academics Writing. The Dynamics of Knowledge Creation. Nueva York: Routledge, 2019, 165 p. ISBN 9780815385905 Reseña de María Gina Furlan (Universidad Nacional de Córdoba) En Academics Writing. The Dynamics of Knowledge Creation, Karin Tusting, Sharon McCulloch, Ibrar Bhatt, Mary Hamilton y David Barton presentan una investigación de corte etnográfico sobre las prácticas de escritura académica en el Reino Unido. La investigación parte de dos supuestos: por un lado, el hecho de que las transformaciones en el lugar de trabajo de educación superior, visibles en las universidades del Reino Unido de las tres últimas décadas, están asociadas con cambios tanto en la identidad como en la responsabilidad de los académicos, y que estos cambios pueden rastrearse en sus prácticas de escritura. Por otro lado, la consideración de que la educación superior es vista ahora como una industria mundial en la que los estudiantes son meros “consumidores” y el trabajo de los docentes es un producto de intercambio dentro de un mercado nacional e internacional competitivo. Así, el personal universitario, según los autores, asume su trabajo en el marco de una universidad “neoliberal” y “comercial” que impone la escritura de diversidad de géneros con el objetivo de promoverse y ascender en las calificaciones internacionales. El libro, compuesto por 10 capítulos, inicia con un prefacio que presenta el contexto inmediatamente posterior a la investigación realizada; esto es, hace referencia a la huelga de profesores universitarios ocurrida en septiembre de 2018 que alcanzó a más de 60 universidades del Reino Unido. Y, es en este sentido que el estudio efectuado y los resultados a los que se llegó podrían leerse en clave anticipatoria. Con respecto a su estructura, los dos primeros capítulos introducen el marco teórico, metodológico de la investigación y el contexto sociohistórico en que esta se realiza. Desde el capítulo tres al nueve, se desarrollan el análisis y los resultados. El último capítulo presenta, a modo de cierre, las conclusiones y perspectivas en torno a las prácticas de escritura académica. El marco teórico que sustenta la investigación, explicado en el segundo capítulo, se nutre de dos enfoques que presentan puntos en común. Los estudios de alfabetización (“literaturas académicas” según la denominación de Lea y Street, 2006) y el enfoque sociomaterial, surgido del trabajo en el campo de los estudios https://doi.org/10.1075/sic.00081.fur | Published online: 21 October 2022 Spanish in Context 19:3 (2022), pp. 563–570. ISSN 1571-0718 | E‑ ISSN 1571-0726 © John Benjamins Publishing Company 564 María Gina Furlan de la Ciencia, Tecnología y Sociedad (STS según sus siglas en inglés), consideran que las prácticas de escrituras están integradas en contextos sociohistóricos determinados y abordan los textos resultantes de esas prácticas como objetos proveedores de significado. En Academics Writing, los autores ponen de relieve que la consideración del panorama cambiante de la escritura a partir de la digitalización ha implicado cambios sustanciales en el modo de abordar el objeto de estudio y que, por lo tanto, este abordaje debe ir más allá de la investigación de la materialidad de los textos. Las prácticas de escritura; por un lado, están condicionadas por el tiempo y el espacio en que se originan; por otro, los sujetos que las producen se vinculan permanentemente con todo un amplio espectro de actores sociales. Los autores recurren a conceptos esenciales de los dos enfoques en que se sustenta su estudio. De este modo, dentro del campo de la investigación de los estudios de alfabetización, los autores incorporan la distinción entre “eventos de literacidad” (literacy events) y “prácticas de literacidad” (literacy practices). El primer término hace referencia a hechos observables, útiles como punto de partida para la investigación, ya que las interacciones alrededor de un texto ofrecen la posibilidad de ser documentadas. Por su parte, “prácticas de literacidad” (literacy practices) implica la consideración, no solo de la actividad propiamente dicha, sino también de las ideologías que subyacen al proceso de escritura y a todos los aspectos espacio-temporales que han rodeado el contexto de escritura. El “discurso mediado” (mediated discourse), término extraído también de los estudios de alfabetización de Scollon (2002), implica, durante el proceso de escritura, tanto la vinculación permanente con actores diversos, muchos de los cuales no son visibles, como el surgimiento de expectativas y de necesidad de toma de decisiones. De la teoría sociomaterial conciben el concepto de “inscripción” (inscription) en el mismo sentido que Latour (1979), quien en su estudio antropológico sobre el trabajo de los investigadores en un laboratorio científico entiende estos ámbitos como dispositivos de inscripción en los cuales todo lo observado y analizado va a decantar, es decir, a materializarse en productos textuales. De manera análoga a los científicos, los académicos también realizan labores de inscripción a las que están obligados, en gran parte, por exigencias institucionales. Los autores explicitan, a modo de cierre del capítulo, ejes surgidos del marco teórico: por un lado, la adopción del principio de simetría, lo que implica la atención a todas las prácticas de escritura y no solo a las estimadas prestigiosas; por otro lado, la consideración de que toda actividad de escritura tiene un propósito y, por estar históricamente situada, se integra en prácticas sociales y culturales más amplias que conllevan, inherentemente, relaciones de poder. Métodos, universo y participantes son explicitados y debidamente justificados. Los autores argumentan a favor de la utilización de métodos etnográficos por su ductilidad para descubrir las prácticas sociales cotidianas de la escritura aca- Crítica de Tusting, McCulloch, Bhatt, Hamilton & Barton (2019) démica y las infraestructuras en las que los académicos llevan a cabo su trabajo. Por su parte, la selección del universo de investigación obedeció a una necesidad de mayor diversidad, en el caso de las universidades, y de representación de todas las ciencias, en el caso de las disciplinas. Es así que, en la investigación que reseñamos, a través de la combinación de entrevistas, de la observación etnográfica a actividades de escritura en línea y presencial y del análisis del contexto se recogió información sobre prácticas de escritura de dieciséis académicos –participantes principales– de tres universidades y de tres disciplinas diferentes –matemática, historia, márquetin– durante tres fases. Con respecto a los participantes, los investigadores reconocen las limitaciones en la selección, la cual podría estar sesgada dado que, aunque aclaran que intentaron lograr una distribución razonable en términos de género, nacionalidad y roles profesionales, esto no se consiguió totalmente. De todos modos, consideran que esta deficiencia fue paliada con la etapa de ampliación de la investigación que se detalla más adelante en esta reseña. La investigación ofrece información de manera explícita y detallada sobre los tres estadios de recolección de datos, cuya implementación requirió una amplia variedad de técnicas, y sobre el sistema que se utilizó para el análisis y para la elaboración de las categorías. Una primera fase consistió en tres entrevistas semiestructuradas con diferentes propósitos: el reconocimiento del espacio y de las diferentes percepciones sobre este por parte de los académicos (walk- along interviews); la indagación sobre el uso de los medios digitales y cómo su conocimiento o desconocimiento limita la vida laboral; por último, el examen sobre las prácticas de escritura en un día de trabajo. En una segunda fase, dado que se estimó que los métodos etnográficos tradicionales no eran suficientes, se realizaron filmaciones con el objetivo de intentar obtener todas las actividades de escritura que se desarrollan simultáneamente en tiempo real. Se aclara que este tipo de recolección de datos no estuvo exenta de dificultades prácticas e incluso éticas; sin embargo, destacan la recuperación de momentos clave para la investigación. La tercera fase, denominada “ampliación” (broadening out), apoyada en el argumento de que los procesos de escritura están sustentados en prácticas sociales más amplias implicó entrevistar a 39 participantes que abarcaban diferentes áreas de las universidades. Además de las tres fases mencionadas, se realizaron dos instancias paralelas a la investigación propiamente dicha: por un lado, una indagación autoetnográfica sobre su propia actuación para comprender y cuestionar sus roles como académicos e investigadores. Por otro lado, el proyecto de investigación incluyó eventos en las universidades con diferentes actores –estudiantes, investigadores– con el propósito de lograr una retroalimentación sobre los hallazgos que se iban produ- 565 566 María Gina Furlan ciendo, lo que implicó, según los autores, la generación de análisis nuevos y más profundos. En los capítulos que siguen, los autores desarrollan, según las categorías establecidas, los datos obtenidos, los cuales son permanentemente apuntalados con citas reveladoras extraídas de las entrevistas realizadas a los participantes principales. En el capítulo 3, titulado “Días en las vidas de la escritura de los académicos” (Days in the lives of Academics’ writing) se presentan ejemplos concretos de las actividades de los participantes en un día cualquiera. El capítulo 4, “Escritura de los académicos en el espacio y el tiempo” (Academics writing in space and time) realiza una investigación exhaustiva sobre la organización del espacio y el tiempo en que los participantes despliegan sus prácticas de escritura. Se examinan, también, las diferentes percepciones que subyacen a estos dos factores. Con respecto al tiempo, la investigación analiza la paradoja entre la autonomía con que generalmente se asocia la labor de los académicos con la sensación de falta de independencia mencionada por gran parte de los sujetos de la investigación. Un marco teórico prolífico–Ylijoki y Mäntylä (2003); Lefebvre (1991); Smith (2015); Müller (2014)–en que se exponen diferentes perspectivas para la representación del tiempo es la base para el análisis de las entrevistas, cuyas respuestas reflejan, en gran medida, las dimensiones expuestas en estas fuentes. La investigación sobre el espacio también permite visualizar las diferentes percepciones que existen sobre este. El ámbito académico cuenta con múltiples áreas que remiten a planes estratégicos de las universidades, los cuales, evidencian los aspectos de internacionalización, digitalización y comercialización de la idiosincrasia universitaria contemporánea. En el capítulo 5, “Disciplinas, géneros y escritura” (Disciplines, Genres, and Writing), siempre poniendo como centro a los sujetos de la investigación, los autores examinan las diferentes valoraciones de los géneros discursivos según las disciplinas elegidas para este estudio. Su detallado análisis computa hasta cien géneros diferentes, de los cuales el mayor porcentaje está constituido por los textos propios del área de la investigación, luego los géneros administrativos y, en menor medida, aquellos destinados a las prácticas pedagógicas. En el capítulo se discuten las tensiones que crean, en las tres áreas objeto de estudio, los sistemas de evaluación por la imposición de determinados géneros para lograr acreditación. En el capítulo 6, “Las cambiantes herramientas y tecnologías en la vida de la escritura de los académicos” (Changing tools and technologies in academics’ writing lives) se investigó el uso de las nuevas tecnologías en la vida de los académicos, entre ellas, las presentaciones en Power Point y el correo electrónico. El estudio incorpora el concepto de “toma de postura” (stance-taking) para definir el posicionamiento y evaluación que los participantes hacen de esas herramientas, Crítica de Tusting, McCulloch, Bhatt, Hamilton & Barton (2019) las cuales conllevan aspectos positivos, tal como la optimización de la colaboración, y aspectos negativos, por ejemplo, el sentimiento de invasión. El capítulo 7, “Nuevos géneros en las redes sociales. La comercialización del yo académico” (New social media genres. Marketing the academic self ) está también dedicado a las tecnologías digitales, pero con el foco en las nuevas formas de publicación que las plataformas han creado y puesto a disposición del público académico. No comprende los repositorios institucionales; sino cualquier tipo de página en los que se publican géneros de autopromoción –blogs institucionales o personales, foros de discusión disciplinaria, e incluso Twitter y Facebook-. Los académicos reconocen que requieren de nuevas habilidades en estas nuevas formas de escritura, si bien permanecen algunos objetivos comunes con las formas tradicionales. El análisis revela que las ventajas y desventajas de su utilización son variadas. Por un lado, la posibilidad de destacar publicaciones para aumentar la citación; el establecimiento de contactos con otros académicos, la comunicación con nuevas audiencias, la experimentación y el desarrollo de la escritura; por otro; la necesidad de tiempo adicional, la sensación de falta de control y el peligro de riesgos con la reputación. El capítulo 8 se titula “Relaciones y colaboración en la escritura académica” (Relationships and collaboration in academic writing). El eje de este capítulo es la escritura colaborativa, siempre entendida como una práctica situada. Se entiende que las comunidades discursivas desarrollan determinadas prácticas de escritura, pero esas prácticas son moldeadas también por factores económicos y hasta políticos. Con respecto a estos dos últimos, el estudio considera la internacionalización de la enseñanza, que implica la colaboración con colegas en determinados espacios físicos, tiempos e idiomas; el gerencialismo, que promueve relaciones de colaboración entre académicos e incluso estudiantes y, por último, la digitalización, que ha aportado mayores oportunidades a la escritura colaborativa. Se analizó también la escritura colaborativa en tres ámbitos diferentes: la investigación, la enseñanza y la administración. El capítulo 9 “Aprendizaje de la escritura académica. Un proceso continuo” (Learning academic writing. An ongoing process) presenta los recursos utilizados por los participantes para el aprendizaje de la escritura académica en un ámbito de constante cambio. Se resalta la insuficiencia de la escritura de tesis para un posterior desempeño idóneo en todos los géneros académicos requeridos. Las prácticas informales–aprender de los demás, aprender de la retroalimentación, aprender de los modelos y aprender haciendo– además de ser, en muchos casos, únicos medios de aprendizaje son significativas para el desarrollo de una escritura académica idónea. El capítulo 10 “El futuro de la escritura. Conclusiones e implicaciones” (The future of writing. Conclusions and implications) retoma, a modo de síntesis, los 567 568 María Gina Furlan ejes principales: espacio y tiempo, gerencialismo, las tecnologías digitales, la escritura colaborativa y el aprendizaje informal de la escritura académica, el estrés y la presión frente a las demandas. Finalmente, aborda las implicancias de la investigación en tres sectores. Para los académicos, ante la sensación de incomodidad evidenciada, la concienciación de que las dificultades de escritura son, en la mayoría de los casos, sistémicas y obedecen a la sobrecarga de actividad. Para la gestión, la idea de promoción de cambios en las rutinas y exigencias de escritura de géneros académicos y administrativos. Para el aprendizaje, la investigación realizada destaca la importancia del aprendizaje informal. La investigación reseñada constituye, sin dudas, un aporte a enfoques contemporáneos sobre el estudio y optimización de la escritura académica y profesional. Por un lado, “Escribir a través del currículum (WAC por sus siglas en inglés), movimiento originado en EEUU a partir de los estudios de retórica y composición, centraliza en el carácter situado y pedagógico de las prácticas de escritura. Aunque la mayoría de sus investigaciones se han orientado a la escritura de estudiantes en diversos momentos de su formación, presenta también trabajos, especialmente de corte etnográfico, centrados en la influencia que los programas WAC han suscitado en las prácticas pedagógicas de profesores de diferentes disciplinas (Bazerman, Little, Bethel, Chavkin, Fouquette, y Garufis 2016). Por otro lado, desde la Escuela Lingüística de Valparaíso (ELV), la concepción de género discursivo se articula en tres dimensiones –cognitiva, social y lingüística–, las cuales no se relacionan entre sí de manera simétrica, sino que es la dimensión lingüística la que opera como nexo entre las otras dos. Las investigaciones en este enfoque, sin embargo, priorizan la dimensión cognitiva por considerar, al igual que la investigación reseñada, la centralidad del sujeto hablante/oyente dentro de los procesos de comunicación como constructor de géneros discursivos en contextos específicos (Burdiles y Parodi 2015; Parodi 2010). Para concluir, Academics Writing The Dynamics of Knowledge Creation, es un texto que describe fenómenos bastante evidentes, y a veces en forma reiterativa, pero no por ello puede dejar de considerarse importante. Para empezar, el método etnográfico elegido para la investigación es clave en la aportación de una lectura que, con rigor científico y sobre la base de una bibliografía actualizada y rigurosa, resulta asequible y amena. Por otra parte, se destaca su originalidad ante la elección del rango de los participantes, dado que la mayoría de las investigaciones sobre escritura académica tienen como objeto de análisis a los estudiantes. En Academics Writing The Dynamics of Knowledge Creation, por el contrario, el centro de la investigación son los académicos y la valoración que ellos hacen de la escritura y del entorno en que esta se realiza. Por último, a pesar de ser una investigación situada en un contexto claramente definido, académicos en diferentes partes del mundo podrían sentirse identificados frente a los resultados obteni- Crítica de Tusting, McCulloch, Bhatt, Hamilton & Barton (2019) dos. De esta manera, las implicaciones para la gestión, para el aprendizaje y para los académicos pueden ser objeto de reflexión, es decir, una oportunidad para tomar distancia sobre las propias prácticas de escritura y sobre la actuación en la comunidad académica. Referencias Bazerman, Charles, Joseph Little, Lisa Bethel, Teri Chavkin, Danielle Fouquette, y Janet Garufis. 2016. Escribir a través del currículo. Una guía de referencia. Córdoba: Universidad Nacional de Córdoba. Burdiles, Gina, y Giovanni Parodi (eds.) 2015. Leer y escribir en contextos académicos y profesionales: Géneros, Corpus y Métodos. Santiago de Chile: Editorial Planeta. Latour, Bruno. 1979. LaboratoryLife: TheConstruction of ScientificFacts. Beverly Hills/London: Sage. Lefebvre, Henri. 1991. The production of space. Oxford: Blackwell. Lea, Mary, y Brian Street. 2006. “The academic literacies model: Theory and applications.” Theory into Practice 45 (4): 368–377. https://doi.org/10.1207/s15430421tip4504_11 Müller, Ruth. 2014. “Racing for what? Anticipation and acceleration in the work and career practices of academic life science postdoc.” Forum:Qualitative Social Research 15 (3): 15. https://www.qualitativeresearch.net/index.php/fqs/article/view/2245/3727 Parodi, Giovanni (ed.) 2010. Alfabetización académica y profesional en el siglo XXI. Santiago de Chile: Editorial Ariel. Scollon, Ron. 2002. Mediated discourse: The nexus of practice. London: Routledge. https://doi.org/10.4324/9780203420065 Smith, Simon. 2015. “Multiple temporalities of knowing in academic research.” Social Science Information 54 (2): 149–176. https://doi.org/10.1177/0539018414566421 Ylijoki, Oili-Helena, y Hans Mäntylä. 2003. “Conflicting time perspectives in academic work.” Time & Society 12 (1): 55–78. https://doi.org/10.1177/0961463X03012001364 Dirección para la correspondencia María Gina Furlan Facultad de Lenguas Universidad Nacional de Córdoba Av. Valparaíso s/n 5000 Córdoba Argentina m.ginafurlan@unc.edu.ar Nota biográfica María Gina Furlan es Profesora de Letras Modernas y Magíster en Enseñanza de Español como Lengua Extranjera por la Universidad Nacional de Córdoba (UNC). Se desempeña como pro- 569 570 María Gina Furlan fesora adjunta en la cátedra Lengua Castellana II de la Facultad de Lenguas de la UNC. Es participante responsable desde 2006 en proyectos sobre escritura académica y sobre argumentación subsidiados por la Secretaría de Ciencia y Tecnología de la Universidad Nacional de Córdoba. En el marco de la Especialización de la Didáctica de las Lenguas Extranjeras de la Facultad de Lenguas de la UNC dicta el curso “Diseño de la evaluación”. Publication history Date received: 11 November 2019 Date accepted: 5 December 2019 Published online: 21 October 2022 Copyright of Spanish in Context is the property of John Benjamins Publishing Co. and its content may not be copied or emailed to multiple sites or posted to a listserv without the copyright holder's express written permission. However, users may print, download, or email articles for individual use.