El diseño de ejes de transmisión o árboles de transmisión suele ser uno de los procesos más críticos en el diseño de reductores de velocidad. Diseño de ejes de transmisión Esto se debe a la transmisión de un par de fuerzas y puede estar sometido a otros tipos de solicitaciones mecánicas al mismo tiempo. La configuración típica de un eje es la de un elemento de sección circular escalonado, con mayor sección en el centro, de manera que los distintos elementos puedan montarse sobre él por los extremos, lo que proporciona mayor sección resistente en la zona central, donde la flexión ocasiona los mayores esfuerzos. Fases en el diseño de ejes de transmisión Definir las especificaciones de velocidad de giro y potencia de transmisión necesaria. Seleccionar su configuración, es decir, elegir los elementos que irán montados sobre el eje para la transmisión de potencia deseada y elección del sistema de fijación de cada uno de estos elementos al eje. Fácil montaje, desmontaje y mantenimiento. Los ejes tienen que ser compactos para reducir material tanto en longitud como en diámetro. Las medidas deben ser preferiblemente normalizadas. Evitar discontinuidades y cambios bruscos de sección. Generalmente los árboles se construyen escalonados para el mejor posicionamiento de las piezas. Ubicar las piezas cerca de los apoyos para reducir momentos flectores. Determinar los esfuerzos sobre los distintos elementos que van montados sobre el eje. Debido a estos tipos de carga, en el árbol se producen generalmente distintos tipos esfuerzos: Por flexión Torsión Carga axial Cortante Calcular las reacciones sobre los soportes. Si las condiciones de resistencia son más exigentes que las de rigidez, podría optarse por aceros de mayor resistencia. Verificar la rigidez del árbol: – Deflexión por flexión y pendiente de la elástica – Deformación por torsión Los árboles deben tener suficiente rigidez, con el objetivo de evitar que las deformaciones excesivas perjudiquen el buen funcionamiento de las piezas que van montadas sobre esto por otro lado, los cojinetes (de contacto rodante o deslizante) se pueden ver afectados si las pendientes del árbol en los sitios de los cojinetes son muy grandes. Como los aceros tienen esencialmente igual módulo de elasticidad, la rigidez de los árboles debe controlarse mediante decisiones geométricas. Deformación de ejes y árboles de transmisión La rigidez del eje, tanto a torsión como a flexión, debe asegurar el correcto funcionamiento de los elementos que van montados sobre él. Para ello debe atenderse a las especificaciones técnicas de los catálogos comerciales de dichos componentes. Por ejemplo, si la deflexión lineal de ejes conectados es demasiado grande, la duración de los engranajes se acortará debido a las fuerzas de impacto adicionales que se producen durante la conexión y también debido al mayor desgaste de las superficies de los dientes. Como valores orientativos de deformaciones aceptables, pueden considerarse los siguientes: Deformación radial admisible (general) Deformación radial admisible (árboles con engranajes cónicos): 0.16 mm/m 0.076 mm/m Deformación radial relativa en punto de engranaje Deformación angular relativa en punto de engranaje Deformación angular relativa en cojinete lubricado Deformación angular relativa en rodamiento (general) 0.13 mm 0.03º ángulo de rotura de la película de lubricante 0.04º Para el cálculo de deflexiones y de ángulos de deflexión pueden utilizarse los distintos métodos de Resistencia de Materiales, como pueda ser el método de multiplicación de gráficos (Verestchaguin), que consiste en aplicar una carga o momento unitario sobre el punto en el que se desea calcular la flecha o el giro, respectivamente. Comprobar la velocidad crítica. Con el fin de evitar problemas de vibraciones, los árboles de giro rápido exigen un buen equilibrado dinámico, buena fijación de los soportes y una rígida configuración. Los árboles huecos permiten mejorar el comportamiento frente a vibraciones, aunque son más caros de fabricar y de mayor diámetro.