FACULTAD DE INGENIERÍA DE PRODUCCIÓN Y SERVICIOS Escuela profesional de ingeniería Mecánica. Curso: Ingeniería de mantenimiento Docente: Ing. Romero Técnicas de mantenimiento preventivo Presentado por el alumno: Chavez Benavides Seth Arequipa – Perú Mayo 2023 TECNICAS DE MANTENIMIENTO PREVENTIVO Existen varias técnicas comunes utilizadas en el mantenimiento preventivo para mantener los equipos en condiciones óptimas y prevenir fallas. Algunas de estas técnicas serán explicadas a continuación de forma detallada y explicando los pasos a seguir para ser realizados de una forma adecuada: 1. INSPECCIONES REGULARES. Son una técnica fundamental dentro del mantenimiento preventivo, ya que permiten detectar y corregir problemas antes de que se conviertan en fallas mayores. Estas inspecciones implican la evaluación visual y, en algunos casos, el uso de herramientas y equipos de medición específicos para examinar detalladamente los equipos y componentes. Al implementar inspecciones regulares de manera sistemática, se pueden prevenir fallas costosas, mejorar la confiabilidad y eficiencia operativa, y reducir el tiempo de inactividad no planificado. Los pasos por seguir son los siguientes: Planificación y programación: Se debe establecer un programa de inspecciones regulares que especifique la frecuencia y el alcance de estas. Esto implica determinar qué equipos y componentes deben inspeccionarse, con qué periodicidad y quién será responsable de llevar a cabo las inspecciones. Verificación visual: La inspección visual es una parte fundamental de las inspecciones regulares. Se debe examinar visualmente los equipos y componentes en busca de signos evidentes de desgaste, daño, corrosión, fugas u otras anomalías. Se presta atención a áreas críticas, como conexiones, sellos, rodamientos, cables, tuberías y partes móviles. Uso de herramientas y equipos de medición: Además de la evaluación visual, se pueden utilizar herramientas y equipos de medición para realizar inspecciones más detalladas. Esto puede incluir medidores de espesores para verificar el grosor de las paredes de componentes metálicos, termografía infrarroja para detectar puntos calientes o anomalías térmicas, medidores de vibración para evaluar la estabilidad y el equilibrio de los equipos, y otros dispositivos de medición especializados según las necesidades y características de los equipos inspeccionados. Mantenimiento de registros: Durante las inspecciones, es importante llevar un registro detallado de los hallazgos, incluyendo la fecha de la inspección, los problemas identificados, las acciones correctivas tomadas y cualquier otra observación relevante. Estos registros proporcionan un historial que permite seguir la evolución de los equipos y detectar patrones o tendencias en los problemas encontrados. Acciones correctivas: Si se detectan problemas o desviaciones durante la inspección, se deben tomar las acciones correctivas necesarias de inmediato. Esto puede implicar reparaciones, ajustes, reemplazos de componentes, lubricación adicional u otras intervenciones para solucionar los problemas identificados. Retroalimentación y mejora continua: Las inspecciones regulares también brindan la oportunidad de recopilar información valiosa sobre el rendimiento y la confiabilidad de los equipos. Esta información se puede utilizar para retroalimentar los programas de mantenimiento y mejorar las estrategias preventivas a largo plazo. Se pueden identificar patrones de fallas recurrentes, áreas problemáticas o posibles mejoras en los procedimientos de inspección. 2. LUBRICACIÓN La lubricación adecuada es una técnica crucial en el mantenimiento preventivo, ya que ayuda a reducir la fricción, el desgaste y la generación de calor en los equipos, garantizando su operación eficiente y prolongando su vida útil. Se puede describir de forma mas detallada el proceso de la siguiente manera: Selección del lubricante adecuado: Es fundamental seleccionar el lubricante correcto para cada aplicación. Esto implica considerar factores como la viscosidad, la capacidad de carga, la resistencia a altas temperaturas y la compatibilidad con los materiales de los componentes. Los fabricantes de equipos proporcionan recomendaciones específicas sobre el tipo de lubricante a utilizar. Establecimiento de un programa de lubricación: Se debe establecer un programa de lubricación regular que especifique los intervalos de lubricación para cada equipo y componente. Esto puede basarse en las recomendaciones del fabricante o en el análisis de la experiencia y los registros de mantenimiento. La frecuencia de lubricación puede variar según las condiciones de operación y el nivel de exigencia del equipo. Cantidad adecuada de lubricante: Es esencial asegurarse de que se aplique la cantidad correcta de lubricante. Tanto la falta de lubricación como el exceso de lubricación pueden ser perjudiciales. Se deben seguir las recomendaciones del fabricante en cuanto a la cantidad de lubricante a utilizar, y se deben considerar factores como la velocidad de operación, la temperatura y la carga del equipo. Métodos de lubricación: Existen diferentes métodos de lubricación, dependiendo del equipo y los componentes. Algunos métodos comunes incluyen la lubricación por aceite, la lubricación por grasa y la lubricación con sistemas centralizados. Se debe seleccionar el método adecuado en función de las características del equipo y las condiciones de operación. Monitoreo de la condición del lubricante: Se debe monitorear la condición del lubricante de forma regular. Esto puede implicar la toma de muestras de aceite para su análisis en un laboratorio especializado. El análisis de aceite ayuda a identificar la presencia de contaminantes, el desgaste excesivo, los cambios en las propiedades del lubricante y otros problemas potenciales. Basándose en los resultados del análisis, se pueden tomar acciones correctivas, como el reemplazo del lubricante o el filtrado para eliminar los contaminantes. Mantenimiento de registros: Es importante llevar un registro detallado de las actividades de lubricación, incluyendo las fechas de lubricación, la cantidad de lubricante utilizado, el tipo de lubricante aplicado y cualquier observación relevante. Estos registros proporcionan un historial de lubricación que ayuda a realizar un seguimiento del rendimiento del equipo y a programar las lubricaciones futuras. Capacitación y entrenamiento: Es esencial capacitar al personal encargado de la lubricación para garantizar que se realice de manera correcta y consistente. El personal debe estar familiarizado con los procedimientos de lubricación, los tipos de lubricantes utilizados y las mejores prácticas para evitar la contaminación del lubricante durante la aplicación. 3. MANTENIMIENTO DE REGISTROS Es una técnica clave dentro del mantenimiento preventivo que consiste en llevar un registro detallado de todas las actividades de mantenimiento realizadas en los equipos. Estos registros proporcionan información valiosa para el seguimiento, la planificación y la toma de decisiones informadas sobre el mantenimiento de los activos. Se puede dividir de la siguiente manera: Registro de datos: Se deben registrar datos relevantes sobre los equipos y las actividades de mantenimiento. Esto puede incluir información como el número de serie del equipo, la fecha de instalación, las especificaciones técnicas, los intervalos de mantenimiento recomendados, los repuestos utilizados, los registros de inspecciones y pruebas, los resultados de análisis de aceite, las fechas de mantenimiento realizadas y cualquier otra información pertinente. Historial de mantenimiento: Los registros deben incluir un historial detallado de todas las actividades de mantenimiento realizadas en cada equipo. Esto implica registrar las fechas de mantenimiento, el tipo de mantenimiento realizado, las tareas llevadas a cabo, las acciones correctivas tomadas y cualquier observación o recomendación relevante. El historial de mantenimiento proporciona una visión completa de las actividades de mantenimiento previas y ayuda a identificar patrones, tendencias o problemas recurrentes. Programación y seguimiento: Los registros de mantenimiento permiten programar y dar seguimiento a las actividades de mantenimiento futuras. Al tener un registro detallado de los intervalos de mantenimiento recomendados por el fabricante, es posible programar de manera proactiva las tareas de mantenimiento preventivo. Los registros también ayudan a rastrear las fechas de vencimiento y a garantizar que no se omita ninguna actividad de mantenimiento importante. Análisis de datos: Los registros de mantenimiento proporcionan una gran cantidad de datos que se pueden analizar para identificar patrones o tendencias en el rendimiento del equipo. Esto puede ayudar a detectar problemas recurrentes, identificar componentes propensos a fallas o evaluar la efectividad de las actividades de mantenimiento realizadas. El análisis de datos también puede ayudar a identificar oportunidades de mejora en los programas de mantenimiento preventivo. Toma de decisiones informadas: Los registros de mantenimiento proporcionan información esencial para la toma de decisiones informadas sobre el mantenimiento de los activos. Al tener acceso a un historial detallado, los responsables del mantenimiento pueden evaluar el rendimiento pasado de los equipos, identificar áreas problemáticas y tomar decisiones fundamentadas sobre las actividades de mantenimiento futuras. Esto incluye decidir cuándo realizar reemplazos de componentes, actualizar programas de mantenimiento o implementar modificaciones en los equipos. Cumplimiento de regulaciones y normativas: En algunos sectores, el mantenimiento de registros es un requisito reglamentario. Las normativas y estándares de seguridad pueden exigir que se lleve un registro detallado de las actividades de mantenimiento realizadas en los equipos. El mantenimiento adecuado de registros ayuda a garantizar el cumplimiento de las regulaciones y a demostrar la conformidad en caso de auditorías o inspecciones. 4. CALIBRACIÓN La calibración es una técnica esencial dentro del mantenimiento preventivo que se utiliza para asegurar la precisión y confiabilidad de los equipos de medición y control. Consiste en comparar las mediciones realizadas por un instrumento con un estándar de referencia conocido y ajustar el instrumento según sea necesario. Se deben realizar los siguientes pasos: Selección de estándares de referencia: Se deben seleccionar estándares de referencia confiables y rastreables para realizar la calibración. Estos estándares deben tener una precisión conocida y estar certificados por organismos de calibración reconocidos. Los estándares de referencia pueden incluir instrumentos de calibración certificados, patrones de laboratorio o equipos de medición de alta precisión. Establecimiento de intervalos de calibración: Se debe determinar la frecuencia con la que se deben realizar las calibraciones. Esto puede basarse en las recomendaciones del fabricante, las especificaciones del equipo, los requisitos reglamentarios o normativos, o la experiencia y el análisis de datos históricos. Los intervalos de calibración pueden variar según el tipo de instrumento y su nivel de criticidad. Procedimiento de calibración: Se debe desarrollar un procedimiento de calibración detallado que especifique las etapas y los pasos a seguir. Esto incluye la preparación del equipo, la realización de las mediciones de referencia, la comparación de las mediciones del instrumento y el ajuste necesario. El procedimiento debe seguir las normas y prácticas recomendadas por los organismos de calibración. Trazabilidad y registros: Es importante garantizar la trazabilidad de las calibraciones realizadas. Esto implica mantener un registro detallado de todas las calibraciones realizadas, incluyendo la fecha, el instrumento calibrado, los estándares utilizados, los resultados de la calibración, las acciones correctivas tomadas y cualquier otra observación relevante. Estos registros proporcionan una evidencia documentada de la calibración y ayudan a rastrear la historia de las mediciones del instrumento. Ajustes y correcciones: Durante la calibración, si se detectan desviaciones o errores en las mediciones del instrumento, se deben realizar los ajustes o correcciones necesarios. Esto implica ajustar el instrumento para que sus mediciones se acerquen a los valores de referencia establecidos. Los ajustes se deben realizar siguiendo los procedimientos y las recomendaciones del fabricante. Certificados de calibración: Después de completar una calibración, se pueden generar certificados de calibración. Estos certificados proporcionan un registro oficial de la calibración realizada y contienen información detallada sobre los estándares utilizados, los resultados de la calibración y cualquier observación relevante. Los certificados de calibración son especialmente importantes cuando se requiere demostrar la trazabilidad y la conformidad con normas o regulaciones. Mantenimiento de instrumentos calibrados: Una vez que un instrumento ha sido calibrado, es importante mantener su estado calibrado. Esto implica proteger el instrumento contra golpes, vibraciones, condiciones ambientales adversas o cualquier otro factor que pueda afectar su precisión. Además, se deben establecer procedimientos para verificar regularmente la estabilidad y la precisión del instrumento entre las calibraciones programadas. 5. REEMPLAZO DE COMPONENTES Y PIEZAS El reemplazo de componentes y piezas desgastadas es una técnica clave dentro del mantenimiento preventivo que consiste en sustituir regularmente aquellos elementos que se han deteriorado o alcanzado su vida útil esperada. Esta práctica ayuda a evitar fallos inesperados, mejorar el rendimiento y prolongar la vida útil de los equipos. Se puede describir de la siguiente manera: Identificación de componentes y piezas desgastadas: Se debe realizar una inspección detallada de los equipos para identificar componentes y piezas que presenten desgaste o deterioro. Esto puede incluir elementos como correas, filtros, rodamientos, sellos, juntas, cables, mangueras, engranajes u otros elementos sujetos a desgaste debido al uso, la fricción, la vibración u otros factores. También se pueden considerar las recomendaciones del fabricante en cuanto a la vida útil estimada de los componentes. Programación de reemplazos: Una vez identificadas las piezas desgastadas, se debe establecer un programa de reemplazo regular. Esto implica definir intervalos de tiempo o hitos en función del desgaste esperado y de la criticidad de los componentes. Los programas de reemplazo pueden basarse en la experiencia, las recomendaciones del fabricante o el análisis de datos históricos de mantenimiento. Adquisición de piezas de repuesto: Se deben adquirir las piezas de repuesto necesarias para el reemplazo. Esto implica asegurarse de contar con un inventario adecuado de componentes y piezas, de manera que estén disponibles cuando se necesiten. Es importante obtener piezas de repuesto de calidad, preferiblemente originales o certificadas, para garantizar la compatibilidad y el rendimiento adecuado de los equipos. Planificación y programación de la actividad: El reemplazo de componentes y piezas desgastadas debe ser planificado y programado de manera adecuada. Se deben asignar recursos suficientes, como personal capacitado y herramientas necesarias, para llevar a cabo la actividad de reemplazo de manera eficiente y sin interrupciones en la operación. La programación debe tener en cuenta la disponibilidad de los equipos y minimizar el impacto en la producción o las operaciones. Procedimientos de reemplazo: Es importante seguir procedimientos adecuados y recomendados por el fabricante para llevar a cabo el reemplazo de componentes y piezas desgastadas. Esto puede incluir pasos específicos, herramientas necesarias, instrucciones de seguridad y recomendaciones sobre el ajuste, la alineación o el ajuste de las nuevas piezas. Los procedimientos deben ser claros, detallados y comprensibles para el personal encargado del reemplazo. Inspección y verificación posterior al reemplazo: Después de completar el reemplazo de componentes y piezas desgastadas, se debe realizar una inspección y una verificación posterior para asegurarse de que el trabajo se haya realizado correctamente. Esto puede implicar pruebas funcionales, mediciones, ajustes o verificaciones de alineación según sea necesario. También se pueden realizar inspecciones visuales para asegurar que no haya problemas adicionales o errores 6. MANTENIMIENTO PLANIFICADO El mantenimiento planificado es una técnica fundamental dentro del mantenimiento preventivo que implica la programación y ejecución de tareas de mantenimiento de manera regular y anticipada. El objetivo principal del mantenimiento planificado es minimizar el riesgo de fallas, maximizar la confiabilidad y prolongar la vida útil de los equipos. El proceso se describe de la siguiente manera: Evaluación de la criticidad: Antes de implementar el mantenimiento planificado, es importante evaluar la criticidad de los equipos y sistemas. Esto implica identificar aquellos elementos que son vitales para la operación del proceso o que podrían tener un impacto significativo en la producción, la seguridad o el rendimiento general. La criticidad ayuda a priorizar los equipos que requerirán un mantenimiento más frecuente y riguroso. Elaboración del plan de mantenimiento: Una vez que se han identificado los equipos críticos, se debe elaborar un plan de mantenimiento detallado. Este plan incluye una lista de tareas de mantenimiento preventivo que deben realizarse en intervalos regulares. Estas tareas pueden incluir inspecciones, limpieza, lubricación, calibración, reemplazo de piezas desgastadas, ajustes, pruebas funcionales y otras actividades específicas según los requerimientos del equipo. Programación de tareas de mantenimiento: El mantenimiento planificado implica establecer una programación para llevar a cabo las tareas de mantenimiento según los intervalos definidos en el plan. Esto implica asignar fechas y horarios para realizar cada tarea, considerando la disponibilidad de recursos, la carga de trabajo y el impacto en la producción u operaciones. Una buena programación permite una ejecución eficiente y oportuna de las actividades de mantenimiento. Asignación de recursos: El mantenimiento planificado requiere asignar los recursos adecuados para llevar a cabo las tareas programadas. Esto puede incluir personal capacitado, herramientas, equipos y materiales necesarios para realizar las actividades de mantenimiento. Es importante asegurarse de que los recursos estén disponibles y listos antes de la fecha programada para evitar demoras o interrupciones innecesarias. Ejecución de tareas de mantenimiento: Durante la ejecución del mantenimiento planificado, se deben seguir los procedimientos establecidos y cumplir con las especificaciones del fabricante. Esto implica realizar las tareas de mantenimiento de acuerdo con las instrucciones, cumplir con los estándares de calidad y seguridad, y registrar todas las actividades realizadas. Además, se pueden aprovechar las oportunidades para identificar y corregir problemas menores o potenciales antes de que se conviertan en fallas mayores. Registro y documentación: Es fundamental mantener un registro detallado de todas las actividades de mantenimiento planificado realizadas. Esto incluye registrar las fechas, las tareas realizadas, los resultados de las inspecciones o pruebas, las observaciones relevantes y cualquier acción correctiva tomada. Estos registros proporcionan un historial completo de las actividades de mantenimiento y son útiles para el seguimiento, el análisis de datos, la evaluación del rendimiento y la toma de decisiones futuras. Análisis y mejora continua: El mantenimiento planificado permite recopilar datos valiosos sobre el rendimiento de los equipos y el impacto de las actividades de mantenimiento. Estos datos pueden ser analizados para identificar patrones, tendencias o áreas de mejora. Se pueden utilizar herramientas de análisis de mantenimiento para evaluar la eficacia de las tareas de mantenimiento y optimizar el plan de mantenimiento en función de los resultados obtenidos. La mejora continua es fundamental para adaptar el mantenimiento planificado a las necesidades cambiantes de los equipos y maximizar su rendimiento a lo largo del tiempo. 7. ANÁLISIS DE ACEITE El análisis de aceite es una herramienta clave utilizada en el mantenimiento preventivo para evaluar la condición y el rendimiento de los equipos lubricados. Consiste en tomar muestras periódicas del aceite utilizado en máquinas y realizar una serie de pruebas para detectar la presencia de contaminantes, desgaste de componentes y cambios en las propiedades físicas y químicas del aceite. El proceso de análisis de aceite generalmente implica los siguientes pasos: Toma de muestras: Se selecciona una muestra representativa del aceite en el equipo a analizar. La muestra se recoge siguiendo pautas específicas para evitar la contaminación y asegurar la representatividad de los resultados. Preparación de la muestra: La muestra de aceite recolectada se prepara para su análisis. Esto puede incluir filtrado para eliminar partículas grandes y agitación para homogeneizar el aceite. Análisis físico: Se llevan a cabo pruebas físicas para evaluar las propiedades del aceite, como la viscosidad, el punto de fluidez, el índice de acidez y el contenido de agua. Estas pruebas ayudan a determinar si el aceite está dentro de los rangos aceptables y si ha habido algún cambio significativo desde la última muestra. Análisis químico: Se realizan pruebas químicas para detectar la presencia de contaminantes en el aceite, como partículas metálicas, agua, combustible, productos de desgaste y aditivos. Estas pruebas utilizan técnicas como espectrometría de emisión óptica, espectrometría de absorción atómica y cromatografía de gases. Los resultados de estas pruebas proporcionan información sobre el desgaste de los componentes del equipo y la presencia de condiciones anormales. Análisis de partículas: Se examina el aceite para determinar la cantidad y el tamaño de las partículas presentes. Esto se realiza utilizando técnicas como el conteo de partículas en suspensión y el análisis de imagen. Las partículas pueden indicar el desgaste de componentes, la contaminación externa o la degradación del aceite. Interpretación de resultados: Los resultados del análisis de aceite se comparan con los valores de referencia y las tendencias históricas. Los cambios significativos en los parámetros del aceite o la presencia de contaminantes inusuales pueden indicar problemas en el equipo, como desgaste excesivo, contaminación interna o condiciones de funcionamiento anormales. Informe y acciones recomendadas: Los resultados del análisis de aceite se presentan en un informe detallado que incluye los valores medidos, las tendencias a lo largo del tiempo y las recomendaciones de acciones correctivas o preventivas. Estas acciones pueden incluir el cambio de aceite, la limpieza del equipo, el reemplazo de componentes desgastados o la realización de inspecciones adicionales.