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La Consistencia Psicológica en el Trading

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La Consistencia Psicológica en el Trading.
Veamos otro ejemplo, el del trader que busca hacer un home run en cada operación.
Hacemos nuestro análisis, comprometemos nuestro capital y el mercado comienza a
moverse a nuestro favor. Estamos en positivo, la operación sigue desarrollándose a
nuestro favor pero no salimos aún, no tomamos beneficio, no queremos salir porque
podría ser que el precio se desplazase hasta el infinito, podría ser que ganásemos y que
con una sola operación nos volviésemos millonarios.
El potencial de ganancia es infinito, es ilimitado entonces, ¿por qué tomar 30 ticks si
podemos tomar 300? Porque salir con 300 si podemos conseguir 1000. El problema es que
después de un buen desplazamiento el precio frena y comienza a retroceder. Hemos visto
1000 dólares en nuestra cuenta y ahora solamente hay 750. Y esperamos y vemos y ahora
solo hay 600. Pero hemos visto 1000 y no queremos conformarnos con 600. Así que
esperamos y ahora miramos y hay 450. Sin duda el precio está corrigiendo pero podría
reemprender su senda, podría volver a los 700 a los 1000.
Así que esperamos con el stop en break even, pero el retroceso sigue y no queremos
precipitarnos con nuestro stop, no queremos salir en break even y ver que luego el precio
gira sin nosotros. Así que volvemos a poner el stop donde debe de estar, que el precio
respire y respira, ya tanto que nos hace saltar el stop y salimos con una pérdida.
Podríamos haber salido con1000 o con 600 o incluso ahora una salida con 400 dólares nos
parece más adecuada que una pérdida, que es lo que hemos conseguido. Pero ¿por qué?
¿Por qué no hemos tomado lo que había cuando estaba disponible? ¿Por qué nuestras
ideas irracionales nos han empujado al precipicio? Veámoslo. Ponemos la alarma a 10
minutos y cuando suena observamos nuestro estado emocional y lo regulamos,
modificamos nuestra respiración, la alargamos, aflojamos nuestra máscara y ponemos el
fuego de atención en el presente. Estamos siendo aquí y ahora. ¿Qué es eso que sabe que
está siendo? Y desde ese espacio observamos nuestros pensamientos. ¿Por qué no
queremos tomar lo que el mercado nos ofrece, aunque sea generoso? Porque hay un
potencial mucho mayor. No importa lo que tome siempre habrá la posibilidad de haber
ganado más, así que ¿para qué conformarse? Si puedes ganar 80 ticks, ¿para qué
conformarte con 20? Pero detrás de este comportamiento está la pura locura,
enmascarada tras el disfraz de la oportunidad, está la muerte financiera. Al no tomar
beneficios cuando están disponibles terminamos arriesgando para nada, asumiendo un
riesgo para devolver después todo al mercado. El mercado se ha expresado. Tu sistema te
ha dado la oportunidad de ganar, pero tu mente te lo ha impedido. Tus ideas irracionales
te han dejado paralizado. No te conformas con 20 ticks. ¿Cómo ibas a hacerlo si el
beneficio potencial es ilimitado? Es infinito. ¿Cómo vas a tomar beneficios pequeños si
uno grande podría hacerte rico? La locura que puedes observar toma la forma de la
desproporción, del deseo desmedito de ganar dinero con un solo movimiento, con una
sola operación. Llevas demasiado tiempo haciendo trading. Quizás sabes mucho de
análisis y tus operaciones son acertadas y anticipaslas mejores zonas y la dirección más
probable. Y ahora, ¿quieres que el mercado pague loque mereces? Tienes un objetivo de
ganancia desmedido porque tu deseo es también desmedido. Tu necesidad no tiene
límites, así que debes ponerlos tú. Debes utilizar la lógica para evitar la trampa. Debes
realizar el hecho de que no puedes ganar si no tomas beneficios cuando están a tu
alcance, que cuando el sistema hace lo que debe hacer lo que anticipabas debes salir con
una ganancia. Y debes observar las ideas que puede haber detrás de esa formade
negación. Recuerda que el mercado puede hacer cualquier cosa en cualquier momento.
Que eso no depende de ti. Que eso es así, es un hecho. Debes vivir con esa verdad. Debes
integrarla. Porque cada vez que te niegas a tomar lo que está a tu alcance, estás gritando
al mercado que no crees que esto sea así. Le estás diciendo en voz alta quetú sabes lo que
va a suceder, que el mercado va a seguir en esa dirección hasta el infinito y más allá. Hasta
que te haga rico, hasta que colme tus más desmeditos deseos de prosperidad.
Pero eso es pura locura. No sabes lo que va a suceder y puede pasar cualquier cosa.
Elprecio puede seguir moviéndose a tu favor, pero se puede girar también en
cualquiermomento. Puede dar la vuelta y sacarte. Puede retroceder, sea donde sea que
pongas tu stop.Es más, si esperas que el precio siga yendo hacia el infinito, puedes quedar
ciego a todala información contraria. Tu deseo desmedido de riqueza puede bloquear tu
capacidad de percibirtoda la información que dice que en este momento tienes una figura
de giro en contra. Simplementeno la ves. No la puedes ver. Solamente ves lo que quieres
porque la visionancia cognitivate deja ciego. Solo ves lo que apoya tu decisión, tu
compromiso con la irracionalidad. Peroahora, a la luz de la lógica, puedes ver que eso es
falso. Que se basa en un deseono ajustado, no adaptativo, no realista, que no es racional
pensar que en una sola operaciónvas a tocar el cielo. Podría pasar, pero la probabilidad no
está a tu favor. Y tampocoes algo que recoja tu sistema. Tampoco es algo que necesites
que sea. Toma lo que estáen tu mano y vuelve a comprometer después tu capital. No pasa
nada, porque puede serque no salgas para no tener que volver a entrar. Cada vez que
comprometes tu capital puedesperderlo y no quieres estar en esa situación. Así que no
sales con una sola operación.Imaginas que puedes lograr tu objetivo. Pero el trading
implica entrar y salir. Entrarde nuevo y volver a salir. No puedes eliminar esa parte del
trading. Debes abrazarlo, asíque pon la lógica a tu favor.Veamos cómo podemos observar
el deseo de venganza. Cuando una operación arroja unresultado negativo, podemos
tomarlo como algo personal. Sabemos que no tiene sentido quesea así. No existimos para
el mercado, pero lo parece. Al fin y al cabo es tu dinero,es tu esfuerzo, es tu trabajo, son
tus ilusiones. ¿Qué hacemos pues cuando sentimos el impulsode vengarnos? Saltamos al
mercado para recuperar, forzamos las operaciones. Entramos con máscontratos de los
que tenemos estipulados en nuestra política de gestión del riesgo. Lavenganza es el
combustible que nos empuja la acción y nos nubla el juicio.Y todos estos
comportamientos irracionales acaban pasándonos factura. No nos recuperamosy al forzar
la operativa tomamos más operaciones perdedoras, lo que aumenta nuestra frustracióny
el deseo de justicia. Aumentamos el riesgo, así que, si perdemos, estamos peor que
antes.Y si seguimos por ese camino, pronto nos encontramos en un pozo de
desesperación del que no podemossalir, frustrados y abatidos, miramos la acción del
precio como una batalla en la que debemosseguir participando. Insistimos en vengarnos y
aumentamos nuestro riesgo, nuestras pérdidas,nuestra exposición y nuestro dolor. ¿Cómo
insuflar lógica a este sentimiento, a esteimpulso? Ponemos nuestra alarma y cuando
suena atendemos a nuestra carga emocional. Las osllegamos, aflojamos la musculatura y
profundizamos nuestra respiración. La alargamos, estamosaquí, viviendo este momento. Y
creamos un espacio en nuestra mente para observar nuestropensamiento. ¿Qué puede
haber detrás de ese impulso? ¿Qué cadenas de pensamiento estamosactivando? ¿Desde
dónde observamos? Cuando decimos que es injusto que el precio vaya ennuestra contra y
que después reemprenda la senda que habíamos anticipado o que es injustoque entremos
en las operaciones perdedoras y nos quedemos fuera de las ganadoras o queno puede ser
que no consigamos más que unos pobres resultados, estamos a merced de
lairracionalidad. ¿Es injusto? ¿De verdad? Pensamos que el mercado es acaso justo
quenos debe algo que debería ser distinto de cómo es. Si el precio va en nuestra contra,así
es el trading. Esas cosas pasan y hay que esperarlas. Y si nos sacan para luego iren la
dirección que anticipábamos, así es el trading. No es nuestra misión que estono sea así. Lo
que es, es, no estamos para no tomar operaciones perdedoras. Eso es unafantasía.
Estamos para explotar una ventaja estadística. No podemos controlarlo
incontrolablecuando hemos comprometido nuestro capital. Solamente podemos
asegurarnos de estar cumpliendolas directrices de nuestro trading plan. Punto, no es justo
que tomemos las malas y nos quedemosfuera de las buenas. Ah, no. Debería ser
diferente. Eres el elegido. ¿Crees que las cosas funcionana cor de a tus deseos? El
mercado se rige por sus reglas, no por las tuyas. Se mueve,acotado a su estructura. Hace
lo que debe de hacer. No lo que tú quieres que haga.No lo que tú sueñas, anhelas o
deseas. Sino lo que debe de hacer. Si te alineas con esoy lo explotas, el trading es sencillo.
Si te centras en decirle al mercado cómo deberíacomportarse, entonces estás perdido.
Quieres vengarte porque no aceptas estoshechos. No aceptas que te mueves en el plano
de la incertidumbre, de la imposibilidad decontrol, de la impredecibilidad. Intentas
vengarte porque no asumes que perder formaparte del trading, que el resultado negativo
de una operación no habla ni de tu talentoni de tu valor. Es solamente la expresión de una
probabilidad que puede ser esa o lacontraria que puede favorecerte o no. Pero que tú
puedes aprovechar con tu sistema.Es tu sistema lo que utilizas para dar sentido al
mercado y para explotar una ventaja y laforma de explotarla es poniéndolas
probabilidades a tu lado y respetando los parámetros deriesgo de tu sistema. No puedes
tener éxito si los incumples. No puedes aumentar tu exposición,movido por el impulso de
venganza y esperar ser consistente. Eso no va a pasar. Tu cometidoes navegar entre las
aguas turbulentas del mercado. No vengarte de lo que solamente esuna consecuencia de
su estructura. Ese deseo de venganza, esa búsqueda neurótica de justicia,es irracional, es
el fruto de tu mente, de las ideas que abrazas que son meras fantasías.Reconoce este
hecho y no te permitas ni un atisbo más de locura. El mercado no sabenada de ti. No te
tienen cuenta, no le importa lo que hagas. No puede perder del mercado,no te puedes
vengar. Lo único que puedes hacer es vivir la fantasía de la venganza.Pero eso lo creas tú
en tu mente. Eso es la proyección de una cadena de ideas desajustadasy eso acaba con tus
posibilidades de ser un tráiler de éxito. No hay nada de lo quevengarte. El mercado se
mueve como debe moverse. Tú haces lo que debes hacer, que es explotaruna ventaja
expresada en tu sistema. Pierdes y ganas y pierdes y ganas. Y si una operaciónresulta ser
perdadora, la aceptas porque no te queda otra. Y pasas página y focalizastu atención en la
siguiente oportunidad. Y cuando aparece, la aprovechas con un desapegototal sobre el
resultado. No es verdad que debas ganar. Es verdad que quieres ganar,pero no que debas.
No hay nada obligado en esto. Algunas veces ganarás y otras perderás,pero no debes
ganar esa operación. Da igual que sea perfecta, que esté en la zona adecuada,que sea de
manual. El resultado depende del futuro y el futuro en este momento no es másque la
expresión de una probabilidad puede suceder cualquier cosa y no está en tus manoshacer
que suceda lo que tú quieres. Si lo está en cambio, aprovechar lo que está pasando,a tu
favor, manejar tu riesgo, elegir las buenas zonas, los excelentes setups y punto.
Losresultados no hablan de ti. Si pierdes una operación, tu valor como persona está a
salvo, nuncate lo jugaste, no es algo que dependa de tus resultados. Tu valor como
persona es intrínsecoal hecho de ser. Así que, sosegate, regula la carga emocional y arroja
luz a la irracionalidad.Despluma la gallina del sin sentido y vuelve a la aquí y a la ahora.
Librate de deseosfantasiosos y acepta, verdaderamente, la naturaleza del juego en el que
participas.Gracias por seguir nuestros vídeos. Si quieres saber más sobre nuestro
programa de formacióny entrenamiento para traders, visita tradingdefuturos.com o ponte
en contacto con nosotros a travésdel email o del teléfono que ves en pantalla. Nos vemos
en el mercado.
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