1 El picante y la percepción del sabor ¿En qué medida el consumo de distintos alimentos picantes influye en la percepción del sabor de otras comidas al poco tiempo de ingerirlos? Número de palabras: 2734 Asignatura: Biología Código del estudiante: 052012-0001 2 Índice 1. Presentación …………………………………………………………………......3 1.1 Introducción .…………………………………………………………….......3 1.1.1 Wasabi ………………………………………………………….….3 1.1.2 Chile …....………………………………...…………………….….4 1.1.3 Cebolla …………………………………………………………….4 1.1.4 No dañan la percepción del sabor a largo plazo pero, ¿y justo luego de comerlo?....………………………………………….…...5 2. Método …………………………………………………………………….……6 2.1 Materiales ……………………………………………………………….…..6 2.2 Procedimiento seguido ………………………………………………….…..6 2.3 Limitaciones ……………………………………………………………..….7 3. Resultados …………………………………………………………………..….9 3.1 Gráficos …………………………………………………………………..…9 4. Análisis ………………………………………………………………………....13 4.1 Análisis de los resultados generales ………………………………………..13 4.2 Análisis de los resultados individuales …………………………………….13 5. Conclusiones ...………………………………………………………………....15 6. Lista de referencias ...………………………………………………..…………18 7. Anexos ………………………………………………………………………….20 3 Presentación Puede que no nos demos cuenta, pero la mayoría de las personas comemos algún picante en nuestras comidas. Ya sea cebolla, chile, pimienta o jengibre, muchos alimentos producen esta sensación, “más adecuadamente descripta como irritación y dolor”, y a la que se le dice “pungente” (McGee, 2004: 272). En este trabajo voy a investigar sobre la disminución de la percepción del sabor que estos alimentos luego de ingerirlos porque, por experiencia propia, he podido observar que algunas personas creen que el picante daña las papilas gustativas (Rothbarth, 2018) (Wolchover, 2012). Pero, ¿es esto cierto? Introducción Aunque nos lo pueda parecer, no todos los picantes son iguales. Algunos, como la cebolla y algunas mostazas son picantes por el sulfuro que poseen las plantas de las que provienen (McGee, 2004: 272), mientras que otros como el jengibre deben su pungencia a un componente que deriva de una base fenòlica llamado gingerol (McGee, 2004: 426). Y todo esto lo sentimos gracias a nuestro sistema nervioso y las células que lo componen. De no ser por las neuronas no podríamos sentir ni percibir estas sensaciones ya que ellas son las que poseen los receptores que captan lo que pasa dentro de nuestra boca cuando comemos algo o en nuestra nariz al oler. Además, son las encargadas de transmitir las señales al cerebro para que nos demos cuenta de lo que sucede en esas áreas (y en todas las otras). Para entender con más claridad el desarrollo de este trabajo, voy a presentar a continuación los tres picantes que estaré analizando y comparando, sus características y cómo actúan. Wasabi 4 El wasabi, también llamado rabanete japonés o rábano picante japonés, es una planta nativa de Japón (Multilingual Multiscript Plant Name Database, 2004). Su sabor picante proviene de unos compuestos químicos llamados isotiocianatos. Estos mismos proceden de la disrupción de los tejidos de la planta. Esto es así ya que la planta posee glucosinolatos que, cuando los tejidos son rotos al morder o cocinar, se liberan y, mediante una cadena de reacciones con azúcares que todavía no se han descubierto completamente, se convierten en isotiocianatos. “Estos compuestos son volátiles, poseen fuertes olores pungentes y son tóxicos cuando son ingeridos en gran cantidad” (Sultana, Savage, 2008: 438-440). Los isotiocianatos son captados por un tipo de receptores llamados TRP (de las siglas en inglés Transient Receptor Potential Cation Channel) (Instituto Químico Biológico -en adelante IQB-, 2010), usualmente localizados en la boca, la garganta, la nariz y la piel en las neuronas nociceptivas (Sultana, Savage, 2008: 438-440). En este caso son los receptores TRPA1, que cuando entran en contacto con isotiocianatos provocan una sensación de quemadura, inflamación y fuerte hipersensibilidad a otros estímulos (IQB, 2010). Chile El chile, ají o pimiento es un vegetal cultivable que al ser ingerido por humanos da una sensación de calor o picor. Debido a esta característica es un ingrediente muy utilizado alrededor del mundo. Este grupo de vegetales, de los cuales se conocen 22, son picantes debido a un compuesto químico que se encuentra en ellos llamado capsaicina, que no es captado por nuestras papilas gustativas en sí, sino por otro receptor TRP, el TRPV1 (Guzmán, Bosland, 2016: 186-187). “[...] Los receptores TRPV1 que se expresan en las neuronas sensoriales y detectan el dolor y los estímulos térmicos [...] son ligandos para los capsaicinoides [...]” como los chiles (IQB, 2010). La capsaicina irrita estos receptores “[...] lo 5 que activa una afluencia de cationes, accionando un potencial de acción que genera la sensación quemante asociada con los pimientos chile” (Guzmán, Bosland, 2016: 187). Cebolla La cebolla es una planta del género Allium muy utilizada en el ámbito culinario. “El constituyente particular al que la cebolla debe su pungencia [...] es químicamente conocido como alil-propil-disulfuro.” Las plantas incorporan sulfuro del suelo en el que crecen para utilizarlo como defensa. Cuando sus células son dañadas las moléculas escapan y “aparentemente hacen daño ligero a membranas celulares desprotegidas en nuestra boca y pasajes nasales, por lo tanto causando daño” (McGee, 2004: 272). No dañan la percepción del sabor a largo plazo pero, ¿y justo luego de comerlo? Tanto en el artículo “¿Comer demasiado picante puede arruinar tus papilas gustativas?” como en el artículo “Myth Debunked: Spicy Food Doesn't Really Kill Taste Buds” recurren al mismo especialista para preguntarle si comer alimentos picantes de forma regular daña las papilas gustativas. Este especialista es Paul Bosland, director y co-fundador del Instituto del Pimiento Chile (New Mexico State University, s.f.). En ambos artículos dió una respuesta parecida: “No hay evidencia de que las "papilas gustativas se vean afectadas"” (Rothbarth, 2018). En el otro artículo proveyó algunos datos más: “la capsaicina química hace que la boca se entumezca temporalmente, y la pérdida de sensación da la impresión de que tus papilas gustativas están muriendo”. Además, agregó que “el entumecimiento es nuestro cuerpo protegiéndose del dolor. [...] El cerebro produce endorfinas para bloquear ese dolor, lo que causa entumecimiento” (Wolchover, 2012). Entonces surge la pregunta, ¿si funciona así con los capsaicinoides, funciona igual con todos los otros picantes? 6 Método Para responder a esta pregunta he realizado un experimento. He invitado a participar a personas mayores de 18 años. El mismo consistía de una degustación de diferentes picantes, intercalando entre uno y otro la degustación de un caramelo mientras se iban respondiendo preguntas que creía podrían influenciar los resultados: con qué frecuencia consume cada tipo de picante o qué tanto o en qué lugares le picó. Además, agregué otras preguntas que consideré podrían afectar un poco a los resultados, como cuál era el rango etario de la persona o su sexo. Este procedimiento se ha realizado en 20 personas, y se ha obtenido un buen rango de edades y géneros. Una copia del cuestionario realizado en este experimento se encuentra anexada a este trabajo. Materiales -1 cuchara de té de plástico. -1 alcohol en gel para limpiarse las manos en caso de haber tocado alguno de los picantes. -1 gramo de chile serrano (sin incluir ni el nervio ni las semillas). -5 gramos de wasabi, preparado con un polvo mezcla de rábano picante y semilla de mostaza. -10 gramos de cebolla blanca cruda. -1 caramelo dulce marca Sugus. -1 cuchillo de acero inoxidable. Procedimiento seguido 1) Explicar el procedimiento que se va a seguir al voluntario que se ofreció a realizarlo. 7 2) Cortar el caramelo con el cuchillo de acero inoxidable en cuatro pedazos, y dar uno de ellos al voluntario para que lo coma. 3) Ofrecer con la cuchara de plástico la cebolla al voluntario para que la coma. 4) Ofrecer al voluntario otro cuarto de caramelo. 5) Indicar al voluntario que tendrá que comenzar a responder las preguntas. 6) Una vez ya haya terminado de responder las preguntas con respecto a la cebolla cruda, proceder a repetir los pasos 3, 4 y 5 con, primero, el chile serrano y, por último, el wasabi. Limitaciones Al realizar este experimento me he encontrado con diversos problemas: -La muestra sobre la que lo he realizado (20 personas), aunque parecía grande, quizás no sería el número más óptimo para un experimento de este estilo. Pero debido a la naturaleza del mismo, y porque para no causar malestar en las personas debía sí o sí ser voluntario, mucha gente a la que le he preguntado si quería participar me ha respondido de forma negativa por una amplia gama de motivos, siendo los más comunes que no les gustaba alguno de los picantes o que tenían miedo de que les pique mucho. -Al terminar de realizar toda la experimentación y a la hora de analizar los resultados, me he dado cuenta que algunas de las preguntas que hice durante la misma eran completamente irrelevantes, como pueden ser si el picante les gustaba o no, lo que significa un gasto de tiempo tanto para el experimentador como para el voluntario, por lo que en caso de ser repetido deberían ser evitadas. -Algunas respuestas de multiple choice no estaban suficientemente bien explicadas, por lo que tuve que aclarar oralmente algunos puntos de las mismas. Además, dificultaban un 8 poco el análisis de los resultados ya que no eran completamente específicas. Un ejemplo de estas preguntas fue una de las más importantes: “¿Sentiste el sabor del caramelo luego de comer el cebolla?”. En esta, la respuesta “difuso” generó confusión. -Los utensilios que utilicé para medir las cantidades de los alimentos no eran muy precisos, por lo que no puedo estar completamente seguro de que no haya habido errores de medición. 9 Resultados Gráficos Gráfico 1. Picor de la cebolla para cada uno de los participantes. El eje y es la cantidad de participantes, el eje x el picor en valor numérico, siendo 1 el menor y 10 el mayor. Gráfico 2. Lugares afectados por el picor de la cebolla. Los números son la cantidad de participantes a los que le picó en el lugar indicado. Gráfico 3. Respuesta a la pregunta: ¿Sentiste el sabor del caramelo luego de comer el cebolla? 10 Gráfico 4. Picor del chile para cada uno de los participantes. El eje y es la cantidad de participantes, el eje x el picor en valor numérico, siendo 1 el menor y 10 el mayor. Gráfico 5. Lugares afectados por el picor del chile. Los números son la cantidad de participantes a los que le picó en el lugar indicado. 11 Gráfico 6. Respuesta a la pregunta: ¿Sentiste el sabor del caramelo luego de comer el chile? Gráfico 7. Picor del wasabi para cada uno de los participantes. El eje y es la cantidad de participantes, el eje x el picor en valor numérico, siendo 1 el menor y 10 el mayor. Gráfico 8. Lugares afectados por el picor del wasabi. Los números son la cantidad de participantes a los que le picó en el lugar indicado. 12 Gráfico 9. Respuesta a la pregunta: ¿Sentiste el sabor del caramelo luego de comer el wasabi? 13 Análisis Hipótesis inicial Harold McGee indica en su libro On food and cooking que todos las sensaciones que producen en nuestra boca los alimentos picantes en realidad son irritación y dolor (McGee, 2004: 272). Esto nos lleva a pensar, gracias a las afirmaciones de Paul Bosland (Wolchover, 2012; Rothbarth, 2018), que cualquiera de estos alimentos debería causar la misma inhibición del sabor si picaran lo mismo. Entonces, dado que algunos son más potentes que otros, con aquellos más picantes (si son ingeridos en una cantidad igual a aquellos con menor pungencia) debería sentirse menos el sabor del caramelo que se come justo después de comer el picante. Aún así, también debería tenerse en cuenta que se puede desarrollar una desensibilización de los TRP cuando son activados repetidamente por la capsaicina (Mohapatra, Nau, 2005). Esto significaría que aquellos con una exposición más prolongada a los picantes deberían sentir menos picor y, por lo tanto, mejor el sabor del caramelo. Análisis de los resultados generales Como se puede observar al comparar los gráficos 3, 6 y 9, el wasabi es el picante que causó que el sabor del caramelo se sintiera menos. Pero, dado que la cantidad de chile que se utilizó era varias veces más pequeña que la de los otros dos picantes, habría que considerar que los resultados deberían ser mayores. Por lo que, aunque el chile haya causado que más o menos la misma cantidad de personas que en la cebolla hayan sentido el sabor del caramelo, hay que tener en cuenta que la porción utilizada era al menos diez veces menor. Entonces, se puede especular que menos gente habría sentido claramente el sabor del caramelo. Sin aumentar mucho los números, el chile entonces quedaría al mismo nivel que el wasabi, por lo 14 que podríamos decir que, en este caso, la hipótesis ha resultado correcta. La cebolla, el alimento menos picante, fue la que causó una menor inhibición del sentido del gusto, mientras que el chile y el wasabi, más picantes, una mayor. Pero, aún así, se deben tener más factores en cuenta. Gordon Shepherd dice en su libro Neurogastronomy: how the brain creates flavor and why it matters que los olores de la comida que comemos se mezclan con el gusto que tiene y que sentimos por las papilas gustativas para formar el sabor (Shepherd, 2011: 2). Esto querría decir que el estado de la nariz también influenciaría a la percepción del sabor del caramelo. Entonces, al observar los gráficos 2, 5 y 8 se pueden notar las diferencias de los lugares en donde actúan los distintos picantes. El wasabi es, de los 3 alimentos analizados, el que más personas sintió en la nariz. Esto es así porque, como ha sido mencionado anteriormente, los compuestos que dan picor al wasabi son muy volátiles, por lo que a bajas temperaturas se evaporan y los podemos sentir en la nariz. Esto podría significar que el wasabi inhibe el sabor del caramelo en dos zonas, mientras que el chile y la cebolla lo harían sólo en una. Entonces, como he proyectado los resultados del chile debido a los motivos explicados anteriormente, significaría que el chile realiza una inhibición diferente a la del wasabi (solamente en la boca, ya que ninguno de los participantes afirmaron que les haya picado en la nariz), pero equivalente, porque los resultados serían parecidos. Ahora bien, según McGee, los componentes picantes del chili también se vuelven volátiles a más de 60 °C, por lo que probablemente si se ingieren chiles a esa temperatura la inhibición del sabor aumentaría (McGee, 2004:415). Por último se puede considerar si las personas sintieron, además de picor, otros sabores al ingerir los alimentos, ya que esto afectaría a la percepción del sabor del caramelo. Después de todo, es conocimiento general que comer una cosa sola no tiene el mismo sabor que si se la junta con otro comida. Con respecto a la cebolla, la mayoría de las personas 15 afirmó sentir un sabor amargo o agrio y, como se puede observar en el gráfico 1, no muchas personas consideraron que la cebolla les parecía picante, sino que la mayoría respondió con números bajos. Esto me lleva a pensar que las personas que sintieron un sabor diferente o no distinguieron muy bien el sabor del caramelo fue más por el sabor fuerte de la cebolla que por el picante en sí. De los otros dos picantes, en cambio, la mayoría de las personas destacaba más el ardor y el calor que sentían en vez del sabor. Además, en general respondieron que eran más picantes que la cebolla. Debido a esto sí me siento inclinado a pensar que lo que causó la inhibición del sabor en estos dos casos fue el picor de los alimentos y no el sabor de los mismos. Análisis de los resultados individuales En primer lugar, el picor sentido por las mujeres resultó ser más alto que el de los hombres. El promedio de picor sentido por las mujeres del 1 al 10 fue de 3,56 para la cebolla; 5,22 para el chile; y 8,67 para el wasabi. El de los hombres resultó ser bastante menor (aproximadamente un 16% general): 2,63 para la cebolla; 4,55 para el chile; y 6,91 para el wasabi. Esto puede ser por tres factores: 1. Un porcentaje de personas más alto dentro del sexo masculino afirmó comer regularmente los tres picantes, por lo que, como se ha explicado anteriormente, es posible que hayan desarrollado cierta tolerancia por el consumo repetido, lo que causaría que les pique menos. 2. Factores genéticos: “los individuos varían genéticamente su sensibilidad al calor de los chiles” (Guzmán, Bosland, 2017). Esto, dado que es un factor más bien aleatorio y ya que los participantes no lo conocen, es difícil de comprobar. 16 3. Valoración personal: Cuando a una persona se le pide que diga un número del 1 al 10, aunque le pique lo mismo que a otra, puede que tenga una escala cuyo número 10 está mucho más separado que el de esta otra persona. Por ejemplo, en una escala del 1 al 10 en dolor uno suele poner como 10 el dolor más fuerte que ha sentido, lo que varía dependiendo de las experiencias personales. Aún así, no se podía poner una escala de picantes con mediciones científicas de los mismos o ejemplos porque es probable que las personas que participaron en el experimento no la conozcan o no hayan probado los picantes de referencia. Aún teniendo en cuenta esas diferencias en el picor, el porcentaje de mujeres y de hombres que no sintieron perfectamente el sabor del dulce es prácticamente igual. En segundo lugar, aquellas personas que afirmaron comer picantes regularmente (en este caso, al menos una vez por semana) en general sintieron más el sabor del caramelo que aquellas que no lo hacían (una vez por mes o menos). Además, los participantes que afirmaron haber estado consumiendo los picantes desde hacía más de un año regularmente fueron los que más sintieron el sabor del caramelo. En último lugar, observé la diferencia entre rangos etarios. En el mismo artículo en el que le preguntaron a Bosland si el picante destruía las papilas gustativas, el indicó que “[...] nuestro sentido del gusto [...] disminuye a medida que envejecemos” (Wolchover, 2012). Dividí entonces el rango etario en aquellos mayores o menores a 30 años. El resultado fue que en general la gente más adulta sentía menos el sabor del caramelo en los tres picantes. 17 Conclusiones En conclusión, si bien no he hecho el experimento de la manera más efectiva por la imposibilidad de obtener los recursos necesarios como utensilios de medición precisos o una muestra lo suficientemente grande, considero que los resultados son útiles para la investigación y el análisis. La hipótesis inicial fue, en general, corroborada, aunque habría que realizar más experimentación con la cebolla para confirmarla, debido al sabor fuerte que tiene. Además, también se requeriría ampliar la investigación con el chile para verificar lo que pasaría a altas temperaturas, pero debido a que sería peligroso intentarlo en un ambiente sin tanto control es complicado. Aún así, los resultados tanto para el wasabi como para el chile han sido satisfactorios (con respecto a la hipótesis) y demuestran que se reduce la percepción del sabor momentos después de comerlos, al menos del sabor dulce. También se ha demostrado que a aquellos a los que le picó menos el picante porque estaban acostumbrados a comerlos el efecto no les fue tan marcado como los que no lo hacían regularmente. 18 Lista de referencias Equipo de redacción Instituto Químico Biológico (IQB), (2010). RECEPTORES TPR (Monografía). IQB. Recuperado el 25/08/2019 de: https://www.iqb.es/monografia/fichas/ficha124.htm Guzmán, I., Bosland, P. W. (2016). Sensory properties of chile pepper heat - and its importance to food quality and cultural preference. Appetite, 117, 186-190. McGee, H. (2004). On food and cooking, Nueva York, Estados Unidos, Scribner. Mohapatra, D.P., Nau, C. (2005). Regulation of Ca2-dependent Desensitization in the Vanilloid Receptor TRPV1 by Calcineurin and cAMP-dependent Protein Kinase. The Journal of Biological Chemistry, 280(14), 13424-13432. New Mexico State University (s. f.). NMSU: Plant and Environmental Sciences | Paul W. Bosland. n/a. Recuperado el 31/08/2019 de: https://aces.nmsu.edu/academics/pes/paul-w-bosland.html. Rothbarth, A.(2018). ¿Comer demasiado picante puede arruinar tus papilas gustativas? (traducido por Silva, D.). Vice, México, D. F. Recuperado el 31/08/2019 de: https://www.vice.com/es_latam/article/gy3w3q/munchies-comer-picante-arruinar-pap ilas-gustativas Shepherd, G. M. (2011). Neurogastronomy: how the brain creates flavor and why it matters. Columbia University Press. Sultana, T., Savage, J. P. (2008). Wasabi - Japanese Horseradish. Bangladesh Journal of Scientific and Industrial Research, 43( 4), 433-448. Universidad de Melbourne. 2004.Multilingual Multiscript Plant Name Database (MMPND) [base de datos]. Recuperado el 22/08/2019 de: http://www.plantnames.unimelb.edu.au/Sorting/Wasabia.html#japonica 19 Wolchover, N. (2012). Myth Debunked: Spicy Food Doesn't Really Kill Taste Buds (traducción del autor). Future US, Nueva York. Recuperado el 31/08/2019 de: https://www.livescience.com/34213-spicy-food-taste-buds-myth.html 20 Anexos Cuestionario del experimento Sexo -Masculino. -Femenino. Edad -Entre 18 y 25 años. -Entre 26 y 32 años. -Entre 33 y 40 años. -Entre 41 y 55 años. -Más de 56 años. Cebolla cruda Antes del consumo ¿Qué tanta cebolla cruda come en la comida? -Nada. -Muy poca. -Poca. -Normal. -Mucha. -Demasiada. ¿Con qué frecuencia consume usted cebolla cruda? -1 vez al mes. -1 vez a la semana. -2 veces a la semana. -Todos los días. -Nunca. Si come cebolla cruda regularmente, ¿desde hace cuánto tiempo? (esta pregunta es opcional) -Menos de 1 mes. -Menos de 6 meses. -Menos de 1 año. -Más de 1 año. ¿Qué tanto le gusta la cebolla cruda? -1. 21 -2. -3. Luego del consumo ¿Qué tanto le picó? -1. -2. -3. -4. -5. -6. -7. -8. -9. -10. Siendo 1 “Nada, no lo sentí” y 10 “Muchísimo”. ¿Qué tanto le duró el picor? (en segundos) -1. -2. -3. -4. -5. -6. -7. -8. -9. -10. Además de picor, ¿qué sentiste? (sabor, ardor, calor, etc.) Esta respuesta era escrita. ¿A dónde te picó? (múltiples opciones podían ser seleccionadas). -Lengua. -Paladar. -Garganta. -Nariz. -Ojos. -Otro (escribir). ¿Sintió el sabor del caramelo luego de probar el picante? -Sí, muy claro. 22 -Difuso. -No. -Otro sabor. Chile Antes del consumo ¿Qué tanto chile come en la comida? -Nada. -Muy poca. -Poca. -Normal. -Mucha. -Demasiada. ¿Con qué frecuencia consume usted chile? -1 vez al mes. -1 vez a la semana. -2 veces a la semana. -Todos los días. -Nunca. Si come chile regularmente, ¿desde hace cuánto tiempo? (esta pregunta es opcional) -Menos de 1 mes. -Menos de 6 meses. -Menos de 1 año. -Más de 1 año. ¿Qué tanto le gusta el chile? -1. -2. -3. Luego del consumo ¿Qué tanto le picó? -1. -2. -3. -4. -5. -6. 23 -7. -8. -9. -10. Siendo 1 “Nada, no lo sentí” y 10 “Muchísimo”. ¿Qué tanto le duró el picor? (en segundos) -1. -2. -3. -4. -5. -6. -7. -8. -9. -10. Además de picor, ¿qué sentiste? (sabor, ardor, calor, etc.) Esta respuesta era escrita. ¿A dónde te picó? (múltiples opciones podían ser seleccionadas). -Lengua. -Paladar. -Garganta. -Nariz. -Ojos. -Otro (escribir). ¿Sintió el sabor del caramelo luego de probar el picante? -Sí, muy claro. -Difuso. -No. -Otro sabor. Wasabi Antes del consumo ¿Qué tanto wasabi come en la comida? -Nada. 24 -Muy poca. -Poca. -Normal. -Mucha. -Demasiada. ¿Con qué frecuencia consume usted wasabi? -1 vez al mes. -1 vez a la semana. -2 veces a la semana. -Todos los días. -Nunca. Si come wasabi regularmente, ¿desde hace cuánto tiempo? (esta pregunta es opcional) -Menos de 1 mes. -Menos de 6 meses. -Menos de 1 año. -Más de 1 año. ¿Qué tanto le gusta el wasabi? -1. -2. -3. Luego del consumo ¿Qué tanto le picó? -1. -2. -3. -4. -5. -6. -7. -8. -9. -10. Siendo 1 “Nada, no lo sentí” y 10 “Muchísimo”. ¿Qué tanto le duró el picor? (en segundos) -1. -2. -3. 25 -4. -5. -6. -7. -8. -9. -10. Además de picor, ¿qué sentiste? (sabor, ardor, calor, etc.) Esta respuesta era escrita. ¿A dónde te picó? (múltiples opciones podían ser seleccionadas). -Lengua. -Paladar. -Garganta. -Nariz. -Ojos. -Otro (escribir). ¿Sintió el sabor del caramelo luego de probar el picante? -Sí, muy claro. -Difuso. -No. -Otro sabor. Fin del cuestionario 26 Consentimiento del experimento Nicolas Kroupensky Este Documento de Consentimiento Informado tiene dos partes: • Información (proporciona información sobre el estudio) • Formulario de Consentimiento (para firmar si está de acuerdo en participar) Se le dará una copia del Documento completo de Consentimiento Informado PARTE I: Información Introducción: Yo soy Nicolas Kroupensky, estudio en la EMPAS y estoy investigando sobre la relación entre comer picantes y sentir más o menos sabor justo luego de consumirlo., para realizar una monografía sobre el tema para el programa del Bachillerato Internacional. Propósito: Averiguar qué tanto afecta el picante a la percepción del dulce justo después de comerlo, cuáles afectan más y cuáles menos. Tipo de Intervención de Investigación: Se darán de probar tres tipos de alimentos picantes: wasabi, chile y cebolla. Antes y después de ingerirlos se comerá medio caramelo dulce y se responderán algunas preguntas. Selección de participantes: Estoy invitando a participar en este experimento a cualquier persona adulta que quiera participar. Participación voluntaria: Su participación en esta investigación es totalmente voluntaria. Usted puede eligir participar o no hacerlo. PARTE II: Formulario de Consentimiento He leído la información proporcionada o me ha sido leída. He tenido la oportunidad de preguntar sobre ella y se me ha contestado satisfactoriamente las preguntas que he realizado. Consiento voluntariamente participar en esta investigación como participante y entiendo que tengo el derecho de retirarme de la investigación en cualquier momento sin que me afecte en ninguna manera Nombre del Participante__________________ Firma del Participante ___________________ Fecha ___________________________ Día/mes/año He leído con exactitud o he sido testigo de la lectura exacta del documento de consentimiento informado para el potencial participante y el individuo ha tenido la oportunidad de hacer preguntas. Confirmo que el individuo ha dado consentimiento libremente. Nombre del Investigador________________________ Firma del Investigador _________________________ Fecha ___________________________ Ha sido proporcionada al participante una copia de este documento de Consentimiento Informado 27 N. K.