El Tarot de Thoth Un ensayo descriptivo por Aleister Crowley, editado por Frieda Harris, con un prefacio de Hymenaeus Beta PREFACIO Aleister Crowley, cuyo verdadero nombre fue Edward Alexander Crowley, naciò en Leamington Spa, Inglaterra, en 1875. Poeta, educado en Cambridge, es reconocido actualmente como el maestro màs grande del esoterismo del siglo XX. La filosofìa religiosa que èl fundò, Thelema, se encuentra entre las que crecen màs ràpidamente en el mundo. Durante su estadìa en El Cairo, en el año 1904, tuvo lugar el evento màs importante en la vida de Crowley, pues recibiò una comunicaciòn directa de un emisario de los Jefes Secretos, la Gran Fraternidad Blanca que guìa la evoluciòn de nuestro planeta. Este emisario, llamado Aiwass o Aiwaz hizo que Crowley escribiera un dictado, una breve obra dividida en tres partes, titulada Liber AL o Liber Legis: El Libro de la Ley. Este libro anunciaba el inicio de una nueva Era o Aeòn regido por Horus, la deidad egipcia con cabeza de Halcòn. A partir de 1904 este Nuevo Aeòn de Horus ha suplantado gradualmente al pasado Aeòn de Osiris. La humanidad evoluciona de acuerdo a còmo se desarrolla su fòrmula màgica y El Libro de la Ley introdujo nuevas fòrmulas y un nuevo simbolismo que continuarà dando impulso a la evoluciòn por miles y miles de años. Estas nuevas fòrmulas influencias el simbolismo del Tarot de Thoth, asì como su acompañante, El Libro de Thoth. Crowley estudiò el Tarot durante cuarenta años antes de encontrar en Lady Frieda Harris la colaboradora artìstica buscada. Nacida en 1877 ( su nombre de soltera era Bloxam), Lady Harris fue la esposa de Sir Percy Harris, miembro del Parlamento Britànico. El Tarot de Thoth vio gradualmente la luz entre 1938 y 1942, a medida que Lady Harris preparaba sus acuarelas a partir de los bosquejos y descripciones de Crowley. Crowley le permitiò el ejercicio completo de su remarcable sentido visual, pero los tìtulos, diseño general, sìmbolos, esquemas de coloraciòn, todos los cuales son derivados de la teorìa esotèrica, pertenecen a Crowley, quien retuvo la aprobaciòn final. Crowley le hizo redibujar o repintar entre cinco y seis veces algunas cartas. Las atribuciones kabalìsticas de las cartas del tarot se hallaban entre los secretos màs celosamente guardados en el siglo XIX y comienzos del XX. No obstante que escritores continentales como Eliphas Lèvi, Papus y Maxwell enseñaron las atribuciones del Tarot y sus conexiones con la Kàbala, ellos introdujeron deliberadamente “ errores” para asì desorientar al no iniciado. Crowley, sin embargo, tomò como trabajo de su vida el hacer accesible a todos las llaves del sendero, tan bellamente simbolizadas en el Tarot. Èl llegò a la conclusiòn de que debido a que los secretos mìsticos y màgicos sòlo pueden ser conocidos verdaderamente por medio de la experiencia directa y que la experiencia directa solamente puede ser alcanzada por medio del logro individual, los secretos podìan protegerse a sì mismos, aùn cuando fuesen publicados claramente. El Tarot de Thoth fue el primero en hacer explìcitas las atribuciones iniciàticas. Crowley dio a algunas delas cartas un nuevo nombre, para asì asegurarse que la doctrina del Nuevo Aeòn fuese explicada. Al Triunfo XI le llamò “ Lascivia”; al Triunfo VIII le llamò “Ajuste” y al Triunfo XIV le llamò “El Arte” ( originalmente denominados “La Fuerza”, “La Justicia” y “La Templanza”, respectivamente). Ademàs, èl incluyò una importante correcciòn a las ocultas atribuciones tradicionales de las letras hebreas en los Triunfos del Tarot que implicaban los Triunfos IV y XVII ( “El Emperador” y “La Estrella”). Esta correcciòn fue inspirada por una enseñanza de El Libro de la Ley. Aclaraciones con respecto a estos cambios, pueden ser encontradas en la obra de Crowley El Libro de Thoth o en uno de sus muchos libros pòstumos que especìficamente tratan sobre El Tarot de Thoth y su simbolismo. Lady Harris expuso en galerìas las pinturas a comienzos de 1940 y el catàlogo preparado por los Nicholson y Venn Gallery en Oxford estuvo basado en las notas de Crowley y obtuvo su consentimiento. Este forma la base para el presente folleto, en el cual los nombres de las cartas se ha hecho conforme a los tìtulos finales dados en El Libro de Thoth y en las cartas mismas. Las atribuciones hebraicas, astrològicas y elementales han sido tambièn añadidas, algunos errores y omisiones obvias se encuentran corregidos, confiando en el trabajo propio de Crowley. El texto que acompaña las cartas de Crowley es El Libro de Thoth, en la actualidad generalmente reconocido como el clàsico moderno del Tarot, publicado originalmente en 1944 por la fraternidad màgica de la cual èl era director, la Ordo Templi Orientis ( O.T.O). Crowley muriò en 1947; las cartas fueron pòstumamente publicadas por primera vez por la O.T.O. en cooperaciòn con Gerald J. Yorke, en 1947. Crowley intentò que El Tarot de Thoth sirviese como un Atlas Màgico y Guìa del Universo en este Nuevo Aeòn de Horus, escribiendo que “ para mì esta obra sobre el Tarot es una enciclopedia de todas las filosofìas `ocultas´serias. Es un libro de referencia estàndar, el cual determinarà el curso entero de los pensamientos mìsticos y màgicos de los pròximos 2000 años”. Fue el primer Tarot global, que hacìa uso de sìmbolos de muchos perìodos y culturas pasadas y presentes, orientales y occidentales. Crowley intentò, ademàs, que su irrefutable verdad, poder y belleza fuesen una reivindicaciòn tangible de la obra de su vida, la cual fue malentendida muy a menudo. En èsto, con la ayuda de Lady Harris, ha tenido èxito. Esta baraja debe ser estudiada en conjunto con El Libro de Thoth de Crowley, el cual es la autoridad màxima en lo concerniente a su significado. Este libro es ciertamente avanzado; afortunadamente, en la actualidad, son accesibles muchas obras introductorias que tratan espècìficamente el texto de El Libro de Thoth. Hymenaeus Beta Frater Superior, Ordo Templi Orientis. Nota: El Tarot de Thoth Està compuesto por 78 cartas. Siguiendo la tradiciòn, la baraja contiene dos cartas suplementarias, una con el “ hexagrama de invocaciòn de la Bestia” y la otra con una exposiciòn de la O.T.O. INTRODUCCIÒN El origen del Tarot es desconocido, mas con toda probabilidad fue introducido en la cuenca mediterrànea a màs tardar a fines del siglo XIV. Existen barajas que datan del siglo XV. Generalmente, se admite que las cartas eran una clasificaciòn o mapa del Universo. El Universo material ha sido, en primera instancia, siempre dividido en cuatro y es el nùmero cuatro la base de la baraja. Hay cuatro palos correspondientes a los cuatro elementos, cuatro cuadrantes, cuatro estaciones del Sol, cuatro estaciones y asì sucesivamente. Los otros nùmeros involucrados en esta clasificaciòn se ven derivados del nùmero cuatro directamente: 1 + 2+ 3+ 4 = 10 1+2= 3 3+4= 7 3x4= 12 El nùmero de los Triunfos ( 22) està de acuerdo al de los Atus, Casas o Claves. El tema de las cartas y del libro ( el Tarot es llamado El Libro de Thoth o Thahuti, el Mercurio egipcio) es la influiencia de los diez nùmeros y las veitidòs letras sobre el hombre y el mètodo de manipular sus fuerzas. Segùn la clasificaciòn, parece que el sistema del Tarot es el de la Kàbala hebrea. Kàbala significa “ recibido”, es decir, una tradiciòn recibida por medio de la Iniciaciòn. La Kàbala hebrea afirma estar basada en la Kàbala egipcia. Se supuso que Moisès, el gran mago de los hebreos, habrìa sido iniciado por los hierofantes de aquel paìs. Esta teorìa se ve confirmada por los vestigios de imàgenes e ideas egipcias fuertemente apreciables en los diseños tradicionales mismos, pero tambièn hay una variada expresiòn de influencia de parte de la religiòn hindù. En particular, el dios hindù Ardhanari es representado con las cuatro armas de los cuatro palos: Bastos, Copas, Espadas y Discos. Por tanto, parece probable que fueran los Adeptos egipcios e hindùes los responsables de la forma original de la baraja, la cual se ha perdido. Lo que sì es innegable es que tuvo que haber sido arreglada, en su forma medieval, por los kabalistas hebreos. El sìmbolo general de los Atu està basado en las ideas populares sobre iglesia y estado de aquellos tiempos. Èsto se manifiesta especialmente en los tìtulos de Atus tales como El Loco, El Mago ( Prestidigitador o Malabarista), La Papisa, El Emperador, El Papa, El Ermitaño, El Ahorcado, La Justicia, La Muerte, El Diablo, La Torre Fulminada, El Juicio. Hay cierta evidencia de influencia greco-romana y probablemente asiria o caldea ya que, en las barajas antiguas, El Emperador fue algunas veces llamado Jùpiter; tenemos la trìada astrològica del Sol, La Luna y La Estrella, mientras que tal vez La Torre Fulminada pueda ser considerada como el sìmbolo de Agni, dios del relàmpago. Estos entremezclados orìgenes, no obstante, no son de gran significaciòn. Lo que sì es cierto es que la baraja, tal como era, fue hàbilmente modelada por Iniciados como medio de preservar y transmitir la tradiciòn de la Sabidurìa Iniciàtica; algunas salvaguardas fueron introducidas para evitar la violaciòn de los secretos, especialmente en cuanto a las atribuciones de los Atus o Triunfos. Las cartas han sido muy famosas por siglos y cientos de libros han sido escritos acerca de ellas. Fueron usadas por los “ Bohemios” o gitanos para predecir la Buenaventura y, de una manera mutilada, son usadas en paises latinos y en ambos hemisferios para jugar a las cartas. Pero èstas son degradaciones de su verdadero uso, la contemplaciòn noble de las Energìas Secretas de la Naturaleza. LOS VEINTIDÒS TRIUNFOS 0. El Tonto ( hebreo Aleph, Aire) El Tonto es el Aire, El Vacìo o inocencia poderosa. Èl sostiene el elemento masculino Fuego, el elemento femenino Agua, la espada del Aire y el disco de la Tierra. Es el Hombre Verde de la Primavera, el Gran Tonto de los Celtas ( Dalua) y Parsifal. Tambièn es Zeus Arhenothelus, Dionisos Zagreus, Bacchus Diphues y Baphomet. I. El Mago, El Magus o El Prestidigitador ( hebreo Beth, Mercurio) Mercurio, quien es Sabidurìa, Voluntad y Palabra, por quien el mundo es creado, simboliza la base fluida de toda transmisiòn de actividad. Detràs de èl està el mono, Hanuman, que es una concepciòn hindù. Thoth, su equivalente egipcio, es tambièn siempre seguido por el mono cinocèfalo. II. La Sacerdotisa ( hebreo Gimel, Luna) Ella es Isis, la Vìrgen Eterna y ademàs Artemisa. Es por esta razòn que ella està vestida con un velo luminoso de luz, siendo la luz considerada no como manifestaciòn del Espìritu, sino como su velo. III. La Emperatriz ( hebreo Daleth, Venus) Ella se encuentra sentada en una postura tradicional. Esta postura representa la Sal, principio inactivo de la Naturaleza. El loto simboliza lo femenino o poder pasivo. Las abejas en su vestido pueden ser comparadas con la fleur de lys, sugiriendo un origen francès del sìmbolo; el cinturòn es el Zoodìaco. El pelìcano puede ser identificado con la Gran Madre y su descendencia. Èl representa la continuidad de la vida y la herencia de sangre unificando todas las formas de la Naturaleza. El àguila blanca simboliza la Sal alquìmica y la Tintura Blanca de naturaleza de plata. IV. El Emperador ( hebreo Tzaddi, Aries) Esta carta significa gobierno por medio de dos sìmbolos opuestos. Ellos son el carnero, que cuando salvaje es solitario y valeroso, y el cordero, que es dòcil y cobarde; de hecho, el carnero domesticado mediante autoridad. La postura indica el Azufre alquìmico, elemento ìgneo del Universo. El àguila roja representa la Tintura Roja de los alquimistas con naturaleza de oro. V. El Hierofante ( hebreo Vav, Tauro) La referencia en esta carta es a tauro, el Toro y su equivalente hindù el Elefante. El pentagrama con el niño bailando simbolizan al Nuevo Aeòn del Niño Horus, el cual toma el lugar del viejo Aeòn que nos ha gobernado durante 2000 años. Las cuatro màscaras son los guardianes de todo misterio culminando en el Gran Misterio de la uniòn del microcosmos con el macrocosmos. La mujer frente al Hierofante representa a Venus, armada y marcial. La Vara con anillos entrelazados representa los tres Aeones de Isis, Osiris y Horus. VI. Los Amantes o Los Hermanos ( hebreo Zain, Gèminis) Esta carta especialmente alquìmica es un sìmbolo de procreaciòn, las espadas llaman la atenciòn al proceso de divisiòn, el cual realmente tiene lugar. Caìn y Abel simbolizan la negativa de Dios a escuchar a los hijos de Eva hasta que se vierta la sangre. Ello parece ser una representaciòn de la religiòn externa. Fue por medio del derramamiento de sangre y de religiones externas como Caìn fue capaz de tener contacto con sus semejantes. En este sentido, el significado de la carta es la entrega de la Ciencia al gènero humano, ya que el asesinato significa el anàlisis y el subsiguiente contacto: la sìntesis. VII. El Carro ( hebreo Cheth, Càncer) Las cuatro esfinges en esta carta, quienes tiran del carro, son el Toro, el Leòn, el Àguila Y EL Hombre; en conjunto representan los diecisèis subelementos. La funciòn del Auriga es portar el Santo Grial, en cuyo centro hay sangre radiante que simboliza la presencia de la luz en las tinieblas. VIII. Ajuste o La Justicia ( hebreo Lamed, Libra) Esta carta representa La Mujer Satisfecha. Este estado es representado por la balanza, en la cual ella pesa el Universo; Alpha, lo Primero, se equilibra exactamente en contraposiciòn a Omega, lo Ùltimo. Los platillos representan los dos “ Testigos”. Cada “ Testigo” es la manifestaciòn autèntica de maya, el uno satisfaciendo al otro por medio de un proceso de contradicciòn, pues la Naturaleza no es Justicia; ella es màs bien, por medio del proceso de equilibrio, “ La Justesse”. Finalmente, esta mujer es el arlequìn original, ya que la salvaje mezcolanza de color y movimiento se desenlaza en el equilibrio de todas las posibilidades de percepciòn. IX. El Eremita ( hebreo Yod, Virgo) La letra a la cual se atribuye esta carta es la letra Yod, base de todas las demàs letras del alfabeto hebreo. Su sìmbolo es el del Creador de Vida y su representante es el Espermatozoo. Por esta razòn,la carta es denominada El Eremita. En consecuencia, El Eremita porta una làmpara cuyo centro es el Sol. El huevo, enroscado por una culebra, simboliza el universo, mientras que la culebra significa esencia fluida de luz, que es la vida del Universo. En esta carta se hallan rastros de la leyenda de Persèphore. La Vara Serpiente, que se ve brotar del abismo, es la Vara de Mercurio, la guìa del alma a travès de las regiones inferiores. La letra Yod significa “ Mano” y la mano es el centro de la ilustraciòn. X. La Fortuna ( hebreo Kaph, Jùpiter) Por medio de la atribuciòn de esta carta al planeta Jùpiter es que se le hace representar al Universo en su aspecto de cambio continuo. La apariciòn de toda clase de fenòmenos celestiales lo enfatizan. En el centro està la rueda de diez rayos, reconocido sìmbolo de la Fortuna. Las tres figuras enganchadas a la rueda representan las tres formas de energìa, expresadas en el sistema hindù bajo el tèrmino de guna. En la parte superior se encuentra situada la Esfinge, representando la inteligencia y el balance (sattva); Humanubis, con apariencia de mono, representa la inquietud de la brillante, inestable razòn ( rajas); en la parte inferior, pràcticamente cayendo de la rueda, està el señor con cabeza de reptil, Tiphon ( tamas), sìmbolo de la destrucciòn, pereza e ignorancia. Las atribuciones alquìmicas de las gunas son el Azufre, el Mercurio y la Sal. XI. Lascivia ( hebreo Teth, Leo) Esta carta fue anteriormente nombrada La Fuerza. Implica, sin embargo, no solamente fuerza, sino tambièn el gozo de la fuerza ejercitada. Las siete cabezas son, respectivamente, de Àngel, Santo, Poeta, Adùltera, Guerrero, Sàtiro y Leòn-Serpiente. La figura central es la mujer que se ha rendido a todas las fuerzas de la Creaciòn y que monta a horcajadas sobre la Bestia. En su mano izquierda ella sostiene las riendas, como representando la pasiòn que les une, en su derecha sostiene en alto la copa en llamas de amor y muerte. En esta copa estàn mezclados los elementos del sacramento del Aeòn. En el fondo estàn las imàgenes exangües de los santos sobre quienes este espejismo toma influencia, pues todas sus vidas han sido absorbidas en el Santo Grial. XII. El Colgado o Dios Muriendo ( hebreo Mem, Agua) La postura de ahogado o ahorcado es de un grandìsimo significado. Las piernas estàn cruzadas de tal forma que la pierna derecha forma un àngulo recto con la pierna izquierda, los brazos estàn extendidos como en un àngulo de sesenta grados, como para formar un triàngulo equilàtero. Èsto da como resultado el sìmbolo de un triàngulo coronado por una Cruz, lo que representa al descenso de la luz en las tinieblas con la finalidad de redimirlas. La idea total de sacrificio es un concepto erròneo de la naturaleza, y el elemento Agua, al cual se atribuye esta carta, es el elemento de la Ilusiòn. XIII. La Muerte ( hebreo Nun, Escorpio) El sentido alquìmico de la muerte no es tanto de destrucciòn como de cambio. Por ello tenemos en esta carta al Escorpiòn, representaciòn de la energìa primitiva, que està siempre preparado para cometer suicidio ( de acuerdo a la leyenda) cuando se ve duramente acosado, aunque preparado a sufrir cualquier transformaciòn que le permita continuar su existencia en una forma diferente. De esta manera, el potasio, cuando es tirado en el agua, se incendia y acepta el abrazo del radical hidroxilo. El pez y la serpiente, aquì ilustrados, han sido objeto de cultos que enseñaron las doctrinas de resurrecciòn o de reencarnaciòn. La figura central està ejecutando la danza de la muerte ( esqueleto y guadaña son imàgenes saturnianas), sobre su cabeza tiene la corona de Osiris. La influencia de Saturno està expresada en el aspecto negativo de la muerte, al representar las formas esenciales que no se ven destruidas por los cambios ordinarios de la Naturaleza; el lado positivo y creativo se observa en el barrido de la guadaña, que da origen a burbujas, representando nuevas vidas. El aspecto màs elevado de esta carta es el Àguila, que representa la exaltaciòn sobre la materia sòlida. XIV. El Arte, anteriormente titulada la templanza ( hebreo Samekh, Sagitario) El logro màs grande de la Alquimia era la realizaciòn del cambio, la transmutaciòn de objetos, cualidades, colores y por consiguiente sus opuestos. De esta manera, es que en esta carta el Leòn Rojo se ha vuelto blanco, el Àguila Blanca se ha vuelto roja. En la figura principal los personajes blanco y negro, que fueron los Amantes de la Carta VI, se encuentran ahora intercambiados y fusionados en una figura andrògina. Es la Consumaciòn del Matrimonio Real. El arcoiris, por medio del aura de luces multicolores ascendiendo de la putrefacciòn, simboliza otra etapa en el proceso alquìmico. Putrefacciòn propiamente dicha es representada por el cuervo posado sobre el cràneo en el caldero. La consumaciòn del arte total de la Alquimia aparece en toda su gloria proclamada en la inscripciòn “ Visita interiora terrae rectificando invenies occultem lapidem” *. El consejo de visitar el interior de la tierra es una recapitulaciòn ( en un plano superior) de la fòrmula primera de la Obra. La palabra importante rectificando, implica la guìa correcta de nueva sustancia viva por el sendero de la Voluntad Verdadera. XVI. El Diablo ( hebreo Ayin, Capricornio) El Diablo està aquì presentado en la forma tradicional del macho cabrìo. El culto del macho cabrìo significa el impulso de creaciòn imprudente, sin ninguna consideraciòn por el resultado. Detràs del macho cabrìo se halla el Àrbol de la Vida, que penetra los cielos en una mezcla de formas fantàsticas, recordando las marcas del planeta Marte, siempre asociado con la salvaje energìa material de la creaciòn. En las transparentes raices se ve la savia, hirviendo y saltando en todas direcciones. El anillo en la parte superior es uno de los anillos de Saturno o Set, el dios con cabeza de asno de los egipcios. La forma en espiral de los cuernos es una alusiòn a las cosas màs elevadas y remotas. Zoroastro define a Dios como “ el que tiene una fuerza espiral”. XVI. La Torre, o La Torre Fulminada, La Casa de Dios, o Guerra ( hebreo Pè, Marte) Esta carta se le atribuye a la letra Pè, que significa boca. La carta, que permite dos interpretaciones en una, es una manifestaciòn de destrucciòn pura en su forma màs tosca, la destrucciòn del establecido viejo Aeòn por relàmpagos, llamas y màquinas de guerra. La otra interpretaciòn es tomada del culto a Shiva. En la parte superior de la carta aparece el Ojo de Shiva. Segùn èsto, la carta significa perfecciòn del aniquilamiento por medio de liberaciòn de la prisiòn de la vida organizada. La Paloma y la Serpiente representan impulsos femenino y masculino. En las palabras de Schopenhauer, “ la voluntad de vivir y la voluntad de morir”. XVII. La Estrella ( hebreo Hè, Acuario) Toda forma de energìa en esta carta es espiral; èsto es una anticipaciòn del presente Aeòn, el de Horus, el Niño Coronado y Conquistador, sucesor del “ dios muriente”, Osiris. El Aeòn que se marcha està simbolizado por las formas rectilìneas de energìa que se derraman de la copa de abajo. Estas formas representan la actualmente abandonada geometrìa euclidiana. La imagen de la diosa puede ser tomada como una manifestaciòn del espacio circundante del cielo. XVIII. La Luna ( hebreo Qoph, Piscis) La carta simboliza el estado de horror impuro, las tinieblas ocultas que deben ser traspasadas antes de que pueda renacer la luz. La Luna es,por tanto, el màs universal de los planetas, tomando parte simultàneamente de lo màs alto y de lo màs bajo. Al fondo de la carta se mueve el Escarabajo Sagrado, transportando al Sol por las tinieblas de la noche. Por encima, se encuentra el paisaje maligno de la Luna. Un arroyo, sendero de suero, teñido de sangre, fluye entre dos montañas estèriles. Sobre las colinas se hallan dos siniestras torres negras. En el umbral està el dios con cabeza de chacal, Anubis, en forma doble; a sus pies estàn los chacales esperando devorar a aquellos que se hayan caido por el camino. * Nota: “ Visita las partes interiores de la tierra; mediante la rectificaciòn encontraràs la piedra oculta”. XIX. El Sol ( hebreo Resh, Sol) Esta carta representa tanto al Señor del Nuevo Aeòn, al Señor de laLuz, Vida, Libertad y Amor, como la liberaciòn completa de la raza humana. Los montìculos verdes representan la tierra fèrtil, aunque la presencia de un muro nos muestra que el Nuevo Aeòn no significa la ausencia de control. Los niños gemelos bailan fuera de la muralla, debido a que ellos simbolizan la nueva etapa en la historia humana, la etapa de completa libertad de las restricciones impuestas por ls ideas tales como pecado y muerte. XX. El Aeòn, El Àngel o El Juicio Final ( hebreo Shin, Fuego y Espìritu) La carta està ceñida por el cuerpo de Nuit, la diosa estelar, simbolizando la posibilidad ilimitada. Ella rodea el globo de fuego, su compañer Hadit, simbolizando la energìa eterna. En el centro està situado su hijo Horus, tambièn deidad solar, quien es la encarnaciòn del Nuevo Aeòn. La mano izquierda, extendida y vacìa, nos recuerda que el dios ha destruido al viejo Aeòn per que, hasta ahora, es demasiado joven como para tomar el lugar de sucesor. En la parte inferior e la carta aparece la letra Shin, la cual se atribuye a esta carta. Las tres Yods estàn oupadas por tres figuras humanas que se levantan para participar de la Enegìa del Nuevo Aeòn. XXI. El Universo ( hebreo Tau, Tierra y Saturno) Esta carta se atribuye a la letra Tau. Junto a la primera carta, El Tonto, forman la palabra Ath, que significa Esencia. De tal manera que toda realidad se ve comprendida en la serie de la que estas dos letras forman el principio y el fin. La letra Tau simboliza una extensiòn cuàdruple aplicable a la trascendencia de espacio y tiempo mediante un cambio que se autocompensa contìnuamente. La letra se atribuye tambièn a Saturno, el màs lento de los planetas, por ello asociado al elemento tierra. Saturno es el dios viejo, el dios de la fertilidad. La posiciòn de la letra Tau sobre el Àrbol de la Vida indica el estado deequilibrio entre cambio y estabilidad. El glifo en la carta, por tanto, simboliza la conclusiòn de la Gran Obra. La imagen del Universo es la de una doncella, la letra final del tetragrammaton. Ella està ilustrada danzando con la gran Serpiente en forma de espiral o Sol. Està rodeada por diez sìmbolos; hay una elipse compuesta por setenta y dos cìrculos, como representaciòn de los quinarios del Zoodìaco. En las esquinas de la carta estàn los cuatro Querubines, sugiriendo el Universo establecido. En el centro se encuentra la Rueda de la Vida dando inicio a la forma del Àrbol de la Vida, que es visible sòlo para los que son de corazòn puro. En la parte inferior de la carta se halla la bien conocida tabla de los elementos quìmicos de J.W.N. Sullivan. LAS CARTAS MENORES Y CARTAS DE CORTE BASTOS As de Bastos Representa la esencia del elemento Fuego en su principio. Las llamas son Yods colocadas en forma de Àrbol de la Vida. Es la Energìa primordial manifestàndose en la Materia. Dos de bastos Dominio. Chokmah en el palo de Fuego. Marte en Aries. Aquì tenemos dos Dorjas cruzadas. La Dorja es el sìmbolo tibetano de la destrucciòn. Mas la destrucciòn puede ser considerada como el primer paso en el proceso creativo. Tres de Bastos Virtud. Binah en el palo de Fuego. Sol en Aries. Los bastos asumen la forma del loto y representan el establecimiento de la Energìa primigenia. Cuatro de Bastos Consumaciòn. Chesed en el palo de Fuego. Venus en Aire. Los bastos estàn encabezados por el Carnero sagrado de Aries; en su otro extremo se hallan las Palomas de Venus. La Voluntad original del Dos ha sido transmitida a travès del Tres y se consolida en un sòlido sistema de orden, Ley y Gobierno. Cinco de Bastos Lucha. Geburah en el palo de Fuego. Saturno en Leo. Estas varas pertenecen al Adepto Supremo ( caduceo), segundo Adepto ( Fènix) y tercer Adepto ( Loto). Cinco llamas dobles muestran una energìa equilibrada. Esto es fuerza puramente activa. Seis de Bastos Victoria. Tipharet en el palo de Fuego. Jùpiter en Leo. Las Tres Varas de los Tres Adeptos estàn colocadas en orden. Nueve llamas arden como làmparas. Se simboliza la Energìa, su recepciòn y reflexiòn a travès de lo femenino. Siete de Bastos Valentìa. Netzach en el palo de Fuego. Marte en Leo. Las varas de los Adeptos se hallan relegadas al trasfondo; en el frente se halla un basto tosco, sin trabajar; las llamas se dispersan. Significa la degeneraciòn de la energìa inicial y el abandono del equilibrio. Ocho de Bastos Rapidez. Hod en el palo de Fuego. Mercurio en Sagitario. Esta carta muestra los bastosLuz convertidos en rayos elèctricos, , que constituyen la Materia mediante la energìa. Sobre este universo restaurado se encuentra el arcoiris, representando interacciòn y correlaciòn. Tambièn representa la energìa de la alta velocidad. Nueve de Bastos Vigor. Yesod en el palo de Fuego. Luna en Sagitario. Los bastos se han convertido en flechas, ocho en nùmero màs una flecha mayor, la cual tiene la Luna por punta y al Sol como su fuerza propulsora. Esta carta da el desarrollo màs completo de la Fuerza en relaciòn a las Fuerzas por encima de ella. Diez de Bastos Opresiòn. Malkuth en el palo de Fuego. Saturno en Sagitario. Los bastos estàn cruzados, demostrando el poder de las energìas completas del Fuego; mas ellos han perdido sus tìtulos de nobleza. En el frente estàn dos Dorjas prolongadas en forma de barras. La carta muestra la Fuerza separada de sus fuentes espirituales. Caballero de Bastos Rige de 20º de Escorpio a 20º Sagitario, incluyendo una parte de Hèrcules. Parte ìgnea del Fuego. Esta carta muestra un guerrero con armadura completa. El yelmo tiene como cimera un caballo negro. En su mano lleva una antorcha flameante; su capa es tambièn llamarada y cabalga sobre llamas. Su corcel es un caballo negro encabritado. Reina de Bastos Rige de 20º de Piscis a 20º de Aries. Parte acuosa de Fuego, su fluidez y color. La carta ilustra a una Reina con una corona de globo alado. Està sentada en un trono en llamas, el cual ha arreglado en luz geomètrica gracias a su poder material. Porta una vara rematada por una piña de abeto que sugiere los misterios de Baco. Prìncipe de Bastos Rige de 20º de Càncer a 20º de Leo. Parte aèrea de Fuego, con su facultad de expansiòn y volatilizaciòn. Se encuentra sentado en un carro en llamas y lleva la vara de Fènix, vara de Poder y Energìa. Princesa de Bastos Rige de 20º de un cuadrante de los cielos alrededor del Polo Norte. Parte terrosa del Fuego, o la atracciòn quìmica irresistible de la sustancia combustible. Ella posee las plumas de la justicia brotando de su frente y en su mano sostiene una vara coronada por el Sol. COPAS As de Copas El elemento Agua en su forma original y secreta. Es el complemento femenino del As de bastos. Es una carta primordial en la forma esencial del Santo Grial. Dos de Copas Amor. Chokmah en el palo de Agua. Venus en Càncer. La carta muestra dos copas desbordadas sobre un mar en calma. Se llenan por un loto que flota en el mar, enroscado por dos delfines gemelos, la armonìa de lo masculino y lo femenino interpretados en su sentido màs amplio y elevado. Tres de Copas Abundancia. Binah en el palo de Agua. Mercurio en Càncer. Las copas son granadas, abundantemente llenas y desbordàndose sobre un mar en calma, simbolizando la satisfacciòn de la Voluntad de Amar. Cuatro de Copas. Lujo. Chesed en el palo de Agua. Luna en Càncer. Las cuatro copas situadas sobre el mar; no estables, sino perturbadas. El Loto posee un tallo mùltiple. La energìa del elemento, aunque organizada, ha perdido la pureza original del concepto. Cinco de Copas Decepciòn. Geburah en el palo de Agua. Marte en Escorpio. Las copas se encuentran vacìas. Estàn dispuestas en forma de pentagrama invertido. Simboliza el triunfo de la materia sobre el espìritu. Seis de Copas Placer. Tipharet en el palo de Agua. Sol en Escorpio. Los tallos de los lotos estàn agrupados en un elaborado movimiento. Agua cae a chorros en su interior; estàn llenas pero no se desbordan. Eso significa la influencia del Sol en el Agua. Su poder feroz, pero equilibrado, opera en una forma de putrefacciòn, que es la base de la fertilidad. Siete de Copas Corrupciòn. Netzach en el palo de Agua. Venus en Escorpio. Los lotos se han vuelto venenosos; fango verde fluye de ellos . Las copas estàn arregladas en dos triàngulos descendentes, con la copa inferior mucho màs grande que las restantes. Significa explendor externo y corrupciòn interna. Ocho de Copas Indolencia. Hod en el palo de Agua. Saturno en Piscis. Los lotos estàn doblados hacia abajo; las copas son poco profundas, viejas y se hallan dispuestas en tres filas. Las de la fila superior se encuentran vacìas. Nueve de Copas Felicidad. Yesod en el palo de Agua. Jùpiter en Piscis. Las nueve copas estàn perfectamente ordenadas en forma de Cuadrado. Estàn llenas y desbordando Agua. Este es el aspecto màs benèfico del Agua. Diez de Copas Saciedad. Malkuth en el palo de Agua. Marte en Piscis. Las copas estàn perfectamente ordenadas como un Àrbol de la Vida; mas son inestables y derraman el Agua del gran Loto que cuelga sobre ellas. Èsto simboliza la fuerza violenta y destructiva que inevitablemente ataca toda supuesta perfecciòn. Caballero de Copas Rige de 20º de Acuario a 20º de Piscis, incluyendo la mayor parte de Pegasus. Parte ìgnea del Agua, el poder de soluciòn del Agua. La carta ilustra un guerrero de armadura negra, con alas blancas, sobre un caballo blanco. Tiene en su mano una copa de la cual sale un cangrejo, sìmbolo del Agua en agresiòn. El pavo real representa la brillantez del Agua. Reina de Copas Rige de 20º de Gèminis a 20º de Càncer. La parte acuosa del Agua, su poder de recepciòn y reflexiòn. Està entronizada sobre el agua en calma y porta una copa en forma de concha que contiene un cangrejo de rìo. En la otra mano sostiene el Loto de Isis. Prìncipe de Copas Rige de 20º de Libra a 20ºde Escorpio. La parte aèrea del Agua, su elasticidad, volatilidad y la energìa del vapor. En esta carta èl se encuentra sentado en un carro rodeado por nubes y tirado por un àguila. Èl lleva un loto y una copa de la cual sale una serpiente en espiral. Princesa de Copas Rige otro cuadrante. Parte terrosa del Agua, su facultad de cristalizaciòn; tambièn su poder de dar sustancia a la idea para mantener la vida y formar parte de la combinaciòn quìmica. Està ilustrada como una figura danzante que tiene como cimera un cisne con las alas desplegadas. Lleva una copa que contiene una tortuga. El delfìn simboliza El Poder de la Creaciòn. ESPADAS As de Espadas Esta carta representa el primero de los elementos mezclados; es el resultado de la uniòn de Fuego y Agua. En el centro, implicando realeza, se encuentra una espada que penetra una corona de doce rayos, los doce signos del Zoodìaco. Dos de Espadas Paz. Chokmah en el palo de Aire. Luna en Libra. En esta carta se encuentran dos espadas cruzadas y unidas por una rosa azul de cinco pètalos que emite rayos blancos, produciendo asì un patròn geomètrico que sugiere energìa màs allà del trastorno del intelecto. Tres de Espadas Aflicciòn. Binah en el palo de Aire. Saturno en Libra. Esta carta muestra la gran Espada del mago, con la punta en lo alto, cortando el punto de contacto de dos espadas cortas. El fondo muestra cristalizaciòn y tormenta. Èsto es las tinieblas del Gran Mar. Cuatro de Espadas Tregua. Chesed en el palo de Aire. Las cuatro espadas en esta carta se hallan en las esquinas de una cruz de San Andrès. Sus puntas estàn envainadas en una rosa de cuarenta y nueve pètalos. Esto significa el establecimiento del dogma y la convenciòn en la esfera del intelecto. Cinco de Espadas Derrota. Geburah en el palo de Aire. Venus en Acuario. Las empuñaduras de las espadas forman un pentagrama invertido; cada una es diferente, las hojas estàn dobladas o melladas, lo que simboliza al intelecto debilitado por el sentimiento. Seis de Espadas Ciencia. Tipharet en el palo de Aire. Mercurio en Acuario. Las decoradas empuñaduras de las espadas forman, en esta carta, un hexagrama. Sus puntas rozan los pètalos exteriores de una rosa roja sobre una cruz dorada de seis cuadrados. El equilibrio perfecto de las cualidades mentales y morales, difìcilmente obtenidas o imposibles de mantener, proporciona la idea de la Ciencia. Siete de Espadas Inutilidad. Netzach en el palo de Aire. Luna en Acuario. La Crta ilustra seis espadas con las empuñaduras en formaciòn de media luna. Sus puntas inciden en la hoja de una espada mucho màs grande que apunta hacia arriba. Aquì se describe vacilaciòn y compromiso. Ocho de Espadas Interferencia. Hod en el palo de Aire. Jùpiter en Gèminis. El centro de la carta contiene dos largas espadas apuntando hacia abajo mientras seis màs pequeñas, que sugieren armas orientales, las cruzan, tres por cada lado. La carta sugiere falta de persistencia en asuntos del intelecto e interferencia accidental. Nueve de Espadas Crueldad. Yesod en el palo de Aire. Las nueve espadas son de tamaños diferentes y apuntan hacia abajo; sangre envenenada gotea de sus melladas puntas. En el fondo podemos observar làgrimas y formas cristalinas. En esta carta el intelecto es reemplazado por la pasiòn despiadada. Diez de Espadas Ruina. Malkuth en el palo de Aire. Sol en Gèminis. Las espadas estàn ordenadas en el Àrbol de la Vida, mas las puntas de la Una a la Cinco y de la Siete a la Nueve destrozan la espada central, que representa al Sol y al Corazòn. El fondo està ardiendo con explosiva destrucciòn. Las carta significa razòn enloquecida y tumulto de mecanismos desalmados. Caballero de Espadas Rige de 20º de Tauro a 20º de Gèminis. La parte ìgnea del Aire, viento y tormenta; la fuerza violenta del movimiento aplicada a un elemento manejable. Està representado por un guerrero con casco que tiene un ala giratoria, montando un furioso corcel. Lleva una espada y un puñal. Reina de Espadas Rige de 20º de Virgo a 20º de Libra. La parte acuosa del Aire, su elasticidad y poder de transmisiòn. Està entronizada sobre las nubes, su yelmop tiene la cabeza de un niño. En una mano empuña una espada; con la otra mano sostiene la cabeza de un hombre. Ella representa la percepciòn clara de la Idea, la Liberadora de la Mente. Prìncipe de Espadas Rige de 20º de Capricornio a 20º de Acuario. La parte aèrea del Aire. Esta carta simboliza el intelecto. El prìncipe està sentado en un carro arrastrado por hadas semejantes a niños. Princesa de Espadas Rige el tercer cuadrante. La parte terrosa del Aire, la fijaciòn de lo volàtil o materializaciòn de la Idea. En esta carta ella aparece delante de un altar profanado y en su cabeza porta un yelmo con una medusa. DISCOS As de Discos Representa al ùltimo de los sìmbolos femeninos; es la hermana gemela del Agua y, ademàs, su novia. No solamente es Tierra, sino materia misma. Por contrtaposiciòn, el disco es un sìmbolo giratorio del espacio. El disco es alado, para indicar asì su origen espiritual. Dos de Discos Cambio. Chokmah en el palo de Tierra. Jùpiter en Capricornio. La carta muestra dos pentàculos, uno superpuesto al otro, que son los sìmbolos chinos del Yang y el Yin. A su alrededor se halla una serpiente verde que asume la forma del 8. Esta carta simboliza la doctrina: El cambio es el soporte de la Estabilidad. Tres de Discos Labor. Binah en el palo de Tierra. Merte en Capricornio. Esta carta muestra una piràmide vista desde arriba. La base està formada por tres ruedas, las cuales simbolizan el Mercurio, el Azufre y la Sal; Sattvas, Rajas y Tamas; Aleph, Shin y Mem. Significa el establecimiento material de la Idea del Universo. Cuatro de Discos Poder. Chesed en el palo de Tierra. Sol en Capricornio. Los discos son muy grandes y sòlidos; sugieren una fortaleza. La carta representa Ley y Orden mantenidos por la vigilancia constante. Cinco de Discos Preocupaciòn. Geburah en el palo de Tierra. Mercurio en Tauro. Representa los cinco discos de un pentagrama invertido. El efecto general es de tensiòn; sin embargo, el sìmbolo es de inacciòn largamente continua. Su significado natural es de Inteligencia aplixcada a la Labor. Seis de Discos Èxito. Tipharet en el palo de Tierra. Luna en Tauro. Los discos se hallan en un Hexagrama. Los palanetas estàn ordenados en su atribuciòn usual; en el centro el Sol como Rosa y Cruz. Simboliza el establecimiento armònico de la Energìa de los elementos. Siete de Discos Fracaso. Netzach en el palo de Tierra. Saturno en Tauro. Los discos se hallan arreglados como en la figura geomàntica Rubeus y representan los frutos de un gran àrbol. Significa inteligencia aplicada a asuntos materiales. Ocho de Discos Prudencia. Hod en el palo de Tierra. Sol en Virgo. Los discos estàn ordenados como la figura geomàntica Populus y representan los frutos de un àrbol grande. Significa inteligencia aplicada a asuntos materiales. Nueve de Discos Ganancia. Yesod en el palo de Tierra. Venus en Virgo. Tres discos estàn dispuestos como un triàngulo equilàtero con el vèrtice hacia arriba y rodeados por un anillo. Seis discos grandes forman un hexàgono. Esto significa la multiplicaciòn de la Palabra original, la combinaciòn de buena suerte y buena administraciòn. Diez de Discos Riqueza. Malkuth en el palo de Tierra. Mercurio en Virgo. Los discos se han convertido en monedas que estàn arregladas en la forma del Àrbol de la Vida, siendo el Dècimo disco el màs grande. La imagen indica la futilidad de la ganancia material. Caballero de Discos Rige de 20º de Leo a 20º de Virgo. La parte ìgnea de la Tierra. Montañas, terremotos, gravitaciòn y actividad de la Tierra como productora de Vida. Èl està vestido como guerrero y su yelmo està coronado con un ciervo. Està armado con un mayal, lleva un disco excepcionalmente grande y està montado sobre un caballo percheròn. Reina de Discos Rige de 20º de Sagitario a 20º de Capricornio. Parte acuosa de la Tierra, o fertilidad. Està entronizada en medio de la vegetaciòn y coronada por los cuernos espirales del markhor. Su cetro està rematado por un cubo; con su brazo izquierdo sostiene su adecuado disco: una esfera de cìrculos y curvas. Representa ambiciòn de la materia por tomar parte en la obra de la Creaciòn. Prìncipe de Discos Rige de 20º de Aries a 20º de Tauro. Parte aèrea de la Tierra, o florecimiento y fructificaciòn de dicho elemento. Està sentado en una carroza arrastrada por un toro; èl lleva un disco que se asemeja a una esfera marcada con sìmbolos matemàticos. En su otra mano tiene un cetro rematado en cruz. La carta simboliza la funciòn de producir a partir de la Tierra, la vegetaciòn que es la sustancia del Espìritu mismo. Princesa de Discos Rige un cuarto cuadrante de los cielos en torno a Kether. Parte terrosa de la Tierra, el elemento en el momento de la transfiguraciòn. Ella se encuentra de pie; como cimera lleva la cabeza del carnero; su cetro penetra la tierra, donde su extremo se convierte en un diamante. Detràs, se encuentra un bosquecito de àrboles y un altar que se asemeja a un haz de trigo. Ella sostiene un disco cuyo centro es el ideograma chino que denota la fuerza espiral gemela de la Creaciòn en perfecto equilibrio.