FCS – PND NU216 Externado En Nutrición en Medicina Interna UNIVERSIDAD PERUANA DE CIENCIAS APLICADAS FACULTAD DE CIENCIAS DE LA SALUD PROGRAMA ACADÉMICO DE NUTRICIÓN Y DIETÉTICA CURSO NU216 – EXTERNADO EN NUTRICIÓN EN MEDICINA INTERNA SECCIÓN NUA2 TRABAJO PARCIAL TEMA: CASO CLÍNICO DE DIABETES MELLITUS Y ENFERMEDAD RENAL CRÓNICA AUTOR Paredes Vargas, Jodie Ximena DOCENTE(ES) Herrera Valenzuela, Rosemary Jackeline Lima, 5 de octubre de 2020 FCS – PND NU216 Externado En Nutrición en Medicina Interna Assessment de la competencia general de UPC PENSAMIENTO CRÍTICO (2020-02) DIMENSIÓN DE LA COMPETENCIA: FORMULACIÓN DEL ASUNTO Caso analizar: Presentamos el caso de un varón de 75 años que acude al Servicio de Nutrición Clínica en 2011 para control metabólico. Es derivado desde el Hospital Comarcal para manejo de su diabetes mellitus. En un ingreso reciente en el Servicio de Medicina Interna por un síndrome de hipoventilación en paciente con obstrucción crónica del flujo aéreo conocido, se realiza diagnóstico de ERC. Conoce diabetes mellitus tipo 2 desde hace 18 años, en tratamiento con metformina 1.000 mg (1 tableta después del desayuno y después de la cena). No ha realizado controles de su diabetes desde hace 4 años. Además, HTA en tratamiento con enalapril 20 mg (antes del desayuno). Como complicaciones microangiopáticas se observa una ERC probablemente secundaria a nefropatía diabética, asociada a clínica de disfunción eréctil de años de evolución. Es remitido a nuestras consultas con la siguiente analítica: Hb: 13.3; Hto: 33%; HbA1c: 8,7%; glucemia plasmática: 144 mg/dl; colesterol total: 240 mg/dl; colesterol-LDL: 152 mg/dl; colesterol-HDL: 52 mg/dl; triglicéridos: 179 mg/dl; ác. úrico: 3,7 mg/dl; creatinina: 1,67 mg/dl; urea: 65 potasio: 4,5 mEq/l; sodio 145 mEq/l FGe: 42 ml/m/1,73 m2 , PTH 58,86 pg/l, albúmina 4,2 g/dL; fósforo: 3,5 mg/dl; prealbúmina: 35 mg/dl; bicarbonato sérico: 27 meq/l. Durante la exploración física no se observaron edemas en extremidades. Presentó una tensión arterial de 150/95 mmHg con una frecuencia cardiaca: 64 lpm. Peso 101 kg, índice de masa corporal (IMC): 35,75 kg/m2. PREGUNTA: 1. ¿Cuál cree usted que son las razones por las que el paciente con diagnóstico crónico de Diabetes Mellitus presentó Enfermedad Renal Crónica y síndrome de hipoventilación?, sustente su respuesta relacionando la información brindada y que otros factores desencadenaron el desarrollo de las patologías descritas. Argumente con un mínimo de 5 evidencias científicas tu postura El paciente presentó ERC como consecuencia de las complicaciones propias de la DM2 inadecuadamente controlada. Como se evidencia de acuerdo al caso, el paciente no realiza control de esta patología desde hace 4 años, así mismo presenta hipertensión, un IMC de 35.75 kg/m2, el cual es considerado dentro del rango de obesidad para adultos mayores (>32 kg/m2) (1), la glucosa al límite superior, considerando los criterios de la American Association of Diabetes en adultos mayores, la cual recomienda que en adultos mayores con complicaciones de diabetes la glicemia en ayunas debe estar entre 90 a 150 mg/dl y la Hb1Ac elevada, debe ser menor a 8%, según estos criterios. (2) FCS – PND NU216 Externado En Nutrición en Medicina Interna La DM2 tiene la característica de provocar complicaciones crónicas en los tejidos y en el sistema vascular (3), dentro de las cuales destaca la nefropatía diabética, que se da en pacientes con glicemia mal controlada de larga data a nivel de la microvasculatura del sistema renal. En presencia de hipertensión, el riesgo para el desarrollo de nefropatía diabética aumenta. (4) Dentro de la patogénesis de la nefropatía diabética se encuentran varías vías que conllevan a su desarrollo, entre estas se encuentran la formación de productos de glicosilación avanzada, la activación de la proteína cinasa C y la estimulación de la vía de polioles. Asimismo, la propia hiperglicemia provoca estrés oxidativo y activación de cascadas de señales de transducción que conllevan a la liberación de mediadores proinflamatorios y profibróticos a nivel renal. (5) Este mecanismo de daño renal se da principalmente por la formación de productos de glicosilación avanzada, estos se generar producto de una reacción de glicosilación no enzimática entre azúcares reductores (glucosa) y los grupos aminos de proteínas, lípidos o ácidos nucleicos, los cuales se reorganizan hasta volverse compuestos estables conocidos como productos finales de la glicosilación avanzada (6-7) En condiciones normales el riñón los excreta, pero cuando se producen en exceso en la hiperglicemia sostenida se acumulan en los tejidos. (4) Tienen receptores en los riñones (en células mesangiales, del endotelio, del músculo liso y en las tubulares), al unirse a sus receptores producen liberación citoquinas proinflamatorias, factores de crecimiento y transcripción y como consecuencia se produce lo mencionado anteriormente, el estrés oxidativo, los procesos inflamatorios y el daño a la microvasculatura renal. (4) Entre los efectos que tiene la hiperglicemia sostenida en el riñón esta la hiperfiltración glomerular producida por una relajación de la arteriola aferente y una contracción de la eferente, que activa al SRAA, produciendo un aumento de la presión glomerular, hipertrofia glomerular y producción alta de endotelina-1, la cual produce vasoconstricción, inflamación, daño celular y fibrosis. (4) Asimismo, la hiperglicemia también produce la disminución de capacidad contráctil de las células mesangiales, causa por la glicación de las fibras F-actina de estas células, como consecuencia estas células se expanden. (7) Por ende, la hiperglicemia genera los siguientes efectos a nivel renal: esclerosis glomerular, engrosamiento de la membrana glomerular y expansión mesangial. (4) Como se puede observar, la diabetes e hiperglicemia por varias vías genera daño renal que a largo plazo compromete de manera severa la función renal llevando a una enfermedad crónica renal. Por otro lado, el síndrome de hipoventilación se relaciona a la obesidad del paciente. El síndrome de hipoventilación del obeso se da en personas con IMC mayor a 30 kg/m2, con hipercapnia e hipoxia diurna (PaCo2 >= 45 mm Hg y PaO2<70 mm Hg) y alteraciones del sueño. (8) En la obesidad, el aumento de la masa adiposa, sobre todo la localizada a nivel central afecta el mecanismo de respiración, puesto que disminuye la distensibilidad de la pared torácica. Junto a este mecanismo de respiración alterado se observa debilidad de los músculos respiratorios, produciendo un aumento del trabajo FCS – PND NU216 Externado En Nutrición en Medicina Interna para poder respirar. (9) Asimismo, existe mayor consumo de oxígeno y producción de CO2 y obstrucción de la vía aérea superior durante el sueño por la acumulación de grasa y falta de tracción de la tráquea, que conllevan a la hipoxemia, problemas del sueño y caída de la ventilación minuto. (10) DIMENSIÓN DE LA COMPETENCIA: ANÁLISIS DE LA INFORMACIÓN Caso a analizar: La valoración global subjetiva es una herramienta validada en pacientes con ERC. El paciente, no presentó alteraciones en la ingesta, ni disminución de peso y parámetros nutricionales no alterados, por lo que cumplía criterios de grado A (normo nutrido). Se realizó una encuesta nutricional al paciente donde se obtuvo resultados en relación al aporte calórico, proteico, hidratos de carbono, lípidos saturados, sodio, potasio y fósforo, según se muestra en la Tabla VI PREGUNTAS: 2. ¿Por qué deberíamos considerar los siguientes macronutrientes (proteínas, carbohidratos y lípidos) y micronutrientes (sodio, potasio y fósforo) para la propuesta de intervención nutricional? Argumente su respuesta con un mínimo de 3 evidencias científicas. En cuanto al consumo de macronutrientes es importante tener en cuenta la cantidad de proteína por kg de peso a dar al paciente puesto que se ha visto que las dietas altas en proteína (más de 1.2 g/kg de peso) en pacientes con la función renal alterada producen alteraciones en la hemodinámica renal. Se ve un aumento de la presión intragromerular y por ende un aumento en la tasa de filtración glomerular. (11) FCS – PND NU216 Externado En Nutrición en Medicina Interna Además de la hiperfiltración glomerular también se ha visto causa expresión de genes pro inflamatorios. (12) Esto a largo plazo puede conducir daño glomerular y esclerosis, produciendo un declive de la función renal. (11) Por otro lado, la ingesta alta de proteínas produce un mayor nivel de urea en sangre, lo cual genera estrés oxidativo, inflamación, disfunción endotelial y mayor riesgo de enfermedad cardiovascular. (12) Se ha visto que las dietas bajas en proteína disminuyen la excreción de nitrógeno y la sobrecarga de trabajo al riñón por la disminución de la presión intragromerular. Asimismo, mejora el problema de acidosis metabólica en pacientes con ERC, es importante mencionar que el metabolismo proteico e puesto que cuando la función renal disminuye suele haber una tendencia a retención de ácido, lo cual afecta al metabolismo proteico, aumenta el catabolismo muscular, el deterioro de la función renal y los síntomas urémicos. (11) En cuanto a los carbohidratos, es importante evitar la ingesta de carbohidratos simples y azúcares (reducirlos a menos del 10%) y preferir los complejos (cereales integrales, frutas y verduras), de esta manera se controla la hiperglicemia asociada a la resistencia a la insulina característica de la diabetes y se disminuye la síntesis de triglicéridos. (13) (14) Sin embargo, en etapas de ERC más avanzadas se debe tener más cuidado en el tipo de carbohidrato a dar; se deben recomendar frutas y verduras con bajo contenido en potasio y utilizar métodos de cocción que disminuyan el contenido de potasio y fósforo de los alimentos. (15) Con respecto a los lípidos, en estos pacientes es importante el control del perfil lipídico puesto que están expuestos a un mayor riesgo de enfermedad cardiovascular y muerte. Por ende, se recomienda la reducción de las grasas saturadas y de las grasas trans por su asociación con la reducción de riesgo cardiovascular en diabéticos. Asimismo, los ácidos grasos omega 3, omega 6 y los monoinsaturados disminuyen la inflamación y la disfunción endotelial en estos pacientes, teniendo como consecuencia un mejor manejo de la hipertensión y de la dislipidemia. (15) Asimismo, debido a que la hiperlipidemia es frecuente en estos pacientes, el reemplazo de grasas saturadas por poliinsaturadas ayuda a manejar este aspecto, lo cual se asocia con un impacto positivo en la progresión de la ERC. Se ha visto que un perfil lipídico alterado acelera el declive de la función renal, por lo que controlar este aspecto es sumamente importante para evitar la progresión de la patología.(16) En referente a los micronutrientes, es importante tener en cuenta el requerimiento de sodio para poder controlar la retención de líquidos e hipertensión. Se cree que esta restricción puede ayudar a enlentecer la progresión de la enfermedad al disminuir la presión intraglomerular y la proteinuria. (12) El potasio debe ser controlado debido a que su equilibrio en el cuerpo depende de la función secretoria tubular, se debe restringir su consumo en presencia de hiperpotasemia o con tasa de filtración glomerular < 10 ml/min. En ERC hay algunas causas que contribuyen a la hiperpotasemia como es la acidosis metabólica, el uso de ciertos antihipertensivos como IECA, beta bloqueantes y espironolactona y la deficiencia de insulina. (13) En pacientes en estadios FCS – PND NU216 Externado En Nutrición en Medicina Interna avanzados de ERC se ha asociado una ingesta alta de potasio con un mayor riesgo de mortalidad. (12) Por último, es importante tener en cuenta la ingesta de fósforo puesto que su acumulación en ERC conlleva a hiperparatiroidismo secundario y calcificaciones metastásicas, la restricción del fósforo depende sus valores en sangre y de los valores de la hormona paratiroidea. (13) En ERC los niveles de fósforo se suelen elevar desde el estadio 3 de la enfermedad. (17) 3. De acuerdo a la Tabla VI analice los datos obtenidos de la encuesta nutricional y describa las razones de los requerimientos planteados, Argumente su respuesta con un mínimo de 3 evidencias científicas. En referente a los requerimientos planteados, en el requerimiento energético la National Kidney Foundation’s Kidney Disease Outcomes Quality Initiative en su guía de práctica clínica nutricional en enfermedad crónica renal del 2020 recomienda calcular el requerimiento calórico de los pacientes con ERC en estadios de 1 al 5 usando la fórmula rápida de 25 a 35 kcal/ kg de peso/ día de acuerdo al sexo, edad, actividad física, composición corporal y metas de peso del paciente. Resaltaron además que un rango de calorías entre 30 a 35 kcal/kg de peso/día es el ideal para mantener un balance nitrogenado neutro. (18) Cabe resaltar que otras fuentes mencionan que en pacientes con exceso de peso se trabaje con el peso ideal para hacer el cálculo calórico y disminuir las calorías diarias entre 250 a 500 kcal para lograr una disminución del peso corporal. (14) En pacientes sedentarios adultos mayores se recomienda una ingesta calórica de 30 kcal/kg de peso. (11) La American Diabetic Association recomienda que en paciente con enfermedad renal sin diálisis ocasionada por diabetes la ingesta proteica sea de 0.8 g/kg de peso corporal al día, puesto que se ha visto que esta cantidad es la más efectiva para disminuir el declive de la tasa de filtración glomerular. Asimismo, ingestas mayores al 20% de las calorías diarias o de 1.3 g/kg/día se asocian a albuminuria, pérdida de función renal más rápida y mayor riesgo de mortalidad por enfermedad cardiovascular. (19) En cuanto a hidratos de carbono, la recomendación actual es de 45 a 60% del valor calórico total, de este total menos del 10% debe ser proveniente de azúcares y carbohidratos simples. Se debe priorizar la ingesta de cereales integrales, frutas, verduras, en general en carbohidratos complejos altos en fibra para poder manejar de manera adecuada la glicemia del paciente. (15) Por último en grasas, se recomienda a ingesta del 30 a 35% del valor calórico total y que de este menos de 7% sea proveniente de grasas saturadas. En micronutrientes, las últimas guías del AJKD recomiendan una ingesta menor a 2.3 g/día en pacientes con ERC en estadio 3 a 5 para poder controlar y reducir la presión arterial y controlar el volumen de líquido corporal. (18) En potasio se recomienda una ingesta de hasta 4.7 g/día a menos que se tengan frecuentes episodios de hiperpotasemia o severos en ERC inicial hasta moderada, en la ERC avanzada y diálisis la recomendación es de < 3 g/día. (12) Finalmente, en fósforo se recomienda ajustar la ingesta de acuerdo a los niveles séricos de fosfato para mantenerlos en el rango normal. (18) Sin embargo, se aconseja no sobrepasar de los 800 mg/día. (12) (14) FCS – PND NU216 Externado En Nutrición en Medicina Interna 4. La Herramienta de tamizaje nutricional empleada fue la VGS, fundamente las razones por la que este tamizaje es utilizado en pacientes con ERC. Argumente con un mínimo de 3 evidencias científicas La herramienta VGS es usada como tamizaje nutricional en pacientes con ERC porque se ha visto que es una buena herramienta para evaluar el desgaste energético proteico en pacientes con ERC sin diálisis al ser comparada con indicadores antropométricos (IMC, pliegue tricipital, circunferencia media de brazo, circunferencia muscular del brazo y pliegue tricipital). (20) Asimismo, la International Society of Renal Nutrition and Metabolism la recomienda para evaluar este desgaste energético proteico en estadios 3 a 5 de la enfermedad. (21) Por otro lado, esta herramienta de tamizaje ha demostrado ser útil como herramienta predictiva de mortalidad en pacientes con ERC con y sin diálisis. (22) La AJKD en sus guías del 2020 recomienda la VGS para los pacientes en estadio de 5 de ERC para evaluar el estado nutricional y en pacientes en estadio 5, hemodiálisis o post trasplante el Malnutrition Inflammation Score. Mencionan que estos tamizajes son específicos para los requerimientos nutricionales de estos pacientes pues recolectan datos una serie de datos importantes (datos antropométricos, marcadores bioquímicos, síntomas clínicos observados en el examen físico, evaluación de la ingesta dietética y de la historia médica/psicosocial) para la siguiente paso del proceso de atención nutricional que es la evaluación nutricional y que por ende permite de manera más detallada conocer el estado nutricional del sujeto. (18) DIMENSIÓN DE LA COMPETENCIA: CONTEXTO Caso a analizar: Tres meses después acude nuevamente a la consulta de Nutrición Clínica con la siguiente analítica: HbA1c- 7,2%; glucosa: 98 mg/ dl: Cr. 1,63; FGe: 44 mg/min/1,73; peso: 92 kg, IMC: 33,4 kg/m2; TA: 135/77 mmHg, por lo que se refuerza la implementación de medidas higiénicodietéticas y se remite a su centro de referencia. Cinco años después acude a urgencias de nuestro hospital por cuadro de 5 meses de evolución de saciedad precoz, distensión abdominal postprandial, hiporexia que en las últimas 3 semanas ha empeorado comenzando con vómitos alimentarios y pérdida de 8 kg de peso. En tratamiento con insulina Glargina (20 UI por la noche), metformina 1000 mg cada 24 horas, enalapril 20 mg y atorvastatina 20 mg. Tras reposición hidroelectrolítica endovenosa y estabilización del paciente se solicita consulta para nueva valoración nutricional. Presenta la siguiente analítica: – Creatinina: 3,0 mg/dl; urea: 110 mg/dl; potasio: 5,5 mEq/l; Na: 140 mEq/l. – FGe: 22 ml/m/1,73 m2 ; PTH 110 pg/l; fósforo: 6 mg/dl. – Albúmina: 3,1 g/dl; bicarbonato: 19 meq/l. – Hb: 10,2 g/dl; Hto: 31%; HbA1C: 5,7%; glucemia plasmática: 56 mg/dl; colesterol total: 97 mg/dl; colesterol-LDL: 40 mg/dl; colesterol-HDL: 40 mg/dl; triglicéridos: 80 mg/dl. Nos encontramos con un paciente con diabetes de larga evolución y complicaciones microvasculares asociadas, con una clínica larvada de años de evolución de náuseas, sensación de plenitud precoz y agudización en las últimas semanas. Con un posible FCS – PND NU216 Externado En Nutrición en Medicina Interna diagnóstico de gastroparesia diabética, se realiza gastroscopia, en la que se observa abundante contenido gástrico, sin obstrucción mecánica asociada. Actualmente el paciente se encuentra en una ERC estadio 4 con (FG 21 ml/m/1,73). El peso habitual del paciente en los 2 últimos años ha sido de 85 kg. Hace 3 meses tenía un peso de 80 kg y el peso actual es de 72 kg, IMC 27,43 kg/m2. Circunferencia muscular braquial de 19 cm: pérdida de peso del 10% en 3 meses. Tras realizar una exhaustiva valoración de su ingesta y de los parámetros nutricionales, el paciente cumple criterios de síndrome de desgaste proteicoenergético. En el caso de nuestro paciente presentaba albúmina 3,1 g/dl, pre albúmina 17 mg/ dl y un colesterol de 97 mg/dl. Pérdida de peso asociada a inadecuación de la ingesta proteica y energética. El paciente presentaba una pérdida de peso de 8 kg (< 10%) y una ingesta escasa cuantificada mediante encuesta de 2 días (Tabla VIII). PREGUNTA: 5. ¿Porque cree Ud. que hay una diferencia en los resultados de la encuesta nutricional y de la nueva propuesta de los requerimientos según se muestra en tabla VIII en relación a la primera entrevista nutricional detallada en la tabla VI? Fundamente su respuesta analizando el contexto y la nueva realidad clínica Estas diferencias entre la primera y la segunda entrevista nutricional se deben a que la progresión de la ERC está relacionada a una disminución en la ingesta dietética por múltiples factores como alteraciones en el sentido del gusto, anorexia, acumulación de toxinas urémicas, alteración en los mecanismos de homeostasis gastrointestinal, alteración en sangre de hormonas controladoras del apetito, entre otros factores. (16) En el caso de las alteraciones gastrointestinales son efecto del aumento de los productos nitrogenados y de la alteración en los iones del cuerpo a consecuencia de la FCS – PND NU216 Externado En Nutrición en Medicina Interna enfermedad; esto provoca disminución de la ingesta, así como también vómitos y nauseas. (23) Por otro lado, la gastroparesia es parte de las complicaciones de la neuropatía diabética, ocurre un enlentecimiento del vaciado gástrico y entre los síntomas se encuentran la llenura postprandial, náuseas, vómitos, anorexia y pérdida de peso, lo cual conlleva a un estado de desnutrición y también explica la disminución de la ingesta del paciente. (24) Por último, anemia del paciente se puede explicar en base a que en la ERC existe deficiencia de eritropoyetina, (Epo), la cual aumenta conforme aumenta el deterioro de la función renal, supresión de la médula ósea y menor supervivencia de los glóbulos rojos. (25) Las diferencias entre los requerimientos de la primera propuesta a esta segunda propuesta varían porque conforme va progresando la ERC la capacidad del riñón para cumplir con sus funciones normales disminuye sustancialmente. Por ejemplo, se vuelve menos eficiente en eliminar grandes cantidades de proteínas, fósforo, sodio y potasio. El consumo alto de proteínas puede conllevar a síntomas urémicos debido a que los productos de desecho del catabolismo proteico se acumulan en la sangre, mientras que el consumo elevado de sodio empeora la hipertensión de estos pacientes, así como también puede producir edemas y llevar a fallos cardíacos. Por otro lado, el fósforo en exceso produce hiperparatiroidismo secundario, calcificación arterial y de las válvulas cardíacas, y por ende mayor riesgo de mortalidad cardíaca. (26) DIMENSIÓN DE LA COMPETENCIA: RAZONAMIENTO Caso a analizar: Para revertir esta situación de síndrome de desgaste proteico-energético, en nuestro paciente se prescribió suplemento nutricional oral específico para pacientes renales pre diálisis (400 kcal + 8 g proteínas). Tras garantizar un correcto cumplimiento del Suplementación oral nutricional (SON), el paciente es dado de alta con dieta fraccionada controlada en potasio, fósforo y sodio, a la que se asoció suplementación oral con SON específico de ERC pre diálisis, con un aporte diario de 1.900 kcal, 58 g de proteínas, 1.000 mg potasio, 1,5 g sodio y 800 mg de fósforo. Al alta, el paciente inició tratamiento con bicarbonato oral, quelantes de fósforo y eritropoyetina recombinante. El tratamiento al alta fue: – Insulina Glargina 20 UI por la mañana. – Metoclopramida 10 mg (antes de las comidas principales). – Resin Calcio sobres de 15 gramos (con el desayuno, comida y cena). – Darbopoetina una inyección subcutánea cada 30 días. – Enalapril 20 mg: 1 comprimido en desayuno. – Bicarbonato sódico sobres de 1 gramo: 1 sobre en desayuno, comida y cena. – Furosemida 40 mg: medio comprimido en desayuno. – Atorvastatina 40 mg: 1 comprimido en la cena. Cuatro meses después del alta hospitalaria y ante el deterioro mantenido de función renal FGE < 20 ml/min/1,73 m2, el paciente ingresa en el Servicio de Cirugía Vascular para realización de fístula arteriovenosa para comenzar con Terapia de reemplazo renal Hemodiálisis en los próximos meses. FCS – PND NU216 Externado En Nutrición en Medicina Interna PREGUNTA 6. Qué opinión tiene Ud. respecto a la propuesta planteada en etapa pre diálisis y Plantee una postura original de tratamiento según las últimas evidencias científicas (utilizar un mínimo de 3 evidencias científicas) Con respecto a las calorías planteadas, estas se encuentran dentro de las recomendaciones de la guía clínica del AJKD que indica que en ERC de estadio 1 a 5 o post trasplante 25 a 35 kcal/kg de peso es una adecuada cantidad de proveer al paciente. (18) En este planteamiento se están administrando 26.35 kcal/kg de peso corporal. Sin embargo, se ha visto que ingesta de 30 a 35 kcal/kg de peso corporal es más adecuada puesto que evita el catabolismo proteico y desnutrición en estos pacientes a causa de una restricción proteica igual o menor a 0.6 g/kg de peso corporal. (11) (18) Además, en adultos mayores sedentarios con un peso normal de acuerdo a IMC como en el caso de este paciente, se considera que una cantidad de 30 kcal/kg de peso es suficiente. (15) Por ende, considero que el aumento de calorías a 30 kcal/kg de peso sería lo más adecuado para evitar el catabolismo proteico y el riesgo de desnutrición en el paciente. En referencia a la cantidad de proteínas, se está administrando 0.8 g de proteína por kg de peso, lo cual va de acuerdo a las recomendaciones de la AJKD en pacientes con ERC y diabetes, pues indican que una ingesta de 0.6 a 0.8 g/kg de peso es adecuada para mantener un estado nutricional adecuado y mejorar el control glicémico. (18) Sin embargo, también existe como propuesta el uso de cetoanálogos y de aminoácidos esenciales en conjunto con una dieta muy baja en proteínas (0.28 a 0.43 g/kg de peso corporal) de origen vegetal para llegar a los requerimientos diarios de los aminoácidos. (18) Se prescribe por cada 5 kg de peso ideal 1 tableta de ceto análogos y aminoácidos esenciales que contiene un total 500 mg de ambos y un adicional de 45 mg de sales de calcio. Estas tabletas con ambos compuestos tienen alta cantidad de ceto-leucina, la cual inhibe la degradación proteica. Asimismo, se ha visto que esta suplementación en estadios 4 y 5 limita al máximo la cantidad de nitrógeno, fósforo y la carga de ácido en el organismo. (26) Además, reduce la proteinuria, la carga urémica, el estrés oxidativo, y por ende enlentece la progresión de ERC y retrasa el inicio de diálisis en estos pacientes. (15) En cuanto a carbohidratos, la propuesta si concuerda con la recomendación de 45 a 60% del valor calórico total y cabe resaltar que se debe hacer énfasis en el consumo de carbohidratos complejos y limitar los simples. (15) En lípidos, las recomendaciones para estadio 4 es de 30 a 35% del VCT con limitación de las grasas saturadas a menos del 7% para disminuir el riesgo cardiovascular en estos pacientes. (27) En sodio, la propuesta también va de acuerdo a lo propuesto por el AJKD de menos de 2.3 g de sal al día en estadios 3 a 5 de ERC. Por último, en potasio y fósforo las pautas también se encuentran del rango propuesto para pacientes en ERC avanzado de < 3g/día y de < 800 mg/ día respectivamente. (12) (18) FCS – PND NU216 Externado En Nutrición en Medicina Interna Propuesta de intervención: La propuesta que planteo para el paciente es una dieta hipoproteica (0.3 g/kg de peso), hiposódica, baja en potasio y fósforo suplementada con una mezcla de cetoanálogos y aminoácidos esenciales para llegar a los requerimientos diarios de aminoácidos en el paciente, de esta manera la progresión a estadio final de ERC y de diálisis será más lenta. Cálculo energético 72 kg x 30 kcal = 2160 kcal/día Tabla 1. Requerimiento de nutrientes Energía y macronutrientes % de referencia kcal g totales kcal/g/kg/día 100% 2160 - 30 kcal/kg/día Proteínas 5% 108 27 0.38 g/kg/día Carbohidratos 60% 1296 324 4.5 g/kg/día - - 25 g 0.4 g/kg/día 35% 756 84 1.2 g/kg/día Energía (kcal) Fibra Grasas Sodio <2.3 g/día Potasio < 3 g/día Fósforo < 800 mg/día Tabla 2. Esquema del plan dietético Tiempo de ingesta Desayuno Preparación Alimento Cantidad (ml/g) Medida casera Clara revuelta con pan francés + 4 pastillas de Ketosteril Claras de huevo Aceite de oliva Pan francés 60 g 20 g 60 g 2 unidades 4 cdtas 1 unid grande Manzana en compota Manzana 100 g 1 unid pequeña Media mañana Batido de fresa Fresas Dátiles Leche evaporada descremada 150 g 50 g 15 g ½ taza 2 unidades 1 cda Almuerzo Arroz salteado con verduras + 5 pastillas de Ketosteril Arroz blanco seco Zanahoria 80 g 45 g ½ taza ½ unidad FCS – PND NU216 Externado En Nutrición en Medicina Interna Cebolla blanca Pimiento Aceite de oliva 50 g 60 g 30 g ½ unidad 1/3 unidad 2 cdas Media tarde Compota de pera endulzada con dátiles Pera Maicena Dátil 150 g 20 g 50 g 1 unidad 2 cdas 2 unidades Cena Verduras y yuca horneadas con aceite de oliva + 5 pastillas de Ketosteril Yuca blanca Poro Pimiento Zapallito Champiñones Aceite de oliva 180 g 55 g 40 g 60 g 40 g 30 g 2 trozos med 1/3 unidad ¼ unidad 3 rodajas 2 unidades 2 cdas Tabla 3. Análisis cuantitativo del esquema dietoterapeútico Las pastillas de mezcla de cetoanálogos y aminoácidos esenciales a utilizar será Ketosteril se dará 1 pastilla por cada 5 kg de peso como pesa 72 se aproximará a 70 kg 70 kg/5= 14 pastillas. Se repartirán en las 3 comidas principales (desayuno, almuerzo y cena) 4 pastillas en el desayuno, 5 en el almuerzo y 5 en la cena. (28) FCS – PND NU216 Externado En Nutrición en Medicina Interna Tabla 4. Adecuación de calorías, macro y micronutrientes Cálculos kcal Proteínas (g) Grasas (g) CHO (g) Fibra Dietaria (g) Sodio (mg) Potasio (mg) Fósforo (mg) Requerimiento del paciente 2160 27 84 324 25 <2300 <3000 <800 Aporte del régimen 2117 29.0 84.8 326.9 23.2 1538.2 2493.9 602.10 % de adecuación de la dieta (90-110%) 93.6 % 107.4% 100.9% 100.9% 92.8% 69.9% 83.13% 75.3% Recomendaciones: (29) (30) En la dieta para paciente renal de se recomienda cocinar evitar agregar sal de mesa en las comidas y utilizar especias y hierbas aromáticas para dar sabor a la comida sin incrementar la cantidad de sodio de estas. Dializar las frutas, verduras, menestras y tubérculos para disminuir la cantidad de potasio de estas remojarlas 12 horas antes de consumirlas y hacer doble cocción cambiando el agua entre cada cocción. Las verduras congeladas tienen menor cantidad de potasio, por ende, son mas recomendadas. Evitar el consumo de productos integrales y de frutos secos porque tienen alto contenido de fósforo y potasio. Referencias bibliográficas empleadas en la relación de la presente prueba: Torres Torres B, Torres TB, Jáuregui IO, Luis Román D, Izaola Jáuregui Daniel de Luis Román OA. Nutritional approach of the patient with diabetes mellitus and chronic kidney disease. A case report. Nutr Hosp [Internet]. 2017 [cited 2020 Aug 23];34:18–37. Available from: http://dx.doi.org/10.20960/nh.1237 REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS: 1. MINSA. Guía técnica para la valoración nutricional antropométrica de la persona adulta mayor [Internet]. 2013. MINSA. Disponible en: https://bvs.ins.gob.pe/insprint/CENAN/Valoraci%C3%B3n_nutricional_antropom%C3%A 9trica_persona_adulta_mayor.pdf 2. American Diabetes Association. Older adults: Standards of Medical Care in Diabetes2020. Diabetes Care. 2020; 43 (Supple 1): S152-S162. 3. Khan M. Diabetic nephropathy: recent advances in pathophysiology and challenges in dietary management. Sulaiman Diabetol Metab Syndr. 2019: 11-7. FCS – PND NU216 Externado En Nutrición en Medicina Interna 4. 5. 6. 7. 8. 9. 10. 11. 12. 13. 14. 15. 16. 17. 18. 19. Ilyas Z, Chaiban J. T, Krikorian A. Novel insights into the pathophysiology and clinical aspects of diabetic nephropathy. Rev Endocr Metab Disord. 2017. DOI 10.1007/s11154017-9422-3 Gallagher H, Suckling RJ. Diabetic nephropathy: where are we on the journey from pathophysiology to treatment?. Diabetes, Obesity and Metabolism. 2016; 18: 641-647. Díaz-Casasola L, Luna-Pichardo D. Productos finales de glicación avanzada en la enfermedad cardiovascular como complicación de la diabetes. Revista de Medicina e Investigación. 2016; (4):52-57. Meza C, San Martín C, Ruiz J, Frugone C. Fisiopatología de la nefropatía diabético: una revisión de la literatura. Medwave. 2017; 16(1): 6839. Mokhlesi B, Kryger M, Grunstein R. Assesment and management of patients with obesity hypoventilation syndrome. Proc Am Thorac Soc. 2008; 5: 218-225. Mokhlesi B. Obesity Hypoventilation Syndrome: A state-of-the-art review. 2010; 55 (10). Díaz-Domínguez E, Rosas-Peralta M, Santos-Martínez L, Rodríguez-Almendros N, Magaña-Serrano J, Pérez-Rodríguez G. El síndrome de hipoventilación del obeso y la hipertensión pulmonar. Una asociación poco conocida en México. Rev Med Inst Mex Seguro Soc. 2018;56(1):72-83. Jee G, Obi Y, Tortoricci A, Kalantar-Zadeh K. Dietary protein intake and chronic kidney disease. Curr Opin Clin Nutr Metab Care. 2017; 20(1): 77-85. Kalantar-Zadeh K, Fouque D. Nutritional management of chronic kidney disease. N Engl Med. 2017; 377: 1765-1776. López M. Nutrición y enfermedad renal [Internet]. Manual Práctico de Nutrición y Salud. Disponible en: https://www.kelloggs.es/content/dam/europe/kelloggs_es/images/nutrition/PDF/Manu al_Nutricion_Kelloggs_Capitulo_21.pdf Sellarés V, Rodríguez D. Nutrición en la Enfermedad Renal Crónica [Internet]. Sociedad Española de Nefrología. 2020. Disponible en: https://www.nefrologiaaldia.org/esarticulo-nutricion-enfermedad-renal-cronica220#:~:text=Las%20gu%C3%ADas%20de%20pr%C3%A1ctica%20cl%C3%ADnica,%5D%20 (Tabla%201)%20y%20 Jee G, Kalantar-Zadeh K, Goldstein-Fuchs J, Rhee C. Dietary approaches in the management of diabetic patients with kidney disease. Nutrients. 2017; 9(8): 24. Sabatino A, Regolisti G, Gandolfini I, Delsante M, Fani F, Gregorini M, Fiaccadori E. Diet and enteral nutrition in patients with chronic kidney disease not on dialysis: a review focusing fat, fiber and protein intake. J Nephrol. 2017. Torres B, Izaola O, de Luis Román D. A. Abordaje nutricional del paciente con diabetes mellitus e insuficiencia renal crónica, a propósito de un caso. Nutr Hosp. 2017; (Supl 1): 18-37. TA, Burrowes JD, Byham-Gray LD, et al; KDOQI Nutrition in CKD Guideline Work Group. KDOQI clinical practice guideline for nutrition in CKD: 2020 update. Am J Kidney Dis. 2020;76(3) (suppl 1): S1-S107. Cefalu W, Bakris G, Blonde L, Boulton A, D’Alessio D, et al. American Diabetes Association: Standards of medical care in diabetes-2017. Diabetes Care. 2017; 40 (1). FCS – PND NU216 Externado En Nutrición en Medicina Interna 20. Cuppari L, Schneider M, Ishikawa C, Ayako M. Subjective Global Assesment for the Diagnosis of Proteín-energy Wasting in Nondyalisis-Dependent Chronic Disease Patients. Journal of Renal Nutrition. 2014; 24 (6): 385-389. 21. Fouque D, Kalantar-Zadeh K, Kopple J, Cano N, Chauveau P, Cuppari L, et al. A proposed nomenclature and diagnostic criteria for protein-energy wasting in acute and chronic kidney disease. 2008; 73 (4): 391-398. 22. Dai L, Mukai H, Lindholm B, Heimbürger O, Barany P, Stevinkel P, et al. Clinical global assessment of nutritional status as predictor of mortality in chronic kidney disease patients. PLoS ONE. 2017; 12(12): e0186659. 23. De Luis Román D, Bustamante J. Aspectos nutricionales en la enfermedad renal. Nefrología al día. 2008; 8(3): 241-359. 24. Krishnasamy, S., Abell, T.L. Diabetic Gastroparesis: Principles and Current Trends in Management. Diabetes Ther. 2018; 9: 1-42. 25. Means R. Anemia of Renal Failure/ Chronic Kidney Disease. 2018. Anemia in the young and old. 2018: 147-157. 26. Cupisti A, Brunori G, Raffaele B, D’Alessandro C, Pasticci F, Cosola C, et al. Nutritional treatment of advanced CKD: twenty consensus statements. Journal of Nephrology. 2018: 31(4): 457-473. 27. Whitham D. Nutrition for the Prevention and Treatment of Chronic Kidney Disease in Diabetes. Canadian Journal of Diabetes. 2014; 38(5): 344-348. 28. Medintegra: Ketosteril [Internet]. Medintegra.mx. Disponible en: https://www.medintegra.mx/nutricionales/nutricion-enteral/formulasmodulares/ketosteril.html 29. Patiño B, Villanueva M, Bañón A, ADAER, González JD, Cortes P. Guía de alimentación para pacientes renales. Asociación de ayuda al enfermo renal. Disponible en: https://nefrosan.com/san/images/documentacion/pdfs/att3ny9c.pdf 30. Recmendaciones dietéticas nutricionales en la enfermedad renal crónica avanzada (ERCA). Estadios 4, 5 (prediálisis)/(filtrado glomerular: < 30 ml/minuto). Servicio Madrileño de Salud. Disponible en: http://www.madrid.org/cs/Satellite?blobcol=urldata&blobheader=application%2Fpdf&b lobheadername1=Contentdisposition&blobheadername2=cadena&blobheadervalue1=filename%3D65.ENFERMED AD+RENAL+CR%C3%93NICA+AVANZADA.+ESTADIOS+45.pdf&blobheadervalue2=language%3Des%26site%3DPortalSalud&blobkey=id&blobtabl e=MungoBlobs&blobwhere=1352869766856&ssbinary=true