H.CH Rompiendo eslabones. Juan 8:31-38 Objetivo: Enseñar a los creyentes que atreves de la verdad, ellos llegan a ser únicamente libres de los malos patrones de conducta a fin de que tengan relaciones interpersonales saludables. Introducción. En nuestro ambiente popular hay un dicho muy conocido “de tal palo tal astilla” lo que nos hace referencia que, tanto el padre como el hijo tienen cosas similares o comparten algo en común. En buena medida a través del tiempo las familias comparten sus vidas y son participes de costumbres y hábitos los cuales se pasan de generación a generación. 1 H.CH Pero en todo esto, cuando nos relacionamos con otros existirá siempre una discrepancia, debido a que algunos con la mente de Cristo no estarán de acuerdo con algún patrón de conducta que no es saludable. Pero la pregunta que debemos responder aquí es ¿Qué tan saludables son esas costumbres y hábitos que tenemos? ¿Hemos llegado a ser protagonistas o más bien nos hemos convertido en antagonistas por causa de estas costumbres y hábitos? Para que algo llegue a ser parte de nuestras vidas tales como los patrones de conducta, tiene que tener su origen o concepción en nuestra cosmovisión o en nuestra facultad cognitiva, donde se da lugar a nuestros juicios o buen parecer. De manera que cuan a 2 H.CH menudo lo vivamos, lo iremos normalizando hasta que llegue a ser algo natural. Pero ¿Qué sucede cuando vivimos erradamente? La respuesta a esto es que llegamos a ser esclavos de esto que nos gobierna y mayormente nos convertimos esclavos de nuestras pasiones, y mayores son las consecuencias funestas cuando nuestra conducta va en contra de lo que a Dios agrada. En el antiguo testamento se nos ilustra con tanta claridad patrones de conducta que se desencadenan de generación a otra, de hombres que vivían a su manera, a lo que bien les pareciere vivían sin tomar en cuenta a Dios a pesar de tener conocimiento de Sus mandamientos. 3 H.CH Como tales son los casos de los reyes de Israel, revisemos en nuestras biblias las siguientes citas: 1Re 15:26 E hizo lo malo ante los ojos de Jehová, andando en el camino de su padre, y en los pecados con que hizo pecar a Israel. 1Re_16:25 Y Omri hizo lo malo ante los ojos de Jehová, e hizo peor que todos los que habían reinado antes de él; 1Re_16:30 Y reinó Acab hijo de Omri sobre Israel en Samaria veintidós años. Y Acab hijo de Omri hizo lo malo ante los ojos de Jehová, más que todos los que reinaron antes de él. 1Re 22:51-52 Ocozías hijo de Acab comenzó a reinar sobre Israel en Samaria, el año diecisiete de Josafat rey de 4 H.CH Judá; y reinó dos años sobre Israel. E hizo lo malo ante los ojos de Jehová, y anduvo en el camino de su padre, y en el camino de su madre, y en el camino de Jeroboam hijo de Nabat, que hizo pecar a Israel. Y muchos textos como estos abundan en la escritura para enseñarnos como los patrones de conducta son transmitidos a través de la familia y que se llega a ser presa de esto. Hay una implicación importante, cuando llegamos a olvidar y obviamos la responsabilidad que tenemos delante de Dios y nuestro prójimo, los patrones de conducta dañinos se convierten en una normalidad debido a que no se censuró, limitó y corrigió, a causa de la unanimidad que existía en medio 5 H.CH de la sociedad inmoral la cual estaba esclava del pecado. Hay una frase muy conocida en la cultura popular: “Quienes no conocen su historia están condenados a repetirla” -Jorge Agustín Nicolás Santayana y Borrás. Ruiz de El hombre esclavo de sus pecados es caracterizado por los patrones de conducta que lo gobiernan, viviendo a su vez a su manera, sin considerar que en las consecuencias de sus actos personas como familia, amigos y sociedad son afectadas. Aquí podríamos pregunta: hacernos una ¿Es probable que un cristiano llegue a tener este tipo de condición? 6 H.CH Sí, es probable mientras el cristiano no someta cada área de su vida al Señorío de Cristo. Hay cristianos que no han entregado o confesado a Dios pecados que muchas veces desconocen que es pecado, o muchas veces sus corazones suelen endurecerse siendo indiferentes a la voz de Dios, y es de sorprenderse! O muchas veces suelen morir en su interpretación pues no desean ser corregidos viviendo aisladamente de la iglesia, no se involucran en las actividades de la iglesia. Pero, ¿Cómo llegamos a ser libres? La escritura es interesante al expresar la solución y señala muy enfáticamente su relación con la identidad que debemos llevar, la de discípulos. 7 H.CH Desarrollo. Bosquejo: Juan 8:31-34 1. Implicaciones de permanecer en la palabra de Dios.v31 1.1 Llegar a ser un verdadero discípulo.v31b 1.2 Llegar a conocer la verdad.v32a 1.3 Llegar a ser libres.v32b 2. Implicaciones de no corresponder a la palabra de Dios.v33 2.1 Mantenerse en un estado de negación y emancipación de Dios.v33 2.2 Mantenerse en un estado de pecado.v34 8 H.CH 1. Implicaciones de permanecer en la palabra de Dios.v31 Comúnmente cuando decidimos iniciar un nuevo caminar o cuando empezamos a practicar un nuevo estilo de vida tiene sus consecuencias tanto que habrá dos efectos opuestos, es decir cuando iniciamos nuevos hábitos, al adquirirlos, estos darán fruto, así también habrá su consecuencia por haber abandonado los anteriores, la práctica de uno definirá la fiabilidad del otro. Y cada vez que estemos más seguros que la decisión que hallásemos tomado, estaremos más convencidos que fue lo mejor que podamos haber hecho. No obstante, hasta el punto que nos encontremos que ciertas cosas vayan en contra de nuestros intereses, deseos e ideales. 9 H.CH El Señor Jesús en su momento predicaba a las multitudes, muchos de los judíos eran convertidos, otros a medio convencer y otros totalmente en desacuerdo con Su predicación, ya que la Palabra misma del Señor demandaba una renuncia a la vida misma llena de sí mismos. Jesús, no solo estaba siendo protagonista de oidores de la palabra sino que hay una pauta importantísima en el texto bíblico que indica y a la vez condiciona, el texto menciona lo siguiente, leamos de nuevo el texto, verso 31 y 32: “Dijo entonces Jesús a los judíos que habían creído en él: Si vosotros permaneciereis en mi palabra, seréis verdaderamente mis discípulos; y conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres.” 10 H.CH ¡Cuán importante es la Palabra del Señor para el creyente¡ “Si vosotros permanecieres en mi Palabra” La palabra “permanecer” expresa algo en que estamos continuamente ejercitándonos, donde somos inamovibles, donde estamos arraigados. Cada día el hombre siendo creación de Dios a imagen y semejanza desea andar según sus designios dejando a un lado las palabras de Jesús, y es algo de la cual debemos cuestionarnos, debido a que llevamos sobre nosotros una identidad que proviene de la eternidad. Jesús expresaba sus palabras para que el pueblo que creyera sea transformado, traído de las tinieblas a la luz y que en ellos fuese evidente 11 H.CH la gracia y el poder de Dios, el perdón de pecados y la libertad. Por lo cual, todo aquel permanece en sus palabras: 1.1 que Llegar a ser un verdadero discípulo.v31b Muchos de aquellos judíos iban atrás del buen maestro, muchos por morbo, otros genuinamente deseaban estar con Él, otros porque podrían sacar provecho de la situación y otros solo por aumentar más a sus intereses. Pero esto dista mucho de ser un verdadero discípulo, a fin de cuentas; ¿Qué es un discípulo? Discípulo es aquel que llega a ser como su maestro, a experimentar lo que enseña y vive su maestro! 12 H.CH Pero, la pregunta que debemos hacernos, ¿somos discípulos de Cristo? Continuamente el hombre se encuentra en esa búsqueda de su semejanza más a hombre de este siglo, busca cada vez más parecerse a los estereotipos que están en el ranking del buen parecer de una sociedad inmoral y perversa, busca definirse mas por sus ideales llagando a ser más discípulos de si mismos y de la cosmovisión que va en dirección opuesta a las palabras del Eterno. Por tanto la humanidad está sumergida en conceptos e ideologías, una humanidad confundida que ha llegado a ser esclava: Violencia Egocentrismo Falta de afecto natural 13 H.CH Inmoralidad Manipulación Feminismo Machismo Etc... Pero el discípulo de Cristo es el extremo contrario a estas cosas, el discípulo de Cristo reconoce su condición y a quien sirve, y es aquel que está dispuesto a abandonarlo todo para ser igual a Su maestro. En una ocasión Jesús se encontraba con sus discípulos en unos cuestionamientos y era sorprendente la convicción de aquel discípulo que estaba seguro que no habría otro a donde ir. “Le respondió Simón Pedro: Señor, ¿a quién iremos? Tú tienes palabras de vida eterna.” Jn 6:68 El discípulo de Cristo es aquel que le sigue, actúa y anhela ser más como 14 H.CH su Señor, de tal forma que si muere así mismo, muere a sus pecados, ahora vive por Él y para Él, dando lugar o inicio a la verdadera libertad. En consecuencia a esto, el discípulo de Cristo: 1.2 Llegar a conocer verdad.v32a la Verdad, es una palabra que siempre ha estado en boca de muchos. Siempre hemos estado habituados a vivir de cierta forma que consideramos que es verdad, el mundo vive su verdad, y es un término que se ha convertido en algo relativo por ocasión de las múltiples corrientes de pensamiento y a la conducta anárquica del hombre en su intento de no reconocer a Dios. Unos viven de un modo según su verdad y otros de otro modo. 15 H.CH Pero esto es estar absolutamente viviendo una mentira. La verdad es una persona quien tomó forma de ciervo y se hizo semejante a los hombres y aquel que establece la realidad absoluta de las cosas, Él es que establece el patrón de vida que debemos seguir. Es por ello que al ser discípulos de Cristo el hombre llega a conocer la verdad de manera intima, las cosas que resultaban grises para la vida, en Él se tornan de color brindando claridad a la vida y su propósito. Cristo es aquel que rompe los patrones de conducta en los cuales hemos estado viviendo engañados, por la mentira en que el mundo está habituado. El rompe los estereotipos y parámetros que se le presentan a la humanidad. 16 H.CH Donde se trata de enseñar que la mujer puede tener las mismas capacidades físicas del de un varón. Donde se desvaloriza a las personas de edad porque no rinden como cuando antes estaban en su vigor. Donde la belleza está definida por algunos requisitos que meramente son del aspecto físico. Donde para ser amado es necesario tener estatus y ser prospero económicamente. Todos estos patrones los rompe el Señor Jesús, ya que Él es la personificación de la verdad, y es la verdad misma. Pero es lamentable conocer o experimentar que en medio de la iglesia se ha permeado estos tipos de patrones pecaminosos dañando así la relación filial de la congregación. 17 H.CH El motivo de esto es que en medio de la congregación unos que otros no han permanecido en las palabras de Jesús y por tanto no han permanecido en la verdad, o han permanecido a media, no dando lugar a la palabra para corregir ciertas áreas de sus vidas de las cuales aún son esclavos. Ejemplos tales como: La manipulación La falta de perdón (resentimiento y rencor) Abusos de autoridad Perfeccionistas Impulsivos Faltos en sus compromisos Lujurias Conflictivos Orgullo Fluctuantes en las decisiones 18 H.CH Cristo es la verdad y el único que puede romper aquellos patrones, y de las que muchos están engañados y esclavos del pecado, pero recuerde que la condición requerida es permanecer en Él, porque es a través de permanecer en su palabra es que nuestra mente es renovada, impulsándonos a reconocer nuestras fallas y ser transformados. Por ende por esta transformación, por la obra de Cristo puede 1.3 Llegar a ser libres.v32b No hay peor cosa que estar engañado y vivir siempre una mentira, estos nos limita, nos esclaviza. Pero la verdad, Jesús, se ha manifestados para hacernos verdaderamente libres, de aquellas cadenas que nos ataba, que nos 19 H.CH apresaba, que nos imputaba dolor y sufrimiento. En Cristo el discípulo ahora ya tiene una visión clara, tiene una mente transformada, sus motivaciones son otras. Ya no está sujeto a la validación de este mundo, ahora tiene claro y está convencido que en Cristo ha encontrado libertad para toda la vida, lejos de dolor, sufrimiento y miseria. Llegamos a ser libres del engaño de que podemos hacerlo todo solo, llegamos a ser libres de las creencias erróneas que se nos inculcaron, llegamos a ser libres del narcisismo donde el yo estaba en un trono, engañado de que de todo tenia derecho, libre de la victimización y de la crítica injusta que daña la honra. 20 H.CH Cristo es la verdad por la cual llegamos a ser libres, es la verdad en la que debemos vivir y afirmar nuestras vidas. Pero al contrario de esto, si nosotros no permanecemos en Sus palabras, no podemos llegar a ser sus discípulos, no podemos llegar a conocer la verdad y no podremos ser libres, por lo cual esto también trae sus implicaciones 21 H.CH 2. Implicaciones de no corresponder a la palabra de Dios.v33 2.1 Mantenerse en un estado de negación y emancipación de Dios.v33 Tal cual reaccionaron los judíos en ese tiempo, así mismo es la reacción de aquellos que no desean permanecer en las palabras del Señor. Reaccionan histéricos, reacios y no decir que hasta argumentación intelectual hacen, sacan excusas por doquier. Tales hombres no reconocen su condición, son esclavos del pecado y lo seguirán siendo, pues aquello es lo que los domina. 22 H.CH No son capaces de reconocer sus falencias y viven infructíferos, llenos de resentimientos. Viven una vida a su manera, pueden que conozcan mucho de Dios pero sus corazones están lejos de Él. Mantienen su vida y conducta emancipados de la verdad por lo cual son hacedores de mentira y corrompen a otros, van de continuo de tropiezo en tropiezo buscando quienes confirmen lo que les dicta el corazón. De tal modo no reconociendo que son esclavos del pecado y se han emancipado de la verdad, y esto manifiesta que su relación con Dios está destruida y no pueden así llamarse sus discípulos, lo que esto también los lleva a: 23 H.CH 2.2 Mantenerse en un estado de pecado.v34 La rebelión constante a Dios, al no permanecer en la verdad da signos de que somos pecadores, que estamos en un estado de pecado, el hombre mismo está esclavizado a esto y aun más se esclaviza al no querer conocer la verdad, aquella luz verdadera que alumbra a todo hombre que viene a este mundo. En nuestras familias muchas veces se establecen patrones de conducta no saludables en las que se está esclavo, pero tome en cuenta algo, si la verdad le fue rebelada no hay justificación para seguir viviendo en ese estado de esclavitud, ese estado de pecado del cual usted de ha victimizado. Jesús, la verdad le ofrece la verdadera libertad! 24 H.CH Conclusión. El hombre a través de las etapas de su vida puede adquirir o desarrollar patrones de conducta que son capaces de destruir relaciones y la vida misma, Cristo es aquel que puede solucionarlo todo, pues todo aquel que permanece en sus palabras es aquel que llega ser un servidor y como su servidor, su Señor le manifestará la verdad que lo llevará a verdadera libertad, libertad donde los atisbos del pecado ya no se enseñorean de la persona, sus cadenas fueron rotas por el gran libertador. 25