Nombre: María Gabriela Rodríguez Álava Profesor: Diana Rodríguez Arteaga 2020 PAO 2 Parcial I Paralelo: 5 COMUNICACIÓN Machismo presente desde el hogar En busca de un cambio en la sociedad para llegar a un modelo de equidad entre hombres y mujeres es importante estudiar el origen del problema. Teniendo en cuenta que la familia es la base de la sociedad, lo apropiado sería decir que es en donde se va formando el comportamiento machista. El Dr. Eric Berne, médico psiquiatra, autor de la teoría del Análisis Transaccional, asevera que las personas en sus primeros 6 años crean de manera inconsciente su plan de vida, el guion que los llevará a actuar de cierta forma por el resto de ella. (Melgar Muñiz, 2019) En vista de eso, podemos decir que el ser humano no le es innato aquel comportamiento y se puede educar de modo que en su etapa adulta contribuya a la sociedad en su equidad. Se puede destacar que también a lo largo de la historia se ha establecido un modelo de representación familiar, en donde la madre estaba limitada a ser la encargada de cuidar de los hijos y de los quehaceres domésticos, en cambio el padre era la cabeza del hogar y el encargado de llevar el dinero a casa. Si bien es cierto, en la actualidad los papeles que desempeñan hombres y mujeres no se rigen a este modelo, aún existen hogares que se ven alineados a ello. La maternidad femenina se perpetúa de generación en generación porque, hasta ahora, la inmensa mayoría de los niños ha sido criada por mujeres. Es decir, niños y niñas han tenido su primer vínculo afectivo con una mujer y no con un hombre. (Castañeda, 2002) Pero como se ha demostrado ahora, no son las únicas responsables en la crianza de los hijos, las únicas tareas que están fuera del alcance de los hombres son las biológicas como el embarazo, parto y lactancia. Otro aspecto que determinaría la ideología machista inculcada tanto en niños como niñas, son las tareas desarrolladas en casa. A las mujeres se las educa para estar listas en caso de llevar un hogar, se les asigna tareas que tienen que ver con el aseo o atender al hombre de la casa, de niñas se les regala juegos de muñecas o cocina. Por otro lado, al varón se le asigna tareas en las que deben realizar esfuerzo físico o salir de casa, como sacar la basura o ir a la tienda, de niños se les regala juegos de pelota o figuras de acción. A las niñas se las elogia por su belleza y delicadeza, mientras al varón se lo reprende por ser débil, se lo elogia por su fortaleza. (Caicedo Aspiazu, 2019) En consecuencia, se van moldeando mentes que plantean un tipo de encasillamiento erróneo de las actividades que puede desempeñar una persona dependiendo de su género, en vez de pensar en la igualdad que existe en las capacidades de cada individuo independientemente de esto. Referencias Caicedo Aspiazu, P. (3 de Febrero de 2019). La necesidad de hablar con los hijos sobre el problema del machismo. El Universo. Obtenido de https://www.eluniverso.com/larevista/2019/02/03/nota/7165202/necesidad-hablar-hijossobre-problema-machismo Castañeda, M. (2002). El machismo invisible regresa. Taurus Historia. Obtenido de https://www.academia.edu/5895888/EL_MACHISMO_INVISIBLE_REGRESA_Marina _Casta%C3%B1eda Melgar Muñiz, Á. (16 de Diciembre de 2019). Impacto negativo del machismo en el hombre. Avances en Psicología, 17(1), 85-87. Obtenido de http://revistas.unife.edu.pe/index.php/avancesenpsicologia/article/view/1910/1943 El machismo empieza a partir de la imposición de los estereotipos de masculinidad en la infancia.