TRADUCCIÓN A LA VISTA Consideramos a la traducción a la vista, por una parte, como estrategia de traducción y, por otra parte, como modalidad de traducción situada entre la traducción escrita y la traducción oral. Su similitud con la traducción escrita radica en la existencia de un texto escrito que da origen al proceso traductor, mientras que la similitud con la interpretación se encuentra en la naturaleza oral de la reformulación. Desde el punto de vista de la función, la traducción a la vista tiene 2 enfoques perfectamente diferenciados: función comunicativa y función instrumental. Función comunicativa El traductor a la vista reformula oralmente el texto escrito para un destinatario que lo está escuchando. El traductor, por lo tanto, se convierte en un intérprete ya que el producto de su traducción es oral y suficientemente claro para ser comprendido por los receptores. La primera versión es la final y el traductor traduce para ser escuchado, no para ser leído. Submodalidades 1. Traducción a primera vista: Reformulación oral en lengua de llegada a un texto escrito en lengua de partida que se ve por primera vez, sin tiempo de prepararlo o leerlo de antemano. 2. Traducción a la vista preparada: En esta ocasión el traductor ha tenido la oportunidad de leer el texto antes de traducirlo. 3. Traducción a la vista consecutiva: El traductor reformula oralmente un texto tras haber finalizado su lectura. La principal diferencia con las mencionadas anteriormente es que la traducción es posterior a la lectura del texto dado. 4. Traducción a la vista en interpretación consecutiva: Reformulación oral no lineal de un texto escrito tras su lectura en voz alta por parte de un orador. 5. Simultánea con texto: Se trata de una combinación de interpretación simultánea y traducción a la vista. Tiene lugar cuando los intérpretes en cabina tienen una copia del texto que está leyendo el orador. Dicho texto puede haber sido entregado al intérprete momentos antes de iniciarse la conferencia, de manera que se puede utilizar como apoyo en caso de que surjan algunos problemas o puede haber sido entregado con anterioridad, en cuyo caso la preparación es más completa. Función instrumental La traducción no constituye un fin, sino que se convierte en un medio para conseguir un objetivo final. Este objetivo puede consistir en una traducción escrita profesional o tener carácter pedagógico. En el primer caso, la traducción representa una estrategia traductora y en el segundo caso, es una estrategia de aprendizaje. 1. La TAV como estrategia traductora: La finalidad de la operación traductora siempre es la traducción escrita. Se persigue la producción final de un texto oral que será escuchado en el mismo momento en que se traduce. Dentro de esta variedad se encuentran: La traducción al dictáfono: El traductor ofrece una versión registrada en cinta magnetofónica prácticamente acabada y lisa para ser transcrita por el mismo traductor o incluso por el cliente. Borrador de traducción: El traductor utiliza la grabadora y efectúa distintas reformulaciones de segmentos de la traducción en lugar de hacerlo escritamente. En la escucha posterior se elige la versión más satisfactoria. Búsqueda de alternativas de traducción: Consiste en parafrasear en voz alta el texto en lengua de llegada para comprobar la coherencia y elegancia de la versión traducida, con el objeto de encontrar la equivalencia justa. En colaboración con especialistas: El traductor no especialista en el campo temático sobre el que versa la traducción trabaja con un experto que verifica la primera versión oral grabada. Una vez realizadas las correcciones se realiza la versión definitiva, esta vez en escrito, que también será revisada por el especialista para su aceptación y entrega. 2. La TAV como estrategia pedagógica: Esta función persigue 2 finalidades fundamentales: el entrenamiento de estudiantes en traducción oral y escrita en didáctica de traducción y, por otra parte, la enseñanza de lenguas. En la didáctica de la traducción se puede utilizar para: Preparación a la interpretación simultánea: Consiste en la realización de ejercicios de entrenamiento previos a la interpretación simultánea. Los estudiantes aprender a leer, analizar, traducir y reformular oralmente a gran velocidad y sin pausas. Preparación a la interpretación consecutiva: Es la práctica de traducción en voz alta de textos escritos con el texto original ejerciendo la función de notas. Preparación de traducción escrita: Se considera un método eficaz para adquirir agilidad traductora. Es empleada en numerosos centros de formación de traductores como ejercicio en las clases de traducción escrita para adquirir agilidad, vocabulario y rapidez en las decisiones. En la didáctica de las lenguas, su uso adquiere las siguientes posibilidades: Estrategia didáctica: Durante las sesiones de clase, los estudiantes realizan traducciones a la vista con la finalidad de aprender la segunda lengua mediante la verificación de la comprensión en traducción directa y la comprobación del frado de dominio de la lengua extranjera en traducción inversa. Estrategia evaluadora: Examen consistente en una prueba de traducción en voz alta como método para demostrar competencia lingüística. En las entrevistas de trabajo es un modo de comprobar el conocimiento de una lengua extranjera por parte del candidato.