Universidad Tecnológica de Santiago (UTESA) Nombre: Harold Michell Guzman Sosa Matricula: 319-6632 Materia: Ética Profesional Tema: Tarea Semana 4 Profesor: Francia Tiburcio Aquino Fecha: 11 de Julio 2022 Desarrolla y analiza los términos siguientes: La ética y los valores humanos Los valores éticos son guías de comportamiento que regulan la conducta de un individuo. En primer lugar, la ética es la rama de la filosofía que estudia lo que es moral y realiza un análisis del sistema moral para ser aplicado a nivel individual y social. Entre los valores éticos más relevantes se pueden mencionar: justicia, libertad, respeto, responsabilidad, integridad, lealtad, honestidad, equidad, entre otros. Los valores éticos se adquieren durante el desarrollo individual de cada ser humano con experiencia en el entorno familiar, social, escolar e, inclusive, a través de los medios de comunicación. Los valores éticos demuestran la personalidad del individuo, una imagen positiva o negativa, como consecuencia de su conducta. Asimismo, se pueden apreciar las convicciones, los sentimientos y los intereses que la persona posee. Por ejemplo, el individuo que lucha por la justicia y la libertad, valores considerados como positivos, son el reflejo de una persona justa. Pero, de lo contrario, se observa un ser humano apático ante dichos valores y que da cierto apoyo a las injusticias. Por tanto, los valores éticos permiten regular la conducta del individuo para lograr el bienestar colectivo y, una convivencia armoniosa y pacífica en la sociedad. Etimológicamente, la palabra ética es de origen griego ethos que significa “hábito o costumbre” y el sufijo -ico que expresa “relativo a”. Los 5 valores éticos más importantes con ejemplos. Valores éticos relativos Los valores éticos pueden ser relativos en virtud del punto de vista que posea cada individuo. Por ejemplo, para una persona es sinónimo de responsabilidad llegar puntual a su lugar de trabajo. No obstante, para otro esa situación no es considerada como algo de relevancia, por lo que puede llegar con retraso a su puesto de trabajo y no sentirse irresponsable. Por tanto, se debe mencionar que son muchas las personas que no comparten opiniones ni respetan los diferentes puntos de vista de otros. Es decir, lo que para algunos es una actitud ética o positiva, necesariamente, no lo es para otros. Valores éticos absolutos Los valores éticos también pueden ser absolutos en virtud de lo que es considerado como un hábito o costumbre practicado por toda la sociedad. No son subjetivos y su sentido permanece invariable más allá de las experiencias personales o colectivas. Es decir, en términos generales y más allá de las diferencias culturales existentes entre las personas, todos somos capaces de reconocer qué es la solidaridad o el respeto, así como de identificar aquellos actos considerados como buenos o malos. Por ejemplo, todos los individuos saben o reconocen qué es la cordialidad más allá de que la pongan en práctica o no con quienes están a su alrededor. Juicio ético Por otra parte, cabe mencionar que el ser humano vive en un constante juicio ético, lo que se refiere a razonar y determinar qué acción, conducta o actitud es la más acertada en un momento determinado, en función a las normas y valores impuestos por la sociedad. Cuando el individuo se encuentra frente a un juicio ético es importante comprender el problema ético, buscar la mejor solución que no perjudique a otros individuos y reflexionar porque fue la mejor solución ante esa situación. Valores éticos y morales Los valores éticos también incluyen los valores morales que son aquellos que permiten diferenciar lo bueno de lo malo y, lo justo e injusto de una situación o circunstancia determinada. El juicio moral es el acto mental que permite al individuo determinar su actitud con respecto a lo que es correcto e incorrecto. Valores éticos y humanos Los valores humanos son las propiedades, las cualidades o las características que posee un individuo. Asimismo, estos valores son universales y dinámicos, se comparten en todas las culturas y, determinan las pautas y las normas de una conducta coherente, por ello se relacionan con los valores éticos. Importancia de la ética en la formación del valor publico Los sistemas políticos y administrativos transitan hoy día por sendas de mayor exigencia, complejidad e interacción debido a la dinámica que tienen con la sociedad civil. Esta dinámica se relaciona con la deliberación y el sentido de los problemas colectivos, los cuales exigen de un tratamiento eficaz y con alta calidad en el desempeño de la vida institucional. El escrutinio de los ciudadanos sobre el desempeño de las instituciones públicas está aumentando por la pluralidad y diversidad de los procesos que intervienen en las transformaciones aceleradas que viven las sociedades contemporáneas. En este caso, las transformaciones de la democracia contemporánea responden a los cambios que en el orden económico, político y social, dan lugar a nuevas condiciones d e vida, en las cuales la sociedad y el Estado ajustan sus vínculos, procesos, sistemas de comunicación y prácticas de gestión, debido a que ahora las políticas públicas se procesan de manera más abierta y los propios ciudadanos intervienen de forma más organizada en el diseño y ejecución de las propias estrategias públicas. En este sentido, los temas vinculados con la eficiencia y el rendimiento de las instituciones públicas están rodeados de un ambiente de mayor presión y exigencia, lo que indica que los aparatos públicos no son ajenos a lo que sucede en la sociedad y, por tanto, la gestión de los asuntos comunes debe tener escalas más altas de eficiencia, ahora bien, considerando la importancia de la agenda pública y el papel activo de las organizaciones civiles en la construcción y definición de las políticas públicas, es importante una visión de reivindicacion institucional en el Estado y la Administración Pública, siendo que ambas figuras están ubicadas en el centro del quehacer público y, con ello, la bandera de la transparencia y efectividad son indisolubles. De este modo, la recuperación de la ética es asunto relevante, porque nutre y aporta el mejor desempeño de la gestión institucional, ya que con su contenido normativo y prescriptivo, contribuye a eliminar situaciones relacionadas con la opacidad, la corrupción, los desfalcos, la cleptocracia, el patrimonialismo y la ilegalidad. Al invocarse la ética como fuente de valores normativos que se orientan a conseguir conductas ejemplares, es factible situar el sentido y filosofía del valor público, entendido en la lógica del buen gobierno. La producción del valor público necesita no solamente reglas institucionales y una eficiente gestión pública, sino también de valores del buen obrar que permitan fortalecer los contenidos, objetivos y metas de las políticas públicas. La producción del valor público, tarea central en las instituciones administrativas y gubernamentales, es una tendencia que permea al servicio público, con la exigencia de cuadros administrativos más comprometidos con el sentido de lo público y la necesidad de que las democracias se acrediten mejor tanto como una forma de gobierno, como un sistema funcional de vida para los ciudadanos y las organizaciones sociales. Por consiguiente, el objetivo de estas ideas consiste en contribuir al análisis y explicación relacionados con la interacción compleja determinada entre la Administración Pública y la sociedad civil, destacando la necesidad de que su nexo sea mediado con valores que abonen en favor de la credibilidad y aceptación que son fundamentales para las instituciones estatales y administrativas. Asimismo, contribuir a puntualizar la importancia de la ética para favorecer que la calidad de vida en la sociedad tenga valores consustanciales a la d emocracia, ya que ésta tiene fuerte contenido ético desde el ángulo de la vida pública. La hipótesis del trabajo se orienta a destacar que la formación de valor ético no es un asunto mercantil ni gerencial, sino que tiene como base las aportaciones de la ética, debido a que aporta valores fundamentales para incentivar la conducta social y el desempeño institucional sobre la base de que las sociedades necesitan conductas honradas que estimulen la legalidad, la responsabilidad y el sentido de pertenencia a la vida comunitaria. En este sentido, el enfoque del trabajo es más de carácter normativo y explicativo, tomando en cuenta que se trata de un asunto que se inscribe en el sentido de la vida estatal y la vida comunitaria para generar una atmósfera de confianza y mejor certidumbre institucional. Valores humanos que se cultivan desde el punto de vista ético Los valores morales o éticos son superiores a los ya mencionados. Esto se debe a que tienen que ver con el uso de nuestra libertad, ese don inapreciable y sublime que nos permite ser constructores de nuestro propio destino. Estos son los valores humanos por excelencia, pues determinan nuestro valor como personas. Incluyen, entre otros, la honestidad, la bondad, la justicia, la autenticidad, la solidaridad, la sinceridad y la misericordia. Pero todavía no son tan importantes como los valores morales. Estos valores nos ennoblecen y desarrollan nuestro potencial humano. Cada valor apoya y sostiene a los demás; juntos forman esa sólida estructura que constituye la personalidad de un hombre maduro. Los valores religiosos. Éstos tienen que ver con nuestra relación personal con Dios. El mundo de hoy pasa por alto un hecho muy sencillo: la persona humana es religiosa. Aunque seguramente será difícil encontrar esta afirmación en un texto de sociología, no ha habido en la historia una sola sociedad que no haya sido religiosa. Preguntar por la existencia de Dios es algo que está íntimamente unido al por qué de la existencia humana. Buscamos de forma natural la trascendencia, porque es lo que da sentido y significado a nuestra vida sobre la tierra. Si el hombre cultiva los valores religiosos con tanta tenacidad, es porque ellos corresponden a la verdad más profunda de su ser. Los valores necesitan dos etapas: la de su revisión seria y la de su aplicación. Valores sin acción son iguales a incongruencia. Si quisiéramos ver un mundo diferente, una sociedad más equilibrada y un futuro más alentador, entonces es el momento de detenernos a reflexionar ¿Qué son los valores para mí? ¿Cuáles forman mi vida? ¿Qué significan los demás para mí? Y entonces, nuestro análisis debe trasladarse del «Yo» al «Tú», es decir, dejar de pensar un poco en nosotros mismo y volcarnos hacia los demás, ser generosos y ver qué necesitan los demás de nosotrosz Mientras no resolvamos nuestra crisis de valores individual y nuestras acciones sean congruentes, seguiremos viviendo en un mundo donde «es lo mismo ser Honrado que traidor, ignorante, sabio, ratero, generoso, estafador; todo es igual, nada es mejor, lo mismo un burro que un gran profesor». ¿O podemos cambiar? ciertas cosas son buenas para nosotros porque nos ayudan a alcanzar nuestro fin u objetivo. Si acertamos a descubrir a dónde vamos como hombres, cuál es nuestro objetivo, podremos entonces saber qué es bueno para nosotros en ese sentido. La relación que se verifica entre la ética La ética se relaciona con la antropología, el derecho, con la Ley, y con ciencias empíricas que estudian el comportamiento humano, como la sociología y la psicología. Un autor define ética del siguiente modo: "Ética (del griego ética, de estos, "comportamiento", "costumbre"), principios o pautas de la conducta humana, a menudo y de forma impropia llamada moral (del latín mores, "costumbre")".3 La palabra ética proviene del griego éticos ("carácter"). Se trata del estudio de la moral y del accionar humano para promover los comportamientos deseables. Una sentencia ética supone la elaboración de un juicio moral y una norma que señala cómo deberían actuar los integrantes de una sociedad. Por profesión se entiende una ocupación que se desarrolla con el fin de colaborar con el bienestar de una sociedad. Para realizar dicha labor es necesario que el profesional (persona que ejerce la misma) actúe con responsabilidad, siguiendo los requisitos que la ley vigente plantee para el desarrollo de esa actividad. La ética profesional pretende regular las actividades que se realizan en el marco de una profesión. En este sentido, se trata de una disciplina que está incluida dentro de la ética aplicada ya que hace referencia a una parte específica de la realidad. Cabe destacar que la ética, a nivel general, no es coactiva (no impone sanciones legales o normativas). Sin embargo, la ética profesional puede estar, en cierta forma, en los códigos deontológicos que regulan una actividad profesional. La deontología forma parte de lo que se conoce como ética normativa y presenta una serie de principios y reglas de cumplimiento obligatorio. Ello implica establecer una distinción entre lo que sea bueno y lo que sea malo desde el punto de vista ético, y si el bien y el mal éticos coinciden o no con lo que serían el bien y el mal en sí. Objeto de Estudio de la Ética Su objeto de estudio lo constituye la conducta moral de los hombres, que son actos consientes y voluntarios que varían históricamente y afectan a determinados grupos sociales o a la sociedad en su conjunto , como teoría explica, objetiva y racionalmente se considera como valiosa y voluntaria, como ciencia no se reduce a un conjunto de normas y prescripciones. Su tarea es investigar, sistematizar, ordenar y esclarecer un tipo de práctica humana llamada moral. La lógica A menudo, la lógica y la ética se consideran como disciplinas separadas, si no es que de alguna manera opuestas entre sí. Pero muchos grandes lógicos, incluyendo a Aristóteles, Ockham, Bolzano, De Morgan y Russell fueron capaces de hacer agudas contribuciones a la ética y de realizar acciones heroicas basadas en su comprensión ética. Asimismo, muchos moralistas ejemplares como Sócrates, Platón, Kant, Mill, Gandhi y Martin Luther King mostraron mediante sus enseñanzas y acciones un compromiso profundo con la objetividad, el valor ético que motiva y que es servido por la lógica. Este artículo explora el papel de la lógica en la ética y el papel de la ética en la lógica. Es importante investigar la hipótesis de que la ética del futuro debe conceder a la lógica un papel más central y explícito. Las conexiones entre la ética y las subjetividades irracionales deben ser cortadas; la dignidad humana y el respeto mutuo pueden basarse en gran medida en el deseo universal de conocimiento objetivo. De la misma manera, es importante investigar la hipótesis de que la lógica del futuro debe conceder a la ética un papel más central y explícito. Los principios lógicos son importantes porque sirven a metas éticas. La lógica es peculiar y esencialmente una empresa humana; las supuestas desconexiones entre la lógica y el interés humano deben ser refutadas. Es necesario criticar la caricatura de la lógica como un juego sin sentido, de manipulación de símbolos, y la caricatura de la ética como una racionalización de la emoción ciega. La lógica y la ética son, de hecho, inseparables y cada una es apoyada por el reconocimiento explícito de su vínculo con la otra. La moral y la filosofía La moral es un conjunto de normas, valores y creencias existentes y aceptadas en una sociedad que sirven de modelo de conducta y valoración para establecer lo que está bien o está mal. Como materia de estudio, se centra en el análisis a distintos niveles (filosófico y cultural, entre otros) de conceptos como el bien y el mal relativos a la conducta del ser humano dentro de una sociedad. Moral es también un estado de ánimo de una persona o un grupo de personas. Habitualmente se usa con un significado positivo de ánimo o confianza en las capacidades para conseguir un objetivo, aunque también puede tener un sentido negativo, por ejemplo, moral baja. Como adjetivo, moral significa que algo es perteneciente o relativo a lo que se considera como bueno a nivel social. De un modo coloquial y genérico, moral indica que algo es correcto, aceptable o bueno en relación a la conducta de la persona. Lo opuesto es lo inmoral. Filosofía Filosofía es un conjunto de razonamientos lógicos y metódicos sobre conceptos abstractos que tratan de explicar las causas y fines de la verdad, la realidad, las experiencias y nuestra existencia. La palabra filosofía deriva del griego φιλοσοφία y del latín philosophia, que al parecer fue acuñada por Pitágoras en la Antigua Grecia, y significa 'amor por la sabiduría' o 'amigo de la sabiduría'. Con este término también se nombran las teorías y sistemas de pensamiento desarrollados por uno o más autores dentro de este campo. La filosofía se originó paralelamente tanto en Occidente como en Oriente. Sin embargo, presentan diferencias en los métodos de pensamiento y percepción del mundo, del ser humano y de la verdad. La filosofía se caracteriza por abarcar diversas áreas de estudio, enfatizar el pensamiento crítico, buscar respuestas lógicas a diversas preguntas y no aceptar verdades absolutas. A partir de la filosofía han surgido innumerables conocimientos de carácter humanista y científico. Entre estos destacan sus principales ramas de estudio como la metafísica, la epistemología o la lógica.