MÁS ESPAÑOL IEEE Std 80 – 2013 Guía IEEE para la Seguridad en el Aterrizamiento de Subestaciones de CA ESPAÑOL (TRADUCCIÓN PARCIAL) IEEE POWER AND ENERGY SOCIETY Auspiciado por el Subcomité de Subestaciones IEEE 3 Park Avenue New York, NY 10016-5997 USA IEEE Std 80TM – 2013 (Revisión de IEEE Std 80 – 2000/ Incorpora IEEE Std 80 – 2013/ Cor 1 – 2015 IEEE Std 80™-2013 (Revisión de IEEE Std 80-2000/ Incorpora IEEE Std 80-2013/Cor 1-2015) Guía IEEE para la Seguridad en el Aterrizamiento de Subestaciones de CA ESPAÑOL Auspiciado por Substations Committee of the IEEE Power and Energy Society Aprobada el 11 de diciembre de 2013 IEEE – SA Standard Board Traducida al español del original en inglés, por Numa Pompilio Jiménez, Universidad de El Salvador, Mejicanos, El Salvador, 2016. 2 Copyrights and permissions: Annex E translated by T. W. Stringfield from Koch, W., “Erdungsmassnahmen fur Hochstspannungsanlagen mit Electrotechnische Zeitschrift, vol. 71, no. 4, pp. 8–91, Feb. 1950. Geerdetem Sternpunkt,” Annex F is taken from Dawalibi, F., and Mukhedkar, D., “Parametric analysis of grounding systems,”IEEE Transactions on Power Apparatus and Systems, vol. PAS-98, no. 5, pp. 1659–1668, Sept./Oct. 1979; and Dawalibi, F., and Mukhedkar, D., “Influence of ground rods on grounding systems,” IEEE Transactions on Power Apparatus and Systems, vol. PAS-98, no. 6, pp. 2089–2098, Nov./Dec. 1979. Annex G translated by T. W. Stringfield from Koch, W., “Erdungsmassnahmen fur Hochstspannungsanlagen mit Geerdetem Sternpunkt,” Electrotechnische Zeitschrift, vol. 71, no. 4, pp. 8–91, Feb. 1950. Resumen: Esta guía está primariamente interesada con las subestaciones CA en intemperie, ya sea convencional o aislada en gas. Estas incluyen subestaciones de distribución, transmisión y de plantas generadoras. Con la precaución apropiada, los métodos descritos aquí son aplicables a porciones en el interior de tales subestaciones, o a subestaciones que están completamente en el interior. Ningún intento se ha hecho para cubrir los problemas peculiares a subestaciones de DC. Un análisis cualitativo de los efectos de los transitorios de rayos está más allá del enfoque de esta guía. Palabras clave: redes de tierra, puesta a tierra IEEE 80TM, diseño de subestación, puesta a tierra de subestación. The Institute of Electrical and Electronics Engineers, Inc. 3 Park Avenue, New York, NY 10016-5997, USA Copyright © 2015 by The Institute of Electrical and Electronics Engineers, Inc. Todos los derechos reservados. Publicado el 15 de Mayo de 2015. IEEE es una marca registrada en the U.S. Patent & Trademark Office, owned by The Institute of Electrical and Electronics Engineers, Incorporated. National Electrical Safety Code and NESC are registered trademarks in the U.S. Patent & Trademark Office, owned by The Institute of Electrical and Electronics Engineers, Incorporated. PDF: ISBN 978-0-7381-8850-8 STD98495 Impreso: ISBN 978-0-7381-8851-5 STDPD98495 IEEE prohíbe la discriminación, acoso y la intimidación. Para más información, visite: http://www.ieee.org/web/aboutus/whatis/policies/p9-26.html. 3 Introducción Esta introducción no es parte de la IEEE Std 80-2013, Guía de la IEEE para la Seguridad en el Aterrizamiento de Subestaciones CA Esta quinta edición representa la tercer mayor revisión de esta guía desde su primera publicación en 1961. Las previas ediciones extendieron las ecuaciones para el cálculo de los voltajes de paso y de toque para incluir las redes con forma de L y con forma de T; ellos introdujeron curvas para ayudar a determinar el factor de división de corriente, cambiando el criterio de selección de conductores y conexiones, y proporcionando más información sobre la interpretación de las mediciones de resistividad; y agregando la discusión de suelos multi-capas. Esta edición introduce los cálculos para determinar TCAP para materiales no listados en la Tabla 1. Esta información puede ser usada para calcular TCAP para diferentes combinaciones de electrodos bi-metálicos usados en los sistemas de puesta a tierra. Esta edición también introduce evaluaciones comparativas (benchmarks en inglés). La evaluación comparativa tiene dos propósitos. El primero, que la evaluación comparativa confronta las ecuaciones de la IEEE Std 80 a software de diseño de redes de tierra disponibles comercialmente. Segundo, la evaluación comparativa proporciona a los usuarios de software una manera de verificar su entendimiento del software. La quinta edición continua construyendo sobre 50 años de trabajo dedicado por miembros del grupo de trabajo AIEE Working Group 56.1 y de los IEEE Working Groups 69.1, 78.1 y D7. Como es requerido por la IEEE Std 80-2013/Cor 1-2015, se han hecho correcciones a la Cláusula 11, Cláusula 17, Anexo C, Anexo H también como en la Tabla 1 y Tabla 2; dos ecuaciones que siguen a la Figura 45; Tabla H.5 que fue reemplazada por una nueva, y la Tabla H.6 hasta la Tabla H.10 que fueron agregadas. 4 Contenido 1. 2. 3. 4. 5. 6. 7. 8. 9. 10. 11. 12. 13. 14. 15. 16. 17. 18. 19. 20. Descripción general Referencias normativas Definiciones Seguridad en el Aterrizamiento Rango de corriente tolerable Límite de la corriente tolerable por el cuerpo humano Circuito de tierra accidental Criterio del voltaje tolerable Principales consideraciones de diseño Consideraciones especiales para subestaciones aisladas en gas (GIS) Selección de conductores y conexiones Características del suelo Estructura del suelo y selección Evaluación de la resistencia de tierra Determinación de la corriente máxima de la cuadrícula Diseño del sistema de tierra Áreas especiales de interés Construcción de un sistema de tierra Mediciones de campo en un sistema de tierra construido Modelos de escala física Anexo A (informativo) Bibliografía Anexo B (informativo) Cálculos de ejemplo Anexo C (informativo) Análisis gráfico y aproximado de la división de corriente Anexo D (informativo) Ecuaciones simplificadas de toque y de paso Anexo E (informativo) Modelo equivalente de suelo uniforme para suelos no uniformes Anexo F (informativo) Análisis paramétrico de sistemas de tierra Anexo G (informativo) Métodos de puesta a tierra para estaciones de alto voltaje con neutros puestos a tierra 5 Guía IEEE para la Seguridad en el Aterrizamiento de Subestaciones de CA 1. Descripción general 1.1 Enfoque Esta guía se ocupa principalmente de subestaciones de corriente alterna en la intemperie, ya sea convencional o aislada en gas. Están incluidas subestaciones de distribución, transmisión y plantas generadoras. Con la debida precaución, los métodos descritos en el presente documento son aplicables a las porciones interiores de dichas subestaciones, o para las subestaciones que son totalmente en el interior también. No se hace ningún intento de cubrir los problemas de puesta a tierra peculiares a las subestaciones de corriente continua. También está más allá del alcance de esta guía el análisis cuantitativo de los efectos de los rayos. 1.2 Propósito La intención de esta guía es proporcionar orientación e información pertinente a las prácticas de puesta a tierra seguras en el diseño de subestaciones de corriente alterna. Los propósitos específicos de esta guía son: a) Establecer, como fundamento para el diseño, los límites de seguridad de las diferencias de potencial que puedan existir en una subestación en condiciones de falla entre los puntos que pueden ser contactados por el cuerpo humano. b) Revisar las prácticas de puesta a tierra en la subestación, con especial referencia a la seguridad, y el desarrollo de criterios de seguridad para el diseño. c) Proporcionar un procedimiento para el diseño de sistemas de tierra prácticos, basados en estos criterios. d) Desarrollar métodos analíticos como una ayuda para el entendimiento y solución de problemas típicos de gradiente de voltaje. 6 e) Proporcionar puntos de referencia sobre casos para comparar los resultados de las ecuaciones de la IEEE Std 80™ y de programas software disponibles comercialmente. El concepto y el uso de criterios de seguridad se describen en la Cláusula 1 hasta la Cláusula 8, los aspectos prácticos de diseño de un sistema de puesta a tierra están cubiertos en la cláusula 9 hasta la Cláusula 13, y los procedimientos y técnicas de análisis para la evaluación del sistema de puesta a tierra (en términos de criterios de seguridad) se describe en la Cláusula 14 a la Cláusula 20. El material de apoyo se organiza del anexo A al anexo H. Esta guía se refiere principalmente a las prácticas de puesta a tierra de seguridad a frecuencia industrial en el rango de 50 Hz a 60 Hz. Los problemas propios de las subestaciones de corriente continua y los efectos de los transitorios de rayos están más allá del alcance de esta guía. Un sistema de puesta a tierra diseñado como se describe en el presente documento, sin embargo, proporcionará cierto grado de protección contra los frentes de ondas entrando en la subestación y pasando al suelo a través de su tierra. 2. Referencias normativas Los siguientes documentos referenciados son indispensables para la aplicación de este documento (es decir, deben ser comprendidos y utilizados, por lo que cada documento de referencia se cita en el texto y su relación con este documento se explica). Para las referencias con fecha, sólo se aplica la edición citada. Para referencias sin fecha, aplica la última edición del documento de referencia (incluyendo cualquier modificación o corrección). Esta guía se utilizará en conjunto con la siguiente publicación. IEEE Std 81™ IEEE Guide for Measuring Earth Resistivity, Ground Impedance, and Earth Surface Potentials of a Grounding System. 3. Definiciones Para propósito de este documento, los siguientes términos y definiciones aplican. El IEEE Standards Dictionary Online debe ser consultado para términos no definidos en esta cláusula. Electrodo auxiliar de tierra: Un electrodo de tierra con cierto diseño o restricciones operativas. Su principal función puede ser la de conducir la corriente de falla a tierra hacia el suelo. Encerramiento continuo: Un encerramiento de bus en el cual las secciones consecutivas del gabinete del mismo conductor de fase están interconectadas para proporcionar un camino de corriente continua a través de toda la longitud del encerramiento. La unión equipotencial cruzada, la conexión de los encerramientos de las otras fases, son hechas solamente en los extremos de la instalación y en unos puntos intermedios seleccionados. Desplazamiento de DC: Es la diferencia entre la onda de corriente simétrica y la corriente real durante una condición de un transitorio del sistema. Matemáticamente, la corriente de falla real puede ser dividida en dos partes, una componente alterna simétrica y una componente uni7 direccional (DC). La componente uni-direccional puede ser de cualquier polaridad, pero la polaridad no cambiará, y disminuirá en alguna tasa predeterminada. Factor de decremento: Un factor de ajuste que se utiliza junto con el parámetro de corriente de falla a tierra simétrica en los cálculos de tierra orientados a la seguridad. Determina el equivalente RMS de la onda de corriente asimétrica para una duración de falla dada, tf, lo que representa el efecto de desplazamiento inicial de DC y su atenuación durante la falla. Corriente de falla asimétrica efectiva: El valor RMS de la onda de corriente asimétrica, integrada en el intervalo de duración de la falla (ver Figura 1). Donde IF es la corriente de falla asimétrica efectiva en A If es la corriente de falla a tierra simétrica en A Df es el factor de decremento Figura 1 – Relación entre los valores reales de la corriente de falla y los valores de IF, If y Df para la duración de la falla tf 8 Corrientes de encerramiento: corrientes que resultan de las tensiones inducidas en el recinto metálico por las corrientes que fluyen en el conductor encerrado. Factor de división de corriente: Un factor que representa la relación la inversa de la corriente de falla simétrica a la porción de la corriente que fluye entre la red de tierra y el suelo circundante. Donde Sf es el factor de división de corriente Ig es la corriente de cuadrícula simétrica RMS en A I0 es la corriente de falla de secuencia cero en A NOTA - En realidad, el factor de división de corriente cambia durante la duración de la falla, en base a las tasa de descomposición de las diferentes contribuciones de falla y la secuencia de interrupción de las operaciones del dispositivo. Sin embargo, a los efectos de calcular el valor de diseño de la corriente cuadrícula y la corriente de cuadrícula simétrica según las definiciones de la corriente de cuadrícula simétrica y la corriente máxima de la cuadrícula, la relación se supone constante durante toda la duración de una falla determinada Subestación aislada en gas (GIS): Un ensamblaje de componentes múltiples compacta, encerrado en una carcasa metálica puesta a tierra en la que el medio de aislamiento primario es un gas, y que normalmente consiste en buses, los aparatos de maniobra y equipo asociado (subconjuntos). Tierra: Una conexión conductora, ya sea intencional o accidental, por el cual un circuito eléctrico o equipo se conecta al suelo o a algún cuerpo conductor de magnitud relativamente grande que sirve en lugar de la tierra. Puesto a tierra: Un sistema, circuito o aparato dotado de una tierra (s) a los efectos de establecer un circuito de retorno por tierra y para mantener su potencial aproximadamente al potencial de la tierra. Corriente de tierra: Una corriente que entra o sale de la tierra o su equivalente que sirve como tierra. Electrodo de tierra: Un conductor incrustado en la tierra y usado para recolectar la corriente de tierra, o la disipación de corriente de tierra hacia el suelo. Red de tierra: Un sistema de electrodos de tierra interconectado arreglado en un patrón sobre un área específica y enterrado por debajo de la superficie del suelo. NOTA – Las redes enterradas horizontalmente cerca de la superficie de la tierra son también eficaces en el control de los gradientes de potencial superficiales. Una cuadrícula típica por lo general se complementa con una serie de varillas de tierra y puede ser conectada además a los electrodos de tierra auxiliares para reducir su resistencia con respecto a tierra remota. Alfombra de tierra: Es una placa metálica sólida o un sistema de conductores desnudos espaciados estrechamente que están conectados y a menudo localizados a poca profundidad y arriba de la red de tierra o en otra parte de la superficie del terreno, para obtener un nivel extra 9 de protección que minimiza el peligro de la exposición a altos voltajes de paso o de toque en un área de operación crítica o en lugares que son usados por la gente. Las rejillas metálicas de tierra, colocada en la tierra o sobre la superficie, o malla de alambres ubicadas directamente sobre el material superficial son formas comunes de una alfombra de tierra. Elevación del potencial de tierra (GPR): El potencial eléctrico máximo que un electrodo de tierra puede alcanzar respecto a un punto de conexión a tierra distante que se supone se encuentra el potencial de tierra remoto. Este voltaje, GPR, es igual a la corriente máxima de tierra, multiplicado por la resistencia de la red de tierra. Nota – Bajo condiciones normales, el equipo eléctrico puesto a tierra opera cerca del potencial de tierra cero. Eso es, el potencial de un conductor neutro puesto a tierra es casi idéntico al potencial de la tierra remota. Durante una falla a tierra la porción de la corriente de falla que es conducida por la red de tierra de la subestación hacia el suelo causa un incremento del potencial de la red de tierra con respecto a la tierra remota. Circuito de retorno a tierra: Un circuito en el que se utiliza la tierra o un cuerpo conductor equivalente para completar el circuito y permitir la circulación de corriente desde o hacia su fuente de corriente. Sistema de puesta a tierra: Comprende todas las instalaciones de puesta a tierra interconectadas en un área específica. Bus principal de tierra: Un conductor o sistema de conductores previstos para la conexión de todos los elementos metálicos designados de la subestación aislada en gas (GIS) con un sistema de puesta a tierra de la subestación. Corriente de cuadrícula máxima: Un valor de diseño de la corriente de cuadrícula máxima definida como sigue: Donde IG es la corriente de cuadrícula máxima en A Df es el factor de decremento para la duración completa de la falla tf, dado en s Ig es la corriente de cuadrícula simétrica en A Voltaje de malla: Es el voltaje de toque máximo dentro de una malla de una cuadrícula de tierra. Voltaje de toque de metal a metal: Es la diferencia de potencial entre los objetos metálicos o estructuras dentro de una subestación que puede ser empuentada por un contacto directo de mano a mano o de mano a pie. NOTA – El voltaje de toque de metal a metal entre objetos metálicos o estructuras unidas a la cuadrícula de tierra se supone que es insignificante en las subestaciones convencionales. Sin embargo, puede ser sustancial el voltaje de toque de metal a metal entre objetos o estructuras metálicas unidas a la red de tierra a objetos metálicos internos al sitio de la subestación, tal como 10 una cerca aislada pero no unida a la cuadrícula de tierra. En el caso de una subestación con aislamiento de gas (GIS), el voltaje de toque de metal a metal entre objetos metálicos o estructuras unidas a la red de tierra puede ser sustancial debido a fallas internas o corrientes inducidas en los encerramientos metálicos. En una subestación convencional, el peor voltaje de toque se encuentra por lo general a ser la diferencia de potencial entre una mano y los pies en un punto de máxima distancia de alcance. Sin embargo, en el caso de un contacto de metal a metal de mano a mano o de la mano a pies, ambas situaciones deben ser investigadas por las posibles peores condiciones de alcance. La Figura 12 y la Figura 13 ilustran estas situaciones para las subestaciones aisladas en aire, y la Figura 14 ilustra estas situaciones en GIS. Encerramiento no continuo: Un recinto de bus con las secciones consecutivas de la carcasa del mismo conductor de fase eléctricamente aislados (o aislados el uno del otro), de modo que no puede fluir corriente más allá de cada sección del encerramiento. Electrodo de tierra primario: Un electrodo de tierra diseñado o adaptado para la descarga de la corriente de falla a tierra en el suelo, a menudo en un patrón de descarga específica, según sea necesario (o implícitamente pedido) por el diseño del sistema de puesta a tierra. Voltaje de paso: La diferencia en el potencial de la superficie que podría ser experimentada por una persona parada con los pies separados una distancia de 1 m sin contactar algún objeto conectado a tierra. Reactancia subtransitoria: Reactancia de un generador en el inicio de una falla. Esta reactancia se utiliza en el cálculo de la corriente de falla simétrica inicial. La corriente disminuye de forma continua, pero se supone que es constante en este valor como un primer paso, con una duración aproximada 0.05 s después de una falla aplicada. Material superficial: Un material instalado sobre el suelo que consiste en, pero no limitado a, roca o piedra triturada, asfalto o materiales artificiales. El material superficial, dependiendo de la resistividad del material, puede afectar significativamente la corriente por el cuerpo para los voltajes de paso y de toque que involucran los pies de la persona. Corriente de cuadrícula simétrica: La parte de la corriente de falla a tierra simétrica que fluye entre la cuadrícula de tierra y el suelo circundante. Puede expresarse como Donde Ig es la corriente de cuadrícula simétrica en A If es la corriente de falla a tierra simétrica RMS en A Sf es el factor de división de corriente de falla Corriente simétrica de falla a tierra: El valor máximo RMS de la corriente de falla simétrica después del instante de inicio de la falla a tierra. Como tal, representa el valor RMS de la componente simétrica en el primer medio ciclo de una onda de corriente que se desarrolla después del instante de la falla en el tiempo cero. Para fallas de fase a tierra 11 Donde If(0+) es la corriente de falla a tierra simétrica RMS inicial I0’’ es el valor RMS de la corriente simétrica de secuencia cero que desarrolla inmediatamente después del instante de la iniciación de falla, reflejando la reactancia del subtransitorio de las máquinas rotativas contribuyendo a la falla Esta corriente RMS de falla simétrica se muestra en una notación abreviada como If, o sólo se menciona como 3I0. La razón subyacente de la segunda notación es que, para los propósitos de esta guía, la corriente de defecto simétrica inicial se supone que se mantiene constante durante toda la duración de la falla. Voltaje de toque: La diferencia de potencial entre el incremento de potencial de tierra (GPR) de una cuadrícula o sistema de tierra y el potencial de superficie en el punto en que una persona puede estar de pie, mientras que, al mismo tiempo tiene una mano en contacto con una estructura conectada a tierra. Las mediciones de voltaje de toque pueden ser en "circuito abierto" (sin la resistencia del cuerpo equivalente incluidas en el circuito de medición) o en "circuito cerrado" (con la resistencia del cuerpo equivalente incluidas en el circuito de medición). Voltaje transferido: Un caso especial del voltaje de toque cuando un voltaje es transferido dentro o fuera de la subestación desde o hacia un punto remoto externo al sitio de la subestación. Voltaje de encerramiento transitorio (TEV): Es un fenómeno transitorio muy rápido, que se encuentra en el encerramiento conectado a tierra de sistemas de subestación aislada en gas (GIS). Típicamente, las conexiones a tierra son demasiado largas (inductivas) a las frecuencias de interés para prevenir eficazmente la aparición de TEV. El fenómeno también se conoce como elevación transitoria de potencial de tierra (TGR) o elevación del potencial de tierra transitoria (TGPR). Transitorio muy rápido (VFT): Una clase de transitorios generados internamente dentro de una subestación aislada en gas (GIS) que se caracteriza por su corta duración y muy alta frecuencia. VFT es generada por el rápido colapso del voltaje durante la ruptura del gas aislante, ya sea a través de los contactos de un dispositivo de conmutación o línea a tierra durante una falla. Estos transitorios pueden tener tiempos de subida del orden de nanosegundos, lo que implica un contenido de frecuencia que se extiende hasta alrededor de 100 MHz. Sin embargo, las frecuencias de oscilación dominantes, que están relacionadas con longitudes físicas de bus GIS, son por lo general en el rango de 20 MHz a 40 MHz. Relación X/R: Es la relación de la reactancia a la resistencia del sistema. Es indicativa de la tasa de decaimiento de cualquier desplazamiento de DC. Una relación grande X/R corresponde a grandes constantes de tiempo y una tasa lenta de decaimiento. 4. Seguridad en el Aterrizamiento 4.1 Problema básico 12 En principio, un diseño seguro de puesta a tierra tiene los siguientes dos objetivos: Proporcionar medios para llevar las corrientes eléctricas hacia la tierra, en condiciones normales y de fallo sin exceder los límites de operación y del equipo o que afecten negativamente a la continuidad del servicio. Reducir el riesgo de una persona en la proximidad de las instalaciones conectadas a tierra que están expuestas al peligro de choque eléctrico crítico. Un enfoque práctico para la puesta a tierra segura de esta preocupación y se esfuerza para controlar la interacción de dos sistemas de puesta a tierra, de la siguiente manera: La tierra intencional, que consiste en electrodos de tierra enterrados a cierta profundidad por debajo de la superficie del suelo. La tierra accidental, temporal establecida por una persona expuesta a un gradiente de potencial en las proximidades de una instalación de puesta a tierra. Las personas a menudo asumen que cualquier objeto conectado a tierra puede ser tocado con seguridad. Una baja resistencia a la tierra de la subestación no es, en sí misma, una garantía de seguridad. No existe una relación simple entre la resistencia del sistema de tierra en su conjunto y la corriente de choque máxima a la que una persona puede estar expuesta. Por lo tanto, una subestación de relativamente baja resistencia a tierra puede ser peligrosa, mientras que otra subestación con muy alta resistencia puede ser menos peligrosa o puede hacerse menos peligrosa con un diseño cuidadoso. Por ejemplo, si una subestación se alimenta desde una línea aérea sin cable de guarda o cable neutro, una baja resistencia de tierra es importante. La mayoría, o la totalidad, de la corriente total de falla a tierra entra en la tierra provocando una subida empinada del potencial de tierra local [véase la figura 2 (a)]. Si se utiliza un cable blindado, cable neutro, bus con aislamiento de gas, o el alimentador de cable subterráneo, etc., una parte de la corriente de falla retorna a través de este camino metálico directamente a la fuente. Este enlace metálico proporciona una ruta de baja impedancia en paralelo al circuito de retorno, la elevación del potencial de tierra local es en última instancia, de menor magnitud [véase la Figura 2 (b)]. En cualquier caso, el efecto de la parte de corriente de falla que entra a tierra dentro del área de la subestación debe analizarse más. Si la geometría, la ubicación de los electrodos de tierra, las características locales del suelo y otros factores contribuyen a un gradiente de potencial excesivo en la superficie de la tierra, el sistema de puesta a tierra puede ser insuficiente a pesar de su capacidad para llevar la corriente de falla en magnitudes y duraciones permitidas por los relés de protección. Cláusula 5 a la cláusula 8 detalla los principales supuestos y criterios que permiten la evaluación de los factores importantes para reducir el riesgo para la vida humana. 13 Figura 2 – Subestación fallada con o sin múltiples tierras 14 4.2 Condiciones de peligro Durante las condiciones típicas de falla a tierra, el flujo de corriente a tierra producirá gradientes de potencial dentro y alrededor de una subestación. La Figura 3 muestra el efecto de una subestación con una simple red de tierra rectangular en el suelo homogéneo. Figura 3 – Contornos equipotenciales de una red de tierra típica Si no se toman las precauciones apropiadas en el diseño, los gradientes de potencial máximo a lo largo de la superficie del suelo pueden ser de magnitud suficiente durante las condiciones de falla 15 a tierra para poner en peligro a una persona en la zona. Por otra parte, los voltajes peligrosos que se pueden desarrollar entre las estructuras puestas a tierra o las masas de los equipos y la tierra cercana. Las circunstancias que hacen posible los accidentes provocados por choque eléctricos pueden posiblemente incluir los siguientes: a) Corriente de falla a tierra relativamente alta en relación con el área de sistema de tierra y su resistencia a la tierra remota. b) La resistividad del suelo y la distribución de las corrientes de tierra de tal manera que los altos gradientes de potencial pueden producirse en los puntos en la superficie de la tierra. c) La presencia de una persona en un punto tal, en la hora y la posición que el cuerpo está empuentando dos puntos de alta diferencia de potencial. d) La ausencia de suficiente resistencia de contacto u otra resistencia en serie para limitar la corriente a través del cuerpo a un valor seguro bajo las circunstancias de a) a c). e) Duración de la falla y el contacto al cuerpo, y por lo tanto, del flujo de corriente a través del cuerpo humano durante un tiempo suficiente para causar daño en la intensidad de corriente dada. La relativa baja frecuencia de accidentes se debe en gran parte a la baja probabilidad de coincidencia de todas las condiciones desfavorables mencionadas anteriormente. 5. Rango de corriente tolerable Los efectos de una corriente eléctrica que pasa a través de las partes vitales del cuerpo humano dependen de la duración, la magnitud y frecuencia de esta corriente. La consecuencia más peligrosa de tal exposición es una condición cardíaca conocida como fibrilación ventricular, lo que resulta en la inmediata detención de la circulación sanguínea. 5.1 Efecto de la frecuencia Los seres humanos son muy vulnerables a los efectos de la corriente eléctrica a frecuencias de 50 Hz o 60 Hz. Las corrientes de aproximadamente 0,1 A pueden ser letales. La investigación indica que el cuerpo humano puede tolerar mayores corriente a 25 Hz y aproximadamente cinco veces valores más altos de corriente continua. En las frecuencias de 3000 Hz a 10 000 Hz, corrientes aún mayores pueden ser toleradas (Dalziel y Mansfield [B34] 4; Dalziel, Ogden, y Abbott [B37]). En algunos casos, el cuerpo humano es capaz de tolerar corrientes muy altas debidos a los rayos. La Comisión Electrotécnica Internacional proporciona curvas para las corrientes tolerables por el cuerpo como una función de la frecuencia y para corrientes de fuga capacitivas (IEC 60479-2 (1987 - 03) [B84]). Otros estudios de los efectos tanto de las corrientes continuas y corrientes de impulso oscilatorios están reportados en Dalziel [B26] [B28]. La información relativa a los problemas especiales de puesta a tierra de corriente continua está contenida en el informe de 1957 del Comité de Subestaciones AIEE [B22]. Los peligros de una descarga eléctrica producida por los efectos electrostáticos de líneas aéreas de transmisión son 16 revisados de la Parte 1 del informe de 1972 de la General Systems Subcommitee [B91]. Información adicional sobre los efectos electrostáticos de líneas aéreas de transmisión se puede encontrar en el capítulo 8 del libro de EPRI Transmission Line Reference Book 345 kB and Above [B59]. 5.2 Efecto de la magnitud y duración Los efectos fisiológicos más comunes de la corriente eléctrica en el cuerpo, establecido en orden con el aumento de la magnitud de corriente, son la percepción en el valor umbral de la corriente, la contracción muscular, pérdida del conocimiento, la fibrilación del corazón, el bloqueo nervioso de la respiración, y quemaduras (Geddes y Baker [B75]; IEC 60479 -1 (1994-1909) [B83]). La corriente de 1 mA se reconoce generalmente como el umbral de percepción; es decir, la magnitud de la corriente a la que una persona es capaz de detectar una ligera sensación de hormigueo en las manos o dedos causados por el paso de la corriente (Dalziel [B27]). Las corrientes de 1 mA a 6 mA, a menudo denominadas corrientes "de poder soltar" (let-go), aunque desagradables para sostener, en general, no ponen en peligro la capacidad de una persona de sostener un objeto con energía para controlar sus músculos y soltarlo. El experimento clásico de Dalziel con 28 mujeres y 134 hombres proporciona datos que indican un promedio de corriente de "poder soltar" de 10.5 mA para las mujeres y 16 mA para los hombres, y de 6 mA y 9 mA como los respectivos valores de umbral (Dalziel y Massogilia [B35]). En el rango de 9 mA a 25 mA, las corrientes pueden ser dolorosas y pueden que sea difícil o imposible de soltar los objetos energizados agarrados con la mano. Para corrientes aún mayores las contracciones musculares podrían dificultar la respiración. Estos efectos no son permanentes y desaparecen cuando se interrumpe la corriente, a menos que la contracción sea muy severa y la respiración se detenga durante algunos minutos en lugar de segundos. Todavía incluso en tales casos, a menudo responden a la resucitación (Dalziel [B30]). En el rango de 60 mA a 100 mA se alcanza la fibrilación ventricular, paro del corazón, o la inhibición de la respiración lo cual puede causar lesiones o la muerte. Una persona capacitada en resucitación cardiopulmonar (RCP) debe administrar RCP después de retirar la fuente de corriente y sea seguro hacerlo, hasta que la víctima pueda ser tratada en un centro médico (Dalziel [B31]; Dalziel y Lee [B32]). Por lo tanto, esta guía enfatiza la importancia del umbral de fibrilación. Si las corrientes de choque se pueden mantener por debajo de este valor mediante un sistema de puesta a tierra cuidadosamente diseñado, puede evitarse una lesión o la muerte. Como es presentado por Dalziel y otros (Dalziel, Lagen, y Thurston [B36]; Dalziel y Massogilia [B35]), la corriente que no fibrila de magnitud IB en duraciones que van entre 0.03 s a 3.0 s se relaciona con la energía absorbida por el cuerpo como se describe por la ecuación siguiente : Donde IB es la magnitud RMS de la corriente que pasa por el cuerpo en A 17 ts es la duración de la exposición en s SB es la constante empírica relacionada a la energía de choque eléctrico tolerada por un cierto porcentaje de la población Una mayor discusión de la Ecuación (6) es dada en la Cláusula 6. 5.3 Importancia del despeje de fallas de alta velociadad Teniendo en cuenta la importancia de la duración de la falla tanto en términos de la ecuación (6) e implícitamente tiene un factor de exposición a accidentes, el despeje de alta velocidad de fallas a tierra puede ser ventajoso por dos razones: a) La probabilidad de la exposición a una descarga eléctrica puede ser reducida por el rápido tiempo de despeje de fallas, en contraste con situaciones en las que las corrientes de falla podría persistir durante varios minutos o, posiblemente horas. b) Las pruebas y la experiencia demuestran que el riesgo de lesiones graves o la muerte puede ser reducida si la duración del flujo de corriente a través del cuerpo es muy breve. El valor de la corriente permitida puede, por lo tanto, estar basado en el tiempo de despeje de las protecciones primarias, o de la protección de respaldo. Un buen caso podría ser de utilizar el tiempo de eliminación primaria debido a la baja probabilidad combinada de mal funcionamiento del relevador y con todos los demás factores adversos necesarios para un accidente, tal como se describe en la Cláusula 4. Es más conservador elegir los tiempos de despeje del relevador de respaldo en la ecuación (6), ya que proporcionan un mayor margen de seguridad. En realidad, los altos gradientes de tierra de fallas suelen ser poco frecuentes, y los choques eléctricos con altos gradientes de tierra también son poco frecuentes. Además, ambos acontecimientos son a menudo de muy corta duración. Por lo tanto, no sería práctico diseñar contra los choques que no son más que dolorosos y que no causan un grave daño; es decir, para corrientes por debajo del umbral de fibrilación. 6. Límite de la corriente tolerable por el cuerpo humano La magnitud y duración de la corriente conducida a través del cuerpo humano a 50 Hz o 60 Hz debe ser menor que el valor que puede causar fibrilación ventricular del corazón. 6.1 Fórmula de la duración La duración para la cual una corriente de 50 Hz ó 60 Hz puede ser tolerada por la mayoría de la gente está relacionada con su magnitud, de acuerdo con la ecuación (6). Con base en los resultados de los estudios de Dalziel (Dalziel [B27]; Dalziel y Lee [B33]), se supone que el 99.5% de todas las personas puede soportar de forma segura, sin fibrilación ventricular, el paso de una corriente con magnitud y la duración determinada por la fórmula siguiente: 18 Donde, en adición a los términos previamente definidos en la ecuación (6) Dalziel encontró que la energía de choque a la que pueden sobrevivir el 99.5% de las personas con un peso aproximado de 50 kg (110 lb) da como resultado un valor de SB de 0.0135. Por lo tanto, k50 = 0.116 y la fórmula de la corriente del cuerpo permitida se convierte en: para pesos del cuerpo de 50 kg (8) La ecuación (8) resulta en valores de 116 mA para ts = 1 s y de 367 mA para ts = 0.1 s. Debido a que la ecuación (7) se basa en pruebas limitadas a una gama de entre 0.03 s y 3.0 s, es obvio que no es válida para duraciones muy cortas o largas. A través de los años, otros investigadores han sugerido otros valores de IB. En 1936 Ferris et al. [B67] sugirió 100 mA como el umbral de fibrilación. El valor de 100 mA se derivó de extensos experimentos en la Universidad de Columbia. En los experimentos, los animales que tienen pesos corporales y el corazón comparables a la de los seres humanos se sometieron a duraciones máximas de choque de 3 s. Algunos de los experimentos más recientes sugieren la existencia de dos umbrales diferentes: uno en que la duración de choque es más corta que un período de latido y otro para la duración de la corriente mayor a un latido del corazón. Para unos 50 kg (110 lb) en adultos, Biegelmeier [B8] [B10] propuso los valores umbral a 500 mA y 50 mA, respectivamente. Otros estudios sobre este tema se llevaron a cabo por Lee [B102] y Kouwenhoven [B98]. La ecuación para la corriente tolerable por el cuerpo desarrollado por Dalziel es la base para la derivación de voltajes tolerables utilizados en esta guía. 6.2 Suposiciones alternativas La corriente de fibrilación se supone que es una función del peso corporal individual, como se ilustra en la figura 4. La figura muestra la relación entre la corriente crítica y el peso del cuerpo para varias especies de animales (terneros, perros, ovejas y cerdos), y un 0.5 % del umbral común para los mamíferos. En la edición de 1961 de esta guía, las constantes SB y k en la ecuación (6) y la ecuación (7), se les dio como 0.0272 y 0.165, respectivamente, y se había supuesto válido para el 99.5% de todas las personas de alrededor de 70 kg (155 lb). Posteriores estudios de Dalziel [B29] y Dalziel y Lee [B33], en el que se basa la ecuación (7), conducen al valor alternativo de k = 0.157 y SB = 0.0246 que es aplicable a las personas que pesan 70 kg (155 lb). Así para pesos del cuerpo de 70 kg (9) 19 Los usuarios de esta guía pueden seleccionar k = 0.157, siempre que el peso promedio de la población puede esperarse que sea al menos de 70 kg. Figura 4 – Corriente fibrilante versus el peso del cuerpo para varios animales basados en una duración de 3 s de choque eléctrico La ecuación (7) indica que las corrientes del cuerpo mucho más altas se puede permitir donde dispositivos de protección de operación rápida pueden ser confiados en limitar la duración de la falla. Una decisión de juicio es necesaria en cuanto a si utilizar el tiempo de despeje de los relevadores primarios de alta velocidad, o el de la protección de respaldo, como la base para el cálculo. 20 6.3 Comparación de las ecuaciones de Dalziel con las curvas de Biegelmeier La comparación de la ecuación (8), la ecuación (9), y la curva en forma de Z de la corriente del cuerpo versus el tiempo desarrollado por Biegelmeier y que fue publicado por Biegelmeier y Lee [B9] se muestra en la Figura 5. La curva Z tiene un límite de 500 mA para cortos tiempos de hasta 0.2 s, y luego disminuye a 50 mA a 2.0 s y más allá. Usando la ecuación (8), la corriente tolerable por el cuerpo será menor que la dada por la curva Z de Biegelmeier para tiempos desde 0.06 s a 0.7 s. Figura 5 – Corriente del cuerpo versus el tiempo 6.4 Notas sobre el recierre El recierre después de una falla a tierra es práctica común en la operación moderna. En tales circunstancias, una persona puede ser sometida al primer choque sin daño permanente. A continuación, un único recierre automático instantáneo podría resultar en un segundo choque, iniciado dentro de menos de 0.33 s del inicio del primer choque. Este segundo choque, que se 21 produce después de un intervalo de tiempo relativamente corto antes de que la persona se haya recuperado, podría causar un accidente grave. Con el recierre manual, la posibilidad de la exposición a un segundo choque puede ser reducido debido a que el intervalo de tiempo de reconexión puede ser sustancialmente mayor. El efecto acumulativo de dos o más choques espaciados muy cerca no ha sido evaluado a fondo, pero puede ser razonable usar la suma de las duraciones de choque individual como el tiempo de una sola exposición. 7. Circuito de tierra accidental 7.1 Resistencia del cuerpo humano Para corrientes de DC y AC de 50 Hz ó 60 Hz, el cuerpo humano se puede aproximar por una resistencia. La trayectoria de la corriente típicamente considerada es de la mano a ambos pies, o de un pie a otro. La resistencia interna del cuerpo es de aproximadamente 300 Ω, mientras que los valores de resistencia del cuerpo incluyendo el rango de piel es de 500 Ω a 3.000 Ω, como se sugiere en Daziel [B27], Geddes y Baker [B75], Gieiges [B76], Kiselev [B97] y Osypka [B121]. La resistencia del cuerpo humano se reduce por el daño o punción de la piel en el punto de contacto. Como se ha mencionado en el punto 5.2, Dalziel [B35] llevó a cabo extensas pruebas con agua salada para humedecer las manos y los pies a fin de determinar las corrientes seguras de "poder soltar", con las manos y los pies mojados. Los valores obtenidos con 60 Hz para los hombres fueron los siguientes: la corriente era 9.0 mA; los voltajes correspondientes fueron 21.0 V de la mano a mano y 10.2 V de mano a los pies. Por lo tanto, la resistencia de corriente alterna para un contacto mano a mano es igual a 21.0 / 0.009 o 2,330 Ω, y la resistencia de la mano a pies es igual a 10.2 / 0.009 ó 1,130 Ω, sobre la base de este experimento. Por lo tanto, para los fines de esta guía, las siguientes resistencias, en serie con la resistencia del cuerpo, se asumen como sigue: a) Resistencia de contacto de manos y pies son igual a cero. b) Resistencia de guantes y zapatos son igual a cero. Un valor de 1000 Ω en la ecuación (10), que representa la resistencia de un cuerpo humano de la mano-a-pies y también de la mano-a-mano o de un pie al otro pie, se utilizará a lo largo de esta guía. 7.2 Caminos de la corriente a través del cuerpo Hay que recordar que la elección de un valor de la resistencia 1000 Ω se refiere a caminos tales como entre la mano y un pie o ambos pies, donde una parte importante de la corriente pasa a través de partes del cuerpo que contiene los órganos vitales, incluyendo el corazón. Es 22 generalmente aceptado que la corriente que fluye de un pie a otro es mucho menos peligrosa. En referencia a las pruebas realizadas en Alemania, Loucks [B103] mencionó que mucha más alta corriente ha sido usada del pie con pie que las corrientes de mano a pie para producir la misma corriente en la región del corazón. Él indicó que la relación es tan alta como 25: 1. En base a estas conclusiones, los valores de resistencia superior a 1000 Ω posiblemente se podría permitir, en un camino de un pie al otro pie se refiere. Sin embargo, se deben considerar los siguientes factores: a) Una tensión entre los dos pies, dolorosa pero no fatal, podría dar lugar a una caída que podría causar un flujo de corriente mayor a través de la zona del pecho. El grado de este riesgo dependerá además de la duración de la falla y la posibilidad de otro choque sucesivo, tal vez en el recierre. b) Una persona podría estar trabajando o descansando en una posición boca abajo cuando se produce una falla. Los peligros de contacto de pie con pie parecen ser menores que de otro tipo. Sin embargo, ya que las muertes se han producido en el caso a) anterior, es un peligro que no debe ser ignorado (Bodier [B15]; Langer [B99]). 7.3 Circuitos equivalentes accidental Usando el valor de corriente de cuerpo tolerable establecida ya sea por la ecuación (8) o la ecuación (9) y las constantes de circuito apropiadas, es posible determinar la tensión tolerable entre cualesquiera dos puntos de contacto. Las notaciones siguientes son usadas para el equivalente del circuito accidental presentado en la Figura 6: If es la corriente de falla total en A Ig es la corriente fluyendo en la cuadrícula en A Ib es la corriente de cuerpo (el cuerpo es parte del circuito accidental) en A RB es la resistencia del cuerpo en Ω U es el voltaje efectivo total del circuito accidental (voltaje de toque o de paso) en V H y F son los puntos de contacto en el cuerpo 23 Figura 6 – Exposición al voltaje de toque La corriente del cuerpo tolerable, IB, definida por la ecuación (8) o la ecuación (9), es usada para definir el voltaje efectivo total tolerable del circuito accidental (voltaje de toque o de paso). El voltaje efectivo total tolerable del circuito accidental es ese voltaje que causará que el flujo de una corriente del cuerpo, Ib, igual a la corriente de cuerpo tolerable, IB. La figura 6 muestra la corriente de falla If siendo descargada al suelo por el sistema de puesta a tierra de la subestación y una persona que toca una estructura metálica conectada a tierra en H. Varias impedancias en el circuito se muestran en la Figura 7. La terminal H es un punto en el sistema al mismo potencial que la red en la que la corriente de falla fluye y la terminal F es el área pequeña en la superficie del suelo que está en contacto con los pies de la persona. La corriente, Ib, fluye de H a través del cuerpo de la persona a la tierra en F. El teorema de Thevenin nos permite representar estas dos terminales (H, F) de la red de la Figura 7 por el circuito que se muestra en la Figura 8 (Dawalibi, Southey y Baishiki [B50]; Dawalibi, Xiong, y Ma [B51]). El voltaje Thevenin VTh es el voltaje entre los terminales H y F cuando la persona no está presente. La impedancia Thevenin ZTH es la impedancia del sistema como se ve desde los puntos H y F con fuentes de voltaje del sistema en cortocircuito. La corriente Ib a través del cuerpo de una persona que entra en contacto con H y F es dada por Donde RB es la resistencia del cuerpo humano en Ω 24 Figura 7 – Impedancias para el circuito del voltaje de toque Figura 8 – Circuito para el voltaje de toque Para los casos más prácticos, los efectos de Zsys, la resistencia de la red y la resistencia mutua entre la red y los pies de la persona puede ser despreciada de la impedancia equivalente total del circuito Thevenin. Por lo tanto, ZTH está representada por la impedancia equivalente de los pies de la persona. La Figura 9 muestra la corriente de falla If siendo descargada al suelo por el sistema de puesta a tierra de la subestación. La corriente, Ib, fluye de un pie F1 a través del cuerpo de la persona al otro pie, F2. Los terminales F1 y F2 son las áreas en la superficie de la tierra que están en contacto con los dos pies, respectivamente. El teorema de Thevenin nos permite representar esta red de dos terminales (F1, F2) en la figura 10. El voltaje Thevenin VTh es el voltaje entre los terminales F1 y F2 cuando la persona no está presente. La impedancia Thevenin ZTH es la impedancia del sistema vista 25 desde los terminales F1 y F2 con las fuentes de voltaje del sistema en cortocircuito. La corriente I b a través del cuerpo de una persona está dada por la ecuación (11). La impedancia equivalente Thevenin, ZTh, es calculada con un número de métodos (Dawalibi, Southey, y Baishiki [B50]; Dawalibi, Xiong, y Ma [B51]; EPRI EL-2699 [B61]; Thapar, Gerez, y Kejriwal [B147]; Laurent [B100]). Figura 9 – Exposición al voltaje de paso Figura 10 – Circuito del voltaje de paso En esta guía, se usan las siguientes fórmulas para la impedancia equivalente de Thevenin. Para el circuito accidental del voltaje de toque Y por el circuito accidental para el voltaje de paso 26 Donde Rf es la resistencia a tierra de un pie (ignorando la presencia del sistema de tierra de la subestación) en Ω A efectos del análisis de circuitos, el pie humano se suele representar como un disco conductor metálico y la resistencia de contacto de zapatos, calcetines, etc., se desprecia. La resistencia de tierra en ohmios de un disco metálico de radio b (m) en la superficie de un suelo homogéneo de resistividad ρ (Ω-m) viene dada por Laurent [B100]. Tradicionalmente, el disco metálico que representa el pie se toma como una placa circular con un radio de 0.08 m. Con sólo una ligera aproximación, ecuaciones para ZTh se pueden obtener en forma numérica y se expresan en términos de ρ como sigue. Para el circuito accidental del voltaje de toque Y para el circuito accidental del voltaje de paso Basándose en la investigación reportado en Dawalibi, Xiong, y Ma [B51]; Meliopoulos, Xia, Joy, y Cokkonides [B110]; y Thapar, Gerez, y Kejriwal [B147], la ecuación (15) y la ecuación (16) son conservadoras en el sentido de subestimar la impedancia equivalente de Thevenin de suelo uniforme y, por lo tanto, resultará en corrientes corporales más altas. El voltaje equivalente total admisible (es decir, el voltaje de toque y de paso tolerable), utilizando la Ecuación (15) y la Ecuación (16), es y 7.4 Efecto de una capa accidental de material superficial La ecuación (14) se basa en la suposición de la resistividad uniforme del suelo. Sin embargo, una capa de material de alta resistividad de 0.08 a 0.15 m (de 3 a 6pulg.) , tal como grava, a menudo esparcida en la superficie de la tierra por encima de la cuadrícula o sistema de tierra para 27 aumentar la resistencia de contacto entre el suelo y los pies de las personas en la subestación. La relativamente poca profundidad de la superficie del material, en comparación con el radio equivalente del pie, se opone a la asunción de resistividad uniforme en la dirección vertical cuando se calcula la resistencia de tierra de los pies. Sin embargo, para una persona en la zona de la subestación, el material de la superficie puede suponerse que es de extensión infinita en la dirección lateral. Si el suelo subyacente tiene una resistividad menor que el material superficial, tal como roca grande limpia con resistividad en húmedo en los miles de Ω-m, solamente parte de la corriente de cuadrícula se irá hacia arriba en la capa delgada del material superficial, y el voltaje superficial será casi el mismo como sin el material superficial. La corriente a través del cuerpo se reducirá considerablemente con la adición del material superficial debido a la mayor resistencia de contacto entre la tierra y los pies. Sin embargo, esta resistencia puede ser considerablemente menor que la de una capa superficial suficientemente gruesa como para asumirla uniforme en todas las direcciones. La reducción depende de los valores relativos de la tierra y las resistividades del material superficial, y del espesor del material superficial. Este efecto de reducción para el material superficial mayor que la resistividad del suelo puede ser representado por un factor de Cs, como se describe a continuación y se representa en la Figura 11. Para este escenario, el factor de reflexión K será negativo y el factor de Cs será menor que 1.0. Lo contrario del principio de reducción de potencia también es cierto. Si el suelo subyacente tiene una resistividad mayor que la del material superficial, tal como una losa de concreto húmedo curado o camino de entrada con una resistividad en el intervalo de 100 Ω-m a 200 Ω-m, una pequeña porción de la corriente de red se irá hacia arriba en la capa delgada de material superficial. Para este escenario, el factor de reflexión K será positivo y el factor de Cs será mayor que 1.0. Esto tiene el efecto de aumentar, en lugar de reducir, la resistividad efectiva de la resistividad del material superficial. Sin embargo, a diferencia del caso descrito en el párrafo anterior, y para profundidades típicas de material superficial, los potenciales de superficie serán alterados por la corriente que fluye cerca de la superficie. Por lo tanto, la resistividad efectiva del material superficial no debe ser actualizada sin tener en cuenta este cambio de potencial superficial. Este problema se puede resolver mejor utilizando análisis de suelo multi-capas (véase 13.4.2.4). Así, el factor Cs mostrado en la Ecuación (20) y la ecuación (27) no es aplicable para la capa superior de resistividad menor que la resistividad de la capa inferior. Una expresión analítica para la resistencia de tierra del pie sobre una capa delgada de material superficial se puede obtener con el uso del método de imágenes (Sunde [B134]; Thapar, Gerez, y Emmanuel [B146]; Thapar, Gerez, y Kejriwal [B147]). La ecuación (19), la ecuación (20), y la ecuación (21) da la resistencia de tierra del pie sobre el material superficial (Thapar, Gerez, y Kejriwal [B147]). 28 Donde Rf es la resistencia de tierra del pie en una delgada capa de material superficial Cs es el factor de reducción de la capa superficial K es el factor de reflexión entre las resistividades de diferente material ρses la resistividad del material superficial en Ω-m ρ es la resistividad del suelo debajo del material superficila en Ω-m hs es el espesor del material superficial en m b es el radio del disco metálico circular representando el pie en m Rm(snhs) es la resistencia mútua de tierra entre dos placas coaxiales, paralelas, similares, separadas por una distancia (2nhs), en un medio infinito de resistividad, ρs, en Ω-m Para la determinación de Rm (2nhs), considere una placa circular delgada, D1, en el plano x-y con el eje Z que pasa por su centro. El radio de la placa es b y se descarga una corriente I en un medio uniforme infinito, de resistividad ρs. El uso de coordenadas cilíndricas, el potencial en cualquier punto (r, z) está dada por las siguientes ecuaciones (Jackson [B92]): Considere la otra placa similar, D2, colocada paralela y coaxial a la placa circular, D1, y a una distancia (2nh) de ella. El potencial producido en D2 se puede determinar mediante la evaluación del potencial promedio sobre la superficie de la placa. Viene dada por La resistencia mutua de tierra, Rm(snhs) entre las dos placas está dada por Comparando la Ecuación (14) y la Ecuación (19), Cs se puede considerar como un factor de corrección para calcular la resistencia efectiva del pie en la presencia de un espesor finito de material superficial. Debido a que la cantidad Cs es bastante tediosa para evaluar sin el uso de una computadora, estos valores se han calculado para b = 0.08 m y se dan en forma de gráficos de la Figura 11. 29 Figura 11 – Cs versus hs Los modelos de computadora también se han utilizado para determinar el valor de Cs (Dawalibi, Xiong, y Ma [B51]; Meliopoulos, Xia, Joy, y Cokkonides [B110]). Hay una coincidencia cercana a los valores obtenidos a partir de estos modelos de computadora con los valores dados en la Figura 11. La siguiente ecuación empírica da el valor de Cs. Los valores de Cs obtenidos utilizando la ecuación (27) están dentro del 5% de los valores obtenidos con el método analítico (Thapar, Gerez y Kejriwal [B147]). 30 8. Criterio de voltaje tolerable 8.1 Definiciones para el criterio de voltaje tolerable Nota – Las definiciones siguientes están también listadas en la Cláusula 3, pero se repiten aquí para la conveniencia del lector. Elevación del potencial de tierra (GPR): El potencial eléctrico máximo que un electrodo de tierra puede alcanzar respecto a un punto de conexión a tierra distante que se supone se encuentra el potencial de tierra remoto. Este voltaje, GPR, es igual a la corriente máxima de tierra, multiplicado por la resistencia de la red de tierra. Nota – Bajo condiciones normales, el equipo eléctrico puesto a tierra opera cerca del potencial de tierra cero. Eso es, el potencial de un conductor neutro puesto a tierra es casi idéntico al potencial de la tierra remota. Durante una falla a tierra la porción de la corriente de falla que es conducida por la red de tierra de la subestación hacia el suelo causa un incremento del potencial de la red de tierra con respecto a la tierra remota. Voltaje de malla: Es el voltaje de toque máximo dentro de una malla de una cuadrícula de tierra. Voltaje de toque de metal a metal: Es la diferencia de potencial entre los objetos metálicos o estructuras dentro de una subestación que puede ser empuentada por un contacto directo de mano a mano o de mano a pie. NOTA – El voltaje de toque de metal a metal entre objetos metálicos o estructuras unidas a la cuadrícula de tierra se supone que es insignificante en las subestaciones convencionales. Sin embargo, puede ser sustancial el voltaje de toque de metal a metal entre objetos o estructuras metálicas unidas a la red de tierra a objetos metálicos internos al sitio de la subestación, tal como una cerca aislada pero no unida a la cuadrícula de tierra. En el caso de una subestación con aislamiento de gas (GIS), el voltaje de toque de metal a metal entre objetos metálicos o estructuras unidas a la red de tierra puede ser sustancial debido a fallas internas o corrientes inducidas en los encerramientos metálicos. En una subestación convencional, el peor voltaje de toque se encuentra por lo general a ser la diferencia de potencial entre una mano y los pies en un punto de máxima distancia de alcance. Sin embargo, en el caso de un contacto de metal a metal de mano a mano o de la mano a pies, ambas situaciones deben ser investigadas por las posibles peores condiciones de alcance. La Figura 12 y la Figura 13 ilustran estas situaciones para las subestaciones aisladas en aire, y la Figura 14 ilustra estas situaciones en SIG. Voltaje de paso: La diferencia en el potencial de la superficie que podría ser experimentada por una persona parada con los pies separados una distancia de 1 m sin contactar algún objeto conectado a tierra. Voltaje de toque: La diferencia de potencial entre el incremento de potencial de tierra (GPR) de una cuadrícula o sistema de tierra y el potencial de superficie en el punto en que una persona puede estar de pie, mientras que, al mismo tiempo tiene una mano en contacto con una 31 estructura conectada a tierra. Las mediciones de voltaje de toque pueden ser en "circuito abierto" (sin la resistencia del cuerpo equivalente incluidas en el circuito de medición) o en "circuito cerrado" (con la resistencia del cuerpo equivalente incluidas en el circuito de medición). Voltaje transferido: Un caso especial del voltaje de toque cuando un voltaje es transferido dentro o fuera de la subestación desde o hacia un punto remoto externo al sitio de la subestación. 32 Figura 12 – Situaciones de choque básicos 33 Figura 13 – Situación típica de potencial transferido 34 Figura 14 – Situación típica de toque de metal a metal en GIS 8.2 Situaciones de choque típicas de subestaciones aisladas en aire La Figura 12 y la Figura 13 muestran cinco situaciones básicas que implican una persona e instalaciones conectadas a tierra durante una falla. Para un contacto de pie con pie, el equivalente del circuito accidental está en la figura 9, y su voltaje de excitación U es igual a Es (voltaje de paso). Para los tres ejemplos de contacto de mano a los pies se aplica la Figura 12, y U es igual a Et (voltaje de toque), Em (voltaje de malla), o Etrrd (voltaje transferido), respectivamente. El circuito accidental que implica el contacto de metal con metal, ya sea de mano a mano o mano a los pies, se muestra en la Figura 14 donde U es igual a voltaje de toque de metal a metal, Emm. Durante una falla, la tierra conduce corrientes que emanan de la cuadrícula y otros electrodos de tierra permanente enterrados bajo la superficie del suelo. Los gradientes de potencial resultantes tienen un efecto primario sobre el valor de U. En el caso de subestaciones convencionales, el caso típico de voltaje de toque de metal a metal ocurre cuando los objetos metálicos o estructuras dentro del sitio de la subestación no están unidos a la red de tierra. Los objetos tales como tuberías, rieles, o vallas que están ubicados dentro o cerca del área de la cuadrícula de tierra de la subestación, y no unidos a la cuadrícula de tierra, cumplen con este criterio. Pueden estar presentes voltajes sustanciales de contacto de metal a metal cuando una persona parada o tocando un objeto o estructura puesta a tierra entra en contacto con un objeto metálico o estructura dentro del sitio de la subestación que no está unido a la cuadrícula de tierra. El cálculo del voltaje de toque de metal a metal real es complejo. En la práctica, los peligros que resultan del contacto de metal a metal mejor se pueden evitar mediante la unión de los posibles puntos de peligro a la cuadrícula de la subestación. 35 Por lo general, el caso del voltaje transferido se produce cuando una persona de pie en el área de la subestación toca un conductor puesto a tierra en un punto remoto, o una persona de pie en un punto alejado toca un conductor conectado a la red de de tierra de la subestación. Durante condiciones de falla, el potencial resultante a tierra puede ser igual o superior a la elevación del potencial de tierra llena (GPR) de una cuadrícula de tierra descargando la corriente de falla, en lugar de la fracción de este voltaje total encontrado en las situaciones de contacto ordinario (ver Figura 13). De hecho, como se discute en la Cláusula 17, el voltaje transferido puede exceder la suma de los GPRs de ambas subestaciones, debido a los voltajes inducidos en los circuitos de comunicación, cables estáticos o neutros, tuberías, etc. No es práctico, y con frecuencia imposible, diseñar una cuadrícula de tierra sobre la base de voltaje de toque causado por los voltajes transferidos externos. Los peligros de estos voltajes transferidos externos es mejor evitarlos mediante el uso de dispositivos de aislamiento o neutralizantes y por tratamiento y etiquetado claramente de estos circuitos, tuberías, etc., como equivalentes a líneas energizadas. 8.3 Situaciones de choque típicas de subestaciones aisladas en gas (GIS) En el análisis de puesta a tierra en GIS, las consideraciones del voltaje de toque presentan varios problemas únicos. A diferencia de las instalaciones convencionales, el equipo GIS cuenta con una envoltura metálica que encierra las celdas aisladas en gas y buses internos de alto voltaje. Cada bus está contenido dentro de su encerramiento y los encerramientos están conectados a tierra. Debido a que un voltaje es inducido a la envoltura exterior cuando fluye una corriente en la barra colectora coaxial, ciertas partes del encerramiento pueden estar a diferentes potenciales con respecto a la tierra de la subestación. Para evaluar el voltaje máximo que ocurre en el encerramiento del bus conectado durante una falla, es necesario determinar la inductancia de la envoltura exterior a tierra, la inductancia del conductor interior, y las inductancias mutuas para una configuración de fase dada de buses individuales. Una persona que toque la envoltura exterior de un GIS podría estar expuesta a voltajes que resultan de dos condiciones de falla básicas: a) Una falla interna en el sistema de bus con aislamiento de gas, tal como una descarga disruptiva entre el conductor y la pared interna del encerramiento. b) Una falla externa al GIS en el que una corriente de falla fluye a través del bus GIS e induce corrientes en los encerramientos. Debido a que la persona puede estar de pie sobre una rejilla metálica conectada a tierra y el circuito accidental puede implicar una trayectoria de corriente de mano a mano y de mano a pies, el análisis de puesta a tierra en GIS requiere la consideración del voltaje de toque de metal a metal (véase la Figura 14). 8.4 Criterio de voltaje de paso y de toque La seguridad de una persona depende de la prevención de la cantidad crítica de energía de choque sea absorbida antes de que la falla se despeje y el sistema se desenergize. El voltaje máximo de 36 conducción de cualquier circuito accidental no debe exceder los límites definidos de la siguiente manera. Para el voltaje de paso el límite es Para un peso del cuerpo de 50 kg Para un peso del cuerpo de 70 kg Similarmente, el límite del voltaje de toque es Para un peso del cuerpo de 50 kg Para un peso del cuerpo de 70 kg Donde Estep es el voltaje de paso en V Etouch es el voltaje de toque en V Cs está determinado de la Figura 11 o Ecuación (27) ρs es la resistividad del material superficial en Ω-m ts es la duración de la corriente de choque en segundos Si no es usada la capa superficial protectiva, entonces Cs = 1 y ρs = ρ. Los límites del voltaje de toque de metal a metal se derivan de las ecuaciones del voltaje de toque, la Ecuación (32) y la Ecuación (33). El contacto de metal a metal, tanto de mano a mano y de mano a pies, dará lugar a ρs = 0. Por lo tanto, la resistencia total del circuito accidental es igual a la resistencia del cuerpo, RB. 37 Con la sustitución de ρs = 0 en los términos de la resistencia del pie de la ecuación (32) y la ecuación (33), el límite del voltaje de toque es Para un peso del cuerpo de 50 kg Para un peso del cuerpo de 70 kg Donde Emm es el voltaje de toque de metal a metal en V El voltaje de paso real, el voltaje de toque, o el voltaje de toque de metal a metal debe ser inferior a los límites de voltaje máximo permisible respectivo para garantizar la seguridad. Los peligros de los voltajes transferidos externos son mejor evitados por dispositivos de aislamiento o de neutralización y el etiquetado de estos puntos de peligro como equivalentes a líneas vivas. 8.5 Efectos de corrientes de tierra sostenidas Después de establecer los límites seguros de voltaje de paso y de toque, se puede diseñar el sistema de puesta a tierra en base a la corriente de falla disponible y el tiempo total de despeje. El diseñador también debe considerar bajos niveles de falla sostenidos (por debajo del ajuste de relés de protección) con magnitudes de corriente de falla que pueden estar por encima del umbral de corriente de poder soltar. Algunas fallas sostenidas por encima de la corriente de dejar soltar, pero por debajo del umbral de fibrilación, puede provocar asfixia por la contracción prolongada de los músculos del pecho. Sin embargo, no sería práctico diseñar contra los choques menores que son dolorosos, pero que no causan daño permanente. 9. Principales consideraciones de diseño 9.1 Definiciones Nota – Las definiciones siguientes están también listadas en la Cláusula 3, pero se repiten aquí para la conveniencia del lector. Electrodo auxiliar de tierra: Un electrodo de tierra con cierto diseño o restricciones operativas. Su principal función puede ser la de conducir la corriente de falla a tierra hacia el suelo. 38 Electrodo de tierra: Un conductor incrustado en la tierra y usado para recolectar la corriente de tierra, o la disipación de corriente de tierra hacia el suelo. Red de tierra o cuadrícula de tierra: Un sistema de electrodos de tierra interconectado arreglado en un patrón sobre un área específica y enterrado por debajo de la superficie del suelo. NOTA – Las redes enterradas horizontalmente cerca de la superficie de la tierra son también eficaces en el control de los gradientes de potencial superficiales. Una cuadrícula típica por lo general se complementa con una serie de varillas de tierra y puede ser conectada además a los electrodos de tierra auxiliares para reducir su resistencia con respecto a tierra remota. Alfombra de tierra: Es una placa metálica sólida o un sistema de conductores desnudos espaciados estrechamente que están conectados y a menudo localizados a poca profundidad y arriba de la red de tierra o en otra parte de la superficie del terreno, para obtener un nivel extra de protección que minimiza el peligro de la exposición a altos voltajes de paso o de toque en un área de operación crítica o en lugares que son usados por la gente. Las rejillas metálicas de tierra, colocada en la tierra o sobre la superficie, o malla de alambres ubicadas directamente sobre el material superficial son formas comunes de una alfombra de tierra. Sistema de puesta a tierra: Comprende todas las instalaciones de puesta a tierra interconectadas en un área específica. Electrodo de tierra primario: Un electrodo de tierra diseñado o adaptado para la descarga de la corriente de falla a tierra en el suelo, a menudo en un patrón de descarga específica, según sea necesario (o implícitamente pedido) por el diseño del sistema de puesta a tierra. 9.2 Concepto general Un sistema de puesta a tierra debe ser instalado de manera que limitará el efecto de los gradientes de potencial de tierra a tales niveles de voltaje y corriente que no va a poner en peligro la seguridad de las personas o equipos bajo las condiciones normales y de falla. El sistema también debe ayudar a asegurar la continuidad del servicio. En la discusión que sigue, se supone que el sistema de electrodos de tierra tiene la forma de una cuadrícula de electrodos enterrados horizontalmente, suplementados por un número de varillas de tierra verticales conectados a la cuadrícula. Basados en dos encuestas, la primera reportada en una guía de aplicación de la AIEE de 1954 [B4], y la segunda publicada en 1980 (Dawalibi, Bauchard, and Mukhedkar [B46]), este concepto representa la práctica prevaleciente de la mayoría de las empresas eléctricas en los Estados Unidos y en otros países. Algunas de las razones para el uso del sistema combinado de varillas verticales y conductores horizontales son las siguientes: - En subestaciones con un único electrodo es, por sí mismo, insuficiente en proporcionar un sistema de puesta a tierra segura. A su vez, cuando varios electrodos, tales como varillas de tierra, están conectados entre sí y a todos los neutros de los equipos, marcos, y las estructuras que van a ser conectados a tierra, el resultado es esencialmente un sistema de 39 puesta a tierra que consiste en múltiples electrodos de tierra, independientemente del objetivo original. Si los enlaces de conexión resultan ser enterrados en un terreno que tiene buena conductividad, esta red por sí sola puede representar un excelente sistema de puesta a tierra. En parte por esta razón, algunas empresas eléctricas dependen del uso de una cuadrícula única. Sin embargo, las varillas de tierra son de un valor particular, tal como se explica en el ítem 2, a continuación. - Si la magnitud de la corriente disipada dentro del suelo es alta, rara vez es posible instalar una cuadrícula con una resistencia tan baja como para asegurar que el aumento de un potencial de tierra no generará gradientes superficiales no seguros para el contacto humano. Entonces, el peligro puede ser eliminado sólo mediante el control de los potenciales locales a través de toda el área. Un sistema que combina una cuadrícula horizontal y un número de varillas de tierra verticales penetrando en los suelos más bajos tiene las siguientes ventajas: 1) Mientras que los conductores horizontales (cuadrícula) son más eficaces en la reducción del peligro de los altos voltajes de paso y de toque en la superficie de la tierra, a condición de que la red se instale a una profundidad superficial (por lo general de 0.3 m a 0.5 m [12 a 18 pulg.] por debajo del nivel del suelo), y que varillas de tierra lo suficientemente largas estabilizarán el desempeño de este tipo de sistema combinado. Para muchas instalaciones esto es importante porque la congelación o el secado de las capas superiores del suelo podrían variar la resistividad del suelo con las estaciones, mientras que la resistividad de las capas inferiores del suelo permanecen casi constante. 2) Las varillas que penetran en el suelo de baja resistividad son mucho más eficaces en la disipación de corrientes de falla siempre que se encuentren un suelo de dos capas o de múltiples capas y la capa de suelo superior tiene una resistividad más alta que las capas inferiores. Para muchas subestaciones GIS y otras instalaciones de espacio limitado, esta condición se convierte, de hecho, en la más deseable que se puede producir, o que deben alcanzarse por los medios de diseño apropiados (varillas de tierra extra-largas, pozos de tierra, etc.). 3) Si las varillas se instalan predominantemente a lo largo del perímetro de la cuadrícula en situaciones de suelo de alto a bajo o uniforme, las varillas considerablemente moderarán el fuerte aumento del gradiente superficial cerca de las mallas periféricas. Ver la Cláusula 16 para los detalles de esta disposición. Estos detalles son pertinentes para el uso de métodos simplificados para determinar el gradiente de voltaje en la superficie de suelo. 9.3 Electrodos de tierra primarios y auxiliares En general, la mayoría de los sistemas de tierra utilizan dos grupos de electrodos de tierra. Los electrodos de tierra primarios están diseñados específicamente para propósitos de puesta a tierra. Los electrodos de tierra auxiliares son electrodos que comprenden diversas estructuras metálicas subterráneas instaladas para fines distintos de la conexión a tierra. Los electrodos primarios típicos incluyen cosas tales como las cuadrículas de tierra, conductores de contrapeso, varillas de 40 tierra, y pozos de tierra. Los electrodos auxiliares típicos incluyen estructuras metálicas subterráneas y barras de refuerzo revestidas de cemento, si está conectado a la red de tierra. Los electrodos de tierra auxiliar pueden tener una capacidad de conducción de corriente limitada. 9.4 Aspectos básicos de diseño de cuadrículas El análisis conceptual de un sistema de cuadrícula por lo general comienza con la inspección del plan de diseño de la subestación, que muestra los principales equipos y estructuras. Para establecer las ideas y los conceptos básicos, los siguientes puntos pueden servir de guía para el inicio de un diseño típico de cuadrícula de tierra: a) Un anillo de conductor continuo debe rodear el perímetro para encerrar tanta área como sea práctico. Esta medida ayuda a evitar una alta concentración de corriente y, por lo tanto, los altos gradientes tanto en el área de la cuadrícula y cerca de los extremos de los cables que se proyectan. Encerrando más área también se reduce la resistencia de la cuadrícula de tierra. b) Dentro del anillo, los conductores se ponen típicamente en líneas paralelas y, donde es práctico, a lo largo de las estructuras o filas de equipos para proporcionar conexiones de tierra cortas. c) Un sistema de cuadrícula típico para una subestación puede incluir conductores de cobre desnudo 4/0 enterrado de 0.3 m a 0.5 m (12 pulgadas a 18 pulgadas) por debajo del nivel del suelo, espaciados de 3 a 7 m (10 pies a 20 pies) de distancia, en un patrón de cuadrícula. En las conexiones cruzadas, los conductores deberían estar unidas firmemente entre sí. Las varillas de tierra pueden estar en las esquinas de la rejilla y en los puntos de unión a lo largo del perímetro. Las varillas de tierra también se pueden instalar en el equipo principal, especialmente cerca de los descargadores de sobretensión. En los suelos de varias capas o de alta resistividad, podría ser útil el uso de varillas más largas o varillas instaladas en los puntos de unión adicionales. d) Este sistema de cuadrícula se debería extender por todo el patio de la subestación y, a menudo más allá de la línea de la cerca. Múltiples conductores de tierra o conductores de mayor tamaño se deberían utilizar en donde pueden ocurrir altas concentraciones de corriente, tal como en una conexión del neutro a tierra de generadores, bancos de capacitores o transformadores. 9.5 Diseño en condiciones difíciles En las zonas donde la resistividad del suelo es más bien alta o el espacio de de la subestación tiene un sobrecosto, puede que no sea posible obtener un sistema de tierra de baja impedancia mediante la distribución de los electrodos de cuadrícula sobre un área grande, como se hace en las condiciones más favorables. Esta situación es típica de muchas instalaciones industriales y subestaciones GIS, ocupando sólo una fracción de la superficie terrestre se utiliza normalmente para los equipos convencionales. A menudo, esto hace difícil el control de los gradientes superficiales. Algunas de las soluciones incluyen: 41 a) La conexión (es) con cuadrículas de tierra remota(s) y con las instalaciones de tierra adyacentes, un sistema combinado utilizando instalaciones separadas en edificios, bóvedas subterráneas, etc. Un uso predominante de los electrodos de tierra remotos requiere una cuidadosa consideración de potenciales transferidos, ubicaciones de descargadores de sobretensión, y otros puntos críticos. Una caída significativa de voltaje puede desarrollarse entre las instalaciones de puesta a tierras locales y remotas, especialmente para los transitorios de alta frecuencia (rayos). b) El uso de varillas de tierra instaladas profundamente y pozos de tierra perforados. c) Varios aditivos y tratamientos de suelos utilizados en conjunto con varillas de tierra y conductores interconectados se describen más detalladamente en el 14.5. d) El uso de alfombras de alambre. Es factible combinar tanto el material superficial y alfombras fabricadas de malla metálica para igualar el campo del gradiente de la superficie. Una alfombra de alambre típico podría constar de alambres de acero con revestimiento de cobre No. 6 AWG, dispuestos en 0.6 m x 0.6 m (24 en × 24 in) en patrón de cuadrícula, instalada en la superficie de la tierra y por debajo del material superficial, y unida a la cuadrícula de tierra principal en múltiples ubicaciones. e) Donde sea factible y controlado de otros medios disponibles para reducir la resistencia global de un sistema de tierra, tales como la conexión de cables estáticos y neutros al suelo (véase 15.3). Es típico el uso de objetos metálicos calificados en el sitio y puede servir como electrodos de tierra auxiliares, o como enlaces de tierra a otros sistemas. Las consecuencias de este tipo de aplicaciones, por supuesto, tienen que ser cuidadosamente evaluados. f) Allí donde resulte práctico, un depósito cercano de material de baja resistividad de volumen suficiente se puede utilizar para instalar una red adicional (satélite). Esta cuadrícula satélite, cuando se conecta efectivamente a la red principal, disminuirá la resistencia total y, por lo tanto, la elevación del potencial de tierra de la cuadrícula de tierra. El material cercano de baja resistividad puede ser un depósito de arcilla o puede ser parte de una estructura grande, como la masa de hormigón de una presa hidroeléctrica (Verma, Mérand, y Barbeau [B152]). 9.6 Conexiones a la cuadrícula Conductores de ampacidad adecuada y resistencia mecánica (véase la Cláusula 11) se deben utilizar para las conexiones entre: a) Todos los electrodos de tierra, tales como las cuadrículas de tierra, lechos de varillas, pozos de tierra, y donde sea aplicable, en metal, tuberías de agua o gas, entubados de pozos de agua aplicables, etc. b) Todas las partes metálicas conductoras sobre el suelo que accidentalmente podría llegar a ser energizadas, tales como estructuras metálicas, bastidores de las máquinas, carcasas metálicas de la aparamenta convencional o con aislamiento de gas, tanques de 42 transformadores, guardas, etc. Además, las partes metálicas conductoras que podrían estar a un potencial diferente en relación con otras partes metálicas deben ser unidas entre sí cuando estas se energizan, por lo general a través de la cuadrícula de tierra. c) Todas las fuentes de corriente de falla, tales como descargadores de sobretensión, bancos de condensadores o capacitores de acoplamiento, transformadores y, en su caso, los neutros de la máquina y los circuitos de iluminación y potencia. Los cables de cobre o cintas se emplean normalmente para estas conexiones a tierra. Sin embargo, los tanques de transformadores se utilizan a veces como parte de un camino de tierra de los descargadores de sobretensión. Del mismo modo, la mayoría de las estructuras de acero o de aluminio se pueden usar para el camino a tierra si se puede establecer que su conductancia, incluyendo la de cualquier conexión, es y puede ser mantenida como equivalente a la del conductor de que normalmente se instala. Donde se sigue esta práctica, deben ser eliminada cualquier película de pintura que de otro modo podría introducir una conexión altamente resistente, y un compuesto de unión adecuado deben aplicarse, u otros medios eficaces, tales como puentes a través de las conexiones, para evitar el deterioro subsiguiente de la conexión. En el caso de instalaciones GIS, una atención especial se debe prestar a la posibilidad de circulación no deseada de corrientes inducidas. La Cláusula 10 cubre el tema más detalladamente. No se debe asumir la división igualitaria de las corrientes de tierra entre múltiples cables de las conexiones cruzadas o puntos similares de unión. Todos los conductores de tierra accesibles deben ser inspeccionados de forma periódica. La soldadura exotérmica, soldadura fuerte, o conectores de tipo de presión se puede utilizar para conexiones bajo el suelo (véase 11.4). Las conexiones soldadas deben ser evitadas debido a la posibilidad de falla bajo altas corrientes de falla. Los circuitos abiertos, incluso en lugares expuestos, pueden escapar de la detección, y es obvio que no es práctico inspeccionar partes enterradas de la red de puesta a tierra, una vez que está instalada. Una discusión más detallada de los métodos de prueba utilizados para determinar la continuidad de los sistemas de puesta a tierra enterrados está incluida en 19.4. Aquellas instalaciones que tienen más probabilidades de suministrar o transportar una corriente alta, tales como transformadores y disyuntores tanques, marcos de interruptor, y las pastillas de pararrayos, deben estar conectadas a la red con más de un cable de tierra. Las derivaciones deberían realizarse, preferiblemente en direcciones opuestas para eliminar fallas de modo común. 10. Consideraciones especiales para subestaciones aisladas en gas (GIS) 10.1 Definiciones para las consideraciones especiales para GIS 10.2 Características GIS 10.3 Encerramientos y corrientes circulantes 10.4 Puesta a tierra de encerramientos 43 10.5 10.6 10.7 10.8 10.9 Cooperación entre el fabricante y usuario GIS Otros aspectos especiales de puesta a tierra GIS Notas sobre puesta a tierra de fundaciones GIS Criterio de voltaje de toque para GIS Recomendaciones 11. Selección de conductores y conexiones 11.1 Requerimientos básicos La selección adecuada del material del conductor se mantendrá la integridad de un sistema de puesta a tierra durante años si los conductores son de tamaño adecuado y las condiciones del suelo no son corrosivas para el material utilizado. En la evaluación de cual material conductor y qué calibre de conductor o límite de temperatura permitida máxima necesita ser aplicada en situaciones individuales de diseño, la selección final siempre debe reflejar las consideraciones señaladas a continuación. Cada elemento del sistema de puesta a tierra, incluyendo conductores de la cuadrícula, conexiones, cables de conexión, y todos los electrodos primarios, debería ser diseñado de manera que para el la vida de diseño esperada de la instalación, el elemento pasará por: a) Tener una conductividad suficiente, por lo que no contribuirá sustancialmente a las diferencias de voltaje locales. b) Resistir la fusión y el deterioro mecánico bajo la combinación más desfavorable de magnitud y duración de falla. c) Ser mecánicamente confiable y robusta en un alto grado. d) Ser capaz de mantener su función, incluso cuando se expone a la corrosión o abuso físico. 11.2 Selección de material para conductores y problemas de corrosión 11.2.1 Cobre El cobre es un material común usado para los sistemas de puesta a tierra. Los conductores de cobre, además de su alta conductividad, tienen la ventaja de ser resistente a la mayor parte de la corrosión subterránea porque el cobre es catódico con respecto a la mayoría de los otros metales que puedan ser enterrados en las proximidades. 11.2.2 Acero recubierto de cobre y acero chapado en cobre El acero revestido de cobre y acero chapado en cobre son materiales comunes utilizados para los sistemas de puesta a tierra, especialmente donde el robo es un problema. 11.2.3 Aluminio 44 El aluminio rara vez ha sido utilizado para las redes de tierra. Aunque a primera vista el uso de aluminio sería una elección natural para el equipo de GIS con encerramientos hechos de aluminio o aleaciones de aluminio, existen las siguientes desventajas a considerar: a) El aluminio en sí puede corroer en ciertos suelos. La capa de material de aluminio corroído no es conductivo a todos los efectos prácticos de puesta a tierra. b) La corrosión gradual causada por corrientes alternas también puede ser un problema bajo ciertas condiciones. No se recomienda el uso de conductor de aluminio bajo tierra, a pesar de que, como el acero, podría aliviar el problema de contribuir a la corrosión de otros objetos enterrados. El aluminio es anódico a muchos otros metales, incluyendo el acero y, de ser interconectados a uno de estos metales en la presencia de un electrolito, el aluminio se sacrificará para proteger el otro metal. 11.2.4 Acero Los conductores y electrodos de tierra de acero o acero inoxidable pueden ser utilizados en aplicaciones en las que las condiciones del suelo pueden ser perjudiciales para el cobre. Por supuesto, un diseño de este tipo requiere que se preste atención a la corrosión del acero o acero inoxidable. El uso de acero recubierto de zinc o acero inoxidable, en combinación con la protección catódica, es típico para los sistemas de puesta a tierra de acero (Mahonar y Nagar [B104]). 11.2.5 Otras consideraciones Una cuadrícula de cobre o de acero revestido de cobre forma una célula galvánica con estructuras enterradas de acero, tuberías y cualquiera de las aleaciones a base de plomo que pueden estar presentes en cubiertas de cables. Esta celda galvánica puede acelerar la corrosión de este último. El estañado del cobre ha sido intentado por algunas empresas de energía. Esto reduce el potencial de la celda con respecto al acero y zinc en aproximadamente un 50% y prácticamente elimina este potencial con respecto al plomo (el estaño ligeramente se sacrifica para conducir). La desventaja de usar un conductor de cobre estañado es que acelera y concentra la corrosión natural, causada por los productos químicos en el suelo, del cobre en cualquier pequeña área desnuda. Otros métodos que se usan con frecuencia son: a) El aislamiento de las superficies de metal de sacrificio con un recubrimiento tal como cinta de plástico, compuesto de asfalto, o ambos. b) El enrutamiento de elementos metálicos enterrados de manera que cualquier conductor a base de cobre va a cruzar las líneas de tuberías de agua u objetos similares hechos de otros metales no revestidos en la medida de lo posible en ángulo recto y, a continuación, aplicar un recubrimiento aislante de un metal u otro donde se encuentran en la proximidad . El recubrimiento aislante se aplica generalmente a la tubería. c) La protección catódica mediante ánodos de sacrificio para los sistemas de corriente aplicada. 45 d) Uso de tubería no metálica y conduits. En subestaciones GIS, el uso de la protección catódica también puede ser necesaria por otros motivos. La protección catódica es comúnmente utilizada para proteger las instalaciones que son externas al GIS, tales como cables de tipo tubería a presión, cables blindados, etc. Debido a la complejidad de las instalaciones GIS, es esencial tener en cuenta todos los aspectos de prevención de la corrosión antes de diseñar el sistema de puesta a tierra. Las directrices específicas son difíciles de establecer debido a que las condiciones de la subestación pueden ser diferentes debido a la ubicación y la aplicación en el sistema de energía eléctrica. El tema de la corrosión bajo tierra y la protección catódica es compleja. Se han hecho muchos estudios y se han publicado mucho sobre este tema. Una discusión detallada de estos fenómenos está más allá del alcance de esta guía. 11.3 Factores de dimensionamiento de conductores 11.3.1 Corrientes simétricas El aumento de la temperatura de corto plazo en un conductor de tierra, o el calibre del conductor requerido como una función de la corriente del conductor, se pueden obtener de la Ecuación (37) a la Ecuación (42), que se toma de la derivación de Sverak [B137]. Estas ecuaciones también se incluyen como Anexo B en el estándar IEEE Std 837 ™ [B89]. Estas ecuaciones evalúan la capacidad de corriente de cualquier conductor para el que se conocen las constantes del material, o pueden ser determinadas por cálculo. Las constantes del material de los materiales comúnmente utilizados para la puesta a tierra se enumeran en la Tabla 1. La Ecuación (37) a la Ecuación (42) se derivan de las corrientes simétricas (sin compensación de CC). Donde I Amm2 Ko Tm Tr αo αr ρr tc TCAP es la corriente RMS en kA es la sección transversal del conductor en mm2 1/αo o (1/αr) – Tr en °C es la temperatura máxima permitida en °C es la temperatura de referencia para las constantes de material en °C es el coeficiente térmico de la resistividad a 0°C en 1/°C es el coeficiente térmico de la resistividad a la temperatura de referencia Tr en 1/°C es la resistividad del conductor de tierra a la temperatura de referencia Tr en μΩ-cm es la duración de la corriente en s es la capacidad térmica por unidad de volumen de la Tabla 1, en J/(cm3 x °C) Cabe señalar que αr y ρr se encuentran a la misma temperatura de referencia de Tr ° C. La Tabla 1 proporciona datos para αr y ρr a 20 ° C. 46 Si el tamaño del conductor se da en kcmil (Amm2 × 1.974 = A Kcmil), la Ecuación (37) se convierte en Las pruebas independientes demuestran que la corriente de fusión real de corto plazo para un conductor de acero revestido de cobre y una varilla de tierra de acero -cobre unidos pueden ser diferentes de los calculados por la Ecuación (37) a causa del fenómeno de la capacidad de calor variable del acero, explicado en la nota (d) de la Tabla 1. Los fabricantes de conductores de acero recubierto de cobre y de varillas de tierra de acero chapado de cobre pueden ser capaces de proporcionar los datos de prueba para ayudar a guiar las decisiones en cuanto a que el tamaño del producto sea el apropiado. Sin embargo, la fusión del conductor bimetálico debería ser referida a la falla del metal con más baja temperatura de fusión debido a que la integridad del conductor debería ser mantenida a través de la vida útil de la subestación. 11.3.1.1 Cálculo del TCAP TCAP se puede calcular para materiales diferentes a los mencionados en la Tabla 1 a partir del calor y la densidad específica. El calor específico, cp, en cal / (gramos × ° C) y la densidad, δ, en gramos / cm3 están relacionados con la capacidad térmica por unidad de volumen en J / (cm3) × ° C como sigue: 4.184 J = 1 caloría Por eso, TCAP es definido por o Una vez que se determina la TCAP, la Ecuación (37) y la Ecuación (38) se pueden utilizar para determinar la capacidad de corriente del conductor. Las constantes del material dadas en la Tabla 1 para los materiales compuestos, como el acero revestido de cobre, son valores promedio para el conductor. El calor específico se define como la cantidad de energía necesaria para aumentar la temperatura de un gramo de un material en un grado Celsius. El calor específico por lo general se aplica a un material individual. Sin embargo, cuando los componentes de un conductor compuesto se mantienen a la misma temperatura, un calor específico promedio puede ser utilizado. El calor específico promedio es proporcional a la fracción de masa. Por ejemplo, un compuesto que es 90% de material de A y 10% de material B, el calor específico es la cantidad de energía necesaria para 47 elevar la temperatura de 0.9 gramos de material A y 0.1 gramos de material B en un grado Celsius. El calor específico se puede calcular con la siguiente ecuación: Donde capv w1 cp1 w2 cp2 es el calor específico promedio es la fracción de masa del material 1 es el calor específico del material 1 es la fracción del material 2 es el calor específico del material 2 La densidad promedio es la masa total del conductor dividido por el volumen total del conductor. La densidad media se calcula usando la siguiente ecuación Donde Dav m1 m2 V1 V2 es la densidad promedio es la masa del material 1 es la masa del material 2 es el volumen del material 1 es el volumen del material 2 Ejemplo 1: Para calcular la capacidad térmica de un 5/8 en una varilla de acero revestido de cobre nominal de 0.545 en el diámetro exterior, y 0.01 de espesor de cobre. En primer lugar el promedio del calor y la densidad específica se calcula a partir de las dimensiones de la varilla, así como la densidad y el calor específico de los materiales Á𝑟𝑒𝑎 𝑑𝑒𝑙 𝐴𝑐𝑒𝑟𝑜 = 𝐴𝑖 = 𝜋 (0.5452 ) = 0.233𝑝𝑢𝑙𝑔2 = 1.505 𝑐𝑚2 4 Á𝑟𝑒𝑎 𝑑𝑒𝑙 𝐶𝑜𝑏𝑟𝑒 = 𝐴𝑂 = 𝜋 (0.5652 − 0.5452 ) = 0.0174 𝑝𝑢𝑙𝑔2 = 0.112 𝑐𝑚2 4 𝐹𝑟𝑎𝑐𝑐𝑖ó𝑛 𝑑𝑒 𝑀𝑎𝑠𝑎 𝑑𝑒 𝐴𝑐𝑒𝑟𝑜 = 𝑤𝑖 = (7.87)(1.505) 𝐷𝑖 𝐴𝑖 = = 0.922 𝐷𝑖 𝐴𝑖 + 𝐷𝑂 𝐴𝑂 (7.87)(1.505) + (8.95)(0.112) 𝐹𝑟𝑎𝑐𝑐𝑖ó𝑛 𝑑𝑒 𝑀𝑎𝑠𝑎 𝑑𝑒 𝐶𝑜𝑏𝑟𝑒 = 𝑤𝑜 = (8.95)(0.112) 𝐷𝑖 𝐴𝑖 = = 0.078 𝐷𝑖 𝐴𝑖 + 𝐷𝑂 𝐴𝑂 (7.87)(1.505) + (8.95)(0.112) 𝐶𝑎𝑙𝑜𝑟 𝐸𝑠𝑝𝑒𝑐í𝑓𝑖𝑐𝑜 𝑃𝑟𝑜𝑚𝑒𝑑𝑖𝑜 = 𝑐𝑝𝑎𝑣 = 𝑤𝑖 𝑐𝑝𝑖 + 𝑤𝑂 𝑐𝑝𝑜 = (0.922)(0.486) + (0.078)(0.385) = 0.48 𝐽 𝑔 ∗ °𝐶 48 𝐷𝑎𝑣 = 𝑚𝑖 + 𝑚𝑂 𝐷𝑖 𝐴𝑖 𝐿𝑟 + 𝐷𝑂 𝐴𝑂 𝐿𝑟 𝐷𝑖 𝐴𝑖 + 𝐷𝑂 𝐴𝑂 (7.87)(1.505) + (8.95)(0.112) 𝑔 = = = = 7.9 3 𝑉𝑖 + 𝑉𝑂 𝐴𝑖 𝐿𝑟 + 𝐴𝑂 𝐿𝑟 𝐴𝑖 + 𝐴𝑂 1.505 + 0.112 𝑐𝑚 Donde Ai es el área de la capa interior, cm2 AO es el área de la capa exterior, cm2 cpi es el calor expecífico de la capa interior, J/(g*°C) cpo es el calor expecífico de la capa exterior, J/(g*°C) cpav es calor específico promedio, J/(g*°C) Di es la densidad de la capa interior, g/cm3 Do es la densidad de la capa exterior, g/cm3 Dav es la densidad promedio, g/cm3 mi es la masa de la capa interior, g mo es la masa de la capa exterior, g Vi es el volumen de la capa interior, cm3 Vo es el volumen de la capa exterior, cm3 wi es la fracción de masa de la capa interior wo es la fracción de masa de la capa exterior Lr es la longitud de la varilla de tierra o alambre, m A partir de la densidad promedio y peso específico promedio la capacidad térmica puede ser calculada. 𝐶𝑎𝑝𝑎𝑐𝑖𝑑𝑎𝑑 𝑇é𝑟𝑚𝑖𝑐𝑎 = 𝑇𝐶𝐴𝑃 = 𝑐𝑝𝑎𝑣 𝐷𝑎𝑣 = (7.9)(0.48) = 3.8 𝐽/(𝑐𝑚3 ∙ °𝐶) En este caso, la capacidad térmica es la misma como el acero dentro del error de redondeo. Esto es debido a que el volumen de acero supera el volumen de cobre por lo tanto domina la capacidad térmica. Ejemplo 2: Calcular la capacidad térmica de un acero revestido de cobre de 19 No. 9 con 40% de IACS con 0.572 pulg de diámetro exterior y 0.1144 pulg de diámetro final. El espesor de cobre, la densidad, y la resistividad, y los valores no se calculan en este ejemplo, pero se toman de ASTM B910 como sigue: Espesor de cobre mínimo = 5% del diámetro total Densidad a 20°C = 8.24 g/cm3 Resisitividad máxima a 20°C = 4.40 μΩ-cm Á𝑟𝑒𝑎 𝑑𝑒𝑙 𝐴𝑐𝑒𝑟𝑜 = 𝐴𝑖 = 19 × 𝜋 (0.102 𝑝𝑢𝑙𝑔)2 = 0.158 𝑝𝑢𝑙𝑔2 = 1.021 𝑐𝑚2 4 𝜋 Á𝑟𝑒𝑎 𝑑𝑒𝑙 𝐶𝑜𝑏𝑟𝑒 = 𝐴𝑜 = 19 × (0.11442 − 0.1032 )𝑝𝑢𝑙𝑔2 = 0.037 𝑝𝑢𝑙𝑔2 = 0.239 𝑐𝑚2 4 𝐹𝑟𝑎𝑐𝑐𝑖ó𝑛 𝑑𝑒 𝑀𝑎𝑠𝑎 𝑑𝑒 𝐴𝑐𝑒𝑟𝑜 = 𝑤𝑖 = (7.87)(1.021) 𝐷𝑖 𝐴𝑖 = = 0.79 𝐷𝑖 𝐴𝑖 + 𝐷𝑂 𝐴𝑂 (7.87)(1.021) + (8.95)(0.239) 49 𝐹𝑟𝑎𝑐𝑐𝑖ó𝑛 𝑑𝑒 𝑀𝑎𝑠𝑎 𝑑𝑒 𝐶𝑜𝑏𝑟𝑒 = 𝑤𝑜 = (8.95)(0.239) 𝐷𝑖 𝐴𝑖 = = 0.21 𝐷𝑖 𝐴𝑖 + 𝐷𝑂 𝐴𝑂 (7.87)(1.021) + (8.95)(0.239) 𝐶𝑎𝑙𝑜𝑟 𝐸𝑠𝑝𝑒𝑐í𝑓𝑖𝑐𝑜 𝑃𝑟𝑜𝑚𝑒𝑑𝑖𝑜 = 𝑐𝑝𝑎𝑣 = 𝑤𝑖 𝑐𝑝𝑖 + 𝑤𝑜 𝑐𝑝𝑜 = (0.79)(0.486) + (0.21)(0.385) = 0.465 𝐽 𝑔 ∗ °𝐶 𝐶𝑎𝑝𝑎𝑐𝑖𝑑𝑎𝑑 𝑇é𝑟𝑚𝑖𝑐𝑎 = 𝑇𝐶𝐴𝑃 = 𝑐𝑝𝑎𝑣 𝐷𝑎𝑣 = (0.465)(8.24) = 3.8 𝐽/(𝑐𝑚3 ∙ °𝐶) 11.3.1.2 Resistividad de la varilla de acero recubierto Para el cálculo de la resistividad de varilla de acero de revestida, se supone que los metales están eléctricamente en paralelo. Donde Ri Ro Rclad ρi ρo ρclad Ai Ao Aclad es la resistencia de la capa interior, μΩ es la resistencia de la capa exterior, μΩ es la resistencia de la varilla bimetálica o alambre, μΩ es la resistividad de la capa interior, μΩ-m es la resistividad de la capa exterior, μΩ-m es la resistividad efectiva de la varilla bimetálica o alambre, μΩ-m es el área de la capa interior, cm2 es el área de la capa exterior, cm2 es el área de una varilla o alambre bimetálico, cm2 Ejemplo: Una varilla de acero revestida de cobre de 5/8 de pulg con un diámetro nominal externo (OD) de 0.545 pulg y 0.01 pulg de espesor del revestimiento de cobre Á𝑟𝑒𝑎 𝑑𝑒𝑙 𝐴𝑐𝑒𝑟𝑜 = 𝐴𝑖 = Á𝑟𝑒𝑎 𝑑𝑒𝑙 𝐶𝑜𝑏𝑟𝑒 = 𝐴𝑜 = 𝜋 (0.545)2 = 0.233 𝑝𝑢𝑙𝑔2 = 1.505 𝑐𝑚2 4 𝜋 (0.5652 − 0.5452 )𝑝𝑢𝑙𝑔2 = 0.0174 𝑝𝑢𝑙𝑔2 = 0.112 𝑐𝑚2 4 50 Los valores de resistividad son tomados de la Tabla 1. Conductividad = 100(1.72) = 17.0% 10.1 Tabla 1 – Constante de los materiales Descripción Cobre, recocido suave Cobre, comercial duro Alambre de acero revestido de cobre Alambre de acero revestido de cobre Varilla de acero revestido de cobre Alambre de acero revestido de aluminio Acero, 1020 Varilla de acero inoxidablec Varilla de acero galvanizada Acero inoxidable, 304 Conductividad del Materiala (% IACS) Factora αr a 20°C (1/°C) Ko a 0°C Temperatura de Fusióna Tm (°C) Resistividada a 20°C ρr (μΩ-m) Capacidada Térmica TCAP [J/(cm3*°C) 100 0.003 93 234 1083 1.72 3.4 97.0 0.003 81 242 1084 1.78 3.4 40.0 0.003 78 245 1084e 4.40 3.8 30.0 0.003 78 245 1084e 5.86 3.8 17.0 0.003 78 245 1084e 10.1 3.8 20.3 0.00360 258 657 8.48 3.561 10.8b 9.8 0.003 77 0.003 77 245 245 1510 1400 e 15.9 17.5 3.8 4.4 8.6 0.003 20 293 419 e 20.1 3.9 2.4 0.001 30 749 1400 72.0 4.0 a Las constantes del material de cobre, acero, acero inoxidable, y zinc son de The Metals Handbook de la American Society. b Las varillas de acero recubiertas de cobre de varilla de 5/8 pulg nominal, 0.010 pulg de espesor de cobre suave sobre acero No. 1020 c Varilla de acero inoxidable en varilla de 5/8 pulg nominal, espesor de 0.020 pulg de acero inoxisable sobre núcleo de acero No. 304. d A diferencia de la mayoría de los metales, el acero tiene una capacidad calorífica muy variable de 550 ° C a 800 ° C; sin embargo ya que la capacidad del calor en este rango es mucho mayor que a temperaturas más bajas y más altas, los cálculos usando valores más bajos son conservadores con respecto al calentamiento del conductor. e La temperatura de fusión de los materiales bi-metálicos sobre metal con más baja temperatura de fusión. 51 La Ecuación (37) y la Ecuación (38), en conjunto con la Ecuación (39) y la Ecuación (40) (que define TCAP), reflejan dos supuestos básicos: a) Que todo el calor se retiene en el conductor (proceso adiabático). b) Que el producto del calor específico (SH) y la densidad (δ), TCAP, sea aproximadamente constante debido a que el aumento en SH y la disminución de δ ocurren aproximadamente a la misma velocidad. Para la mayoría de los metales, estas premisas son aplicables en un rango de temperatura razonablemente amplio, siempre que la duración de la falla sea de unos pocos segundos. Ejemplo: Una tabulación se puede hacer, utilizando la ecuación (46) y la Tabla 1, para obtener los datos para el acero recubierto de cobre al 30% y al 40%, y para los conductores de cobre de 100% y el 97% de IACS. Por ejemplo, para calcular el tamaño de 1 s de un conductor de acero recubierto de cobre al 30%, se obtiene Así, para I = 1 kA y usando la Ecuación (46) Por cada 1 kA se requiere 12.06 kcmil. 11.3.1.3 Simplificación de la fórmula La fórmula en unidades inglesas puede ser simplificada a la siguiente: Donde 52 Akcmil I tc Kf es el area del conductor en kcmil es la corriente de falla en kA es la duración de la corriente en s es la constante de la Tabla 2 para el material en los diferentes valores de Tm (la temperatura de fusión o la temperatura limitada del conductor basada en 11.3.3) y usando la temperatura ambiente (Ta) de 40°C. Tabla 2 – Constante de Materiales Material Conductividad (%) Tm a (°C) Cobre, recocido suave 100.0 1083 Cobre, comercial duro 97.0 1084 Cobre, comercial duro 97.0 250 Alambre de acero revestido de cobre 40.0 1084 Alambre de acero revestido de cobre 30.0 1084 Varilla de acero revestido de cobre 17.0 1084 Alambre de acero revestido de aluminio 20.3 657 Acero, 1020 10.8 1510 Varilla de acero inoxidable 9.8 1400 Varilla de acero galvanizada 8.6 419 Acero inoxidable, 304 2.4 1400 a Ver 11.3.3 por los comentarios concernientes a la selección de material. Kf 7.00 7.06 11.78 10.45 12.06 14.64 17.26 18.39 14.72 28.96 30.05 Ejemplos: Usando la Ecuación (47) para una falla de 20 kA, por 3 s a) Para cobre suave = 242.5 kcmil Usar 250 kcmil b) Para conductor de acero recubierto de cobre de conductividad del 40% = 362.0 kcmil Usar 19/No.7 c) Para conductor de acero = 552.5 kcmil Usar conductor de diámetro de ¾ pulg Uno puede también comparar las corrientes de fusión de un tamaño de conductor establecido para varias duraciones de tiempo. Usando 4/0 AWG (211.6 kcmil) de cobre suave como un ejemplo 53 Si tc = 0.5 s; I = 211.6/(7.00)√0.5 = 42.7 kA Si tc = 2.0 s; I = 211.6/(7.00)√2 = 30.2 kA Si tc = 0.5 s; I = 211.6/(7.00)√3 = 17.5 kA El tamaño del conductor realmente seleccionado es generalmente más grande que la basada en la fusión debido a factores tales como: a) El conductor debe tener la resistencia necesaria para soportar cualquier abuso mecánico y de la corrosión esperada durante la vida de diseño de la instalación de puesta a tierra. b) El conductor debería tener una conductividad suficientemente alta para evitar cualquier caída de voltaje peligrosa posible durante una falla, para la vida de la instalación de puesta a tierra. c) La necesidad de limitar la temperatura del conductor (ver 11.3.3). d) Un factor de seguridad se debe aplicar al sistema de tierra como con otros componentes eléctricos. 11.3.2 Corrientes asimétricas 11.3.2.1 Usando el factor de decremento En los casos en que se presenta un posible componente de desplazamiento de corriente continua en la corriente de falla que se desea, un valor equivalente de la corriente simétrica, IF, representando el valor efectivo de una corriente asimétrica integrada a lo largo de toda la duración de la falla, tc, puede determinarse como una función de X / R usando el factor de decremento Df, Ecuación (84) en 15.10, antes de la aplicación de la ecuación (37) a la Ecuación (42). El valor resultante de IF es siempre mayor que If debido a que el factor de decremento se basa en una suposición conservadora de que la componente de corriente alterna no decae con el tiempo, pero se mantiene constante en su valor inicial subtransitorio. 11.3.2.2 Usando las tablas de corriente asimétricas Debido a que el desplazamiento CD en la corriente de falla de corriente continua hará que el conductor alcance una temperatura más alta para las mismas condiciones de falla (duración y magnitud de la corriente de falla), la Ecuación (48) determina un valor equivalente de la corriente simétrica en presencia del desplazamiento de CD. Además, si está presente, el desplazamiento de CD dará lugar a fuerzas mecánicas y la energía absorbida que son casi cuatro veces el valor que el valor de una corriente simétrica equivalente. Sin embargo, el efecto de desplazamiento de CD 54 puede despreciarse si la duración de la corriente es mayor que o igual a 1 s o la relación X / R en la localización de la falla es menor que 5. Las características de fusión para diversos tamaños de conductor de cobre con diversos grados de desplazamiento de CD se presentan en la Tabla 3, Tabla 4, Tabla 5 y Tabla 6. Estas características de fusión se han derivado teóricamente, y luego ampliamente verificadas experimentalmente (Reichman, Vainberg, y Kuffel [ B126]). Tabla 3 – Capacidad Última de transporte de corriente de cables de tierra de cobre; las corrientes están en valores RMS, para la frecuencia de 60 Hz, X/R =40; corrientes en kA Tabla 4 – Capacidad Última de transporte de corriente de cables de tierra de cobre; las corrientes están en valores RMS, para la frecuencia de 60 Hz, X/R =20; corrientes en kA 55 Tabla 5 – Capacidad Última de transporte de corriente de cables de tierra de cobre; las corrientes están en valores RMS, para la frecuencia de 60 Hz, X/R =10; corrientes en kA Tabla 6 – Capacidad Última de transporte de corriente de cables de tierra de cobre; las corrientes están en valores RMS, para la frecuencia de 60 Hz, X/R = 0; corrientes en kA NOTA 1- Los valores de corriente de la Tabla 3 a la Tabla 6 se calcularon a partir del programa de computadora RTGC (Reichman, Vainberg, y Kuffel [B126]). Este programa de computadora puede ser utilizado directamente para determinar los requerimientos de calibre del cable de tierra para la relación conocida X / R y el tiempo de despeje de falla. NOTA 2 – La corriente es calculada para el valor de desplazamiento máximo de CD (ver 15.10). NOTA 3 – La temperatura inicial del conductor = 40°C; la temperatura final del conductor = 1083°C. NOTA 4 – los valores métricos son valores suaves. La conversión suave es un cálculo de área directo, en unidades métricas, del calibre AWG. 56 11.3.3 Factores adicionales en el dimensionamiento del conductor El diseñador debe tomar precauciones para verificar que la temperatura de cualquier conductor y la conexión de la instalación de puesta a tierra no representa un peligro para la operación segura de la subestación. Por ejemplo a) Por lo general, los conductores y las conexiones cerca de materiales inflamables deben estar sujetos a las limitaciones de temperatura más estrictas. b) Si se requiere la fuerza de cobre estirado en frío por razones mecánicas, entonces, puede ser prudente no exceder de 250 ° C para evitar la recocido de los conductores. La posible exposición a un ambiente corrosivo debe examinarse cuidadosamente. Aun cuando el tamaño del conductor correcto y el método de conexión seleccionada cumpla con todos los requisitos de prueba del IEEE Std 837 [B89], puede ser prudente elegir un mayor tamaño del conductor para compensar una reducción gradual en la sección del conductor durante el vida de diseño de la instalación donde el ambiente del suelo tiende a fomentar la corrosión. Las conexiones bajantes del equipo a la cuadrícula pueden estar sometidas a la corriente total de falla en la red, mientras que la cuadrícula divide esta corriente de manera que cada segmento de conductor en la red solamente se somete a una fracción de la corriente total de falla. Por lo tanto, los conductores bajantes pueden tener que ser más grande que los conductores de la cuadrícula o pueden ser múltiples desde los equipos a la cuadrícula para tener una corriente admisible suficiente a la corriente de falla total. Los conductores de toma de tierra que conducen la corriente del rayo rara vez requieren consideración adicional. El tamaño del conductor, que se selecciona de acuerdo a los requisitos de corriente de falla, por lo general también resultan adecuado para llevar los impulsos de corto tiempo causados por un rayo (Bellaschi [B7]). En la práctica, los requisitos de fiabilidad mecánica establecerán el mínimo tamaño del conductor. Aunque podría parecer adecuado para el diseñador el establecer tamaños mínimos en función de las condiciones locales, la necesidad de que ser conservador merece consideración. Algunas de las razones específicas son a) Un mal funcionamiento del relevador de protección puede dar lugar a la duración de la falla en exceso del tiempo de despeje de falla primario. El tiempo de despeje de respaldo suele ser adecuado para el dimensionamiento del conductor. Para subestaciones más pequeñas, esto puede acercarse a 3 s o más. Sin embargo, debido a las grandes subestaciones normalmente tienen esquemas complejos o redundantes de protección, el fallo será en general aclarado en 1 s o menos. b) El valor máximo de la corriente utilizada para determinar el tamaño del conductor debe tener en cuenta la posibilidad de un crecimiento futuro. Es menos costoso incluir un margen adecuado en el calibre del conductor durante el diseño inicial que tratar de reforzar un número de conexiones a tierra en una fecha posterior. 57 11.4 Selección de conexiones Todas las conexiones realizadas en una red de puesta a tierra por encima y por debajo del suelo deben ser evaluadas para cumplir con los mismos requisitos generales del conductor utilizado; a saber, conductividad eléctrica, resistencia a la corrosión, capacidad de transporte de corriente, y resistencia mecánica. Estas conexiones deben ser suficientemente masivas para mantener un incremento bajo en la temperatura del conductor y soportar el efecto de calentamiento. Las conexiones también deben ser lo suficientemente fuerte para soportar las fuerzas electromagnéticas de las máximas corrientes esperadas de falla y ser capaz de resistir la corrosión durante la vida prevista de la instalación. La norma IEEE Std 837 [B89] proporciona información detallada sobre la aplicación y comprobación de las conexiones permanentes para su uso en la conexión a tierra de la subestación. Las conexiones de tierra que pasan la IEEE Std 837 [B89] satisfacen todos los criterios de conductividad eléctrica, resistencia a la corrosión, capacidad de corriente y resistencia mecánica. 12. Características del suelo 12.1 El suelo como un medio de puesta a tierra El comportamiento de un electrodo de tierra enterrado en el suelo puede ser analizado por medio del circuito en la Figura 16. Como se muestra, la mayoría de los suelos se comportan tanto como un conductor de resistencia, r, y como un dieléctrico. Excepto por las ondas de alta frecuencia y frentes de onda-escarpados penetrando en un material de suelo muy resistente, la corriente de carga es insignificante en comparación con la corriente de fuga, y el suelo se puede representar por una resistencia pura. Figura 16 – Modelo del suelo 58 12.2 Efecto del gradiente de voltaje La resistividad del suelo no se ve afectada por un gradiente de voltaje a menos que este último exceda de un cierto valor crítico. El valor ligeramente varía con el material del suelo, pero por lo general tiene la magnitud de varios kilovoltios por centímetro. Una vez superado, se desarrollan arcos en la superficie del electrodo y progresa en la tierra de manera que aumenta el tamaño efectivo del electrodo, hasta que los gradientes se reducen a valores que el material del suelo puede soportar. Esta condición se ilustra por la presencia de vacíos en la Figura 16. Debido a que el sistema de puesta a tierra de la subestación normalmente está diseñado para cumplir con los criterios más rigurosos de los límites del voltaje de paso y de toque, el gradiente siempre se puede suponer que está por debajo del rango crítico. 12.3 Efecto de la magnitud de corriente La resistividad del suelo en las proximidades de los electrodos de tierra puede ser afectada por la corriente que fluye desde los electrodos en el suelo circundante. Las características térmicas y el contenido de humedad del suelo determinarán si una corriente de una magnitud y duración dada causará secado significativo y por lo tanto aumentará la resistividad efectiva del suelo. Un valor conservador de la densidad de corriente, como se da por Armstrong [B5], no debe exceder de 200 A / m2 durante 1 s. 12.4 Efecto de la humedad, temperatura y contenido químico La conducción eléctrica en los suelos es esencialmente electrolítica. Por esta razón la resistividad de la mayoría de los suelos se eleva bruscamente cuando tiene un contenido de humedad menor de 15% del peso del suelo. La cantidad de humedad adicional depende del tamaño del grano, compacidad, y la variabilidad de los tamaños de grano. Sin embargo, como se muestra en la curva 2 de la figura 17, la resistividad es poco afectada una vez que el contenido de humedad es superior a aproximadamente el 22%, como se muestra en IEEE Std 142 ™ [B86]. El efecto de la temperatura sobre la resistencia del suelo es casi insignificante para temperaturas por encima del punto de congelación. A 0 °C, el agua en el suelo se comienza a congelar y la resistividad aumenta rápidamente. La curva 3 muestra esta variación típica de un suelo franco arenoso que contiene 15.2% de humedad en peso. La composición y la cantidad de sales solubles, ácidos o álcalis presentes en el suelo pueden afectar considerablemente su resistividad. La curva 1 de la figura 18 ilustra un efecto típico de la sal (cloruro sódico) en la resistividad del suelo que contiene 30% de humedad en peso (Towne [B151]). La Figura 17 no se debe utilizar para los propósitos de cálculo. Para determinar la resistividad real del suelo, pruebas tales como las descritas en IEEE Std 81 ™ se deben realizar en el sitio. 59 Figura 17 – Efectos de la sal, humedad y temperatura en la resistividad del suelo 12.5 Uso de la capa de material superficial El revestimiento con grava o material superficial, por lo general de aproximadamente 0.08 m a 0.15 m (3 a 6 pulg) de profundidad, son muy útiles en el retraso de la evaporación de la humedad y, por tanto, al limitar el secado de las capas superiores del suelo durante períodos prolongados de tiempo seco. Además, como se analiza en 7.4, la cobertura de la superficie con un material de alta resistividad es muy valiosa en la reducción de las corrientes de choque. El valor de esta capa en la reducción de las corrientes de choque no siempre se realiza plenamente. Las pruebas realizadas por Bodier [B15] en una subestación en Francia mostraron que la grava de río utilizado como revestimiento de patio cuando se humedece tenía una resistividad de 5000 Ω-m. Una capa de 0.1 m a 0.15 m (4 a 6 pulgadas) de espesor disminuye el factor de peligro (relación del cuerpo a la corriente de cortocircuito) en una proporción de 10: 1, en comparación con el suelo húmedo natural. Las pruebas realizadas por Langer [B99] en Alemania compararon las corrientes del cuerpo al tocar un hidrante mientras está de pie sobre grava gruesa húmeda de 6000 Ω-m de resistividad con las corrientes del cuerpo mientras está de pie en el césped seco. La corriente en el caso de césped seco era del orden de 20 veces el valor de grava gruesa húmeda. Las pruebas reportadas por otros proporcionan una confirmación adicional de estos beneficios (Elek [B55]; EPRI TR-100863 [B65]). 60 Al basar los cálculos en el uso de una capa de material superficial limpio o grava, se debe tener en cuenta la posibilidad de que el aislamiento puede deteriorarse en parte a través del relleno de huecos que quedan por la compresión de las capas de balasto más bajos en el suelo y por el material de las excavaciones posteriores, si no se elimina con cuidado, y en algunas zonas donde hay asentamiento de polvo llevado en el aire. El rango de valores de la resistividad de la capa de material superficial depende de muchos factores, algunos de los cuales son la clase de piedra, tamaño, estado de la piedra (es decir, limpia o con finos), la cantidad y el tipo de contenido de humedad, contaminación atmosférica, etc. La Tabla 7 indica que la resistividad del agua con el que la roca es humedecida tiene una influencia considerable en la resistividad medida de la capa de material superficial. Por lo tanto, la capa del material superficial sometida a salpicaduras de agua puede tener una resistividad sustancialmente menor que en ambientes áridos. Como se indica en la Tabla 7, las condiciones locales, el tamaño y tipo de piedra, etc., pueden afectar el valor de la resistividad. Por lo tanto, es importante medir la resistividad de muestras de roca típicos del tipo que se utiliza en una zona determinada. La Tabla 7 muestra valores típicos de resistividad para diferentes tipos de material superficial medidos en varias partes diferentes de diversas regiones de los Estados Unidos (Abledu y Laird [B2]; EPRI TR-100863 [B64]; Hammond y Robson [B79]; Thompson [B149 ] [B150]). Estos valores no son válidos para todos los tipos y tamaños de piedra en una región determinada. Las pruebas deben realizarse para determinar la resistividad de la piedra típicamente comprada por la empresa eléctrica. 61 Tabla 7 – Resistividades de material típicos (Estados Unidos) a Concreto secado al horno (Hammond and Robson [B79]). Los valores de concreto curado al aire pueden ser mucho más bajo debido al contenido de humedad. 13. Estructura del Suelo y selección del Modelo del Suelo 13.1 Investigación de la estructura del suelo Las investigaciones de resistividad de un sitio de subestación son esenciales para la determinación tanto de la composición general y el grado de homogeneidad del suelo. Las pruebas de sondeo y otras investigaciones geológicas a menudo proporcionan información útil sobre la presencia de varias capas y la naturaleza del material del suelo, lo que da al menos algunas ideas en cuanto a la gama de resistividad en el sitio. 13.2 Clasificación del suelo y rango de resistividad Una serie de tablas existen en la literatura que muestran los rangos de resistividad para distintos tipos de suelo y rocas. La tabulación de Rudenberg [B130] tiene la ventaja de la extrema 62 simplicidad. Más datos detallados están disponibles en los manuales de ingeniería y publicaciones (por ejemplo, Sunde [B134] y Wenner [B154]). Ver Tabla 8. Tabla 8 – Rango de resistividad del suelo Tipo de tierra Suelo orgánico húmedo Suelo húmedo Suelo seco Lecho de roca Resistividad promedio (Ω-m) 10 102 103 104 13.3 Mediciones de resistividad Las estimaciones basadas en la clasificación del suelo solamente dan una aproximación de la resistividad. Por lo tanto, las pruebas reales de resistividad son imprescindibles. Estas deben hacerse en varios lugares dentro del sitio. Rara vez se encuentran sitios de subestación donde el suelo posee una resistividad uniforme en toda la zona y a una profundidad considerable. Típicamente, hay varias capas, cada una con resistividad diferente. A menudo, también se producen cambios laterales, pero en comparación con los verticales, estos cambios son por lo general más graduales. Deben realizarse pruebas de resistividad del suelo para determinar si hay variaciones importantes de resistividad con la profundidad. El número de tales lecturas tomadas debe ser mayor cuando las variaciones son grandes, especialmente si algunas lecturas son tan altas como para sugerir un posible problema de seguridad. Si la resistividad varía apreciablemente con la profundidad, a menudo es deseable usar un rango más amplio de separación de la sonda con el fin de obtener una estimación de la resistividad de las capas más profundas. Esto es posible porque, a medida que aumenta la separación de la sonda, la corriente de fuente de prueba penetra más y más distantes regiones, en ambas direcciones vertical y horizontal, independientemente de cuanto el camino de corriente se distorsiona debido a las condiciones de suelo diferentes (Manual on Ground Resistance Testing [B105]). Un número de técnicas de medición se describen en detalle en la norma IEEE Std 81. El método de Wenner de cuatro puntas, como se muestra en la Figura 18, es la técnica más comúnmente utilizada. En resumen, cuatro sondas son incrustadas en la tierra a lo largo de una línea recta, a la misma distancia de separación, incrustados a una profundidad b. El voltaje entre los dos electrodos interiores (potenciales) se mide y se divide por la corriente entre los dos electrodos exteriores (corrientes) para dar un valor de resistencia R. 63 Figura 18 – Método de las cuatro puntas de Wenner Luego, Donde ρa R a b es la resistividad aparente del suelo en Ω-m es la resistencia medida en Ω es la distancia entre los electrodos adyacentes en m es la profundidad a la cual se han incrustado los electrodos en m Si b es pequeña en comparación con a, como es el caso de las puntas que penetran el suelo sólo una corta distancia, la Ecuación (49) puede ser reducida a La corriente tiende a fluir cerca de la superficie para una pequeña separación de las puntas de prueba, mientras que más de la corriente penetra más profundamente el suelo en un mayor espaciamiento. Así, es usual una aproximación razonable suponer que la resistividad medida para un espaciamiento dado a represente la resistividad aparente del suelo a una profundidad a cuando no son excesivos los contrastes de resistividad en la capa de tierra. La Ecuación (49) y la Ecuación (50) por lo tanto se pueden utilizar para determinar la resistividad aparente ρa a una profundidad a. Palmer [B122] es una versión modificada del método de Wenner. Este método da una mayor sensibilidad para mayores separaciones de las puntas de prueba, como se describe en IEEE Std 81. Otro método de medición de la resistividad del suelo, como se muestra en la Figura 19 y descrita en la IEEE Std 81, es el método de la varilla impulsada basado en el método de los tres polos o de caída de potencial (Blattner [B12] [B13]; Purdy [B125 ]). 64 En este método, se varía la profundidad Lr de la varilla incrustada en el suelo a ser probado. Las otras dos varillas, conocidas como varillas de referencia, son incrustadas a una profundidad en línea recta. La ubicación de la varilla de voltaje se varía entre la varilla de prueba y la varilla de corriente. Alternativamente, la varilla de voltaje se puede colocar en el lado opuesto de la varilla de corriente. La resistividad aparente está dada por Donde Lr es la longitud de la varilla en m d es el diámetro de la varilla en m Una representación de los valores de resistividad aparente medida ρa con respecto a la longitud de la varilla Lr ofrece una ayuda visual para determinar la variación de la resistividad del terreno con la profundidad. Las pruebas realizadas por la Universidad Estatal de Ohio [B63] demostraron que el método de Wenner de cuatro puntas o el método de tres puntas-varilla-incrustada pueden proporcionar la información necesaria para desarrollar un modelo de suelo. Figura 19 – Diagrama de circuito para el método de tres puntas o de varilla incrustada El método de cuatro puntas de Wenner es el método más popular en uso. Hay varias razones para esta popularidad. El método de cuatro puntas obtiene los datos de resistividad del suelo para las capas más profundas sin tener que manejar las puntas de prueba en esas capas. No se necesita equipo pesado para realizar la prueba de cuatro puntas. Los resultados no se ven afectados en 65 gran medida por la resistencia de las puntas de prueba o de los agujeros creados en incrustar las puntas de prueba en el suelo. Una ventaja del método de varilla incrustada, aunque no necesariamente relacionado con las mediciones, es la capacidad de determinar en qué profundidad las varillas de tierra pueden ser clavadas. Saber si las varillas se pueden clavar y cuan profundas dentro de la tierra, puede salvar la necesidad de rediseño de la red de tierra. A menudo, debido a las capas duras en el suelo, tales como roca, arcilla dura, etc., se hace prácticamente imposible clavar la varilla de prueba lo que resulta en datos insuficientes. Una técnica para la predicción de la resistencia del suelo a una profundidad de 10 veces la profundidad de los valores de resistividad conocida ha sido desarrollado por Blattner [B12]. Esta técnica se puede utilizar eficazmente en los casos en que la varilla de prueba no puede ser incrustada de profundidad. Sin embargo, se recomienda al usuario revisar las limitaciones prácticas de esta técnica antes de usarla. Una desventaja del método de la varilla incrustada es que cuando la varilla de prueba es clavada profundamente en el suelo, por lo general pierde el contacto con el suelo debido a la vibración y el acoplamiento de mayor diámetro resulta en valores de más altos resistencia medidos. Una red de tierra diseñada con estos valores de resistividad del suelo superior puede ser innecesariamente conservadora. El método de la varilla incrustada presenta una incertidumbre en el valor de resistencia. La regla del 62% es válida sólo para grandes separaciones de los electrodos y el suelo uniforme. En suelos no uniformes, esta suposición puede afectar el resultado de las lecturas, como se describe en la IEEE Std 81. Si se utiliza la parte plana de la curva para determinar la resistencia de la varilla de prueba, esta parte plana no puede dar la resistencia correcta en el suelo no uniforme, y la porción plana ni siquiera puede obtenerse a menos que sea muy grande la separación entre la varilla de prueba y la punta de corriente (Dawalibi y Mukhedkar [B40] [B45]). Los registros de medición de la resistividad deben incluir los datos de temperatura y la información sobre el contenido de humedad del suelo en el momento de la medición. Todos los datos disponibles sobre los objetos conductores enterrados conocidos de la zona estudiada también deben ser registrados. Los objetos conductores enterrados en contacto con el suelo puede invalidar las lecturas hechas por los métodos descritos si están lo suficientemente cerca para alterar el patrón de flujo de corriente de prueba. Esto es particularmente cierto para los objetos grandes o largos. Por esta razón, las mediciones de resistividad son susceptibles de ser distorsionada de manera significativa en una zona donde ya se han instalado conductores de la cuadrícula, excepto para las mediciones de poca profundidad en o cerca del centro de un gran rectángulo de malla. En tales casos, unas pocas lecturas aproximadas podrían tomarse a una corta distancia fuera de la red, con las puntas de prueba colocadas de manera de minimizar el efecto de la cuadrícula en el patrón de flujo de corriente. Aunque no es concluyente en cuanto a las condiciones dentro de la red, tales lecturas pueden ser utilizadas como aproximación, sobre todo si hay razones para creer que el suelo en toda la zona es razonablemente homogéneo. 66 13.4 Interpretación de mediciones de resistividad La interpretación de la resistividad aparente obtenida en el campo es quizás la parte más difícil del programa de medición. El objetivo básico es derivar un modelo de suelo que sea una buena aproximación del suelo real. La resistividad del suelo varía lateralmente y con respecto a la profundidad, en función de la estratificación del suelo. Las variaciones estacionales pueden ocurrir en la resistividad del suelo debido a las distintas condiciones climáticas como se describe en EPRI TR 100 863 [B65]. Hay que reconocer que el modelo de suelo es sólo una aproximación de las condiciones reales y que una coincidencia perfecta es poco probable. Los modelos de resistividad del suelo más comúnmente utilizados son el modelo de suelo uniforme y el modelo de suelo de dos capas. Los modelos del suelo de dos capas son a menudo una buena aproximación de muchas estructuras del suelo mientras que los modelos del suelo de varias capas pueden ser utilizados para las condiciones del suelo más complejas. La interpretación de las mediciones de resistividad del suelo se puede realizar de forma manual o mediante el uso de técnicas de análisis de computadora descrita en Blattner [B12] [B13]; Blattner y Dawalibi [B14]; Endrenyi [B57]; EPRI EL-2699 [B61]; EPRI EL-3982 [B63]; EPRI TR-100622 [B64]; Lazzara y Barbeito [B101]; Meliopoulos y Papelexopoulos [B106]; Meliopoulos, Papelexopoulos, Webb, y Blattner [B108]; Moore [B113]; Nahman y Salamon [B115]; Roman [B127]; y Tagg [B139]. Un modelo de suelo uniforme debe usarse sólo cuando hay una variación moderada en la resistividad aparente. En las condiciones del suelo homogéneo, que rara vez se producen en la práctica, el modelo de suelo uniforme puede ser razonablemente preciso. Si hay una gran variación en la resistividad aparente medida, el modelo de suelo uniforme es poco probable que produzca resultados precisos. Una representación más precisa de las condiciones reales del suelo se puede obtener mediante el uso de un modelo de dos capas. El modelo de dos capas consta de una capa superior de profundidad finita y de una capa inferior de espesor infinita con diferente resistividad. Existen varias técnicas para determinar un modelo de dos capas equivalente de la resistividad aparente obtenida en las pruebas de campo. En algunos casos un modelo de dos capas se puede aproximar por la inspección visual de un gráfico de resistividad aparente versus la profundidad a partir de mediciones de la varilla incrustada o la resistividad aparente en comparación con las separaciones de las puntas en el método de medición de cuatro puntas de Wenner (Blattner [B11] [B13]; IEEE Tutorial curso 86 [B90]). Programas de computadora disponibles en la industria también se pueden usar para derivar un modelo de suelo de dos capas y modelos de suelo de varias capas (Dawalibi y Barbeito [B39]; EPRI EL-2699 [B61]; EPRI TR-100622 [B64]; Orellara y Mooney [ B120]). En algunos casos la variación de la resistividad del suelo puede presentar mínimos y máximos de tal manera que un modelo de dos capas equivalente puede no producir un modelo preciso. En tales casos, un modelo de suelo diferente, tal como un modelo de múltiples capas, puede ser necesario como se describe en Dawalibi, Ma, y Southey [B47] y Dawalibi y Barbeito [B39]. 67 13.4.2.1 Suposición de resistividad uniforme Un modelo de suelo uniforme se puede utilizar en lugar del modelo de suelo cuando las herramientas de cálculo de dos capas o de múltiples capas no están disponibles. Por desgracia, un límite superior de error en todos los parámetros de puesta a tierra relevantes es difícil de estimar en general, pero cuando el contraste entre las diferentes resistividades de capa es moderada, un valor promedio de resistividad del suelo se puede utilizar como una primera aproximación o para establecer el orden de magnitud. La resistividad del suelo uniforme aproximada puede obtenerse tomando una media aritmética de los datos de resistividad aparente medidos como se muestra en la ecuación (52). Donde ρa(1), ρa(2), ρa(3), … ρa(n) son los datos de resistividad aparente obtenidos a diferentes espaciamientos por el método de cuatro varillas de prueba o a diferentes profundidades en el método de varilla clavada dentro de la tierra en Ω-m. n es el número total de mediciones. La mayoría de los suelos no cumplirá los criterios de la ecuación (52). Es difícil desarrollar un modelo de suelo uniforme cuando la resistividad de un suelo varía significativamente. Debido a que las ecuaciones de voltaje de paso y de contacto de esta guía se basan en modelos uniformes de suelo, se hizo un intento para desarrollar una guía para aproximar un terreno no uniforme a un suelo uniforme. Se obtuvieron datos de resistividad del suelo aparentes utilizando el método de cuatro puntas de varias localizaciones geográficas diferentes. Los datos sobre el suelo de cada lugar se aproximaron con tres diferentes modelos de suelo equivalente. Estos modelos aproximados consistieron en un (EPRI TR100622 [B64]) modelo de dos capas generado por computadora y dos modelos de suelo uniforme. Los modelos uniformes de suelo se determinaron a partir de datos medidos de resistividad aparente utilizando la Ecuación (52) y la Ecuación (53). En el siguiente paso, se calculó la resistencia de la red y los voltajes de paso y de toque para una cuadrícula de 76.2 m × 76.2 m (250 pies x 250 pies) con un total de 64 varillas de tierra distribuidas de manera uniforme, utilizando un programa de computadora (EPRI TR-100622 [B64 ]). La profundidad de las varillas de tierra dependía del modelo de suelo utilizado. Por ejemplo, en el caso del modelo de dos capas, las varillas de tierra penetraron la capa inferior. Consulte el Anexo E para más detalles de esta investigación. Finalmente, los parámetros de puesta a tierra calculados para el modelo de dos capas se compararon con el calculado usando los modelos uniformes de suelo. Los parámetros de puesta a tierra calculados utilizando el modelo de suelo uniforme de la Ecuación (48) resultaron bien con respecto al calculado usando el modelo de dos capas. Donde ρa(max) ρa(min) es el valor de resistividad aparente máximo (a partir de los datos medidos) en Ω-m es el valor de resistividad aparente mínimo (a partir de los datos medidos) en Ω-m 68 Hay una serie de suposiciones hechas en el estudio anterior. Como resultado, la Ecuación (53) se debe utilizar con precaución. Por ejemplo, no se recomienda el uso de la Ecuación (53) para una cuadrícula de tierra sin varillas de tierra (Dawalibi, Ma, y de Southey [B48]). Además, si la resistividad de suelo uniforme determinada utilizando la Ecuación (53) se emplea para diseñar una cuadrícula de tierra, las varillas de tierra deben al menos alcanzar la profundidad donde la resistividad medida se corresponde con el valor calculado de ρa (av2). Hay varios métodos sugeridos por diferentes autores para aproximarse a un terreno no uniforme con un modelo de suelo uniforme. Uno de estos métodos incluye el uso del promedio de la capa superior de la resistividad aparente para los cálculos de voltaje de toque y de paso y el promedio de la resistividad aparente de la capa más baja para el cálculo de la resistencia de puesta a tierra del sistema. Dawalibi y Barbeito [B39]; Dawalibi, Ma, y de Southey [B47]; EPRI TR-100622 [B64]; Fujimoto, Dick, Boggs, y Ford [B70]; y Thapar y Gerez [B144] pueden proporcionar información adicional acerca de la interpretación de los datos medidos del suelo y la influencia de los modelos de suelo de múltiples capas, dos capas, y uniforme sobre los parámetros de puesta a tierra. Otro enfoque para situaciones en las que la resistividad varía notablemente con la profundidad es sugerido por Sunde [B134], y en algunos de los libros de prospección geofísica a la que se refiere. Por ejemplo, a menudo es posible a partir de las lecturas de campo tomadas con un amplio rango de distancias entre sondas para deducir una estratificación de la tierra en dos o más capas de espesor apropiado que dar cuenta de las variaciones reales de la prueba (Moore [B113]). 13.4.2.1 Modelo de suelo de dos capas (general) Un modelo de suelo de dos capas puede ser representado por un suelo de la capa superior de una profundidad finita por encima de una capa inferior de profundidad infinita. El cambio abrupto de la resistividad en los límites de cada capa de suelo se puede describir por medio de un factor de reflexión. El factor de reflexión, K, se define por la ecuación (54). Donde ρ1 es la resistividad del suelo de la capa superior, Ω-m ρ2 es la resistividad del suelo de la capa inferior, Ω-m Mientras que la representación más exacta de un sistema de puesta a tierra, sin duda debe estar basada en las variaciones reales de la resistividad del suelo presente en el sitio de la subestación, rara vez será económicamente justificable o técnicamente factible modelar todas estas variaciones. Sin embargo, en la mayoría de los casos, la representación de un electrodo de tierra sobre la base de un modelo de tierra de dos capas equivalente es suficiente para diseñar un sistema de puesta a tierra segura. La IEEE Std 81 proporciona métodos para determinar las resistividades equivalentes de la capa superior e inferior del suelo y la altura de la capa superior para un modelo de este tipo. Hay otros métodos sugeridos por los autores que incluyen la determinación de un modelo de dos capas y utilizando la resistividad de la capa superior para los cálculos de voltaje de paso y 69 contacto, y la resistividad de la capa inferior para el cálculo de la resistencia; las ecuaciones modificadas presentadas en la guía pueden ser usadas de esta manera en modelos de dos capas. Estos documentos de investigación pueden proporcionar al diseñador más información acerca de la interpretación de los suelos y el impacto de múltiples capas, de dos capas, y los modelos uniformes (Dawalibi y Barbeito [B39]; Dawalibi, Ma, y de Southey [B47]; Thapar y Gerez [B144 ]). 13.4.2.2 Modelo de suelo de dos capas por el método gráfico Un modelo de suelo de dos capas puede ser aproximado mediante el uso de métodos gráficos descritos en Blattner y Dawalibi [B14]; Endrenyi [B57]; Romano [B127]; Sunde [B134]; y Tagg [B140]. El método gráfico de Sunde se describe en los párrafos siguientes. En el método de Sunde, el gráfico mostrado en la Figura 20 se utiliza para aproximar un modelo de suelo de dos capas. El gráfico de la Figura 20, que se basa en los datos de prueba de cuatro puntas de Wenner, se reproduce de la Figura 2.6 de Sunde [B134], con la notación revisada para que coincida con los símbolos utilizados en esta guía. Los parámetros ρ1 y ρ2 se obtienen mediante la inspección de las mediciones de resistividad representados gráficamente (Figura 21). Sólo h se obtiene por el método gráfico de Sunde, como sigue: a) Trazar la curva de resistividad aparente ρa en el eje Y versus el espaciado de las puntas de sondeo en el eje x. b) Estimar ρ1 y ρ2 partir de la gráfica ploteada en el literal a). ρa correspondiente a una separación más pequeña es ρ1 y para una separación más grande es ρ2. Ampliar el gráfico de resistividad aparente en ambos extremos para obtener estos valores extremos de resistividad si los datos de campo son insuficientes. c) Determinar ρ2 / ρ1 y seleccionar una curva en el gráfico de Sunde en la Figura 20, que coincida estrechamente, o interpolar y trazar una nueva curva en el gráfico. d) Seleccionar el valor en el eje y de ρa / ρ1 dentro de la región inclinada de la curva ρ2 / ρ1 apropiada de la Figura 20. e) Leer el valor correspondiente de a / h en el eje x. f) Calcular ρa multiplicando el valor seleccionado, ρa / ρ1, en el apartado d) por ρ1. g) Leer la correspondiente separación de las puntas de prueba en el gráfico de resistividad aparente ploteada en a). h) Calcular h, la profundidad de la capa superior, usando la separación de las puntas de prueba apropiada, a. Utilizando los datos de suelo del tipo de suelo 1 en la Tabla E.2, un gráfico de resistividad versus espaciamiento se puede dibujar. Véase la Figura 23. Tanto ρ1 y ρ2 se puede determinar mediante 70 inspección visual. Suponiendo ρ1 = 100 Ω-m y ρ2 = 300 Ω-m, el siguiente ejemplo ilustra el método gráfico de Sunde: a) b) c) d) e) f) g) h) Graficar la Figura 23. Seleccionar ρ1 = 100 Ω-m, ρ2 = 300 Ω-m. ρ1 / ρ2 = 300/100 = 3. Dibujar la curva en la Figura 20 (ver la Figura 22 para un ejemplo). Seleccionar ρa / ρ1 = 2. Leer a/h = 2.7 de la Figura 22 para ρa / ρ1 = 2. Calcular ρa : ρa = 2 ρ1 = 2 (100) = 200. Leer a = 19 de la curva de resistividad aparente de la Figura 23 para ρa = 200. 𝑎 Calcular h: ℎ = 𝑎/ℎ =19/2.7 = 7.0 m. Este resultado se compara favorablemente con 6.1 m usando el programa EPRI TR -100622 [B64]. Figura 20 – Método gráfico de Sunde 71 Figura 21 – Ploteo de los datos de suelo tipo 1, Tabla E.2 Figura 22 – Ejemplo del método gráfico de Sunde 72 Figura 23 – Ejemplo para determinar “a” de la curva de resistividad aparente 13.4.2.3 Comparación del modelo de suelo uniforme y el de dos capas en sistemas de puesta a tierra El enfoque del modelo de dos capas se ha encontrado que es mucho más preciso que el modelo de suelo uniforme. Un sistema de puesta a tierra en un ambiente de suelo de dos capas se comporta de manera diferente en comparación con el mismo sistema en el suelo uniforme. En general, para un sistema de puesta a tierra en suelo uniforme o en suelo de dos capas con ρ1 menor que ρ2 (capa superior de resistividad del suelo menor que la resistividad del suelo de la capa inferior, con un factor de reflexión positivo), la densidad de corriente es mayor en los conductores en los bordes exteriores de la cuadrícula de tierra. En el suelo de dos capas con ρ1 mayor que ρ2 (el suelo en la capa superior es más resistivo que el suelo de la capa inferior, con un factor de reflexión negativo), la densidad de corriente es más uniforme sobre todos los conductores del sistema de puesta a tierra. Esto es causado por la tendencia de la corriente de cuadrícula a ir hacia abajo en la capa de baja resistividad, en lugar de arriba y hacia afuera a la capa superior más resistiva. Los estudios realizados por Thapar y Gross [B145] y Dawalibi y otros [B42] [B44] [B49] proporcionan una gran cantidad de información sobre este tema. a) Las variaciones de la resistividad del suelo tienen una influencia considerable en el rendimiento de la mayoría de los sistemas de puesta a tierra, que afecta tanto al valor de la resistencia de tierra y elevación del potencial de tierra, y los voltajes de paso y de toque. En general, para los valores negativos de K (capa superior más resistente que la capa inferior), la resistencia es menor que la del mismo sistema de puesta a tierra en suelo uniforme con ρ1 de resistividad. Por el contrario, para valores positivos de K, la resistencia 73 es generalmente más alta que en suelo uniforme y ρ1 de resistividad. Existe una relación similar para las tensiones de paso y de contacto producidas en la superficie de un suelo de dos capas frente al que hay en la superficie de suelo uniforme. Para los valores negativos de K, los voltajes de paso y de toque son generalmente inferiores a los voltajes para el mismo sistema de puesta a tierra en suelo uniforme de ρ1 de resistividad. Además, para valores positivos de K, los voltajes de paso y de toque son generalmente más altos que en el suelo uniforme. b) Otros parámetros, tales como la altura de la capa superior h, también afecta las diferencias en el desempeño de los electrodos de tierra en un entorno de dos capas y en condiciones de suelo uniforme. La regla general es que, cuando la altura de la capa superior h se hace significativamente más grande que las dimensiones propias del electrodo, el rendimiento del electrodo se acerca al desempeño del mismo electrodo en suelo uniforme de resistividad ρ1. c) Además, se debe reconocer que las características anteriores se basan en la premisa de una fuente de corriente de fallo constante. Las corrientes reales en el sistema de puesta a tierra cambiarán de un caso a otro en función de ρ1 y ρ2, lo que refleja los cambios locales en relación con todos los otros caminos de la corriente de falla a tierra predeterminadas por la ubicación de la falla. Esta división de corriente se discute en la Cláusula 15. Por eso, en ciertos casos, algunos de los supuestos indicados anteriormente no siempre puede ser ciertos. Para aplicaciones de diseño que involucran arreglos de puesta a tierra relativamente simples de electrodos enterrados en un terreno razonablemente uniforme, los métodos aproximados proporcionados en otras partes de la guía serán adecuados para la obtención de un diseño realista con márgenes de seguridad adecuados. Sin embargo, para los diseños que implican una gran superficie de tierra, cuadrículas de forma irregular, etc., o cuando la resistividad del suelo es claramente muy no uniforme, el ingeniero responsable del diseño debe decidir si se necesitan métodos más sofisticados (Záborzsky [B156]). El Anexo F proporciona un análisis paramétrico de diversas configuraciones de la red en los modelos uniforme y de dos capas del suelo. 13.4.2.4 Modelo de suelo multicapas Las condiciones altamente no uniforme del suelo pueden ser encontradas. Tales condiciones del suelo pueden requerir el uso de técnicas de modelado de múltiples capas si un modelo de suelo de dos capas equivalente no es factible. Un modelo de suelo de varias capas puede incluir varias capas horizontales o capas verticales. Las técnicas para interpretar la resistividad altamente no uniforme del suelo requieren el uso de programas de computadora o métodos gráficos (Dawalibi y Barbeito [B39]; Dawalibi, Ma, y de Southey [B47]; EPRI EL-2699 [B61]; EPRI TR-100622 [B64 ]; Orellara y Mooney [B120]). Las ecuaciones que rigen el desempeño de un sistema de puesta a tierra enterrado en el suelo de varias capas se pueden obtener mediante la resolución de las ecuaciones de Laplace para una fuente de corriente en un punto, o por el método de las imágenes, lo que da resultados idénticos. 74 El uso de cualquiera de los métodos para determinar el potencial de tierra causado por un punto de fuente de corriente resulta en una serie infinita de términos que representan las contribuciones de cada imagen consecuente de la fuente de corriente del punto. La formulación exacta de las ecuaciones que incluyen estos efectos se da en Dawalibi y Mukhedkar [B42], Heppe [B81], y Sunde [B134]. 14. Evaluación de la resistencia de tierra 14.1 Requerimientos usuales Como se discutió en 12.5, es una práctica común tener una capa delgada de material superficial que recubre la zona de conexión a tierra de una subestación. Podría parecer que tal capa de alta resistividad, que tiene la altura h, mucho menor que la profundidad del sistema de puesta a tierra, podría empeorar tanto el voltaje de paso y de toque. Sin embargo, éste no es el caso. El material superficial se utiliza para aumentar la resistencia de contacto entre el pie de una persona y la superficie de la tierra. Por lo tanto, para una corriente de cuerpo máxima permisible dada, se pueden permitir voltajes de paso y de toque considerablemente más altos si está presente un material de superficie de alta resistividad. 14.2 Cálculos simplificados La estimación de la resistencia total a la tierra remota es uno de los primeros pasos para determinar el tamaño y el diseño básico de un sistema de puesta a tierra. La resistencia depende principalmente de la zona a ser ocupada por el sistema de puesta a tierra, que generalmente se conoce en la primera fase de diseño. Como primera aproximación, un valor mínimo de resistencia del sistema de puesta a tierra de la subestación en suelo uniforme puede ser estimada por medio de la fórmula de una placa metálica circular a una profundidad de cero Donde Rg ρ A es la resistencia a tierra de la subestación en Ω es la resistividad del suelo en Ω-m es el área ocupada por la cuadrícula de tierra en m2 A continuación, un límite superior de la resistencia a tierra de la subestación se puede obtener mediante la adición de un segundo término a la fórmula anterior, tal como fue propuesto por Laurent [B100] y Nieman [B118]. 75 Donde LT es la longitud total de conductores enterrados en m. En el caso de una combinación varilla – cuadrícula en el suelo uniforme, con una longitud combinada de conductores horizontales y varillas de tierra se dio una estimación ligeramente más conservadora de LT, porque las varillas de tierra por lo general son más eficaces en una base por unidad de longitud. El segundo término reconoce el hecho de que la resistencia de puesta a tierra de cualquier sistema real que consta de un número de conductores es mayor que la de una placa metálica sólida. La diferencia disminuirá con el aumento de la longitud de conductores enterrados y se acercará a 0 para un LT infinito, cuando se alcanza la condición de una placa sólida. Sverak [B137] amplió la ecuación (56) para tener en cuenta el efecto de la profundidad de la cuadrícula Donde h es la profundidad de enterramiento de la cuadrícula en m. Para las redes sin varillas de tierra, esta fórmula ha sido probada para producir resultados que son prácticamente idénticos a los obtenidos con la ecuación (61) de Schwarz [B132], descrita en 14.3. La siguiente tabla de Kinyon [B96] ofrece una idea de cómo la resistencia calculada y la real se compara en cinco subestaciones diferentes. La ecuación (56) se utilizó para calcular la resistencia de cuadrícula. Véase la Tabla 9. Tabla 9 – Resistencias típicas de cuadrículas Un valor promedio de los valores de resistividad medidos es frecuentemente utilizado como la resistividad del suelo uniforme en la Ecuación (56). Si se utiliza esta resistividad promedio, la Ecuación (56) por lo general produce una resistencia que es mayor que el valor que resultaría de una medición de resistencia directa. Los valores de resistencia medidos y calculados que se 76 muestran en la Tabla 9 no reflejan esta tendencia, porque Kinyon [B96] basa sus cálculos en el "... menor valor promedio de resistividad medida en el sitio". Los lectores deben consultar Kinyon [B96] para continuar el debate sobre la elección de los valores de resistividad utilizados en la Tabla 9. 14.3 Ecuaciones de Schwarz Schwarz [B132] desarrolló el siguiente conjunto de ecuaciones para determinar la resistencia total de un sistema de puesta a tierra en un suelo homogéneo que consta de electrodos horizontales (cuadrícula) y verticales (varillas). Las ecuaciones de Schwarz extendieron las ecuaciones aceptadas de un alambre recto y horizontal para representar la resistencia de tierra, R1, de una cuadrícula que consta de conductores que se entrecruzan, y una esfera embebida en la tierra para representar varillas de tierra, R2. También presentó una ecuación para la resistencia mutua de tierra Rm entre la cuadrícula y el lecho de varillas. Schwarz usa la siguiente ecuación introducida por Sunde [B134] y Rudenberg [B131] para combinar la resistencia de la cuadrícula, varillas, y la resistencia de tierra mutua para calcular la resistencia total del sistema, Rg. Donde R1 es la resistencia de tierra de los conductores de la cuadrícula en Ω R2 es la resistencia de tierra de todas las varillas de tierra en Ω Rm es la resistencia de tierra mutua entre el grupo de conductores de la cuadrícula de tierra, R1, y el grupo de varillas de tierra, R2 en Ω La resistencia de tierra de la cuadrícula es Donde ρ es la resistividad del suelo en Ω-m Lc es la longitud total de todos los conductores de la cuadrícula conectados en m a’ es √𝑎 × 2ℎ para los conductores enterrados a la profundidad h en m, o a’ es a para el conductor en la superficie del suelo en m 2a es el diámetro del conductor en m A es el área cubierta por los conductores en m2 k1, k2 son los coeficientes (ver la Figura 24(a) y (b)) La resistencia de tierra del lecho de varillas es 77 Donde Lr 2b nR es la longitud de cada varilla en m es el diámetro de la varilla en m es el número de varillas colocadas en el área A La resistencia mutua entre la cuadrícula y el lecho de varillas es La resistencia de tierra combinada de la cuadrícula y el lecho de varillas será más baja que la resistencia de tierra de cualquiera de los componentes individuales, pero todavía mayor que la de una combinación en paralelo. Schwarz comparó los resultados de sus ecuaciones con el trabajo teórico publicado anteriormente y probar el modelo a fin de verificar la exactitud de sus ecuaciones. Desde que fueron publicados en 1954, las ecuaciones de Schwarz han sido modificadas por Kercel [B95] para proporcionar ecuaciones para las constantes k1 y k2 y adicionalmente expandirlas para incluir el uso de ecuaciones de suelos de dos capas (Nahman y Salamon [B116] [B117]) . 14.4 Nota sobre la resistencia de electrodos primarios En general, la resistencia de tierra de cualquier electrodo primario depende de la resistividad del suelo y el tamaño y tipo de disposición de todos los conductores individuales que comprenden el electrodo de tierra. En disposiciones más complejas con alambres entrecruzados y un gran número de varillas en la misma área, la resistencia mutua entre elementos individuales juega un papel importante. 14.5 Tratamiento de suelos para una baja resistividad A menudo es imposible alcanzar la reducción deseada de la resistencia de tierra mediante la adición de más conductores en la cuadrícula o varillas de tierra. Una solución alternativa es aumentar el diámetro efectivo del electrodo mediante la modificación del suelo que rodea el electrodo. La cobertura interior del suelo más cercano al electrodo comprende normalmente la mayor parte de la resistencia a tierra del electrodo de tierra respecto a la tierra remota. Este fenómeno se utiliza a menudo como una ventaja, de la manera siguiente: a) Uso de cloruro de sodio, magnesio y sulfatos de cobre, o cloruro de calcio, para incrementar la conductividad del suelo que rodea un electrodo. Las autoridades estatales o federales pueden no permitir el uso de este método debido a la posible lixiviación a las áreas circundantes. Además, el tratamiento de sal debe ser renovado periódicamente. 78 Figura 24 – Coeficientes k1 y k2 de las fórmulas de Schwars: (a) coeficiente k1; (b) coeficiente k2 b) El uso de bentonita, una arcilla natural que contiene la montmorillionita mineral, que se formó por la acción volcánica hace años. Es resistente a la corrosión, estable, y tiene una resistividad de 2.5 Ω -m a 300% de humedad. La baja resistividad se debe principalmente a un proceso electrolítico entre el agua, Na2O (soda), K2O (potasa), CaO (cal), MgO (magnesia), y otras sales minerales que se ionizan formando un electrolito fuerte con pH 79 que varía desde 8 hasta 10. Este electrolito no se filtrará poco a poco, ya que es parte de la propia arcilla. Siempre con una cantidad suficiente de agua, se hincha hasta 13 veces su volumen en seco y se adhiere a casi cualquier superficie que toca. Debido a su naturaleza higroscópica, actúa como un agente de secado pasando cualquier humedad disponible en el medio ambiente circundante. La bentonita necesita agua para obtener y mantener sus características beneficiosas. Su contenido de humedad inicial se obtiene en la instalación cuando se prepara la suspensión. Una vez instalado, la bentonita cuenta con la presencia de la humedad del suelo para mantener sus características. La mayoría de los suelos tienen suficiente humedad en el terreno para que la desecación no sea una preocupación. La naturaleza higroscópica de la bentonita aprovechará el agua disponible para mantener su condición instalada. Si se expone a la luz solar directa, tiende a sellarse ella misma, previniendo que el proceso de secado penetre más profundamente. Puede que no funcione bien en un ambiente muy seco, ya que puede reducir el tamaño del electrodo, incrementando la resistencia del electrodo (Jones [B93]). c) Los electrodos de tipo químico constan de un tubo de cobre lleno de una sal. Los agujeros en el tubo permiten que la humedad penetre, disuelve las sales, y permite que la solución de sal se filtre en el suelo. Estos electrodos se instalan en un agujero previamente hecho y por lo general se vuelve a rellenar con el mismo suelo tratado. d) Los materiales de mejoramiento del suelo, algunos con una resistividad de menos de 0.12 Ω-m (alrededor de 5% de la resistividad de la bentonita), se colocan típicamente alrededor de la varilla en un agujero o alrededor de los conductores de tierra en una zanja, ya sea en una forma seca o premezclado en una suspensión. Algunos de estos materiales de mejora son permanentes y no se filtrará ningún producto químico en el suelo. Otros materiales de mejora de suelo disponible se mezclan con el suelo local en cantidades variables y van a filtrarse lentamente en el suelo circundante, bajando la resistividad del terreno. 14.6 Electrodos encapsulados en concreto El concreto, siendo higroscópico, atrae la humedad. Enterrado en el suelo, un bloque de concreto se comporta como un medio semiconductor con una resistividad de 30 Ω-m a 200 Ω-m en función del nivel de humedad. Esto es de particular interés en suelos medios y altamente resistivos porque una varilla de alambre o metálico revestido de concreto tiene una resistencia menor que un electrodo similar enterrado directamente en la tierra. Este recubrimiento reduce la resistividad de la parte más crítica del material que rodea el elemento metálico de la misma manera como un tratamiento químico de suelos. Sin embargo, este fenómeno puede a menudo ser tanto una ventaja y desventaja en el diseño. Algunas de las razones son las siguientes: a) Por un lado no resulta práctico construir las fundaciones de estructuras en las que el acero interior (barras de refuerzo) no está conectado eléctricamente al metal de la estructura. Incluso si un cuidado extremo se tomara con la colocación de tornillos de anclaje con el fin de evitar cualquier contacto directo de metal a metal, la naturaleza semiconductora del concreto proporcionaría una conexión eléctrica. b) Por otra parte, la presencia de una pequeña corriente continua puede causar la corrosión del material de las barras de refuerzo. Aunque la corriente alterna, como tal, no produce 80 corrosión, aproximadamente el 0.01% de la corriente de corriente AC se rectifica en la interfaz de la barra de acero y el concreto (Rosa, McCollum, y Peters [B128]). c) El fraccionamiento del concreto se puede producir ya sea por el fenómeno anterior debido a que el acero corroído ocupa aproximadamente 2.2 veces su volumen original, produciendo presiones que se acercan a 35 MPa o el paso de una corriente muy elevada, vaporiza la humedad en el concreto. Afortunadamente, hay un cierto potencial de umbral para la corrosión de CD, de aproximadamente 60 V CD, debajo del cual no se producirá corrosión. Una serie de pruebas de campo en relación con la carga máxima de corriente se informó en Bogajewski, Dawalibi, Gervais, y Mukhedkar [B17]; Dick y Holliday [B54]; y Miller, Hart, y Brown [B111]. La capacidad de carga de corriente de corto tiempo, ICE, de electrodos encapsulados en concreto se puede estimar por medio de formula de Ollendorff para una corriente sostenida indefinidamente I∞, ajustada por un factor de 1.4, o directamente de la Figura 25. Donde λg Rz ρ Ta Tv I∞ es la conductividad térmica de la tierra en W/(m °C) es la resistencia de tierra del electrodo encapsulado en concreto en Ω es la resistividad del suelo en Ω-m es la temperatura ambiente en °C es la temperatura máxima permitida para prevenir la evaporación repentina de la humedad en °C es la corriente sostenible indefinida en A La aplicabilidad de esta fórmula se ha verificado en Bogajewski, Dawalibi, Gervais, y Mukhedkar [B17], que reportan resultados de extensas pruebas de campo en postes de concreto. En general, si el daño se va a prevenir, la corriente real debe ser menor que el valor de ICE determinado por la ecuación (62). Un margen de seguridad de 20% a 25% es razonable para la mayoría de las aplicaciones prácticas. 81 Figura 25 – Capacidad de carga de corriente de corto tiempo de electrodos de tierra encapsulados en concreto Por lo tanto, con las precauciones apropiadas, los electrodos encapsulados en concreto se pueden utilizar como electrodos de tierra auxiliar. Fagan y Lee [B66] usan la siguiente ecuación para la obtención de la resistencia de tierra, R CE-rod, de una varilla vertical encapsulada en concreto: Donde ρc ρ Lr d Dc es la resistividad del concreto en Ω-m es la resistividad del suelo en Ω-m es la longitud de la varilla de tierra en m es el diámetro de la varilla de tierra en m es el diámetro de la capa de concreto en m La ecuación (63) puede ser relacionada con la fórmula utilizada comúnmente para una varilla de tierra de longitud Lr y de diámetro d, como sigue: Luego la Ecuación (63) puede ser resuelta en 82 Representando la combinación de dos resistencias en serie. La resistencia de tierra calculada por la Ecuación (64) de un cilindro de concreto de diámetro Dc, directamente enterrado en un suelo ρ. La resistencia a tierra del segmento interior de diámetro DC, que contiene una varilla metálica en diámetro d. Obviamente, el último término se obtiene como la diferencia de los valores de resistencia hipotéticos para una barra en concreto, si d y DC se introducen en la fórmula de la ecuación de un solo medio (64), y ρ se sustituye por ρc. Este enfoque es válido en general para cualquier otro electrodo que tiene una forma diferente. Nada, es por conveniencia. En donde, en adición a los símbolos ya mencionados, RSM RDM So Si G es la resistencia del electro en un medio simple en Ω es la resistencia del electrodo en un medio dual en es el área superficial de un electrodo dado en m2 es el área de la interface en m2 es el factor geométrico que caracteriza la forma particular de un electrodo dado Las siguientes recomendaciones deben ser consideradas cuando se utilizan electrodos de concreto encapsulados: a) Conectar los pernos de anclaje y los angulares metálicos al acero de refuerzo para un contacto confiable de metal a metal. b) Reducir el requerimiento de corriente y las fugas de corriente continua a niveles admisibles, asegurándose de que suficientes electrodos de tierra primarios (cuadrícula de tierra y electrodos de tierra) conducirán la mayor parte de la corriente de falla. c) El material de mejoramiento de la tierra se puede usar en las áreas de alta resistividad del suelo para reducir la resistencia de puesta a tierra primaria. Un método útil para ayudar a prevenir el predominio de los electrodos auxiliares en la disipación de la corriente de falla es el barrenado de un hueco de 100 mm a 250 mm (4 pulgadas al 10 pulgadas) y rellenarlo con material de mejoramiento del suelo alrededor de una varilla de tierra. 83 Esta forma es adaptable a una variedad de electrodos, enterrados en el suelo, y que se supone está rodeado por una capa concéntrica de un material que tiene una resistividad diferente que la del suelo. Un posible modelo de este tipo, que puede obtener fácilmente modificando la fórmula de Schwarz para un lecho de varillas, se muestra en la Figura 26. Figura 26 – Cuadrícula con electrodos verticales encapsulados 15. Determinación de la corriente máxima de cuadrícula 15.1 Definiciones de la Determinación de la corriente máxima de cuadrícula Nota – Las definiciones siguientes están listadas en la Cláusula 3, pero repetidas aquí para conveniencia del lector. Desplazamiento de DC: Es la diferencia entre la onda de corriente simétrica y la corriente real durante una condición de un transitorio del sistema. Matemáticamente, la corriente de falla real puede ser dividida en dos partes, una componente alterna simétrica y una componente unidireccional (DC). La componente uni-direccional puede ser de cualquier polaridad, pero la polaridad no cambiará, y disminuirá en alguna tasa predeterminada. Factor de decremento: Un factor de ajuste que se utiliza junto con el parámetro de corriente de falla a tierra simétrica en los cálculos de tierra orientados a la seguridad. Determina el equivalente RMS de la onda de corriente asimétrica para una duración de falla dada, tf, lo que representa el efecto de desplazamiento inicial de DC y su atenuación durante la falla. Factor de división de corriente: Un factor que representa la relación la inversa de la corriente de falla simétrica a la porción de la corriente que fluye entre la red de tierra y el suelo circundante. Donde Sf es el factor de división de corriente Ig es la corriente de cuadrícula simétrica RMS en A I0 es la corriente de falla de secuencia cero en A 84 NOTA - En realidad, el factor de división de corriente cambia durante la duración de la falla, en base a las tasa de descomposición de las diferentes contribuciones de falla y la secuencia de interrupción de las operaciones del dispositivo. Sin embargo, a los efectos de calcular el valor de diseño de la corriente cuadrícula y la corriente de cuadrícula simétrica según las definiciones de la corriente de cuadrícula simétrica y la corriente máxima de la cuadrícula, la relación se supone constante durante toda la duración de una falla determinada. Corriente de cuadrícula máxima: Un valor de diseño de la corriente de cuadrícula máxima definida como sigue: Donde IG es la corriente de cuadrícula máxima en A Df es el factor de decremento para la duración completa de la falla tf, dado en s Ig es la corriente de cuadrícula simétrica en A Reactancia subtransitoria: Reactancia de un generador en el inicio de una falla. Esta reactancia se utiliza en el cálculo de la corriente de falla simétrica inicial. La corriente disminuye de forma continua, pero se supone que es constante en este valor como un primer paso, con una duración aproximada 0.05 s después de una falla aplicada. Corriente de cuadrícula simétrica: La parte de la corriente de falla a tierra simétrica que fluye entre la cuadrícula de tierra y el suelo circundante. Puede expresarse como Donde Ig es la corriente de cuadrícula simétrica en A If es la corriente de falla a tierra simétrica RMS en A Sf es el factor de división de corriente de falla Reactancia transitoria: Es la reactancia de un generador entre los estados subtransitorios y síncrono. Esta reactancia es usada para el cálculo de las corrientes de falla simétricas durante el período entre los estados subtransitorios y de estado estable. Esta corriente se decrementa continuamente durante este período, pero es asumida a ser estable en este valor por aproximadamente 0.25 s. Relación X/R: Es la relación de la reactancia a la resistencia del sistema. Es indicativa de la tasa de decaimiento de cualquier desplazamiento de DC. Una relación grande X/R corresponde a grandes constantes de tiempo y una tasa lenta de decaimiento. 15.2 Procedimiento En la mayoría de casos, el valor más grande de corriente de cuadrícula que da la condición más peligrosa. Para estos casos, los siguientes pasos están involucrados en determinar el valor de 85 diseño correcto de la corriente de cuadrícula máxima IG para uso en los cálculos de puesta a tierra de la subestación: a) Evaluar el tipo y localización de aquellas fallas de tierra que están probablemente produciendo el flujo más grande de corriente entre la cuadrícula de tierra y la tierra de alrededor, y entonces el GPR más grande y los gradientes de potencial superficial local más grande en el área de la subestación (ver 15.8). b) Determinar, por cálculo, el factor de división de corriente de falla Sf para los cálculos seleccionados en a), y establecer los valores correspondientes para la corriente de cuadrícula simétrica Ig (ver 15.9). c) Para cada falla, basada en su tiempo de duración, tf, determinar el valor del factor de decremento Df permitido por los efectos de asimetría de la onda de corriente de falla. Seleccionar el producto más grande de Df x Ig, y entonces la peor condición de falla (ver 15.10). d) Considerar el incremento futuro en la corriente de falla disponible (ver 15.11). 15.3 Tipos de falla de tierra Mucho de los diferentes tipos de falla puede ocurrir en el sistema. Desafortunadamente, puede ser difícil determinar cual tipo de falla y localización resultará en el flujo más grande de corriente entre la cuadrícula de tierra y el suelo que la rodea debido a que no hay simples reglas para aplicar. La Figura 27, Figura 28, Figura 29 y la Figura 30 presentan la corriente de cuadrícula máxima IG para varias localizaciones de falla y configuraciones del sistema. En la determinación de los tipos aplicables de falla, se debe poner consideración a la probabilidad de ocurrencia de la falla. Múltiples fallas simultáneas, aunque podrían resultar con corrientes de falla más altas, no necesitan ser consideradas si su probabilidad de ocurrencia es despreciable. Es así recomendable, por consideraciones prácticas, que la investigación sea confinada a fallas de una línea a tierra y de línea a línea con contacto con tierra. En el caso de una falla de línea a línea con contacto a tierra, la corriente de falla de secuencia cero es Donde I0 E Rf R1 R2 R2 X1 es el valor RMS simétrico de secuencia de la corriente de falla de secuencia cero en A es el voltaje de fase a neutro en V es la resistencia estimada de la falla en Ω (normalmente Rf = 0 es asumida) es la resistencia equivalente del sistema de secuencia positiva en Ω es la resistencia equivalente del sistema de secuencia negativa en Ω es la resistencia equivalente del sistema de secuencia cero en Ω es la reactancia equivalente del sistema de secuencia positiva en Ω 86 X2 X0 es la reactancia equivalente del sistema de secuencia negativa en Ω es la reactancia equivalente del sistema de secuencia cero en Ω Los valores de R1, R2, R0, X1, X2 y X0 son calculados vistos por el sistema al punto de falla. En el caso de una falla a tierra de una línea a tierra, la corriente de falla de secuencia cero es En muchos casos, sin embargo, el efecto de los términos de resistencia en la Ecuación (72) es despreciable. Para propósitos prácticos, las siguientes ecuaciones simplificadas son suficientemente precisas y más convenientes. La corriente de secuencia cero para una falla de línea a línea a tierra es: La corriente de secuencia cero para una falla de línea a tierra es: Figura 27 – Falla dentro de la subestación local; neutro local aterrizado 87 Figura 28 – Falla dentro de subestación local; neutro aterrizado en un lugar remoto Figura 29 – Falla en subestación; sistema aterrizado en la subestación local y también en otros puntos 88 Figura 30 – Típica división de corriente para una falla en el lado de alto voltaje de una subestación de distribución 15.4 Efecto de la resistencia de tierra de la subestación En la mayoría de los casos es suficiente derivar la corriente máxima de cuadrícula IG, como se describe en 15.2 y 15.3, despreciando el efecto de la resistencia del sistema, la resistencia de tierra de la subestación, y la resistencia de falla. El error introducido por lo tanto es generalmente pequeño, y está siempre del lado de la seguridad. Sin embargo, puede haber casos inusuales donde la resistencia de tierra de la subestación predicha es tan grande, en relación con la reactancia del sistema, que vale la pena tener la resistencia en cuenta mediante su inclusión en la ecuación más exacta (71) o la ecuación (72). Esto plantea un problema debido a que el sistema de tierra de la subestación aún no está diseñado y su resistencia no se conoce. Sin embargo, la resistencia se puede estimar por el uso de las fórmulas aproximadas de 14.2 o 14.3. Esta resistencia estimada generalmente da una precisión suficiente para la determinación de la corriente Ig, y por lo tanto IG. 15.5 Efecto de la resistencia de falla Si la falla es una ruptura del aislamiento en la subestación local, la única suposición segura es que la resistencia de la avería se supone cero (véase la Figura 27, Figura 28, Figura 29 y Figura 30). En el caso de una falla fuera del área de la subestación local, en una línea conectada al bus de la subestación (Figura 30), es permisible, si un valor conservador (mínimo) de resistencia de falla Rf se puede asignar, usar este en los cálculos de corriente de falla a tierra. Esto se hace multiplicando 89 Rf por tres y añadirla a los demás términos de resistencia, como se indica en el denominador de la ecuación (71) o la ecuación (72). Si, sin embargo, la resistencia de falla real no mantiene un valor al menos tan grande como el valor de Rf utilizado en los cálculos, entonces, la resistencia de falla debe ser despreciada. Cualquier error de despreciar Rf será, por supuesto, está del lado de la seguridad. 15.6 Efecto de los cables de tierra aéreos y conductores neutros Cuando los cables de tierra o conductores neutros aéreos de la línea de transmisión están conectados a la tierra de la subestación, una parte sustancial de la corriente de falla a tierra se desvía de la cuadrícula de tierra de la subestación. Cuando existe esta situación, los cables de tierra o conductores neutros aéreos deben tomarse en cuenta en el diseño de la cuadrícula de tierra. Conectando la tierra de la subestación a los cables de tierra o conductores neutros aéreos, o ambos, y a través de ellos las estructuras de las líneas de transmisión o postes de distribución, por lo general tienen el efecto global de aumentar la GPR en las bases de la torre, mientras que lo disminuye en la subestación. Esto se debe a que cada una de las torres cercanas compartirá el aumento del voltaje de la cuadrícula de tierra de la subestación, cualquiera que sea la causa, en lugar de ser afectada solamente por la falla de aislamiento local o descarga disruptiva en una de las torres. A la inversa, cuando se produce una falla tal en una torre, el efecto del sistema de tierra de la subestación conectada debe ser disminuir la magnitud de los gradientes cercanos a las bases de la torre. 15.7 Efecto de la tubería y cables directamente enterrados Los cables enterrados con sus fundas o blindaje en contacto efectivo con la tierra, y las tuberías metálicas enterradas unidas al sistema de tierra de la subestación y que se extiende más allá de su perímetro tendrán un efecto similar al de los cables de tierra y neutros. Al conducir parte de la corriente de falla a tierra lejos de la subestación, el aumento potencial de la cuadrícula durante la falla y los gradientes locales en la subestación se verán algo reducidos. Como se discute en la Cláusula 17, se pueden introducir en ocasiones peligros externos (Bodier [B16]; Rudenberg [B131]). Debido a las complejidades e incertidumbres en el patrón de flujo de corriente, el efecto es a menudo difícil de calcular. Algunas pautas para el cálculo de la impedancia de entrada de dichos caminos de corriente que salen de la subestación son suministrados por Rudenberg [B131] y Laurent [B100]. Un estudio más reciente de este problema se presenta en EPRI EL-904 [B60], que proporciona métodos para el cálculo de la impedancia tanto de la tierra superior y de tuberías enterradas. A partir de estos valores un cálculo aproximado puede determinar la división de la corriente de tierra entre estos caminos, el sistema de tierra de la subestación, y cualquiera de los cables de tierra que están presentes y conectados. 90 15.8 Tipo y localización de la peor falla La peor tipo de falla de un sistema de puesta a tierra dada es usualmente el que resulta con el valor más alto de la corriente máxima de cuadrícula IG. Debido a que esta corriente es proporcional a la corriente de secuencia de cero o corriente de falla a tierra y el factor de división de corriente, y porque la división de corriente es casi independiente del tipo de falla, el peor tipo de falla se puede definir como la que resulta en el valor más alto de corriente de secuencia cero o de falla a tierra que fluye hacia el suelo, 3I0. En un lugar dado, una falla de una sola línea a tierra será el peor tipo de falla si Z1 Z0> Z22 en el punto de falla, y una falla de línea a línea a tierra será el peor tipo, si Z1 Z0 < Z22. En el caso habitual en el que Z2 se supone igual a Z1, las comparaciones anteriores se reducen a Z0 > Z1 y Z0 < Z2, respectivamente. Z1 , Z2 y Z0 están definidos como La cuestión de la ubicación de la falla que produce la máxima corriente de cuadrícula IG implica varias consideraciones. La peor localización de falla puede ser o bien en el lado de alta tensión o en el lado de baja tensión, y en ambos casos puede ser o bien dentro de la subestación o en el exterior de una línea, a una cierta distancia de la subestación. Una falla se clasifica como en el interior de la subestación si se relaciona con una estructura metálica que está conectada eléctricamente a la cuadrícula a través de la tierra de la subestación vía una impedancia despreciable. No hay reglas universales para la determinación de la peor ubicación de la falla. La siguiente discusión se refiere a algunas, pero de ninguna manera, todas las posibilidades. Para subestaciones de distribución con el transformador aterrizado sólo en el lado de distribución, la corriente máxima de cuadrícula IG por lo general se ocurre para una falla a tierra en los terminales del lado de alta del transformador. Sin embargo, si la fuente de corriente de falla a tierra en la parte alta es débil, o si un funcionamiento en paralelo de varios transformadores resulta en una fuerte fuente de corriente de falla a tierra en el lado de baja, la corriente máxima de cuadrícula ocurre para una falla a tierra en algún lugar del circuito de distribución. Para fallas a tierra en los terminales del lado de baja tal como en el secundario de un transformador aterrizado, la contribución del transformador a la falla circula en el conductor de la cuadrícula de la subestación con una corriente de fuga despreciable hacia el suelo y, por lo tanto, no tiene efecto en el GPR de la subestación, como se muestra en la Figura 28. Para fallas a tierra fuera de la subestación en un alimentador de distribución (lo suficiente lejano como para estar en la tierra remota con respecto a la cuadrícula de tierra), una gran parte de la corriente de falla volverá a su fuente (el neutro del transformador) a través de la cuadrícula de la subestación, contribuyendo así al GPR de la subestación. En subestaciones de transmisión con transformadores de tres devanados de o autotransformadores, el problema es más complejo. La corriente máxima de cuadrícula IG puede 91 ocurrir para una falla a tierra en ya sea el lado de alta o baja del transformador; ambos lugares se deben revisar. En cualquier caso, se puede suponer que la peor localización de falla se encuentra en los terminales del transformador dentro de la subestación, si la contribución del sistema a la corriente de falla es mayor que la de los transformadores en la subestación. Por el contrario, la peor localización de falla puede estar fuera de la subestación en una línea de transmisión, si la contribución del transformador domina. Existen excepciones a las generalizaciones anteriores. Por lo tanto, para un sistema específico, se deben considerar varios candidatos de localización de fallas para la corriente máxima de cuadrícula. Para cada candidato, el valor aplicable de corriente de secuencia cero I0 (corriente de falla a tierra) debe establecerse en este paso. En unos pocos casos, surge una complicación adicional. La duración de la falla depende del tipo de esquema de protección usado, la ubicación de la falla, y la opción de usar tiempos de despeje de falla primario o de respaldo para la duración de la falla (choque). La duración de la falla no sólo afecta al factor de decremento, Df, sino también los voltajes tolerables, como se discutió en la Cláusula 8. Si el tiempo de despeje de la falla es relativamente largo, los voltajes tolerables correspondientes pueden reducirse a valores que hacen que esta condición de falla sea el peor de los casos, a pesar de que la corriente de cuadrícula para este caso no sea la del máximo valor. Esta situación ocurre generalmente cuando un transformador delta / estrella aterrizada se alimenta desde una fuente relativamente débil de corriente de falla y la falla ocurre a cierta distancia por un alimentador de distribución rural. En este caso, la corriente de falla del lado de alta (en delta) puede ser relativamente baja, y las fallas en alimentadores del lado de baja (en estrella aterrizada) son determinadas principalmente por las impedancias del transformador y del alimentador. Si el despeje de falla de respaldo se considera, una falla en el alimentador a varios kilómetros abajo, dependiendo del dispositivo de despeje de falla del lado de alta, de respaldar la falla del interruptor de alimentación, podría tomar varios segundos para despejar. El voltaje tolerable para este caso puede ser significativamente menor que para una falla del lado de alta, haciendo que la falla del alimentador del lado de baja el peor caso para el diseño de la cuadrícula. Por lo tanto, el peor tipo de falla y la ubicación deben tener en cuenta no sólo el valor máximo de la corriente de cuadrícula IG, sino también los voltajes tolerables basados en el tiempo de despeje de fallas. 15.9 Cálculo del factor de división de corriente Para el supuesto de un flujo sostenido de la corriente de alla a tierra inicial, la corriente simétrica de cuadrícula se puede expresar como Para determinar Ig, el factor de división de corriente Sf debe ser calculado. El proceso de cálculo consiste en derivar una representación equivalente de los cables aéreos de tierra, neutros, etc., conectados a la cuadrícula y luego resolver el equivalente para determinar qué fracción de la corriente total de falla fluye entre la cuadrícula y la tierra, y qué fracción fluye a través de los cables de tierra o neutros. Sf es dependiente de muchos parámetros, algunos de los cuales son 92 a) Localización de la falla, como es descrito en 15.8. b) Magnitud de la impedancia de la cuadrícula de tierra de la subestación, como se discutió en la Cláusula 4. c) Tuberías y cables enterrados en la vecindad o directamente conectados al sistema de tierra de la subestación, como se discutió en 15.7. d) Los cables de tierra, neutros u otras vías de retorno de tierra aéreo, como se discutió en el 15.6. Debido a Sf, la corriente de cuadrícula simétrica Ig, y por lo tanto también IG, están estrechamente relacionadas con la ubicación de la falla. Si se desprecian los caminos de tierra adicionales de los apartados c) y d) anteriores, la relación de división de corriente (basada en las contribuciones de corrientes remota versus local) puede ser calculada utilizando componentes simétricas tradicionales. Sin embargo, la corriente Ig, calculada usando tal método podría ser demasiado conservadora. La discusión restante se refiere sólo a los cables de tierra y conductores neutros aéreos, aunque los principios implicados también se aplican a las tuberías, cables o cualquier otra vía conductora enterrada conectadas a la cuadrícula de tierra. Las líneas de transmisión de alto voltaje están comúnmente provistas de cables estáticos aéreos, ya sea en toda su longitud o para distancias cortas de cada subestación. Pueden estar conectados a tierra en cada torre a lo largo de la línea o pueden estar aislados de las torres y se utilizan para fines de comunicación. Hay muchas fuentes que proporcionan ayuda en la determinación de la impedancia efectiva de un alambre estático como se ve desde punto de falta (ver, por ejemplo, Carson [B18]; Clem [B20]; EEI y Bell Telephone Sistemas [B21]; CCITT Grupo de Estudio V [B25]; Desieno, Marchenko, y Vassel [B52]; Laurent [B100]; Patel [B123]; y Verma y Mukhedkar [B153]). Muchos de estos métodos pueden, sin embargo, ser difíciles de aplicar por el ingeniero de diseño. Debido a que está más allá del alcance de esta guía discutir en detalle la aplicabilidad de cada método a todas las posibles configuraciones del sistema, se da sólo una breve descripción de algunos de los métodos más recientes. Endrenyi [B56] [B58] presenta un enfoque en el que, para una serie de tramos idénticos, las impedancias de la torre y de los cables de tierra o neutros se reducen a una impedancia equivalente agrupada. Excepto para los propósitos de estimación, Endrenyi recomienda incluir las mutuas entre múltiples conductores de tierra y se introduce un factor de acoplamiento para dar cuenta de la impedancia mutua entre los conductores de neutro y de los conductores de fase. Esta técnica se desarrolló aún más por Verma y Mukhedkar [B153]. En el método de la matriz en cascada de Sebo [B133], una matriz de impedancia se deriva para cada tramo de la línea, y las matrices de tramo individuales se conectan en cascada en una matriz resultante que representa toda la línea. Esta técnica permite que una persona tome en cuenta todas las impedancias propias y mutuas (excepto entre las tierras en las patas de la torre), y la ubicación y el tipo de falla. Una corrección de los efectos de fin de línea se sugiere, utilizando un factor de selección modificado. Con algunas limitaciones en la aplicación y la precisión, la técnica de cálculo tramo por tramo se puede simplificar considerablemente. Un enfoque típico, en el que se tienen en cuenta todos los acoplamientos mutuos entre el conductor de fase y conductores de neutro y entre los conductores 93 neutros, ha sido descrito por Garrett [B71]. En esta técnica, cada conductor neutro se modela por la impedancia de cada tramo y la impedancia de tierra equivalente de cada torre para formar una red que se asemeja a una escalera. Esta red de escalera es luego reducida, usando técnicas simples de reducción, a la impedancia de entrada como se ve desde el punto de falla. La impedancia de entrada de cada circuito se combina con la resistencia de la cuadrícula y tres veces este valor resultante está incluido en la impedancia de falla equivalente de secuencia cero. El factor de división de corriente Sf se calcula mediante la aplicación de la ley de corrientes de Kirchoff para obtener la división de corriente entre la resistencia de la cuadrícula y la impedancia de entrada de cada circuito. Aunque este, o enfoques similares aproximados, están limitados en aplicabilidad y precisión, en muchos casos, puede proveer una estimación razonable de la influencia de los cables de tierra y neutros, tanto en la resistencia del sistema de puesta a tierra y la relación de división de corriente. Dawalibi [B38], [B41] proporciona algoritmos para derivar las ecuaciones simples para resolver las corrientes en la cuadrícula y en cada torre. Estas ecuaciones se obtienen en uno o ambos extremos de cada línea y no requieren de los grandes requerimientos de almacenamiento informático como en las técnicas que modelan cada tramo individual. Dawalibi también se ocupa de los efectos de la estructura del suelo (es decir, las resistividades de suelo múltiples capas) en las impedancias propias y mutuas de los conductores y en la relación de división de corriente. Meliopoulos et al. [B107] introdujo un conductor equivalente para representar los efectos de la tierra utilizando la fórmula de Carson. Cada tramo en cada línea se modela y la red resultante se resuelve para los flujos de corriente. A partir de esta solución, la relación de división de corriente se calcula. El número de líneas y subestaciones modelados sólo están limitadas por el equipo utilizado para resolver la red (EPRI TR-100622 [B64]). Garrett, Meyers, y Patel [B74] usaron el método de Meliopoulos, [B107] para llevar a cabo un análisis paramétrico de los parámetros que afectan a Sf, y desarrollar un conjunto de curvas de Sf frente a la resistencia de cuadrícula para algunos de los parámetros más críticos. Esto proporciona un método rápido y sencillo para estimar la división de corriente que evita la necesidad de algunas de las hipótesis de simplificación de los otros métodos aproximados, aunque los resultados aún son sólo aproximados. Estas curvas, junto con algunas nuevas curvas y una tabla de impedancia se han añadido en esta guía, y se incluyen en el Anexo C. Referirse al Anexo C por las limitaciones de este método. Obviamente, las técnicas que modelan los cables estáticos, conductores de fase, torres, etc., en detalles le da la mejor evaluación del factor de división de corriente Sf. Sin embargo, los métodos aproximados expuestos anteriormente se han comparado con los métodos detallados y se encontró que dan respuestas comparables para muchos ejemplos sencillos. Así, la elección del método utilizado para determinar Sf dependerá de la complejidad del sistema conectado a la subestación y el grado deseado de precisión. Un ejemplo sencillo que sigue, muestra los resultados de cuatro de los métodos descritos en los párrafos anteriores. En el siguiente ejemplo, los métodos aproximados de Endrenyi y Garrett y Patel se comparan con los resultados de Dawalibi de y métodos más precisos de Meliopoulos. Como ejemplo, la Figura 31 muestra una subestación de distribución de un alimentador energizada por una línea de transmisión única conectando la subestación a una fuente equivalente remota (próxima subestación adyacente). La línea de transmisión es de 20 km de largo y la 94 distancia entre las tierras de las torres es de 0.5 km. El alimentador de distribución es de 4 km de longitud y la distancia entre las tierras de los postes es 0.122 km. El suelo se supone que es uniforme con una resistividad de 200 Ω-m. Las ecuaciones de Carson se utilizan para calcular las auto-impedancias de los conductores de fase y del cable estático aéreo, y la impedancia mutua entre éstas (sólo una línea de transmisión) para usar con la fórmula de Endrenyi y Garrett y las curvas de los factores de división de Patel. En el Anexo C se muestra las ecuaciones usadas para calcular las impedancias de línea necesarias para los cálculos de división de corriente. Las diferentes impedancias de la resistencia de las zapatas de torre de cada sección de línea, la resistencia de tierra del terminal remoto, y la resistencia de cuadrícula de la subestación son Rtg = 10.0 + j0.0 Ω/sección Rdg = 25.0 + j0.0 Ω/ sección Rs = 3.0 + j0.0 Ω Rg = 2.5 + j0.0 Ω Z1 = 3.82 + j9.21 Ω para la línea de 115 kV Z0(a) = 7.37 + j35.86 Ω para la línea de 115 kV Z0(g) = 148.24 + j66.44 Ω para la línea de 115 kV Z0(ag) = 3.56 + j33.34 Ω para la línea de 115 kV Z0 = 12.54 + j39.72 Ω para la línea de 115 kV Zs–l = 1.24 + j0.55 Ω/vano para el cable estático aéreo de la línea de 115 kV Zs–f = 0.11 + j0.11 Ω/vano para el neutron del alimentador de 12.47 kV Donde Rtg es la impedancia de la tierra remota de cada electrodo de tierra de transmisión en Ω Rdg es la impedancia de tierra remota de cada electrode de tierra de distribución en Ω Rs es la impedancia (equivalente) de tierra en la terminal remota en Ω Rg es la impedancia de tierra de la estación a la tierra remota en Ω Z1 es la impedancia equivalente de secuencia positiva para la línea de 115 kV en Ω Z0(a) es la impedancia propia de secuencia cero para los conductores de fase de 115 kV en Ω Z0(g) es la impedancia propia de secuencia cero para el cable de tierra de 115 kV en Ω Z0(ag) es la impedancia mutual de secuencia cero entre los conductors de fase y de tierra para la línea de 115 kV en Ω Z0 es la impedancia equivalente de secuencia cero para la línea de 115 kV en Ω Zs–l es la impedancia propia del cable estático aéreo de 115 kV en Ω/vano Zs–f es la impedancia propia del neutro del alimentador de 12.47 kV en Ω/vano La adición de las impedancias de las líneas de 115 kV a las impedancias de la fuente da la siguiente impedancia de falla equivalente en el bus 115 kV: Z1(eq) = 3.82 + j19.01 Ω Z0(eq) = 12.54 + j46.32 Ω Así, para una falla de línea a tierra a 115 kV 3 × 115000/√3 |3Io | = | | = |534.5 − j2233.8| = 2297 2(3.82 + j19.01) + (12.54 + j46.32) 95 Usando el circuito mostrado en la Figura 31, se asume una falla de una línea a tierra que ocurre en el conductor del bus de la subestación al neutro de la subestación. Usando el método de Endrenyi [B58], la impedancia equivalente del cable estático aéreo (como se ve desde el punto de falla e ignorando los efectos de acoplamiento) es Zeq-l = 0.5 x (1.24 + j0.55) +√10 × (1.24 + 𝑗0.55) = 4.22 + j1.04 Ω La impedancia equivalente del neutro del alimentador (como es visto desde la subestación) es Zeq-f = 0.5 x (0.11 + j0.11) +√25 × (0.11 + 𝑗0.11) = 1.88 + j0.89 Ω Figura 31 – Sistema del ejemplo para el cálculo del factor de división de corriente Sf El equivalente que resulta del cable estático aéreo y el neutro del alimentador se encuentra al poner en paralelo las impedancias equivalentes anteriores: El factor de división de corriente Sf Y la corriente de cuadrícula resultante es 96 𝐼𝑔 = 𝑆𝑓 × 3𝐼𝑜 = 0.37 × 2297 = 850 𝐴 Usando la tabla de factores de división de Garrett y Patel (Anexo C), el equivalente del cable estático aéreo y del alimentador neutro es Z = 0.91+ j0.485 Ω Y el factor de división es Así, la corriente de cuadrícula es 𝐼𝑔 = 𝑆𝑓 × 3𝐼𝑜 = 0.30 × 2297 = 689 𝐴 Usando las curvas del factor de división de Garrett y Patel (Figura C.3), el factor de división aproximados Sf = 0.28. Por lo tanto, la corriente de cuadrícula es 𝐼𝑔 = 𝑆𝑓 × 3𝐼𝑜 = 0.28 × 2297 = 643 𝐴 Usando el EPRI TR-100622 [B64], la corriente de falla total 3I0 es 2,472 A. Aproximadamente el 34% (Ig = 836 A) de la corriente de falla circula a través de la cuadrícula a la tierra remota, por lo que el factor de división de corriente es igual a 0.34. Se obtienen resultados similares utilizando Dawalibi [B38]. Como puede observarse, los métodos aproximados y detallados están en estrecho acuerdo para este ejemplo. Sin embargo, para sistemas más complejos, con ambas fuentes de tierra local y remoto, y con líneas y fuentes disímiles, los resultados pueden no estar en mucho acuerdo (véase el Anexo C). 15.10 Efecto de la asimetría El diseño de una cuadrícula de tierra debe tener en cuenta la corriente asimétrica. Un factor de decremento, Df, se deriva al tener en cuenta el efecto de la corriente de desplazamiento de CD. En general, la corriente de falla asimétrica incluye las componentes subtransitoria, transitoria, y de corriente alterna de estado estable, y la componente de corriente de desplazamiento de CD. Tanto las componentes de CA subtransitoria y transitoria y desplazamiento de CD decaen exponencial del, cada uno teniendo una tasa de atenuación diferente. Sin embargo, en aplicaciones típicas de esta guía, se supone que la componente de corriente alterna no se descompone con el tiempo, pero mantiene su valor inicial. Así, como una función periódica del tiempo, t, la corriente de falla asimétrica puede expresarse como 97 Donde if (t) es la corriente de falla asimétrica, en A, en cualquier instante t, con t en s E es el voltaje RMS pre-falla, de línea a neutro en V ω es la frecuencia del sistema en radiantes/s α es el ángulo del voltaje en el inicio de la corriente en radianes θ es el ángulo de fase del circuito en radiantes Yac es la admitancia equivalente del sistema AC en mhos Ta es la constant de tiempo del desplazamiento de CD en s [Ta = X/(ωR), para 60 Hz, Ta = X/(120πR)] La relación X / R a ser usada aquí es la relación X / R del sistema en el lugar de la falla para un tipo determinado de falla. Las componentes X y R de la impedancia de falla subtransitoria del sistema deben ser utilizados para determinar la relación X / R. El máximo desplazamiento de CD ocurre cuando (α – θ) = - π/2 Entonces la Ecuación (79) llega a ser Debido a que los datos experimentales en el umbral de fibrilación se basan en el contenido de energía de una onda sinusoidal simétrica de amplitud constante, es necesario establecer un valor eficaz equivalente de la onda de corriente asimétrica para el tiempo máximo de la posible exposición al choque. Este valor, de acuerdo con la definición de la corriente de falla asimétrica efectiva IF, puede ser determinado por la integración de la Ecuación (80) al cuadrado en toda la duración de tf fallo en s. Donde IF es el valor RMS efectivo de la corriente asimétrica aproximada para la duración completa de una falla en A tf es la duración de tiempo de falla en s t es el tiempo (variable) posterior de la iniciación de falla en s Evaluando la integral de la Ecuación (81) en término de la Ecuación (80), se sigue que Por eso, el factor de decremento Df, es determinado por la relación IF/If, dando 98 La ecuación (84) puede ser usada para calcular el factor de decremento para relaciones X/R y duraciones de falla específicas. Los valores típicos del factor de decremento para varias duraciones de falla y relaciones X / R se muestran en la Tabla 10. Para duraciones de falla relativamente largas, el efecto de la corriente de desplazamiento de CD se puede suponer que ser más que compensado por el decaimiento de la componente subtransitoria de la corriente de CA. Un factor de decremento de 1.0 se puede utilizar para duraciones de falla de 30 ciclos o más. Para los choques sucesivos muy próximos entre sí (posiblemente de recierres), las primeras ediciones de esta guía sugerían un factor de decremento calculado usando el menor tiempo posible de falla única, aunque el tiempo, ts, usado en otras partes en los cálculos está basado en la suma de las duraciones de choque individuales. Sin embargo, la discusión precedente del factor de decremento de la corriente de falla asimétrica sugiere el uso de la duración de la falla más corta en relación con la duración más larga de choque, o la suma de las duraciones de choque, puede resultar en un sistema de puesta a tierra sobrediseñado. Esto es especialmente cierto para las faltas de duración intermedia (es decir, 6 a 30 ciclos), donde el factor de decremento es relativamente grande y las componentes de CA de la corriente se supone permanece en su valor subtransitorio. Crawford y Griffith [B23] sugieren que la duración de choque y la duración de la falla se pueden suponer idéntica, lo que resultará en un diseño de la cuadrícula suficiente para los casos que no hay recierres automáticos o sucesivos choques (de alta velocidad). Sin embargo, debido a la poca o ninguna prueba que se ha realizado sobre los efectos de los choques repetitivos separados por sólo unos pocos ciclos, el ingeniero de diseño debe juzgar si usa o no la duración de choque más larga para el tiempo ts en otros lugares de los cálculos y la duración de la falla más corta para el tiempo tf en el cálculo del factor de decremento con la ecuación (84). Es importante que los valores del factor de decremento dados en la Tabla 10 no deben ser confundidos con los coeficientes multiplicadores dados en la IEEE Std C37.010 ™ -1979 [B85]. El factor de decremento es Df, y es usado para determinar la corriente efectiva durante un intervalo de tiempo dado después del comienzo de la falla, mientras que los factores de multiplicación dados por IEEE Std C37.010-1979 [B85] son usados para determinar la corriente RMS en el final de este intervalo. Debido al decaimiento de los componentes transitorios de CA y CD con el tiempo, los factores de decremento determinados por la Ecuación (84) son ligeramente mayores que los factores dados por la IEEE Std C37.010-1979 [B85] para fallas cortas y duraciones de choque. 99 Tabla 10 – Valores típicos de Df 15.11 Efecto de los cambios futuros Es una experiencia común que las corrientes de falla máximas en un lugar determinado aumentan a medida que se añade capacidad al sistema de potencia o cuando se realizan nuevas conexiones a la red eléctrica. Mientras que un aumento en la capacidad del sistema aumentará la corriente máxima esperada de falla IF, las nuevas conexiones pueden aumentar o disminuir la corriente máxima de cuadrícula IG. Un caso en el que la corriente de cuadrícula puede disminuir con nuevas conexiones es cuando se añaden nuevas líneas de transmisión con cables de tierra o neutros, o ambos. En general, si no hay margen de incremento en IG que se incluya en el diseño original del sistema de tierra, el diseño puede llegar a ser peligroso. Además, las adiciones posteriores por lo general serán mucho menos convenientes y más costosas para la instalación. Ha sido una práctica ampliamente aceptada asumir la corriente de falla total, IF, entre la cuadrícula y la tierra circundante (es decir, ignorando cualquier división de corriente) en un intento de permitir el crecimiento del sistema. Si bien este supuesto sería demasiado pesimista para las condiciones presentes, puede que no exceda la corriente IG calculada considerando la división de corriente y el crecimiento del sistema. Si el crecimiento del sistema se tiene en cuenta y la división de corriente es ignorada, la cuadrícula resultante sería sobre diseñada. Una estimación de las condiciones del sistema futuro puede ser obtenida mediante la inclusión de todas las adiciones al sistema previstas. Se debe tener precaución cuando los cambios futuros implican tales cambios de diseño como la desconexión de cables de tierra aéreos que entran a las subestaciones. Tales cambios pueden tener un efecto sobre las corrientes de falla a tierra y pueden resultar en un sistema de puesta a tierra inadecuado. Sin embargo, los cambios futuros, tales como las adiciones de los cables de tierra entrantes, pueden disminuir la relación de división de corriente, lo que resulta que el sistema de tierra existentes queda sobre diseñado. 100 16. Diseño del sistema de tierra 16.1 Criterio de diseño Como se ha establecido en 4.1, hay dos principales objetivos de diseño que deben alcanzarse por cualquier sistema de tierra de subestación en condiciones normales, así como también, en condiciones de falla. Estos objetivos son a) Proporcionar medios para disipar las corrientes eléctricas en el suelo sin exceder algún límite de operación y del equipo. b) Asegurar que una persona en la proximidad de las instalaciones conectadas a tierra no está expuesta al peligro de choques eléctricos críticos. Los procedimientos de diseño que se describen en los siguientes incisos están orientados a lograr la seguridad de peligrosos voltajes de paso y de toque dentro de una subestación. Se señala en 8.2 que es posible que potenciales transferidos excedan el GPR de la subestación durante condiciones de falla. En la Cláusula 17 se discute algunos de los métodos utilizados para proteger al personal y al equipo de estos potenciales transferidos. Así, el procedimiento de diseño descrito aquí se basa en garantizar la seguridad del peligro de los voltajes de paso y de toque dentro, e inmediatamente fuera, del área cercada de la subestación. Debido a que el voltaje de malla es generalmente el peor voltaje de toque posible dentro de la subestación (excluyendo a los potenciales transferidos), el voltaje de malla será usado como la base de este procedimiento de diseño. Los voltajes de paso son intrínsecamente menos peligrosos que los voltajes de malla. Si, sin embargo, la seguridad en el área de puesta a tierra se consigue con la ayuda de una capa superficial de alta resistividad (material superficial), que no se extiende fuera de la cerca, entonces los voltajes de paso pueden ser peligrosos. En cualquier caso, los voltajes de paso calculados deben compararse con el voltaje de paso permitido después de que una cuadrícula se ha diseñado que satisface el criterio de voltaje de toque. Para las redes de tierra igualmente espaciadas, el voltaje de malla se incrementará a lo largo de las mallas desde el centro hasta la esquina de la cuadrícula. La tasa de este aumento dependerá del tamaño de la cuadrícula, el número y ubicación de varillas de tierra, el espaciamiento de conductores paralelos, el diámetro y profundidad de enterramiento de los conductores, y el perfil de la resistividad del suelo. En un estudio de computadora de tres redes de tierra típicos en suelo de resistividad uniforme, se obtuvieron los datos que se muestran en la Tabla 11. Estas cuadrículas estaban igualmente espaciadas sin varillas de tierra e igual espaciamiento en el conductor paralelo. El Em en la esquina se calculó en el centro de la malla de esquina. En realidad el peor caso de Em se produce ligeramente fuera del centro (hacia la esquina de la cuadrícula), pero es sólo ligeramente más alta que la Em en el centro de la malla. Como se indica en la Tabla 11, el voltaje de malla de la esquina es generalmente mucho más alta que en la malla central. Esto es cierto a menos que la cuadrícula sea asimétrica (tiene proyecciones, es de forma de L, etc.), tiene varillas de tierra localizados en o cerca del perímetro, o tiene el espaciamiento del conductor extremadamente no uniforme. Así, en las ecuaciones para el voltaje de malla Em dado en 16.5, sólo el voltaje de malla en el centro de la malla de la esquina es 101 usado como base del procedimiento de diseño. El análisis basado en los programas de computadora, que se describe en 16.8, puede usar este voltaje de malla de la esquina aproximado, el voltaje real de malla en la esquina, o el voltaje real de toque del peor caso que se encuentre en cualquier lugar dentro de la zona puesta a tierra, como la base del procedimiento de diseño. En cualquier caso, el criterio inicial para un diseño seguro es limitar el voltaje de malla o de toque calculado por debajo del voltaje de toque tolerable partir de la Ecuación (32) o la Ecuación (33). A menos que se especifique lo contrario, el resto de la guía usará el término de voltaje de malla (Em) para significar el voltaje de toque en el centro de la malla de la esquina. Sin embargo, el voltaje de la malla puede no ser el peor voltaje de toque si las varillas de tierra se encuentran cerca del perímetro, o si es pequeño el espaciado de la malla cercana al perímetro. En estos casos, el voltaje de contacto en la esquina de la cuadrícula puede exceder al voltaje de malla de la esquina. Tabla 11 – Relación típica del voltaje de malla de esquina/centro 16.2 Parámetros críticos Se han encontrado los siguientes parámetros dependientes del sitio a tener un impacto sustancial en el diseño de la cuadrícula: la corriente de cuadrícula máxima IG, la duración de la falla tf, la duración del choque ts, la resistividad del suelo ρ, la resistividad del material superficial ρs, y la geometría de la cuadrícula. Varios parámetros definen la geometría de la cuadrícula, pero el área del sistema de puesta a tierra, el espaciamiento del conductor, y la profundidad de la cuadrícula de tierra tienen el mayor impacto en el voltaje de malla, mientras que los parámetros tales como el diámetro del conductor y el espesor del material superficial el material tiene un menor impacto (AIEE Working Group [B4]; Dawalibi y Mukhedkar [B43]; Dawalibi, Bauchard, y Mukhedkar [B46]; EPRI EL-3099 [B62]). Una breve discusión o revisión de los parámetros críticos sea dado en 16.2.1 a través 16.2.5. 16.2.1 Corriente de cuadrícula máxima (IG) La evaluación del valor máximo de diseño de la corriente de falla a tierra que fluye a través de la cuadrícula de tierra de la subestación hacia el suelo, IG, ha sido descrita en la Cláusula 15. En la determinación de la máxima corriente IG, por medio de la Ecuación (69), deberían tenerse en cuenta la resistencia de la cuadrícula de tierra, la división de la corriente de falla a tierra entre los caminos alternativos de retorno y la cuadrícula, y el factor de decremento. 102 16.2.2 Duración de la falla (tf) y la duración del choque (ts) La duración de la falla y la duración de choque normalmente se suponen iguales, a menos que la duración de la falla es la suma de los choques sucesivos, tal como de recierres. La selección de tf debe reflejar el tiempo de despeje rápido para subestaciones de transmisión y tiempos lentos de despeje para la distribución y subestaciones industriales. Las selecciones de tf y ts deberían dar lugar a la combinación más pesimista del factor de decremento de la corriente de falla y la corriente del cuerpo permisible. Los valores típicos de tf y ts van desde 0.25 a 1.0 s. Más información detallada es dada en 5.2 a 6.4 y en 15.10 sobre la selección de tf y ts. 16.2.3 Resistividad del suelo (ρ) La resistencia de la red y los gradientes de voltaje dentro de una subestación dependen directamente de la resistividad del suelo. Debido a que en realidad la resistividad del suelo variará tanto horizontal como verticalmente, deben ser recogidos suficientes datos para un patio de la subestación. El método Wenner descrito en 13.3 es ampliamente utilizado (James J. Biddle Co [B105]; Wenner [B154]). Debido a que las ecuaciones de Em y Es dadas en 16.5 asumen la resistividad uniforme del suelo, las ecuaciones pueden emplear solamente un valor único para la resistividad. Consulte la 13.4.1 por orientación en la determinación de una resistividad del suelo uniforme aproximada. 16.2.4 Resistividad de la capa superficial (ρs) Una capa de material superficial ayuda a limitar la corriente del cuerpo mediante la adición de resistencia a la resistencia del cuerpo equivalente. Véase 7.4 y 12.5 para más detalles sobre la aplicación de este parámetro. 16.2.5 Geometría de la cuadrícula En general, las limitaciones de los parámetros físicos de una cuadrícula de tierra se basan en la economía y las limitaciones físicas de la instalación de la red. La limitación económica es evidente. No es práctico instalar un sistema de puesta a tierra de placa de cobre. La Cláusula 18 describe algunas de las limitaciones encontradas en la instalación de una cuadrícula. Por ejemplo, la excavación de zanjas en la que se coloca el conductor limita el espaciamiento del conductor a aproximadamente 2 metros o más. Separaciones del conductor típicas varían de 3 a 15 metros, mientras que las profundidades típicos de la cuadrícula van desde 0.5 m a 1.5 m. Los conductores típicos que van desde 2/0 AWG (67 mm2) a 500 kcmil (253 mm2), el diámetro del conductor tiene un efecto insignificante en el voltaje de malla. El área del sistema de puesta a tierra es el factor geométrico individual más importante en la determinación de la resistencia de la cuadrícula. Cuanto mayor sea el área de la puesta a tierra, menor es la resistencia de la red y, por lo tanto, menor es el GPR. 16.3 Índices de parámetros de diseño La Tabla 12 contiene un resumen de los parámetros de diseño usados en el procedimiento de diseño. 103 16.4 Procedimiento de diseño El diagrama de bloques de la Figura 32 ilustra las secuencias de pasos para el diseño de la cuadrícula de tierra. Los parámetros que se muestran en el diagrama de bloques se identifican en el índice presentado en la Tabla 12. A continuación se describe cada paso del procedimiento: - Paso 1: El mapa de la propiedad y plano de localización general de la subestación debe proporcionar buenas estimaciones del área a ser puesta a tierra. Una prueba de resistividad del suelo, que se describe en la Cláusula 13, determinará el perfil de resistividad del suelo y el modelo del suelo necesario (es decir, un modelo uniforme o de dos capas). - Paso 2: El tamaño del conductor se determina por las ecuaciones dadas en 11.3. La corriente de falla 3I0 debe ser la corriente de falla máxima futura esperada que será conducida por cualquiera de los conductores del sistema de puesta a tierra, y el tiempo, tc, debe reflejar el tiempo de despeje máximo posible (incluyendo el respaldo). - Paso 3: Los voltajes de de paso y de toque tolerables son determinados por las ecuaciones dadas en 8.4. La elección del tiempo, ts, se basa en el criterio del ingeniero de diseño, con la guía de 5.2 a 6.3. - Paso 4: El diseño preliminar debe incluir un conductor en anillo circundante en toda la zona de la puesta a tierra, más conductores cruzados adecuadamente para proporcionar un acceso conveniente a la tierra de los equipos, etc. Las estimaciones iniciales de la separación del conductor y ubicación de varillas de tierra debe basarse en la corriente IG y del área que se está conectado a tierra. - Paso 5: Las estimaciones de la resistencia preliminar del sistema de puesta a tierra en el suelo uniforme pueden ser determinados por las ecuaciones dadas en 14.2 y 14.3. Para el diseño final, se pueden desear estimaciones más precisas de la resistencia. El análisis por computadora basado en el modelado de las componentes del sistema de puesta a tierra en detalle puede calcular la resistencia con un alto grado de precisión, asumiendo que el modelo de suelo se elige correctamente. - Paso 6: La corriente de IG está determinada por las ecuaciones dadas en la Cláusula 15. Para evitar el sobre diseño del sistema de puesta a tierra, sólo la porción de la corriente de falla total, 3I0, que fluye de la cuadrícula hacia la tierra remota se debe utilizar en el diseño de la cuadrícula. La corriente IG debe, sin embargo, reflejar la peor tipo y ubicación de falla, el factor de decremento, y cualquier expansión del sistema futuro. - Paso 7: Si el GPR del diseño preliminar está por debajo del voltaje de toque tolerable, ningún análisis adicional es necesario. Sólo es necesario el conductor adicional requerido para proporcionar acceso a las zonas de equipamiento. - Paso 8: El cálculo de los voltajes de malla y de paso para la cuadrícula que se está diseñando puede hacerse por las técnicas de análisis aproximadas descritas en 16.5 para suelo uniforme, o por las técnicas de análisis de computadora más precisos, como se demuestra en 16.8. Una discusión adicional de los cálculos se reserva para esas secciones. 104 - Paso 9: Si el voltaje de malla calculado está por debajo del voltaje de toque tolerable, el diseño puede estar completo (véase el paso 10). Si el voltaje de malla calculado es mayor que el voltaje de toque tolerable, el diseño preliminar debe ser revisado (véase el paso 11). - Paso 10: Si tanto el voltaje de toque y de paso calculado están por debajo de los voltajes tolerables, el diseño sólo necesita los refinamientos necesarios para proporcionar acceso a las zonas del equipamiento. Si no es así, el diseño preliminar debe ser revisado (véase el paso 11). - Paso 11: Si se exceden los límites tolerables de paso o de toque, es requerido la revisión del diseño de la cuadrícula. Estas revisiones pueden incluir espaciamientos más pequeños de conductores, varillas de tierra adicionales, etc. Más discusión sobre la revisión del diseño de la cuadrícula para satisfacer los límites del voltaje de paso y de toque está dado en 16.6. - Paso 12: Una vez cumplidos los requisitos de voltaje de paso y de toque, pueden ser necesarias considerar cuadrículas y varillas de tierra adicionales. Los conductores de la cuadrícula adicionales pueden ser necesarios si el diseño de la cuadrícula no incluye conductores cercanos a equipos que se deben conectar a tierra. Las varillas de tierra adicionales pueden ser necesarias en la base de descargadores de sobretensión, neutros de transformadores, etc. El diseño final también deben ser revisado para eliminar peligros debidos a potenciales transferidos y los peligros asociados con las áreas especiales de preocupación. Ver la Cláusula 17. 105 Figura 32 – Diagrama de bloques del procedimiento de diseño 106 Tabla 12 – Índice de parámetros de diseño Símbolo Descripción Referencia ρ ρs 3Io A Cs d D Df Dm Em Es 13 7.4, 12.5 15.3 14.2 7.4 16.5 16.5 15.1, 15.10 16.5 16.5 16.5 Estep50 Estep70 Etouch50 Etouch70 Emm-touch50 Emm-touch70 h hs IG Ig K Kh Ki Kii Km Ks Lc LM LR Lr LS LT Lx Ly n nR Rg Sf tc tf ts Resistividad del suelo, Ω-m Resistividad de la capa superficial, Ω-m Corriente de falla simétrica en la subestación para el tamaño del conductor, A Área total encerrada por la cuadrícula de tierra, m2 Factor de reducción de la capa superficial Diámetro del conductor de la cuadrícula, m Espaciamiento entre conductores paralelos Factor de decremento para determinar IG (ver corriente máxima de cuadrícula) Máxima distancia entre dos puntos de la cuadrícula, m Voltaje de malla en el centro de malla de la esquina, método simplificado, V Voltaje de paso entre un punto arriba de la esquina exterior de la cuadrícula y a 1 m de la diagonal exterior de la cuadrícula por el método simplificado, V Voltaje de paso tolerado por el humano con 50 kg de peso del cuerpo, V Voltaje de paso tolerado por el humano con 70 kg de peso del cuerpo, V Voltaje de toque tolerado por el humano con 50 kg de peso del cuerpo, V Voltaje de toque tolerado por el humano con 70 kg de peso del cuerpo, V Voltaje de toque de metal a metal tolerado por el humano con 50 kg de peso, V Voltaje de toque de metal a metal tolerado por el humano con 70 kg de peso, V Profundidad de enterramiento de los conductores de la cuadrícula, m Espesor de la capa de material superficial, m Corriente máxima de cuadrícula que fluye entre la cuadrícula y el suelo que la rodea, A Corriente de cuadrícula simétrica, A Factor de reflexión entre las diferentes resistividades Factor de corrección que enfatiza los efectos de la profundidad, método simplificado Factor de corrección para la geometría de la cuadrícula, método simplificado Factor de corrección que ajusta los efectos de los conductores interiores sobre la malla de la esquina, método simplificado Factor de espaciamiento para el voltaje de malla (Em), método simplificado Factor de espaciamiento para el voltaje de paso (Es), método simplificado Longitud total del conductor de cuadrícula, m Longitud efectiva Lc + LR para el voltaje de malla (Em), m Longitud total de las varillas de tierra, m Longitud de una varilla de tierra en cada punto, m Longitud efectiva Lc + LR para el voltaje de paso (Es), m Longitud efectiva total del conductor del sistema de tierra, de cuadrícula y varillas, m Longitud máxima de conductor de la cuadrícula en la dirección x, m Longitud máxima de conductor de la cuadrícula en la dirección y, m Factor geométrico compuesto de los factores na, nb, nc y nd Número de varillas instaladas en el área A Resistencia del sistema de tierra, Ω Factor de división de corriente Duración de la corriente de falla para el dimensionamiento del conductor, s Duración de la corriente de falla para determinar el factor de decremento, s Duración del choque eléctrico para determinar la corriente de cuerpo tolerable, s 8.3 8.3 8.3 8.3 8.4 8.4 14.2 7.4 15.1 15.1 7.4 16.5 16.5 16.5 16.5 16.5 14.3 16.5 16.5 14.3, 16.5 16.5 14.2 16.5 16.5 16.5 14.3 14.1 a 14.4 15.1 11.2 15.10 5.2 a 6.3 107 16.5 Cálculo de voltajes máximos de paso y de malla Los algoritmos de computadora para determinar la resistencia de la cuadrícula y los voltajes de malla y de paso han sido desarrollados en Dawalibi y Mukhedkar [B43]; EPRI TR-100622 [B64]; Garrett y Holley [B72]; Heppe [B82]; y Joy, Meliopoulos, y Webb [B94]. Estos algoritmos requieren considerable capacidad de almacenamiento y fueron relativamente caros de ejecutar, pero las mejoras en los algoritmos de solución y la proliferación de las computadoras de escritorio de gran potencia han aliviado la mayor parte de estas preocupaciones. En algunos casos, no es económicamente justificable utilizar estos algoritmos de computadora, o el diseñador no puede tener acceso a una computadora con la capacidad exigida. Este apartado, en relación con el Anexo D, describe las ecuaciones aproximadas para la determinación de los parámetros de diseño y el establecimiento de los valores correspondientes de Em y Es, sin necesidad de utilizar una computadora. 16.5.1 Voltaje de malla (Em) Los valores de voltaje de malla se obtienen como un producto del factor geométrico, Km; un factor de corrección, Ki, que explica en parte el error introducido por las suposiciones hechas al derivar Km; la resistividad del suelo, ρ; y la corriente promedio por unidad de longitud enterrada efectiva del conductor de puesta a tierra (IG / LM). El factor geométrico Km (Sverak [B136]), es como sigue: Para las cuadrículas con varillas de tierra a lo largo del perímetro, o para las cuadrículas con varillas de tierra en las esquinas de la cuadrícula, así como a lo largo del perímetro y en toda el área de la cuadrícula Kii = 1 Para cuadrículas sin varillas de tierra o con solamente unas pocas varillas de tierra, pero ninguna localizada en las esquinas o en el perímetro 108 El uso de cuatro componentes para la forma de la cuadrícula desarrollados en Thapar, Gerez, Balakrishnan, y Blank [B148], el número efectivo de conductores paralelos en una cuadrícula dada, n, se puede hacer aplicable a cuadrículas de forma rectangular o de forma irregular que representan el número de conductores paralelos de una cuadrícula rectangular equivalente. Donde nb = 1 para cuadrículas cuadradas nc = 1 para cuadrículas cuadradas y rectangulares nd = 1 para cuadrículas cuadradas, rectangulares y con forma de L En otros casos Lc Lp A Lx Ly Dm es la longitud total del conductor en la cuadrícula horizontal en m es la longitud del perímetro de la cuadrícula en m es el área de la cuadrícula en m2 es la longitud máxima de la cuadrícula en la dirección x en m es la longitud máxima de la cuadrícula en la dirección y en m es la máxima distancia entre cualquiera dos puntos de la cuadrícula en m Y D, h, y d son definidas en la Tabla 12. El factor de irregularidad, Ki, usado con n definido arriba, es Las cuadrículas sin varillas de tierra, o cuadrículas con sólo unas pocas barras de tierra repartidos por toda la red, pero ninguna se encuentra en las esquinas o a lo largo del perímetro de la cuadrícula, la longitud enterrada efectiva, LM, es 109 Donde LR es la longitud total de todas las varillas de tierra en m Para las cuadrículas con varillas de tierra en las esquinas, así como a lo largo del perímetro y en toda la cuadrícula, la longitud efectiva enterrada, LM, es Donde Lr es la longitud de cada varilla de tierra en m 16.5.2 Voltaje de paso (Es) Los valores de voltaje paso se obtienen como un producto del factor geométrico, Ks; el factor de corrección, Ki; la resistividad del suelo, ρ; y la corriente promedio por unidad de longitud enterrada del conductor de puesta a tierra (IG / LS). Para cuadrículas con o sin varillas de tierra, la longitud de conductor enterrado efectiva, Ls, es El voltaje de paso máximo se supone que ocurre a una distancia de 1 m, comenzando en y extendiéndose fuera del conductor del perímetro en la bisectriz del ángulo de la esquina más extrema de la cuadrícula. Para la profundidad de enterramiento habitual de 0.25 m <h <2.5 m (Sverak [B136]), Ks es 16.6 Refinamiento del diseño preliminar Si los cálculos basados en el diseño preliminar indican que pueden existir diferencias de potencial peligrosos dentro de la subestación, las siguientes posibles soluciones deben ser estudiadas y aplicados en su caso: 110 a) Disminuir la resistencia total de la cuadrícula: Una disminución en la resistencia total de la cuadrícula disminuirá el máximo GPR y, por lo tanto, el máximo voltaje transferido. La forma más efectiva para disminuir la resistencia de la cuadrícula de tierra es mediante el aumento de la superficie ocupada por la cuadrícula. También se pueden usar varillas de tierra profundas o pozos de tierra si el área disponible es limitada y las varillas penetrarán capas de resistividad más baja. Una disminución en la resistencia de la subestación puede o no disminuir sensiblemente los gradientes locales, dependiendo del método utilizado. b) Espaciamiento de la cuadrícula más corto: Mediante el empleo de espaciamiento más corto de los conductores de la cuadrícula, se puede aproximar más estrechamente la condición de placa continua. Los potenciales peligrosos dentro de la subestación de este modo se pueden eliminar a un costo. El problema en el perímetro puede ser más difícil, especialmente en un pequeña subestación donde la resistividad es alta. Sin embargo, es usualmente posible, enterrando conductor de tierra fuera de la línea de la cerca, asegurar que los gradientes más escarpados inmediatamente fuera de este perímetro de la cuadrícula no contribuyen a contactos de toque más peligrosos. Otra forma eficaz y económica para controlar los gradientes es aumentar la densidad de las varillas de tierra en el perímetro. Esta densidad puede ser disminuida hacia el centro de la cuadrícula. Otro enfoque para el control de los gradientes en el perímetro y los potenciales de paso es enterrar dos o más conductores paralelos alrededor del perímetro en forma sucesiva a mayor profundidad como se incrementa la distancia desde la subestación. Otro enfoque consiste en variar el espaciamiento del conductor de cuadrícula con conductores más corto cerca del perímetro de la cuadrícula (Grupo de Trabajo AIEE [B4]; Biegelmeier y Rotter [B10]; Laurent [B100]; Sverak [B136]). Desvío de una mayor parte de la corriente de falla a otros caminos: Mediante la conexión de cables de tierra de líneas de transmisión o por la disminución de las resistencias en las fundaciones de las torres ubicadas en la vecindad de la subestación, parte de la corriente de falla se desviará de la cuadrícula. En relación con este último, sin embargo, debe sopesarse el efecto en los gradientes de falla cerca de las fundaciones de la torre (Yu [B155]). c) Limitación de la corriente de falla total: Si es factible, la limitación de la corriente de falla total disminuirá el GPR y todos los gradientes en proporción. Otros factores, sin embargo, por lo general van a hacer de esto impráctico. Por otra parte, si se realiza a expensas de un mayor tiempo de despeje de fallas, el cambio puede hacer que se incremente en lugar de disminuir. d) Barreras de acceso para área limitadas: La puesta de barreras de acceso para ciertas áreas, donde sea práctico reducirá la probabilidad de peligros para el personal. e) Aumentar los voltajes de toque y de paso tolerables: Los voltajes de toque y de paso tolerables pueden ser aumentados mediante la reducción del tiempo de eliminación de fallas, uso de un material superficial con mayor resistividad o aumentar el espesor del material de superficie. Véase la Tabla 7. 111 16.7 Aplicación de las ecuaciones de Em y Es Varias hipótesis de simplificación se hacen en la derivación de las ecuaciones de Em y Es. Las ecuaciones se compararon con los resultados de computadora más precisos en casos con diversas formas, tamaños de malla, números y longitudes de varillas de tierra, tierra, y se encontró una mejor consistencia que con las ecuaciones anteriores. Estos casos incluyen cuadrículas de forma cuadrada, rectangular, triangular, en forma de T, y en forma de L. Los casos se analizaron con y sin varillas de tierra. La longitud total de la varilla de tierra era variada con diferentes números de ubicaciones de la varilla de tierra y diferentes longitudes de varilla de tierra. El área de las cuadrículas se varió de 6.25 m2 a 10 000 m2. El número de mallas a lo largo de un lado se varió de 1 a 40. El tamaño de la malla se varió de 2.5 m a 22.5 m. Todos los casos suponen un modelo de suelo uniforme y el espaciamiento del conductor es uniforme. Se consideraron la mayoría de los ejemplos prácticos de diseño de la cuadrícula. Las comparaciones encontraron que las ecuaciones seguían los resultados de computadora con una precisión aceptable. 16.8 Uso del análisis de computadora en el diseño de cuadrículas Dawalibi y Mukhedkar [B43]; EPRI TR-100622 [B64]; y Heppe [B81] describen algoritmos de computadora para modelar sistemas de puesta a tierra. En general, estos algoritmos se basan en a) Modelado de los componentes individuales que comprenden el sistema de puesta a tierra (conductores de la cuadrícula, varillas de tierra, etc.). b) La formación de un conjunto de ecuaciones que describen la interacción de estos componentes. c) Resolviendo para la corriente de falla a tierra que fluye de cada componente hacia el suelo. d) Cálculo del potencial en cualquier punto de la superficie deseada debido a todos los componentes individuales. e) La precisión del algoritmo de computadora depende de cuán bien el modelo de suelo y el diseño físico reflejen las condiciones reales de campo. Hay varias razones que justifican el uso de algoritmos de computadora más precisos en el diseño del sistema de puesta a tierra. Estas razones incluyen - Los parámetros exceden las limitaciones de las ecuaciones. Un modelo de suelo de dos capas o multicapas es preferido debido a las variaciones significativas en la resistividad del suelo. No se puede analizar con los métodos de 16.5 las cuadrículas con separaciones de conductor o varillas de tierra desiguales. Puede ser deseado más flexibilidad para determinar puntos de peligro local. Presencia de estructuras metálicas enterradas o conductor no conectado al sistema de tierra, lo cual introduce complejidad al sistema. 112 17. Áreas de interés especial Antes de que se completen los cálculos de diseño final de la cuadrícula de tierra, aún queda la tarea importante de la investigación de posibles áreas especiales de interés en la red de la subestación de conexión a tierra. Esto incluye una investigación de las técnicas de puesta a tierra para la cerca de la subestación, ejes de los mandos de maniobra, rieles, tuberías y blindaje de cables. También deben ser considerados los efectos de potenciales transferidos. 17.1 Áreas de servicio Los problemas asociados con el voltaje de paso y de toque a las están expuestas las personas fuera de la cerca de la subestación son prácticamente los mismos como los que las personas dentro de las áreas cercadas de la subestación. De vez en cuando, una cerca se instalará para encerrar un área mucho mayor de lo que inicialmente se ha utilizado en una subestación y la cuadrícula de tierra se construye sólo en la superficie utilizada y a lo largo de la cerca de la subestación original. Las restantes áreas no protegidas dentro del área cercada a menudo se utilizan como almacenamiento, resguardo, o áreas de servicios generales. Los voltajes de paso y de toque deben ser evaluados para determinar si se necesitan tierras adicionales en estas áreas. Una cuadrícula de subestación reducida, que no incluye el área de servicio, tiene ventajas en los costos iniciales y futuros ahorros resultantes de no tener los problemas asociados con el "trabajo en torno a” un sistema de cuadrícula en la superficie total instalada anteriormente cuando se requiere una futura expansión en el área de servicio. Sin embargo, una cuadrícula reducida proporciona menos protección personal en comparación con una cuadrícula de subestación completa que incluya el área de servicio. También, debido al área más pequeña y menor longitud del conductor, una cuadrícula en el área de servicio y una reducida cuadrícula de la subestación tendrán una resistencia total mayor en comparación con una cuadrícula de subestación completa que incluya el área de servicio. El área de servicio podría estar rodeada por una cerca independiente que no está puesta a tierra ni unida a la cuadrícula de la subestación. Posibles problemas de voltaje transferido se abordan en 17.3. 17.2 Puesta a tierra de mandos de operación y tubos maniobra Los mandos de operación de seccionadores representan una preocupación significativa si los mandos no están conectados a tierra adecuadamente. Debido a que la operación manual de un seccionador requiere la presencia de un operador cerca de una estructura puesta a tierra, varias cosas pueden ocurrir que podría resultar en una falla de la estructura y someter al operador a una descarga eléctrica. Esto incluye la apertura de un circuito energizado, falla mecánica, falla eléctrica en un aislador del seccionador, o el intento de interrumpir un valor mayor de la corriente de magnetización del transformador de corriente o línea de carga que el seccionador puede interrumpir con seguridad. 113 Es relativamente fácil de proteger contra estos peligros cuando la palanca de operación está dentro de un área razonablemente extensa de la cuadrícula de tierra de la subestación. Si el sistema de puesta a tierra ha sido diseñado de acuerdo con esta norma, el voltaje de toque y de paso cercanos a la palanca de operación debe estar dentro de los límites de seguridad. Sin embargo, muy a menudo se toman medios adicionales para proporcionar un mayor factor de seguridad para el operador. Por ejemplo, el árbol de accionamiento del seccionador puede ser conectado a una alfombra de tierra (como se describe en 9.1) en la cual el operador se para cuando se opera el seccionador. La alfombra de tierra está conectada directamente a la cuadrícula de tierra y al eje de maniobra del seccionador. Esta técnica proporciona una derivación directa a tierra a través del mando del seccionador. El camino de tierra desde el eje de mando del seccionador a la cuadrícula de tierra debe ser dimensionado adecuadamente para soportar la corriente de falla a tierra durante el tiempo necesario. Refiérase a la Figura 33 para una práctica típica de puesta a tierra del eje de mando del seccionador. Las prácticas para la puesta a tierra de árboles de operación de seccionadores son variadas. Los resultados de una encuesta realizada en todo el mundo en 2009, indican que el 82% de las empresas eléctricas que respondieron, requieren la puesta a tierra de los árboles de operación de seccionadores de aire a la cuadrícula de tierra. La encuesta también mostró que un 100% de los encuestados tomó precauciones adicionales para reducir los gradientes superficiales donde el operador del seccionador se para. La metodología de la tierra del eje de maniobra fue casi igualmente dividida entre los que respondieron al cuestionario. Aproximadamente la mitad de las empresas eléctricas provee un puente directo entre el eje de maniobra del seccionador y la alfombra de tierra, mientras que la otra mitad provee un puente desde el eje del seccionador al acero estructural aterrizado que esta adyacente. El acero se utiliza como parte de la trayectoria conductora. Aproximadamente el 90% de las empresas eléctricas utiliza una trenza para conectar a tierra el eje de maniobra del seccionador. El 10% restante utiliza un dispositivo de puesta a tierra sin trenza. Una tierra de trenza típica se muestra en la Figura 34 y un dispositivo de puesta a tierra sin trenza se muestra en la Figura 35. La metodología para reducir los gradientes superficiales donde el operador del seccionador estaría parado estaba dividida entre la utilización de: una plataforma aterrizada, una malla de alambre estrechamente espaciada bajo el material superficial, o un espaciamiento más cercano de la cuadrícula primaria. 114 Figura 33 – Puesta a tierra típica del eje de operación de un seccionador 115 Figura 34 – Tierra típica trenzada 116 Figura 35 – Dispositivo típico de tierra sin trenza 17.3 Puesta a tierra de la cerca de la subestación Las cercas alrededor de las subestaciones son usualmente metálicas. En algunos casos, la cerca puede estar hecha de materiales de albañilería o materiales no conductivos. Para estos casos, la cerca no está aterrizada, excepto posiblemente en piezas o secciones metálicas expuestas, tales como las puertas. La discusión siguiente pertenece a la puesta a tierra de cercas metálicas. La puesta a tierra de la cerca es de gran importancia debido a que la cerca está generalmente accesible al público en general. El diseño de la puesta a tierra de la subestación debe ser tal que el voltaje de toque en la cerca está dentro del límite tolerable calculado de voltaje de toque. El 117 voltaje de paso también debe ser evaluado para verificar que no existe problema, a pesar de que el voltaje de paso rara vez es un problema cuando el voltaje de toque está por debajo del nivel tolerable. Existen varias filosofías con respecto a la puesta a tierra de la cerca de la subestación. A modo de ejemplo, el National Electrical Safety Code® (NESC®) [B3] requiere la puesta a tierra de las cercas metálicas usadas para encerrar las subestaciones de suministro eléctrico que tienen conductores o equipos eléctricos energizados. Este requisito de puesta a tierra de las cercas metálicas se puede lograr mediante la unión de la cerca a la red tierra de la subestación o a un electrodo (s) de tierra separado, el cual puede consistir de una o más varillas de tierra y un conductor enterrado dentro o fuera de la cerca usando los métodos descritos en el NESC. Las diversas prácticas de puesta a tierra de cercas son: - - La cerca se encuentra dentro del área de la red de tierra de la subestación y está conectado a la cuadrícula de tierra de la subestación. La cerca se encuentra fuera del área de la red de tierra de la subestación y está conectada a la cuadrícula de tierra de la subestación. La cerca se encuentra fuera del área de la red de tierra de la subestación y no está conectada a la cuadrícula de tierra de la subestación. La cerca está conectada a un electrodo de tierra separado. La cerca se encuentra fuera del área de la red de tierra de la subestación y no está conectada a la cuadrícula de tierra de la subestación. La cerca no está conectada a un electrodo de tierra separado. El contacto a tierra del poste de la cerca al concreto en el suelo está basado en una tierra efectiva. Si han de seguirse las dos últimas prácticas de puesta a tierra de la cerca, es decir, si la cerca y sus tierras asociadas no se van a acoplar en modo alguno a la cuadrícula principal de tierra (excepto a través del suelo), entonces tres factores requieren consideración: ¿La caída de una línea energizada sobre la cerca es un peligro que debe ser considerado? La construcción de líneas de transmisión sobre las cercas privadas es común y fiable. El número de líneas que cruzan una cerca de la subestación puede ser mayor, pero los tramos son a menudo más cortos y rematan en una o ambas terminales. Por lo tanto, el peligro de una línea que cae sobre una cerca no suele ser de gran preocupación. Si se va a diseñar contra de este peligro, entonces es necesario un acoplamiento muy cercano de la cerca a la tierra adyacente a lo largo de su longitud. Los potenciales de toque y de paso en ambos lados de la cerca deben estar dentro del límite aceptable para una corriente de falla de esencialmente el mismo valor máximo como para la subestación. Esto es algo impráctico ya que la cerca no está ligada a la red principal de tierra en la subestación y se requeriría la tierra adyacente a disipar la corriente de fallo a través del sistema de cerca a tierra local. Además, la corriente de falla podría causar un daño significativo a la cerca, y predecir que el tiempo de despeje real y los voltajes de toque y de paso podrían ser imposibles. ¿Pueden existir potenciales peligrosos en la cerca durante otros tipos de fallas debido a que la línea de la cerca cruza los contornos equipotenciales normales? Las cercas no siguen las líneas equipotenciales normales en la superficie de la tierra que resultan de la corriente de falla que fluye hacia y desde la red de tierra de la subestación. Si el 118 acoplamiento de la cerca a tierra se basa únicamente en el contacto entre los postes de la cerca y la tierra circundante, la cerca podría, bajo una condición de falla, alcanzar el potencial de la tierra donde el acoplamiento era relativamente buena, y con ello alcanzar un alto voltaje en relación con la superficie del suelo adyacente en los lugares donde el acoplamiento no era tan buena. ¿En la práctica, puede ser asegurado en todo momento el aislamiento metálico completo entre la cerca y la cuadrícula de tierra de la subestación? Puede ser algo impráctico esperar un completo aislamiento metálico de la cerca y la cuadrícula de tierra de la subestación. Puede existir la posibilidad de una conexión eléctrica inadvertida entre la cuadrícula y la cerca. Esta conexión eléctrica inadvertida puede ser desde conduits metálicos, tuberías metálicas de agua, etc. Éstos ítems metálicos podrían transferir potencial de la red de tierra principal a la cerca y por lo tanto podría existir diferencias locales de potencial peligroso en la cerca durante una falla. 17.4 Resultado de los perfiles de voltaje para la puesta a tierra de la cerca 17.5 17.6 17.7 17.8 17.9 Puesta a tierra del blindaje del cable de control Extensiones del bus GIS Puesta a tierra de descargadores de sobretensión Tierras separadas Potenciales transferidos 18. Construcción de un sistema de tierra 19. Mediciones de campo de un sistema de tierra construido 20. Modelos de escala física A menudo es difícil extraer conclusiones válidas con respecto a un problema general de puesta a tierra únicamente a partir de los datos reales de campo. La falta de resultados consistentes causados por la incapacidad de controlar la prueba, tales como las condiciones climáticas y otras variables que afectan a la condición del suelo, y las dificultades en la recolección de datos, reduce la capacidad de correr y duplicar las pruebas. Debido a que es útil contar con la verificación de las hipótesis teóricas o técnicas de computadora, o ambas, los modelos a escala se han usado para cerrar la brecha. El uso de modelos pequeños se puede utilizar para determinar la resistencia y perfiles de potenciales de arreglos de cuadrículas de tierra. Las primeras pruebas con modelos a escala usaban agua para representar el suelo uniforme. El uso de modelos pequeños en grandes tanques dio resultados consistentes y habilitaban varios modelos y condiciones que pueden ser probados y observar los efectos de los diferentes parámetros (Armstrong y Simpkin [B6]). 119 A finales de 1960, un modelo de laboratorio de dos capas fue desarrollado en la Escuela Politécnica para verificar técnicas de computadora. Este método utiliza bloques de concreto para representar la capa inferior del suelo (Mukhedkar, Gervais, y Dejean [B114]). Una técnica posterior desarrollada por la Universidad del Estado de Ohio utiliza agar, una sustancia similar a la gelatina que se utiliza con frecuencia en estudios biológicos, simula los niveles inferiores de suelo. En este proyecto, los modelos de suelo uniforme y de dos capas fueron usados para estudiar los efectos de muchos parámetros en la resistencia y potenciales superficiales (EPRI EL-3099 [B62]). Aunque las pruebas en modelos tienen una medición inherente en las precisiones, los modelos a escala se pueden utilizar con eficacia en los estudios paramétricos para el diseño de cuadrículas de tierra y para verificar las simulaciones por computadora de los parámetros de la cuadrícula de tierra (Sverak, Booream, y Kasten [B138]). 120 IEEE Std 80 - 2013 IEEE Guía para la Seguridad en el Aterrizamiento de Subestaciones CA Anexo F (Informativo) Análisis paramétrico de sistemas de tierra (El Anexo F se ha tomado del artículo de Dawalibi, F., y Mukhedkar, D. “Parametric analysis of grounding systems,” IEEE Transactions on Power Apparatus and Systems, vol. PAS-98, no. 5, pp. 1659–1668, Sept./Oct. 1979; y Dawalibi, F., and Mukhedkar, D., “Influence of ground rods on grounding systems,” IEEE Transactions on Power Apparatus and Systems, vol. PAS-98, no. 6, pp. 2089–2098, Nov./Dec. 1979.) Para diseñar eficientemente un sistema de puesta a tierra segura es necesario tener conocimiento de cómo varios parámetros afectan el rendimiento del sistema de puesta a tierra. Algunos de estos parámetros incluyen el espaciamiento y disposición del conductor en la cuadrícula, el número de varillas de tierra, la ubicación y la longitud, y los parámetros de la resistividad del suelo (es decir, suelo homogéneo o de varias capas con diferentes espesores y los valores de K, el factor de reflexión). En este anexo se da una breve explicación de cómo los parámetros anteriores afectan el comportamiento de los sistemas de puesta a tierra en suelos de resistividad uniforme y de dos capas. Hay muchos otros parámetros que pueden afectar el desempeño del sistema de puesta a tierra, pero no está dentro del alcance de este anexo para discutir estos parámetros. F.1 Suelo uniforme F.1.1 Densidad de corriente – solamente la cuadrícula Para un sistema de puesta a tierra que consiste solamente en conductores en la cuadrícula, la corriente a lo largo de cualquiera de los conductores se descarga en la tierra de una manera bastante uniforme. Sin embargo, una porción más grande de la corriente se descarga en el suelo de los conductores de la cuadrícula ubicados en la parte exterior en lugar de los conductores cerca del centro de la cuadrícula (consulte la Figura F.1 y F.2). Una manera eficaz de hacer que la densidad de corriente más uniforme entre el interior y los conductores de la periferia es emplear un espaciado de conductor no uniforme, con el conductor de espaciamiento más grande en el centro de la rejilla y más pequeño hacia el perímetro. Sin embargo, el análisis de las redes con este tipo de separación no se puede hacer utilizando los métodos simplificados de esta guía, sino que debe hacerse utilizando técnicas similares a las descritas en las referencias. 121 F.1.2 Resistencia – solamente la cuadrícula Para un área dada a ser conectada a tierra, el efecto sobre la resistencia al aumentar el número de mallas en un sistema de tierra llega a ser mínima. Es decir, como el número de mallas aumenta desde uno, la resistencia de la cuadrícula disminuye. Sin embargo, esta disminución se convierte rápidamente en insignificante para un gran número de mallas (o pequeño espaciamiento conductor paralelo). Ver figura F.3 y F.4. Como se muestra en la figura F.5, la resistencia también muestra una disminución gradual con la profundidad de enterramiento, hasta que se aproxima a la mitad de su valor de la resistencia en la superficie cuando la profundidad aumenta hasta el infinito. Pero para las variaciones típicas de profundidad de enterramiento encontrado dentro de la industria (es decir, de 0.5 m a 1.5 m), este cambio en la resistencia con la profundidad es despreciable para suelo uniforme. F.1.3 Voltajes de toque y de paso – solamente la cuadrícula Dado que la mayoría de la corriente en una cuadrícula uniformemente espaciada se descarga a tierra en los conductores exteriores, los peores voltajes de paso y toque se producen en las mallas exteriores, especialmente en las esquinas de las mallas. El aumento del número de mallas (disminuyendo el espaciamiento conductor) tiende a reducir los voltajes de toque y de paso hasta que se alcanza un límite de saturación. Más allá de este número de mallas, la reducción del espacio entre conductores tiene un efecto mínimo en la reducción de los voltajes (consulte la Figura F.6, F.7, F.8 y F.9). Este límite de saturación es la componente vertical del voltaje causado por la profundidad de enterramiento de la red de tierra, y sólo se modifica con un cambio en la profundidad de enterramiento de la cuadrícula. La profundidad de enterramiento de la cuadrícula también influye en los voltajes de paso y de toque de manera significativa, como se muestra en la figura F.10 y F.11. Para aumentos moderados en la profundidad, el voltaje de toque disminuye debido principalmente a la reducción de la resistencia de la cuadrícula y la correspondiente reducción en la elevación del potencial de tierra. Sin embargo, en caso de grandes aumentos de la profundidad, el voltaje de toque puede en realidad aumentar. La reducción del incremento del potencial de tierra llega a un límite de aproximadamente la mitad de su valor en la superficie cuando la profundidad de la red se aproxima al infinito, mientras que el potencial de la superficie de tierra se aproxima a cero a profundidades infinitas. Por lo tanto, dependiendo de la profundidad inicial, un aumento de la profundidad de enterramiento en la cuadrícula puede o bien aumentar o disminuir el voltaje de toque, mientras que el voltaje de paso siempre se reduce por el aumento de la profundidad. 122 Figura F.1 – Densidad de corriente en cuadrícula de una malla F.2 – Densidad de corriente en cuadrícula de 16 mallas 123 Figura F.3 Resistencia de la cuadrícula de cuatro mallas Figura F.4 Resistencia de la cuadrícula de 16 mallas 124 Figura F.5 Resistencia de la cuadrícula vrs. profundidad de la cuadrícula F.1.4 Varillas de tierra solamente Para los sistemas que consisten solamente de varillas de tierra, la corriente se ha encontrado para descargar dentro de la tierra a un ritmo bastante uniforme a lo largo de la longitud de la varilla con un aumento gradual con la profundidad y con un poco más altos incrementos en la densidad de corriente cerca de los extremos (consulte la figura F.12). Al igual que en el caso de la cuadrícula formada solo de conductores, la densidad de corriente es mayor en las varillas cerca de la periferia del sistema de puesta a tierra que para los del centro (consulte las figuras F.13 y F.14). Por lo tanto, los voltajes de paso y de toque son mayores cerca de las varillas ubicadas hacia el exterior de la red de tierra. El aumento de la longitud de las varillas es eficaz en la reducción de la resistencia del sistema, y por lo tanto, la reducción de los voltajes de paso y de toque. Aumentar el número de varillas también reduce la resistencia hasta que se satura la zona conectada a tierra, y es incluso más eficaz en la reducción de los voltajes de paso y de toque, como se muestra en la Tabla F.1. Esto es cierto porque, además de la menor resistencia y menor elevación del potencial de tierra, la separación entre las varillas se reduce, lo que tiende a hacer más uniforme el potencial superficial de tierra. Los comentarios anteriores sobre los efectos de profundidad de enterramiento de la cuadrícula también se aplican a los efectos de la profundidad en que queda la parte superior de la varilla. 125 Figura F.6 – Voltajes de toque de la cuadrícula de cuatro mallas Figura F.7 – Voltajes de toque de una cuadrícula de 16 mallas 126 Figura F.8 – Voltajes de paso de una cuadrícula de cuatro mallas Figura F.9 – Voltajes de paso de una cuadrícula de 16 mallas 127 Figura F.10 – Voltaje de toque vrs. la profundidad de enterramiento de la cuadrícula Figura F.11 – Voltaje de paso vrs. la profundidad de enterramiento de la cuadrícula 128 Figura F.12 – Densidad de corriente de un arreglo con solo varillas Figura F.13 – Densidad de corriente en múltiples varillas enterradas dentro de suelo uniforme 129 Figura F.14 – Densidad de corriente de múltiples varillas de tierra en suelo de dos capas F.1.5 Combinación de la cuadrícula y varillas de tierra Cuando se utiliza una combinación de conductores en la cuadrícula y varillas de tierra en un sistema de puesta a tierra, el número y la longitud de las varillas de tierra pueden tener una gran influencia en el rendimiento del sistema de puesta a tierra. Para una longitud dada de conductor de la cuadrícula o varilla de tierra, la descarga de las varillas de tierra es mayor que del conductor de la cuadrícula, como se muestra en la figura F.15, F.16, F.17 y F.18. Esta corriente en la varilla de tierra también se descarga principalmente en la parte inferior de la varilla. Por lo tanto, los voltajes de paso y toque se reducen significativamente en comparación con solo la cuadrícula. F.1.6 Conclusiones En general, un sistema de puesta a tierra uniformemente espaciada que consiste en una cuadrícula y varillas de tierra es superior a un sistema de puesta a tierra uniformemente espaciados que consiste solamente en una cuadrícula con la misma longitud total del conductor. La técnica de separación variable que se discutió anteriormente puede ser utilizada para diseñar un sistema de puesta a tierra que consiste en una cuadrícula solamente, con menores voltajes de paso y de toque que un diseño de la cuadrícula y varillas de tierra de igual longitud y uniformemente espaciadas. Sin embargo, la técnica de espaciamiento variable también podría utilizarse para diseñar un sistema de puesta a tierra con un mejor uso de conductores de la cuadrícula no uniformemente espaciada y varillas de tierra. Debe apreciarse que este tipo de diseño deberá ser analizado utilizando las técnicas de análisis detallados en las referencias. 130 Figura F.15 – Densidad de corriente en la cuadrícula – cuadrícula y varillas en suelo uniforme Figura F.16 – Densidad de corriente en la varilla – Varillas y cuadrículas en suelo uniforme 131 Figura F.17 – Densidad de corriente en la varilla y cuadrícula – nueve varillas y cuadrícula en suelo de dos capas Figura F.18 – Densidad de corriente en la varilla y cuadrícula – nueve varillas y cuadrícula en suelo de dos capas 132 F.2 Suelo de dos capas El rendimiento de un sistema de puesta a tierra en un suelo de varias capas puede variar mucho respecto al desempeño del mismo sistema de tierra pero instalado en suelo uniforme. Además de otros parámetros, el rendimiento se ve afectado por la resistividad y espesor de las capas de suelo y la profundidad de enterramiento del sistema de puesta a tierra. En la siguiente discusión se tendrá en cuenta a modelos de tierra sólo de dos capas, debido a la complejidad y a las numerosas combinaciones posibles para las capas adicionales. Para una explicación de análisis de suelo de dos capas de los sistemas de puesta a tierra, consulte la sección 13.4.2 de la IEEE Std 80 – 2013. Por brevedad en la discusión, las siguientes variables son definidas: ρ1 = resistividad de la capa superior del suelo ρ2 = resistividad de la capa superior del suelo 𝜌 −𝜌 K = el factor de reflexión = 𝜌2 +𝜌1 2 1 h = altura de la capa superior del suelo F.2.1 Densidad de corriente – cuadrícula solamente Para los sistemas de puesta a tierra que consisten solamente de conductores en la cuadrícula, la densidad de corriente depende altamente tanto de K y h, como se muestra en la Figura F.1 y F.2. Para los valores negativos de K (ρ1> ρ2), la densidad de corriente es bastante uniforme en toda la red con densidades ligeramente mayores en el conductor entre los puntos de intersección de la cuadrícula, y es ligeramente más alta para conductores exteriores que para los conductores cerca del centro de la cuadrícula. Cuando se incrementa la altura de la capa superior, esta mayor densidad de corriente en los conductores exteriores se hace más dominante. Esto se puede explicar de la siguiente manera. Para valores pequeños de h, la mayor parte de la corriente descargada de la red de tierra se va hacia abajo en el suelo de baja resistividad, mientras que para valores grandes de h la mayor parte de la corriente permanece en la capa de alta resistividad del suelo, suponiendo que la cuadrícula esta en la capa superior. Cuando h aumenta, el modelo se aproxima al de suelo uniforme con una resistividad igual a la de la capa superior. Por lo tanto, como en el caso del modelo de suelo uniforme discutido en F.1, los conductores de la cuadrícula en el exterior descargan una porción más grande de la corriente en el suelo que los conductores centrales. Para valores positivos de K (ρ1 < ρ2), la corriente tiene una tendencia mucho mayor a permanecer en el suelo de baja resistividad, incluso para valores moderadamente pequeños de h. Cuando h aumenta, la densidad de corriente se acerca rápidamente a la de un suelo uniforme, con densidades más altas en los conductores de la periferia. F.2.2 Resistencia – solamente la cuadrícula La resistencia de un sistema que consiste sólo de la cuadrícula puede variar en gran medida como una función de K y h y, por lo tanto, puede ser mayor o menor que la resistencia de la misma red en un suelo uniforme, como se muestra en la figura F.3 y F.4. En general, la resistencia de una cuadrícula es más baja si está en la capa más conductiva del suelo. Cuando h aumenta la resistencia de la cuadrícula se aproxima al valor del suelo uniforme de la misma resistividad como 133 la capa superior. Suponiendo que la red se encuentra en la capa superior del suelo con resistividad igual a ρ1, lo siguiente puede generalizarse: a) Para valores negativos de K (ρ1 > ρ2), la resistencia de la cuadrícula será mayor que la de una cuadrícula idéntica en suelo uniforme con ρ1 resistividad. b) Para valores positivos de K (ρ1 < ρ2), la resistencia de la cuadrícula será menor que la de una cuadrícula idéntica en una resistividad del suelo uniforme ρ2. F.2.3 Voltajes de paso y de toque – solamente la cuadrícula Los voltajes de paso, de toque y de malla también pueden variar significativamente con K, h, y la profundidad de la cuadrícula. Pueden ser mucho mayor o menor que un modelo de suelo uniforme correspondiente. Ver figura F.6, F.7, F.8 y F.9. Para las redes enterradas cerca de la superficie de la tierra, el aumento del número de mallas es un medio eficaz de reducir los voltajes de malla. Sin embargo, al aumentar la profundidad de la cuadrícula, la efectividad de este método de reducción de los voltajes de malla disminuye hasta un valor de profundidad de cuadrícula característica, en que los voltajes de malla comienzan a aumentar. Las razones de este fenómeno son idénticas a los descritos anteriormente para el suelo uniforme. Para un gran número de mallas (es decir, pequeña separación entre conductores paralelos), los voltajes de toque son relativamente poco afectadas por h y K. Para los valores negativos de K (ρ1 > ρ2), el voltaje de toque más alto se produce cuando h es ligeramente mayor que la profundidad de enterramiento de la cuadrícula. Para los valores positivos de K (ρ1 < ρ2), los voltajes de toque más altos se producen cuando h es menor que la profundidad de la cuadrícula, o cuando h es mucho mayor que la profundidad de cuadrícula. Una forma de reducir el voltaje de toque sin aumentar la cantidad total de conductor es omitir los conductores transversales de conexión (excepto en los extremos) y reducir la separación entre los conductores paralelos restantes. Hay que señalar, sin embargo, que mientras que el voltaje de toque se reduce, se aumenta el voltaje de paso cuando se utiliza este diseño. F.2.4 Varillas de tierra solamente El comportamiento de un sistema de puesta a tierra que consiste solamente de varillas de tierra puede variar en gran medida del caso de suelo uniforme. Las principales diferencias se deben a que la densidad de corriente en cada varilla puede ser mucho mayor en la porción de la varilla situada en la capa de baja resistividad, en función del valor de K. A medida que el valor absoluto de K aumenta, también lo hace el porcentaje de la corriente descargada en la parte de la varilla situada en la capa de menor resistividad del suelo, como se muestra en la Figura F.12. Suponiendo que la varilla se extiende de la capa superior a la capa inferior de suelo, la densidad de corriente en la parte de la varilla en cualquiera de las capas es esencialmente uniforme con un ligero aumento cerca del límite de la capa. Hay un cambio brusco en la densidad de corriente, sin embargo, a la profundidad h. Para varillas que se encuentran principalmente en la capa de baja resistividad, hay una densidad de corriente considerablemente mayor en las varillas exteriores, en comparación con las varillas cerca del centro del diseño, pero para varillas principalmente en la 134 capa de alta resistividad la diferencia en la densidad de corriente en las varillas exteriores y las que están adentro es mucho menor (véase la figura F.14). Como en el caso de la cuadrícula, los valores positivos de K (ρ1 < ρ2) generalmente dan una mayor resistencia, y valores negativos de K (ρ1 > ρ2) dan una menor resistencia para un sistema de varillas de tierra en comparación con el sistema de puesta a tierra idéntica en suelo uniforme con una resistividad de ρ1. Sin embargo, como la altura de la capa superficial aumenta, la resistencia de las varillas para todos los valores de K se aproxima a la del modelo uniforme (véase la Tabla F.1). F.2.5 Combinaciones de cuadrícula y varillas de tierra En función de los valores de K y h, la adición de varillas de tierra a un sistema de conductores de la cuadrícula puede tener un enorme efecto sobre el rendimiento del sistema de puesta a tierra. Para los valores negativos de K (ρ1 > ρ2) y para valores de h limitado de modo que las cuadrículas se extienden en el suelo más conductor, la mayoría de la corriente se descarga a través de las varillas en la capa inferior del suelo. Incluso para grandes valores de h donde ninguna de las varilla se extiende en el suelo más conductor, la densidad de corriente es mayor en las varillas de tierra que en los conductores de la cuadrícula, como se muestra en la figura F.17 y F.18. Tabla F.1 – Voltajes de toque para múltiples varillas de tierra Si K es positivo (ρ1 < ρ2), la densidad de corriente para la porción de las varillas de tierra en la capa superior es aún mayor que la de los conductores de la cuadrícula. Para los valores positivos de K, los efectos de los electrodos de tierra se vuelven dependientes en gran medida de h, o en la longitud de las varillas en la capa más conductora. Dependiendo de la magnitud de K y h, las longitudes de las varillas se acortan de manera efectiva de manera que no puede contribuir significativamente al control de los voltajes de paso y de toque. Sin embargo, para valores de K 135 positivo moderados y grandes valores de h, las varillas de tierra se pueden utilizar para mejorar de forma efectiva los voltajes de paso y de toque. Si K es negativo (ρ1 > ρ2), los voltajes de paso y de toque se reducen significativamente con la adición de varillas de tierra a un sistema de conductores de la cuadrícula. Para pequeños y medianos valores de h, relativamente toda la corriente se descarga en la capa de suelo inferior, reduciendo así los voltajes de paso y de toque. Cuando h aumenta, el rendimiento del sistema de puesta a tierra se aproxima al de un sistema idéntico en suelo uniforme de resistividad ρ1. F3. Resumen Los parámetros de dos capas h y K discutidos anteriormente pueden tener una influencia considerable en el rendimiento del sistema de puesta a tierra. Un sistema diseñado utilizando las técnicas de suelo uniforme puede dar resultados para el voltaje de paso y de toque, y la resistencia de tierra en la subestación, que van desde muy pesimista a muy optimista, dependiendo de los valores específicos de los distintos parámetros. La Tabla F.2 resume los efectos de un entorno de suelo de dos capas en el voltaje de toque con la adición de una varilla de tierra a una cuadrícula, y en el voltaje de toque para una combinación de cuadrícula-varilla. Tabla F.2 – Voltajes de toque para la combinación de cuadrícula y varilla de tierra en suelos de dos capas 136