La Sociología de la Educación es la rama de la ciencia que estudia qué agentes de socialización influyen en el proceso de inserción social de los individuos en la escuela, así la familia como agente primario de socialización es la que permite que los niños empiecen a conocer las normas básicas de comportamiento que le facilitarán poder integrarse en la sociedad. Mientras que, la escuela, el grupo de amigos, etc., como agentes secundarios de socialización influyen en el rendimiento escolar del alumnado. Durkheim (16) es considerado uno de los pioneros en el desarrollo de la sociología y define la educación como la institución cuya misión es la de preservar los valores de una determinada cultura. Por ello, la educación no implica solamente el desarrollo de destrezas y habilidades, sino que también supone el desarrollo de las capacidades para solucionar problemas de la vida cotidiana. Según el informe del Programa para la Evaluación Internacional de los Estudiantes (PISA) (17) una de las principales causas de desigualdad educativa que más influyen en el rendimiento académico del alumnado es el nivel de estudios de los padres, esto ocurre tanto en España como en el conjunto de los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) y de la Unión Europea, es decir, el capital cultural de las familias es un factor influyente en el rendimiento académico del alumnado. Otra de las desigualdades educativas es el género del alumnado, por ejemplo, los alumnos obtienen mejor rendimiento escolar en aquellas áreas asignadas a su género como son las matemáticas, mientras que con las alumnas ocurre en el ámbito de la lectura. Resulta importante contemplar la diferencia entre igualdad y equidad educativa. Entendemos por equidad educativa a la educación considerando las diferencias y necesidades específicas de cada alumno, es decir, que las condiciones demográficas, geográficas, éticas o de género no supongan un impedimento en el aprendizaje del alumnado, de tal forma que se ofrezca a todos ellos igualdad de oportunidades en el acceso a una educación de calidad; mientras que nos referimos a la igualdad educativa como la educación en la que se aportan los mismos recursos a todo el alumnado, es decir, independientemente de las condiciones de cada uno. De esta forma, surge el concepto de discriminación positiva que son las acciones encaminadas a dar consideraciones especiales a los individuos que, sobre la base de su pertenencia a un grupo social determinado, poseen una desventaja en relación con el resto de grupos sociales. En resumen, para asegurar la equidad educativa y, por tanto, ofrecer una educación digna, es necesario que todos los individuos, independientemente de sus condiciones sociales, económicas, culturales, etc..